-En todas las puertas de la ciudad, si, y luego se reportaron aqui. +responde el gunso con parsimonia. Eso no es del todo tranquilizador. Ustedes saben que el distrito curtidor no tiene murallas y por ende, tampoco puertas. Si bien entonces se corre un gran riesgo de que una patrulla te detenga en el camino por no tener papeles de viaje (los que se piden a la guardia) o tenerlos fuera de regla, es tambien una forma de salir sin ser detectado.
-Deberas consultar a los magistrados al respecto. Sin una autoridad real de la ciudad que os acompañe, es probable que no tenga tiempo para vosotros...+señala Kitsuki-sama, con un ligero enfasis al final. Los dragones no tienen problemas en entender el mensaje. Es una de las excusas comunes que se suele dar a los que intentan visitar las tierras Dragon sin ser invitados o deseados. Pueden pasar meses en Shiro Tonbo, de los primos Libelula, esperando noticias favorables de un samurai que siempre parece estar demasiado ocupado, como para atenderlos...
Luego de esto los 3 se retiran. Al salir no ven a la mencionada Osako, aunque es bien probable que halla sido introducida a una sala de espera entretanto, sobre todo considerando su rango. Pueden notar no obstante, que dos bushi escorpion aguardan en la puerta como una escolta, en compania de los Mirumoto destacados. Los dos grupos se miran... Es un ambiente tenso. Sintiendo el peso de aquellas espadas, los 3 atraviesan eso y salen en direccion a la puerta del distrito Mercader, para encontrarse con los Magistrados Escorpion, y poner a prueba sus suspicacias...
Sin nada mas que preguntar, los 3 se retiran. El gunso ha aclarado pocas cosas. Aun existe la chance de que la joven saliera hace mucho o en secreto... o que este en algun rincon de la ciudad, oculta.
Ahora toca reencontrarse con los Dragon, y recorrer el distrito Mercader en busca de respuestas sobre las alianzas de Agasha-san... y de las propias cuitas, como bien puede recordar Hitomi al sentir ese vacio en su obi.