Partida Rol por web

Aliena pasea por cubierta echando un ojo a los cañones. En caso de afrenta siempre es mejor estar peparado.... Repasa los anclajes de aquí y de allá, el estado de la polvora y la metralla...

De pronto escucha la estruendosa voz del vikingo y observa atónita la escena con una mecla de repulsión y curiosidad.

Bárbaros...

Miro expectante a Asbjörn para ver si las palabras del piloto han conseguido aplacarlo un poco, pero tras años junto a el se que no seria nada bueno tratar de interponerme

La niebla de la noche, se va cerrando cada vez más ... ahora tan solo se puede ver con claridad hasta las primeras casas ... y los gritos de los borrachos ya casi han cesado seguramente dormidos tirados por ahí ...

La calma es un tanto angustiosa ... el silencio se vuelve tenso ... tan solo la pequeña disputa entre los dos marineros corta el ambiente ... de repente ... en la oscuridad de la noche ... en la incertidumbre de la niebla ... unos pasos apresurados rompen el silencio mas allá del puerto ... llaman la atención incluso del bárbaro Asbjörn, y no podéis evitar mirar hacia el lugar ... tensos expectantes ... incluso preparados para la peor de las situaciones ... de entre los jirones de niebla ... podéis observar como aparece un inconfundible traje rojo ... parece ser vuestra capitana ... no os queda ninguna duda cuando por fín sale de la niebla ... corriendo a toda velocidad ...

Pocos segundos después intentando seguirle el ritmo, la sigue un extraño hombre ... no parece que le conozcáis de nada ... poco a poco se van acercando ambos ...

Reese pasa corriendo al lado de Asbjörn:

- ¡¡ASBJÖRN!! ¡¡ZARPAM...!! - observa al gigante, cubierto de sangre - Mierda... Has tirado provisiones por la borda ¿¡EH!? ¡¿TE ESPERAS A QUE NO ESTÉ PARA...?! ¡¡BAH!! ¡¡DA LAS ÓRDENES DE QUE ZARPAMOS YA!! ¡¡ARRIAD LAS VELAS!! ¡¡LEVEN EL ANCLA!! ¡¡SUELTEN AMARRES!! ¡¡TODOS A SUS PUESTOS!! - grita la capitana, a quien no le importa que el pistolero se haya colado tras ella en la cubierta - ¡¡VAMOS, VAMOS, VAMOS!! ¡¡¡¡CORTANDO EL AIRE, MARINEROS!!!!

El pistolero, sube a bordo tras la capitana con una sonrisa, aunque se queda parado nada mas subir al ver a la tripulación, sobre todo al enorme vikingo, al que mira con los ojos bien abiertos .... un tanto asustado ...

Con preocupacion miro a la capitana y me pongo en el centro de la cubierta, para no estorbar la maniobra pero listo para comenzar a dar ordenes si estalla un combate, y no dejo de seguir con la mirada en ningun momento al nuevo "pasajero", pero no es momento para preguntas a la capitana

- ¡¡PINFOL!! ¡¡MUÉVETE O TE VAS POR LA BORDA!! ¡¡AYUDA A DESPLEGAR EL VELAMEN Y EN CUANTO NOS MOVAMOS - hace un gesto seco con el pulgar señalando hacia arriba - A LAS ALTURAS!! - se nota que la capitana está alterada. Corre subiendo hasta el timón y le dice a Alfonso:

- Pon rumbo a La Española, Alfonso... Dentro de nada, eso será un tinglado importante...

Se vuelve hacia la tripulación, bajando de nuevo con rapidez y poniéndose en el lado contrario de Asbjörn a dar órdenes:

- ¡¡VAMOS, MARINEROS!! ¡¡LA ARMADA INGLESA VA A PISARNOS LOS TALONES!! ¡¡ARTILLERÍA, QUIERO ESOS CAÑONES A PUNTO POR SI NUESTRO RUMBO NOS DEPARA BATALLA!! ¡¡VAMOS!! - da palmadas en el aire incitando a la velocidad.

Lanzo una última y furibunda mirada al timonel, tras lo cuál, dejo el hacha a un lado y miro a la tripulación mientras empiezo a moverme. Con voz atronadora y potente, comienzo a gritar:
-¡¡¡A CUBIERRRTA, PORRRR LA HIRRRSUTA BARRRBA DE ODÍN!!! ¡¡¡TRRRIPULACIÓN A BRRRAZAS, ISAD ANCLA, ARRRRRIAD VELAS!!! Comienzo a gritar aún más fuerte, incluso llegando a enrojecer. -¡¡¡¡VAMOS, MALDITOS!!!! ¡¡¡¡QUERRRERRR MOVIMIENTO, O ENVIARRRR A POZOS DE AZUFRRRRE DE NIFLEHEIM!!!!

Mi Capitana sus palabras resuenan como el cantar de los ángeles a mis oidos.

Alfonso sonríe al contramaestre y se pone de pie de un salto para agarrar el timón mientras ajusta mentalmente la ruta a seguir.

Vamos marineros de agua dulce, quiero ver movimiento alegrad esas caras que volvemos a alta mar... Pronto estaremos en La Española disfrutando de una buena ración de cerveza fresca.

Alfonso mira con ligera preocupación a la tierra, nunca le dio buena espina y está deseoso de saber qué llevó a la capitana a parar aquí.

Así no holgazanes, maldita sea esas velas son vuestro pasaporte tratadlas con un poco más de delicadeza majaderos, si al final tendré que bajar yo a hacer el trabajo.

La poca delicadeza con la que algunos marineros tratan el material le pone de los nervios, no en vano es un maestro velero y armador de buques. Sin embargo mientras habla intenta no entrometerse en las órdenes dadas por la Capitana o el Contramaestre, sino que va animando a su manera a cumplir las áreas que más le afectan.

Agarraos los machos que partimos, Mi Capitana rumbo La Española a toda vela... la previsión del tiempo es agitada y se esperan rachas de hostias a popa, será un viaje movidito.

Reese se asoma al puerto, escudriñando la actividad...

- ¡¡ARTILLERÍA!! ¡¡VEEEENGAAAAA!! - repite, aunque tampoco se ha molestado en mirar si los de artillería están ya manos a la obra.

Isadore algo sorprendido por la acelerada llegada de la capitana se queda en un prinicipio quieto donde estaba tratando de estorbar lo minimo posible. Cuando ya los marinos hayan pasado para arriar las velas sale corriendo presto evitando estorbar hacia el alcazar donde se coloca por detras de la capitana y de sus ayudantes. Cuando el cirujano pasa por su lado, Isadore le dedica una preciosa sonrisa y un respetuoso saludo.

Subo al castillo por si la capitana tiene alguna orden mas, mi rostro solo refleja la felicidad por navegar otra vez rumbo a la gloria o la muerte

Ingleses, unos estrategas mediocres y peores espadachines, si nos los encontramos sera divertido

Aliena apresura a lo de artillería para que acaben de dejar listos los cañones que comprueba rápidamente ella misma - ¡QUIERO ESE CAÑÓN MÁS SUJETO HOLGAZANES! - Dice antes de lanzarse a atarlo mejor - ¡ARILLERÍA LISTA MI CAPITANA!

Tras unos segundos observando la reacción de todos, y tras los gritos de la capitana, asiente afirmativamente, viendo que todos comienzan a seguir sus órdenes ... Ayuda con las velas, ata los cabos en su sitio ... y poco a poco las velas se van comenzando a llenar de aire, que hace que el barco comience a coger velocidad ....