Partida Rol por web

La gran red de estaciones de Metro, galerias y edificios de Montreal proporcionan a la espada de Cain un mundo perfecto. Despues de que los ultimos trenes se hayan marchado a las cocheras, cerca de la 1:30 am, el submundo bulle con no-vida. Las estaciones de la zona centro, particularmente McGill, son populares puntos de encuentro porque interceden con multitud de galerias comerciales, pasajes peatonales y conexiones secretas con el Refugio Comunal. Los cainitas se reunen en los nodos para charlar y planear o perpetrar paseos al aire libre. Se realizan festines de sangre frecuentemente, y el ultimo entretenimiento de la noche suele ser devolver los cuerpos a sus casas.

La ciudad Subterranea

Localizado bajo el corazon del centro, y abarcando mas de 30 kilometros, hay una vasta red subterranea de tuneles, galerias, estaciones de metro y oficinas del gobierno conocida popularmente como la “ciudad subterranea”. Todo el complejo esta conectado con el metro, lo que permite virtualmente viajar a cualquier localizacion del centro sin tener que poner un pie en la acera. La red esta densamente atestada con incontables estrechos corredores, cada uno con pequeñas tiendad y restaurantes, conectando las muchas galerias que forman el complejo subterraneo.

Durante el dia, el recinto es relativamente seguro; el numero de compradores y guardias de seguridad mantienen el crimen al minimo. Al caer la noche, sin embargo, el lugar se convierte en dominio del Sabbat. La mayoria de los tuneles y callejones son lugubres y apenas estan patrullados. Extraños sonidos y gritos pueden oirse a menudo viniendo de las sombras. El sabbat obtiene mucho placer jugando con los tenderos y compradores que no sospechan nada. Los cainitas organizan crueles entretenimientos de gato y raton que generalmente terminan con las sangrientas muertes de los humanos.

La ciudad subterránea fue el primer lugar donde el trio decidio explorar, era una entrada perfecta a los demas túneles que se conectaban por todo Montreal. La ciudad ahora tenia unos pocos humanos dando vueltas o manejando las tiendas, junto a ellos estaban algunos sabbat que bromeaban con ellos o que simplemente los abusaban de distintas formas.

Pero no era por ellos que el vampiro estaba ahi sino por una investigación que habían comenzado sus compañeros de manada. Justo a la posibles dificultades que podrían llegar a tener.

Estaba harto de esa charla vacía de mujeres, no se puede tomar el té cuando tus compañeros pueden dejar de existir, no estaban peleando contra humanos, estaban contra algo superior a un vampiro. Se dispuso a ir para ofrecer la información que tenía, la cruz, la forma de moverse por las cloacas de esa fuerza. Entró ofuscado y llevaba su confiable pistola, lo mejor sería permanecer invisible mientras se pueda.

Las criaturas parecen sangrar, y parecen quejarse, pero tambien parecen dificiles de matar.

HAY QUE BUSCAR UN PUNTO DEBIL.

Digo mientras peleo, mi ojos miran como los cuerpos deformes, como mocos pegados se quejan pero a la vez son muy resistentes, mi mente piensa en ese momento, ¿qué pudo hacer un monstruo así?

Un tzimisce podría hacer monstruos, pero seres que salen de las paredes como mocos  asquerosos, como un ente que como seres, no sabría como explicarlo.

Rápidamente continuo atacando mientras grito. Cuiden al maldito perro,  es él único que puede ayudarnos a salir de aquí. Y en ese momento  con mi daga  ataco nuevamente y con fuerza a la figura deforme que tengo delante.

En la cabeza del gangrel no habia piedad y eso se demostró cuando volvió a atacar con fuerza al deforme que le intento atacar antes pero fallo. Por eso fue que cuando volvió a barrerlo con sus garras este quedo partido casi a la mitad cayendo al suelo como cualquier otro cadáver.

Luis por su lado volvia atacar a pesar de su dolor. Saltando encima de su asaltante empezó a morder con rabia su brazo haciendo que el otro ser gritara.

