Partida Rol por web

El obispo amplió su sonrisa y comenzó a hablar con una voz muy suave, que empujaba a la tranquilidad.

-Así es hijo, así es. Como bien sabes, vivimos en una época de grandes decisiones. Hay elecciones... trascendentales que debemos tomar constantemente, a mayor gloria de nuestra naturaleza y nuestro destino. Como también sabes, una de esas decisiones ha sido tristemente la de elegir entre el camino de la verdad y el de la servidumbre, entre la aceptación sin resquicios de nuestra condición de elegidos por el Señor, y la humillación automplaciente de los que huyen de sí mismos. Los que seguimos la primera de esa senda hemos fundado una alianza de seres como nosotros a la que llamamos Sabbat, y que constituye el único camino para alcanzar la santidad dentro de los márgenes que nos ha dejado nuestra herencia y la bendición de Caín. Pero frente a nosotros se han alzado otros muchos, impíos y titubeantes, seguidores de una secta de herejes llamada la Camarilla. Como tú bien sabes, tu... clan tuvo que elegir, y, desafortunadamente, hijo, eligió mal. Muy mal. Las criaturas de la noche, los hijos del Clan Nosferatu, nos han dado la espalda y se han unido a las filas de la Camarilla. Otros, en mi posición, te habrían llamado monstruo y te habrían condenado con un sólo gesto a morir pasto de las llamas. Pero yo creo en el perdón, Isaac Bitlor. ¿Crees tú en el perdón...?

Estaba enterado de todo aquello que el Obispo ponía sobre la mesa, cada palabra tenía un mensaje…. Cada frase tenia mas de un significado; Solo en la oscuridad así podía sentirse Isaac en ese momento… entre sus manos había una decisión que tomar y era mas que complicado… darle la espalda a todo, o simplemente llegar a mas respetando una nueva ley.

-El Perdón mi Señor…. Es difícil de explicar – Musito entre pensamientos abstractos que poco a poco tomaban una consistencia para poder ser expresados de forma inteligente – Mi Señor….. Usted cree que Ellos son el primer motivo de todos sus problemas? son la principal causa de errores y fracasos? son como una enfermedad que corroe el alma? – Había echo nuevas preguntas ante la cita del Obispo – Quizás sepa que a veces los corazones se obnubilan con facilidad y con el poder; deberíamos sentarnos por un momento a pensar en como cambiar eso, no le doy un sermón su no una respuesta compuesta Señor. – Expreso con elocuencia – Quizás yo elija el camino que me propone, quizás lo rechace pero aun lo ayude….. De todas formas su corazón sentirá que lo he traicionado y pronto yo no caminare por las calles de esta ciudad – Isaac se levanto de su asiento y camino unos pasos hacia el Obispo.
-Sepa entender su excelencia que debe usar la inteligencia antes de cegarse y no perdonar, quizás perdonando podríamos atraer a los exiliados a nuestro lecho… a veces las palabras son mas lacerantes que una espada de doble filo – Expuso mientras observaba aquel majestuoso lugar.

-Se que costara entender tan descabellado plan o consejo…. Solo se que usted tomara una buena decisión y yo estaré allí para ayudarlo…. Leal sirviente de vos su excelencia –

-MI señor…. Perdone a sus enemigos… pero jamás olvide sus nombres – Aquella frase supo decirlo todo en tan pocas palabras, allí estaba Isaac mirando al Obispo… esperando sus palabras.

El obispo afila su sonrisa.

-Sois sabio para ser tan joven, Isaac. En efecto, en algunas ocasiones, el perdón es algo complejo de aplicar justamente. Y luego está la cuestión de vuestro nombre, Isaac: no pretendo que paguéis vos por los pecados de vuestro clan, igual que no pretendió el Señor que Isaac pagara por los pecados de su padre Abraham. Sé quién sois, amigo, y conozco bien vuestra devoción. Lo que yo os ofrezco es un camino, junto a nosotros, por el que llegaréis a canalizar esa devoción. Cumplid una misión para el Sabbat, para mí, y os garantizo que ese perdón os hará encontrar la paz... Decidme, ¿qué sabéis de Castilla?

- Demasiado poco mi Señor, demasiado poco.... - Respondio ante las palabras del Obispo, mas se habia concentrado solo en Milan y no en los que pasaba fuera.... solo algunos rumores habian llegado hasta sus oidos pero eso era todo solo rumores - Mi Señor solo escuche rumores que no creo ciertos, pero - Quedo en silencio por unos segundos.

- Quizas Usted pueda hablarme sobre castilla.... y yo con gusto cumplire con su mandato - Musito ahora el sumiso Nosferatu

El obispo tendió un mapa de la península ibérica en su mesa y señaló su centro:

-Aquí -dijo- está la ciudad de Toledo, una de las más importantes y antiguas de la Corona de Castilla. Durante tiempos inmemoriales ha sido también lugar de encuentro de brujos y criaturas de la noche. Pero no temáis: Toledo es una ciudad segura y completamente dominada por la Espada, así como el resto de Castilla. Sin embargo, en Toledo hay... una molesta presencia de la Camarilla... es mínima, claro, pero aún así es molesta, y hasta ahora ninguno de los agentes que hemos enviado para neutralizarla ha encontrado otra cosa que la muerte. Yo... sospecho que esa habilidad para esconderse sólo puede deberse a que ese nido de espías de la Camarilla en Toledo está formado por vástagos de vuestro propio clan. Vástagos a los que sólo vos podréis encontrar y a los que debéis eliminar.

Sonrio por un momento aumque se lamentaba por tener que erradicar a los de su clan.... pero so obsesion y devocion estaba a flor de piel - Si mi Señor... cumplire con su encargo, pronto la ciudad estara en manos de la Espada -

-Sé que así lo haréis -repone, tendiéndote la mano para que beses su anillo-. Marchad inmediatamente hasta Castilla. En Toledo os daré la dirección de Paulo de Cesena: él sirve como representante del Arzobispo de Madrid en la ciudad, y os dará más información. Cumplid lo que os ordeno, hijo mío, y seréis ampliamente recompensado: la Espada de Caín nunca se ha despreocupado de sus chiquillos más diligentes...