Sin perder tiempo Yasutora observa por encima del hombro del hombre en busca de percibir algo en el interior del almacén, aunque era probable que la poca visibilidad no le permitiera ver nada, mas la verdadera intención de dicho gesto era el descaro con que fue realizado para que el Yasuki se percatara de ello y en caso de ocultar algo se pusiera nervioso.-Yasuki-sama, disculpe no son solo caballos lo que buscamos, sino joyas también y es probable que esos desalmados ladrones puedan haber escondido esos objetos entre estos dos almacenes, si nos permitís con vuestra compañía observar el almacén.-Le indicó con un gesto de la mano y una educación acorde a la zalamería que esperaría el Yasuki de un comprador.
Motivo: Etiqueta
Dificultad: 20
Tirada (3): 13 (10, 3), 2, 17 (10, 7)
Guardados (2): 17, 13
Total: 30, Éxito
Volví chicos y perdonen las tardanzas.
PD:Master, me he tomado la libertad de acompañar mi post con una tiradita de etiqueta para intentar agradar al Yasuki, he puesto una dificultad de 20, como algo promedio....a ver que tal sale.
.-Yasutora-san. Sin duda ya lo habreis intuido, pero debo aclarar que como leal a los intereses cangrejo y por simpatia al unicornio, ha venido de buen grado por ayudarnos. Sería apropiado corresponderle buscando solo lo que nos atañe. Tampoco es que tengamos tiempo para desviarnos de nuestra investigación, que es de vital importancia del mismo modo que no podemos quitarle demasiado tiempo a el mismo-.
Comentó para que se entendiese cual era el posible problema que podía haber retrasado las cosas de proceder de un modo más ortodoxo. Iban a entrar al almacen de un Yasuki después de todo.
La mirada del joven shinjo escudriñó con fiereza incrédulo de las palabras del yasuki , en especial cuando escuchó el relinchar de un caballo . Iba a hablar cuando Hida Yatsutora se le adelantó .
" Sin duda el ser del mismo clan es más facil que ceda ante él que ante mí , además no tengo autoridad sobre miembros de otros clanes . Nota mental , buscar información sobre los magistrados esmeralda , ellos si pueden entrometerse entre clanes , puede que intente optar por un puesto si las cosas aquí van bien " .
Divagó para si mismo mientras escuchaba lo que ocurría que pocas opciones tenía el yasuki para negarse cuando le estaban pidiendo las cosas de una manera educada . Igualmente , por la curiosidad natural , el shinjo estiró el cuello y dio un par de pasos para observar mejor por la rendija de la puerta lo que ocurría dentro ; si el yasuki se negara a la petición de su compañero de clan y él mismo veía los caballos ¿ que iba a hacer el yasuki ? ofender a un unicornio honorable que su vista y oido le mentía ? si hiciera tal cosa la reputación del yasuki quedaría en entre dicho , y se aseguraría de que se disolviera algún negocio con el que tuviera contacto ese yasuki y se encargaría que la vergüenza cayera sobre él y apoyaría a sus oponente económicos en el clan unicornio y en el cangrejo .
No podía ser que después de llevarles hasta el almacén no les dejara entrar pero eso ha hecho, no podía ahora sino esperar a la reacción del comerciante tras hablar Hida Yasutora san. Si aun así no les dejaba pasar habría que optar a otra opción. No quería entrar más en debate de lo que había echo Hida Akira san.
Lo que Otaku tenía claro es que lo que escuchaba eran caballos y quería verlos, ya había negado la existencia de éstos en su almacén pero quizás los oculta en otra zona contigua.
El comerciante no engañaba a nadie con su cara, su mala cara, cuando el otro cangrejo le habla de entrar al local. Aquello no era a lo que había venido. Pero tras pensar un poco, asiente con la cabeza.
Pase usted mismo a buscar lo que necesite.
Dando acceso a Yasutora, y acompañándolo por el almacén.
Los demás, por fin, podéis ver la entrada del almacén, que tiene telares, tallas de piedra y madera, y cajas y jarrones apilados a montones.
Pero sin duda no caballos.
Los caballos suenan. Pero suenan en el otro almacén, el que según los registros pertenece a un magistrado escorpión. Sin duda, este no es el almacén.
Y tras la búsqueda del resto de piezas perdidas Yasutora no encuentra indicios de que esten en el almacén Yasuki. Aunque no tenía claro que todo fuera del todo legal, pues había piezas, llamativas. Pero claro, eso eran solo sospechas.
Finalmente salís del almacén hasta la calle, y el Yasuki, comenta alegremente.
Bien, como predije, mi almacén no guarda nada de lo que estáis buscando. Sin duda se me agradecerá debidamente la colaboración. Si no os puedo de ser más ayuda.
No se había marchado, pero estaba claro que no tenia intención de que se os ocurriera algo más.
Disculpad las faltas ortograficas.
A jugar, teneis un turno antes del que el tipo se marche, o menos dependiendo de lo que se os ocurra decir.... que os conozco...
EDIT
Post editado, que la otra noche, no puse ni lo que hablaba el tipo en negrita. El tipo si no lo interrumpis se marcha con viento fresco.
Gracias por su comprensión y colaboración yasuki sama .
Dijo el joven shinjo con una inclinación como disculpa por haberle hecho perder el tiempo al cangrejo . Sin duda lo que buscaban no estaba ahí , lo cual les dejaba con el otro almacén como único sospechoso . El tiempo apremiaba y debían encontrar al propietario y recuperar a los caballos y los objetos robados .