Las alcantarillas despedían un olor nada raro para el lugar, lleno de desperdician y basuras varias. Al entrar ofuscado nadie que estuviera ahí se daría cuenta de su presencia aunque el malka empezaba a notar que tampoco habia tanta vida en ese lugar. Si bien en la entrada estaban tus típicas ratas y animales medio muertos, mas adentro parecía ser un lugar donde la vida no se adentraba excepto ahora por el ghoul de Albert que tal vez fue con ellos o con algo de suerte fue dejado en el departamento.

Escucho a Ductus hablando sobre encontrar un punto debil, cosa que suena mas facil decirlo que hacerlo ¡Carajo si estamos rodeados! ¡6 seres deformes, con una fealdad peor que un nosferatu! Solamente me hace tener ganas de vomitar, pero no tengo estomago o mejor dicho ya no me funciona el estomago como deberia-¡Que repulsivas!-Dijo mientra proseguia con mi ataques, el cual se vuelve mas deseperado por cada acometida de la bestia.

Estaba un  poco jodido, sabia que necesitaba mi pistola,  pero mi maldita suerte ha hecho que se trabe el arma, veo que estas cosas se estan acercando, entonces trato   de  atacar al mismo tiempo que  hacer los movimientos necesarios para que el revolver quede nuevamente operativo.

El meterse por la alcantarilla del lugar no le fue dificil, ya que por alguna razon la puerta no estaba bloqueada o cerrada de ninguna forma. Lo que fue mas complicado era guiarse por el lugar. Las alcantarrillas aunque no tenian esa funcion parecian un laberinto, falta de señales visibles y una paredes que parecian identicas las unas de la otra no ayudaban mucho al Malkavian a ubicarse por donde iba.

No habia ni siquiera ruidos que lo guiaran aunque debia estar seguro que los demas estarian ahi presentes solo que aun no encontraba señal alguna de ellos. De paso el lugar empezaba a oscurrese aun mas mieentras mas se internaba dentro.

La suerte parecia estar con Martin que tras una nueva apuñalada el ser frente a èl cayo como cualquiera siendo atacado con tal ferocidad, agonizando se cayo al suelo dejando de molestar al nosferatu que aprovechando el momento detravo el revolver en dos segundos para aprovecharlo contra quien viniera.

Mientras Albert iba tambien bien, aunque sus puños no se mostraban tan efectivos como la daga del otro vampiro. Si bien el bicho se extremecia con cada golpe probando que no era una pared. Este volvia mas rapido al ataque y eso se probo con un nuevo rasguño, pero este probo ser mas debil que el anterior sin llegar a dañarlo tal vez por el anterior golpe de Albert. Lo mismo paso cuando un nuevo deforme fue por el nosferatu atacandolo a un costado yendo por su mano con la daga, tal vez en un intento de desarmarlo.

En la otra batalla las cosas estaban igual de inciertas. Aunque Kupuka parecia no estar nervioso por los ataques recibidos. Aun cuando uno de los deformes fue a hacerle un tajo parecido al que hizo èl a uno de los deformes  y otro se le acerco a uno costado para morderlo en el cuello. Al parecer los deformes habian ignorado a Luis por el momento viendo mas claro la verdadera amenaza. Incluso joshua parecio ignorado cuando el que tenia enfrente fue a buscar morder al gangrel. Lo que empezaba a ser preocupante ya que lo rodeban.

Joshua en vez de aprovechar el momento trato de disparar al grupo pero su arma se trabo repentinamente, lo que lo hizo maldecir en un grito mientras miraba nervioso su arma. Este no estaba siendo su dia para nada.

Sigo golpeando a las criaturas una y otra vez, pero no parece que yo le este realizando un gran daño. Simplemente se levanta de nuevo, para atacarme y asi seguir en este estado de monotonia perpetua, volviendo la batalla en una prueba de resistencia que de supervivencia. Y con los gritos Joshua, solo hace que me ponga mas nervioso. -¡UNA PUTA ARMA NECESITO YO!- Dijo mientras recibo el golpe del egrendo en mis ropas, que de por suerte. No fue lo suficientemente fuerte como para causarme un daño serio a mi cuerpo.

Pero aun asi, la soledad y el creciente numero de enemigos. Me hace pensar que no podre llevar esto yo solo, motivandome a retroceder y correr hacia nuestro sacerdote, con la esperanza de poder aumentar mis posibilidades de supervivencia. Ya que mi mente poco a poco se esta volviendo mas agresiva y salvaje de lo que yo soy.

