El teléfono sonó rompiendo el silencio de la noche.
Hace años que no duermes a pierna suelta. En tu conciencia ya hay demasiada carga como para lograrlo. Hace tiempo que perdiste la cuenta... y eso te hace sentir fatal...
¿Cuántos habrán sido?
La televisión en tu habitación sigue encendida. Una vieja película en blanco y negro pasa sin pena ni gloria a través de las ondas.
Respondes con desgana. Sabes quien es. Y esta noche no te apetece. Pero se lo debes. Sin ellos ni siquiera estarías aquí...
- Si...
- Hola Frank.- no hace falta presentación. Como suponías se trata de Jack- Tenemos visita en casa.
- ¿Cuántos?
- Ocho...
- Joder... Vale.
- En media hora paso a recogerte. Hace una noche de perros. Llueve a cántaros y tardaremos en llegar unas horas. Nuestro Padre quiere que sea limpio y rápido. Sabes lo importante que es para él. Además, yo tendré que estar de vuelta a primera hora para el Oficio.
- Está bien.
La comunicación finaliza. Frank se de cuenta de se había dormido vestido y con la luz encendida. Se asoma por la ventana. Llueve a cántaros. Ocho... A la mierda. Es lo se espera de ti! Obedece sin discusión. Es solo otro acto de Fe.
Una pistola a la cartuchera. La escopeta y el hacha de mano a la bolsa de nylon. Cartuchos, balas y la Cruz Negra, símbolo de la Orden.
Los veinticinco minutos restantes que faltan para que llegue Jack los pasa leyendo el "Libro Principal".
En principio, Sutagar llevará a Frank y Gran_ a Jack. Aunque en un momento dado, yo mismo puedo llevar a Jack si Gran_ no aparece (que creo que estaba liado con el trabajo...).
Bajas al portal y abres la puerta justo en el momento en el que Jack, al mando de un Chrysler Voyager negro de lunas tintadas, para delante. Frank cruza la acera en dos zancadas dejándose mojar por la lluvia.
- Vamos. Tenemos que llegar antes de que amanezca.
El vehículo arranca. Silencio en la cabina. Solo el repiqueteo constante de la lluvia sobre la chapa, y el sonido del limpiaparabrisas sobre el cristal.
Jack abre la boca.
- Nos han avisado hace un rato. Al parecer un tal Adam ha dado aviso en la oficina del sheriff de extraños acontecimientos en el Convento.
- ¿Y los guardianes?
- No lo sabemos. Pero es probable que alguno haya caído. Ocho visitantes son muchos. Máxime si son jóvenes y estúpidos, y van bebidos. Si han dado con la armería, podríamos tener un problema serio. Ya sabes lo importante que es ese lugar para la Orden. Debemos mantener el secreto...
Ante ese comentario, Jack aparta la vista de la carretera para mirar por un momento a Frank.
- ... A toda costa.
Bien. Ya tenéis un poco los antecedentes y el rol que debéis llevar. Jack es una especie de Sacerdote. No el responsable principal pero sí alguien con cargos en esa Organización. Su arma favorita es "El Libro Principal" (el libro de Fe de esa orden). Mucha labia y mucha influencia sobre Frank (Sobre todo por miedo). Lleva una pistola y la intención es que sea alguien inquietante. Que los PJs lo vean con un libro y una cruz en una mano, rezando continuamente, y la pistola en la otra.
Frank es un ser atormentado que le debe mucho a la Orden. Siempre ha sido un matón, y ahora lo es más. Escopeta, pistola y hacha.
El final de la partida será tipo survival. Es decir, sálvese quien pueda. En el primer encuentro de Frank con los PJs, éste abrirá fuego (y matará) al primero que se encuentre. Si hay varios PJs juntos vete pensando (Sut) a quién vas a disparar. El resto dependerá del azar.
Así que esas son las instrucciones. Conocéis el lugar y podéis moveros con libertad. Objetivo: acabar con ellos antes de que ellos acaben con ustedes.
¿Alguna pregunta o sugerencia?
Mola!
Bueno, alguna pregunta.
-Frank es como el matón de la orden, pero es solo eso, o pertenece a ella tambien de forma espiritual? Vamos, si es también un chalado religioso que comparte los credos de la orden, sean cuales sean estos… Me imagino que si. ¿Por qué le debe tanto a la orden y porque tiene miedo de Jack?
-¿La casa pertenece a la orden? ¿Por qué es tan importante para la orden?¿Que sabemos de esa casa? Saben Frank y Jack que allí ocurre algo paranormal, con fantasmas y demás historias de Iker Jiménez? XD
-¿Quiénes son los guardianes que menciona Jack?
De momento eso ;-) Solo es curiosidad, y por si en algún momento tengo que conocer esos datos para el roleo.