¿ No encontrasteis al propietario del otro almacén ? .
Preguntó a los que había enviado a buscar a los propietarios ; pero mantenía la vista a intervalos sobre el otro almacén para evitar de que comenzaran con sus actividades antes de que pudieran hacer nada al respecto .
No recuerdo quien fue a por quien , solo que yatsutora y yo nos quedamos de vigilancia .
Yasutora entró y miró presto el interior del almacén y aunque su dignidad y honor le requerían exigir detalles sobre ciertas pertenencias del hombre en aquel local, su sentido común le advirtió que al igual que él servía al clan de alguna que otra forma, mas la buena voluntad del hombre no sería olvidada por Yasutora.
Muchas gracias, sabed que vuestro nombre llegará a oídos de mi señor como un gran aliado en la búsqueda cuando todo se solucione, sama.-Dijo despidiéndose del hombre para que pudiera marcharse, mas cuando este se marchó miró al resto de samurais con los ojos brillando con osadía.-Un magistrado escorpión? no nos dará mas allá que patadas en los traseros para echarnos de aquí, mas todos sabemos que de seguro implicado estará en dicho robo y se nos ordenó recuperar lo robado con premura, entrar y salir...comprobar la veracidad del cargamento y extraerlo o informar a nuestros superiores para que soliciten su extracción mediante su superior status en el orden celestial.-Les comentó a sus compañeros, ambas opciones eran claras, entrar allí sin permiso alguno o perder un preciado tiempo en informar a sus superiores para que estos intercedieran por ellos.
Después de despedirse de forma afectuosa con el comerciante compañero de clan, pues si bien sabia que estaba algo sucio cumpliria su función para el clan y el orden, y que Akira era más bien dado a las buenas formas con casi todo el mundo que no le atacase directamente, entonces surgio el tema del magistrado escorpion.
.-Disculpad Yasutora-san. ¿Quizas no sería más adecuado suponer que el echarnos a patadas supusiese que hubiese sido ofendido por nuestra actitud? Al fin y al cabo siendo correctos y habiendo pedido permiso a su superior y consejo sobre como proceder sin ofensa sería una gran descortesía no dejarnos inspeccionar el almacen. Después de todo intentamos demostrar su inocencia, y proceder de otro modo sería interpretado como tratar de demostrar su culpabilidad, lo cual es un agravio para cualquier hombre inocente. No entiendo tanto de honor y buen hacer como vuestra persona ni estoy tan acostumbrado a tanta rectitud pero espero entendais que intento reducir los daños que provoquen nuestra investigación. De todas formas habia imaginado desde que supe que el propietario era un magistrado que sería Shijo-sama-. Volvio la mirada hacia el .-Quien tendria mayor conocimiento sobre estos asuntos-. Ya dirigiendose a Shijo-sama .-Además tendras responsabilidad sobre lo bueno y lo malo que resulte de nuestros actos-.
*Usar un lenguaje más formal para referirse a Yasutora no es casual. Lo llevo haciendo desde el principio de la partida XD
Simplemente nuestra presencia armada en las cercanías de sus almacenes podría ser la excusa que necesita, mas me plegaré a los deseos de una acción mas educada si es lo que precisáis todos.-Sonrió a su compañero cangrejo.-Sabed que el honor a veces no nos lleva por los derroteros mas educados o amables.
Yo por mi parte abogo por lo q dije antes
Estaba claro que el comerciante no iba a colaborar más pero los caballos no estaban allí aunque se les escuchaba cerca, si pudiesen ver el almacén contiguo....
No hay otro modo de proceder a mi entendimiento. Debemos encontrar al magistrado escorpion para que nos permita entrar a su almacén ya veremos cuando lo encontremos si nos da patadas o no, pero hay que hacerlo. Y otra cosa... ya casi abren el mercado al público y es un buen lugar para traficar con las joyas robadas, no podemos olvidarnos de ellas.
Otaku tomo aire.
Lo mejor será separarnos de nuevo por parejas para poder revisar el mercado y que otra pareja se encargue del magistrado.
Los cuatros samuráis tenias claro ya donde estaban los animales perdidos. Pero de ahí a conseguir su devolución había un trecho bastante bueno.
Pero las dos opciones estaban ahí. Las joyas, y los caballos.
Arduas tareas ambas.
Tras un poco de debate, los cangrejos convinieron avisar al cangrejo jefe del puerto, ya que en cierta manera os habíais ganado su apoyo.
Y os proporciono dos hombres de confianza para vigilar el almacén discretamente.
Eso os daba tranquilidad, porque los caballos sin duda eran el elemento más complicado de mover, más de día por una ciudad tan concurrida sin llamar la atención.
Dos tareas a realizar, dos objetivos. Y siempre, el tiempo en contra.
La mañana de Rokugan cobraba vida, al algarabío era constante, el calor empezaba a inundar las calles así como las sombras a retirarse a los rincones más oscuros, de los cuales la apodada “Ciudad de las Mentiras” tenía más que suficiente.
La noche entera sin dormir, aun no os pesaba en los hombros, pero sí que alguno tenía hambre, y necesitaba al menos unos minutos para sí mismo.
Pero el deber se imponía a todo lo demás, prueba de ello era, que todos, fueran de la escala social que fueran, estaban ya trabajando.
Fin de Escena.
Pasamos brevemente al off topic. Y luego continuais en las siguientes escenas.