Capitán Clay Holly y ArdenTellini
Si la captura del buque insignia de Tasca fue una de las más notorias hazañas de Holly, la destrucción de la pequeña ciudad portuaria de Bella Ardena, fue la más incomprendida. Holly tomó al asalto el puerto, siguiendo las palabras de un agente español, que le había contado que en las colinas que dominaban la plantación Tellini se había encontrado oro. Dispuesto a conseguir el oro fuera cómo fuera, Holly ordenó a todos sus barcos( pues para entonces se había construido una pequeña flota) arrasar el pueblo y conseguir el oro. Cientos murieron, pero una joven, cuyo nombre era Ariel Mendoza, y que había sobrevivido al bombradeo, consiguió llegar a hablar con la tripulación de Holly. Y cuando el pirata descubrió que la historia del oro era un engaño, él y sus hombres se alejaaron navegando, con Mendoza abordo. Mendoza provó ser uno de los marineros más capaces de Holly, y se rumoreaba que era muy cercana a él, quizá demasiado. Aunque ella había comenzado como pinche de cocina, sus habilidades naturales para el mar, así como un misteriso incremento de las muertes en abordajes y luchas, pronto significaron el ascenso para ella. Primera de abordo, la mano derecha de Holly. Pero Ariel Mendoza no era lo que parecía. Arrinconando al capitán en su cabina, después del asalto exitoso a una fragata francesa, Mendoza reveló una pistola, con la que apuntó al corazón de Holly, y su verdadero nombre, Arden Tellini. Ella exigió a Holly que le dijera el nombre del confidente español que había causado todo. Cuando él le dijo el nombre, Diego Ortiz(en cualquier caso un apodo que no serviría de nada), ella le disparó, destrozandole la mano. La pérdida de su mano, así como de la mayoría de las mujeres de su tripulación, que se unieron a Arden y formaron la hermandad de las Iron Maidens, llevó a Holly a la buisqueda de una sangrienta venganza. Pero cuando Arden Tellini, cogió la fragata francesa capturada, y renombrándola como El Sable Carmesí, la hizo suya, Holly, cayó en la más profunda de las locuras. Él estaba determinado a perseguirla y recuperar lo que veía como de su legítima propiedad, incluso estaba decidido a conseguir que Arden( a la que no podía dejar de odiar y admirar al mismo tiempo) fuera de nuevo su primera de abordo. Aunque quizá la dispararía primero en unpie que permitir que subiera de nuevo a bordo. Pero testimonio de la arrogancia de Holly, y de su confianza en sus habilidades, que creía que incluso este sin sentido sería posible para él.
La Noche del Mar Ardiente
Todavía recuerdo vivamente esa noche, incluso ahora, casi cincuenta años después. ¿Cómo olvidarla?Nunca antes en mi larga vida había sido testigo de tanta maldad y crueldad hasta esa noche...Cortés retrocedía arrinconado. La bahía donde se había ocultado mientras cargaba sus barcos con prisioneros y oro, había servido también para atraparle. Cuando nos acercábamos, Hernán Cortés hizo lo impensable. Dándose cuenta de que disponía de muchos menos cañones y de que encaraba una lucha imposible de vencer, prendió fuego a toda su flota, dejándola a la deriva...los barcos se juntaban, las llamas crecían.La gran bahía a las afueras de Puerto Príncipe se convirtió en un turbio mar reflejos de anaranjados. En su ansia por impedirnos conseguir su tesoro, Cortés no descargó de sus bodegas ni oro ni prisioneros, dejándolos consumirse por el fuego...Recuerdo el sol ocultándose y las llamas cada vez más altas, como un segundo sol, visible al este desde Mathew Town, al oeste desde Trinidad, y al sur desde Port Royal...Miles murieron cuando la flota de Cortés ardió por su propia mano. Incluso ahora, que tantos años han pasado, se conoce aquel suceso como “La Noche del Mar Ardiente” Fragmentos recuperados de las memorias del Almirante Jack Soothby, de la Royal Navy.