PD:por cierto, al escribir el mensaje me sale de forma predeterminada Gregory, y tengo que seleccionar a mano a Frank. ¿Puedes poner que Frank sea mi personaje predeterminado? Si no ya tendré cuidado de cambiarlo al escribir los mensajes ;-)
Por partes:
Pequeñísimas gotas de agua que ni siquiera se podía llamar lluvia caían sobre el cristal delantero del vehículo. Era de noche y el polen que se pegaba al crista, mezclado con la fina capa de humedad hacía pensar que se trataba de restos de un incendio que ensuciaban el cristal.
Jack metió su mano en el interior de su americana y sacó un pequeño libro. El libro estaba forrado con mucha delicadeza con piel humana de una de esas personas que creían que la casa a la que se dirigían ahora servía para ocuparla sin pagar precio alguno.
Abrió el pequeño libro por la página central. Era fácil encontrarla, estaba marcada por el uso.
- Cuando el pasado te busca, te encontrará y cuando te hayó, te pedirá lo que le debes. El futuro, el pasado y el presente son uno solo y por ello debemos redimir nuestros pecados defendiendo aquello que nos ha sido encomendado. Empecemos a rezar Frank.
Y Jack empieza a leer en un idioma olvidado en el tiempo. Frank ha oido una y otra vez lo que Jack lee en voz alta. Un idioma que no comprende, pero que sabe que habla de la misión que va a tener que cumplir ésta noche.
- No quiero que nadie más que nosotros salga de esa casa.
Dice Jack cuando termina.
Frank apaga el puro antes de entrar en el coche. Se sacude las gotas de la gabardina negra y se sienta, sin pronunciar palabra. Es Jack quien rompe el silencio. Frank se pasa la mano por la mejilla, rasposa de la barba de dos días, escuchando las palabras del sacerdote.
Cuando Jack comienza a rezar, Frank repite las palabras por lo bajo, mascullando, sin demasiado interés. Mira por la ventanilla hacia la oscuridad. Se lleva la mano a la cartuchera, comprobando que la pistola siga allí. Por un momento desea que no esté.
No quiero que nadie más que nosotros salga de esa casa- las palabras de Jack resuenan como una premonición. Frank pierde la mirada en la oscura lejanía.
Claro…
OK. Gracias por todas las respuestas, Vitriol ;-)
El coche asciende por la sinuosa carretera que lleva a la montaña, con la lluvia repiqueteando en el techo y el limpiaparabrisas a velocidad media.
Os cruzáis con escasos vehículos durante el camino de ascenso.
El silencio restante es útil para pensar: en la Orden, en lo que va a pasar esta noche. En los designios del Altísimo...
El tiempo pasa rápido, y cuando os dáis cuenta, estás girando a la derecha y encarando el camino de grava que lleva a la verja principal.
Hay una forgoneta aparcada.
La puerta principal del Convento está rota. El edificio principal está iluminado. Al igual que la biblioteca. Desde donde se escuchan voces.
Bien, ya estáis aquí. Recordad lo que se exige a estos PJs. Son mandados con fe. Sobre todo Jack. Objetivo, limpiar el escenario y que el Convento no sea el centro de noticias desagradables. Cómo ya habéis hecho otras veces. La Orden debe ser Secreta... ante todo.
El brazo ejecutor es sobre todo Frank.
Ya sabéis que en principio tenéis el "poder" de eliminar al primer compi al que disparéis. Lo hará Frank. En base a cómo se desarrollen los acontecimientos elegirás a la víctima. El resto no se cómo saldrá.
Cualquier duda la exponéis. Pasaremos después todos a una escena común, así que aquí podréis hablar.
Bueno, ha llegado el momento...- comenta Frank, con la mirada fija en la luz de la biblioteca, y lanzando un leve suspiro-. Parece que hay alguien en la biblioteca. Será mejor no acercarse más en coche, para no llamar su atención antes de tiempo- la mirada de Frank parece analizar la situación de forma profesional-. Creo que lo mejor sería inutilizar primero la furgoneta, para que no puedan escapar.
Dicho esto, baja del coche, echándose la bolsa de nilon al hombro, y palpando por última vez la pistola debajo de la gabardina.
Bueno, bueno, que comiencen las tortas! XD
Unas cuestiones. Mi intención es inutilizar la furgoneta primero (siempre que no tengas objeciones, y quieras que vayamos directos a donde ellos) ¿Tenemos algún cuchillo con que pinchar las ruedas? Podría intentarlo con el hacha, pero me parece un poco bruto XD Pero solo lo haría si la furgoneta está entre la biblioteca y donde estamos nosotros. Si tengo que pasar frente a la biblioteca para llegar a la furgoneta no lo haría, que podrían verme antes de tiempo.