TENGAN  CUIDADO! ,...Miro al rededor paranoide y completamente complacido de que haya matado a uno y que mi arma  este arreglada. Viendo que nuestro sacerdote esta en problemas grito. Darle una mano a KupuKa  y al criado, que los rodean.  En ese momento disparo para matar a uno de los  sujetos que amenazan a los otros dos que estan en peligro, veia que  no estaban teniendo suerte y  sentia la adrenalina de la no vida en mi interior.

Kupuka a pesar de estar rodeado por tres deformes siguio peleando como podia, usando sus garras contra los mas cercanos. Contra el que lo quizo morder en el cuello con fuerza le fue primero. Ese pobre diablo recio un rasguño que lo hizo retroceder de miedo aunque no lo mato.

Luis por su lado tambien fue a ayudar mordiendo como podia a uno de los heridos, aunque este se lo saco de encima sin mucho esfuerzo con el perro no sacando ni sangre del deforme.

La ayuda de Martin sirvio, haciendo sentir al deforme que se habia sacado al perro el caliente acero de las balas de su revolver. Mas ello no termino de disuadirlo a èl u a los demas para dejar al Gangrel en paz.

Pronto los tres que habian atacado antes se avalanzaron de nuevo contra èl, cada uno saltando a una parte diferente de su cuerpo buscando hacer caer al guerrero sureño. Ninguno teniendo un gran exito pero se empezaba a notar que la gran cantidad de enemigos hacia mecha en el guerrero que pronto vio como uno de ellos les producia un daño en su estomago tras arrancarle algo de su piel a pesar de lo endurecida que estaba.

Mientras cerca del otro grupo Albert corria al otro lado, pasando cerca de uno de los deformes que le tiro un garrazo en el camino aunque sin tener la suerte de tocarle. Al mismo tiempo uno cercano a Martin lo atacaba buscando ganar su atension y tal vez mucho mas, proque aprovechando la distraccion de este golpeo con una fuerza importante al Nosferatu.

Mientras el ghoul tomaba en cuenta el plan de Albert pero para otros fines, corriendo pero en dirreccion de este aunque tambien para salirse de ese lugar. "Debemos huir!" gritaba desesperado al resto.

Agarro el brazo de Joshua y le aprieto con fuerza-¡NO HUIRAS HASTA QUE DUCTUS DIJA ALGO! ¡AHORA DAME UNA MALDITA ARMA!- No queria que se fuera, o mejor dicho. NO deseaba que se fuera y saliera con vida mientras los demas nos quedabamos aqui batallando con estas criaturas, simplemente no lo soportaria mas-¡DUCTUS!-Grito para alarmar a nuestro Lider y tome una decision, huir o batallar. Solo habria 2 resultado que mi mente podria procesar. Mientras el lider decidia que pensara realizar, miro todo el lugar en busca de algo que me ayude. Un arma, un atajo, algo que nos permita ayuda en esta situacion.

Le lanzo  a  Albert mi daga una vez me ha atacado el ser.  Toma. utilizala bien, pues con eso ando. Si ese hijo de puta no colabora que sirva como comida para estos seres o luche!, lanza tu arma si eres cobarde maldito seas!

El ser asqueroso me impacta, y me recupero pero ciertamente  tenia que sacarlo de encima asi que le disparo.

Ayuden al sacerdote.... es fuerte, pero quiero a mi equipo completo...

En eso disparo al fulano que me ataca.

El arma que te podia ofrecer Joshua era la unica que tenia, la que se le habia quedado trabada. Igual pronto Albert la podria tener en su mano, a pesar que su atension estuviera en otro lado. Claro que tambien la daga de Martin llegando a èl le pidio la atension.

Aunque buscaba no encontraba nada demasiado util para la situacion que tenian ahora en sus manos, la batalla no cambiaria mucho aunque empezara a lanzar porqueria a los deformes o tal vez lo segaria un poco, pero tambien podia terminar molestando al gangrel. Mientras la salida quedaba mas o menos clara, solo debian retroceder y doblar a la izquierda...o era a la derecha.