—¡Bravo, bravo! ¡Gloria a Seryan y a su campeón! —felicito con entusiasmo a mis heroicos compañeros, reapareciendo ante ellos y frotándome el doloroso chichón que me ha salido en la cabeza—. Yo casi no lo cuento, pero nuestro comandante nos ha conducido hacia una victoria legendaria. Todos deberíais darle las gracias por eso.
Sin embargo, cuando veo que tienen intención de seguir registrando el templo, no me queda más remedio que volverme invisible otra vez, eso sí de forma muy valiente, y dejar que ellos tomen la delantera esperando que tras cada puerta hallaremos al monstruoso elemental que va a destruir el mundo.
Cuando después de un buen rato no lo encontramos, algunos de mis voluntariosos secuaces se muestran decepcionados pero yo lo único que siento es una mezcla de alivio e incontinencia intestinal. Estaba seguro de que iba a encontrar mi fin entre estas paredes en cualquier momento a juzgar por los altares, las estatuas y las inscripciones macabras que hemos ido hallando a cada paso.
Casi me da pena descubrir al viejo loco Xaod atado a una cama y torturado a conciencia, pero no estoy acostumbrado a manejar tantas emociones a la vez.
La noticia de que está vivo todavía me sorprende, pero me sorprende todavía más alegrarme de que así sea. No era consciente de haberle cogido cariño en ningún momento pero está claro que es así a juzgar por la sonrisa estúpida que se me dibuja en la cara al escuchar al halfling medio majara que todavía respira.
—¡Eh, tú, chica-cabra, eso que dices está muy feo! —la reprendo genuinamente ofendido. La pobrecilla no tiene la culpa de ser fruto de una violación y haber crecido sin amor, pero tampoco la tiene el desafortunado paladín senil—. Quita de en medio y deja que un verdadero héroe obre su milagro.
Invisible, me acerco volando al viejo y le impongo también mis manos en la que es mi buena acción del día. No sé por qué pero creo que por esta vez voy a dejar que Crodos se lleve todo el mérito. A fin de cuentas, el chico se lo ha ganado, es el que mejor me ha tratado hasta ahora y yo soy un pixie justo. A mi manera.
Motivo: Daño sanado a Xaod (1 carga)
Tirada: 2d8
Resultado: 10 [5, 5]
La batalla termino y lamentablemente ninguno de aquel trío había muerto, el enemigo había salido más débil de lo pensado o por el contrario, aquel grupo era tan formidable como aparentaba, sea como sea, no tenía forma de devolverles el golpe que antes le había habían propiciado.
Despojo de los cuerpos sin vida las armaduras y armas que aún portaban, a unos les toco arrancar partes del cuerpo para poder hacerse con ellas, las amontonó como un dragón con su tesoro mirando con recelo al resto del grupo, las palabras de Akta no cayeron bien en los oídos de la cucaracha, quien instintivamente se giró hacia ella enseñándole los colmillos, al parecer está lo ignoro y Krath-tk hizo lo mismo, a fin de cuentas sabía que no podía cargar con todo eso el solo.
La inspección del resto del lugar no asombro mucho al insectoide, un elemental capaz de destruir el mundo no va a estar custodiado por hombre hiena, si embargo no todo era mentira, aquella etiqueta en el templo evidenciaba algo sobre un elemental pero, al parecer era cosa del pasado.
Tras la última puerta por abrir se encontraba Xaod, colgado y torturado hasta morir, o así parecía ser, un sentimiento de derrota inundó su ser, era justo lo que él quería hacerle pero alguien más se le había adelantado, sin embargo si dios le ofreció una segunda oportunidad y una sonrisa maliciosa enmarcó su rostro, cuando Questin dijo - respira -.
Motivo: Saber religión
Tirada: 1d20
Resultado: 10(+11)=21 [10]
Dm descripción de las armas y armaduras para saber que robarme, digo, para saber cómo dividir el botín xD
Lanzo saber religión para saber que rituales se llevaban aquí y a qué dios se lo ofrecían.