En cuanto a quien dispararé primero, me imagino que lo suyo sería disparar a quien más peligroso le parezca a Frank, vamos quien esté más armado XD
P sssssssssss. P ssssssssssssss. P ssssssssssssss. P ssssssssssssssss.
Frank saca su cuchillo y pincha las cuatro ruedas de la furgoneta, que baja casi diez centímetros dejando las llantas pegadas al suelo.
La mente del matón ya ha entrado en el programa de "ejecución". Ya no hay sentimientos. Ya no hay remordimientos. Ya no hay emociones.
Al trabajo...
Hecho!
Cita:
Pobre Spinner... Jejejeje
Jack junta las manos y muestra las palmas hacia las ruedas en el momento en que Frank pincha las ruedas. Mientras éstas se desinflan, Jack reza en silencio. Aunque sus ojos están cerrados, se puede sentir su mirada sicópata.
- Continuemos.
A pesar de que quiere pasar desapercibido, Jack no se agacha en ningún momento. Permanece de pie y caminando con calma hacia la casa.
- Acabemos rápido con este pequeño incordio.
Un par de segundos terroríficos.
- Como la última vez.
Frank se guarda de nuevo el cuchillo, mira hacia la biblioteca, y asiente silencioso a las palabras de Jack. Esperemos que no nos den muchos problemas.
Frank comienza a caminar hacia la casa, unos pasos por delante de Jack. Saca la pistola de la cartuchera, le quita el seguro, y la sujeta escondida detrás de la espalda.
De manera sorpresiva, de la biblioteca sale primero un chico y un segundo más tarde una chica.
El chico parece atlético, bien parecido. De cabellera rubia y media melena al viento. Sale con la cabeza gacha y los hombros caídos. Como presa de una terrible preocupación.
Un segundo más tarde sale una joven, también rubia. Le habla, aunque él le da la espalda. Están apenas a un metro de la puerta de entrada a la biblioteca.
Es un milagro que ninguno de los dos os hayan visto. Las sombras de la noche y el ruido de la lluvia y el viento os camuflan perfectamente.
Terminemos con ésto - piensa Frank mientras levanta la pistola en dirección a la pareja.
Bien, comienza la fiesta. Frank, cómo te dije, el primero al que dispares morirá. Sin concesiones. Debes decidir a quién te cargas: si Rubí o Diamante.
Dímelo por aquí aunque la acción tendrá lugar en una nueva escena que abriré a tal efecto cuando sepa qué vas a hacer.
Jack (Gran_), lo mismo. Tu eres menos físico y expeditivo. De ti espero un rollo más inquietante en la interpretación. Más misticismo. Aunque por supuesto puedes emplear las armas que llevas (incluído las palabras en el Código de la Orden).
Jack nota como su alma viaja a toda velocidad a través del tiempo y el espacio. Los muertos se comunican con Jack y a la inversa. Las almas doradas y con tonos morados viajan por el éter pretendiendo tocar un aire que ya no pueden saborear.
Jack ve al joven de los dos que va a morir. Su alma ya está viajando por el infinito éter.
Y desde fuera, Frank puede ver como de nuevo los ojos de Jack se vuelven blancos, sus pupilas han desaparecido por completo y de su garganta sale un sonido gutural y estrambótico que se extiende por igual por toda la zona. Es casi imposible saber de dónde viene porque el sonido retumba por la zona, por las paredes, por los suelos.
Y empieza a rezar.
- El abismo se abrió y descendimos por las tinieblas.
Frank apunta a los dos jóvenes con su pistola. No se han percatado de su presencia, lo que le facilita tener un buen blanco. No hay prisa, apunta con tranquilidad…
Frank respira hondo, y con el pulso firme de un profesional, desvía la mirilla de la pistola hacia el muchacho rubio. De los dos parece el que más problemas podría darle, por lo que lo más razonable es eliminarlo cuanto antes. Sin dudar ni un instante, su dedo índice presiona el frío metal del gatillo.
El sonido resuena en la noche, pero el joven no tiene tiempo de pensar en que lo causa. La bala le atraviesa la cabeza. El rubio pelo se tiñe de rojo, mezcla de sangre y cachos de masa encefálica.
Lo siento, chico…
Sin perder un segundo, Frank se prepara para realizar un segundo disparo, esta vez dirigido a la chica. Pero al mismo tiempo su cerebro ya está analizando la situación. Su mirada busca el mejor sitio de cobertura, por si los chicos estuviesen armados.
Lo siento por Pespunt, pero el tiro va para Steve. Creo que es la decisión que tomaría Frank
Ah, y voy echando un vistazo para localizar la mejor cobertura que pueda haber cerca de mi, algún arbol, etc.