Resumen de la partida.
Los personajes llegan a la Merrick y Klodzinsky les expone el caso. Éstos aceptan tras horas de información e intenso debate. Todos deciden pasar la noche en la Merrick a excepción de Bruce Douglas, que marcha en coche a Londres para encontrarse ahí con sus nuevos compañeros.
El viaje en avión se retrasa por las fuertes ventiscas, y pj's llegan sobre las 18:30 horas a Londres, donde Bruce Douglas aparece después de haber hecho el viaje solo en coche, un flamante jaguar de 220 cv, aunque poco pudo disfrutar de tanta potencia, al haber tremendos atascos en las carreteras cortadas por la intensa nieve.
Una vez en Londres, el grupo de investigadores no esperaba que se les hiciera tan tarde, por lo que deciden acudir al psquiátrico donde se encuentra "alojado" el tnte. Gallagher. Tras una hora aproximada de viaje en el jaguar de Bruce, por fin llegan a la residencia donde les atiende amable y amistosamente el doctor Richard Hamblin, director del centro. Poco puede decir del teniente, ya que apenas lleva un par de días con ellos, así que los conduce directamente a su habitación para que el grupo observe y sque su propia conclusión sobre Gallagher.
Ahí se encuentra Conrad Walters, celador del teniente.
Richard Hamblin se retira y los investigadores interrogan con suspicacia al celador. Detectan cierto temor hacia la habitación de Gallagher y comenta acerca de extraños sucesos nocturnos.
No parece muy dispuesto a hablar, cuando de repente Gallagher, que parecía aparentemente sedado y dormido, parece estallar en un hábito de locura y destreza sobrenatural. Sus ojos rojos y unos colmillos protuberantes no hacen si no formar una mueca de horror en sí mismo cuando las venas parecen a punto de estallárseles del cuello.
El grupo parece alarmarse, cuando de pronto Gallagher salta increíblemente sobre Patrick que intentaba calmarle y escapa por la puerta, llevándose por delante al celador y a Bruce.
Patrick y Martín, el escritor, salen tras él por el pasillo que lleva a otras estancias y al ascensor. Mientras, Ignacio, Bruce y Gary intentan consolar al celador, Conrad, que parcía sumido en estado de shock.
Afuera, Patrick y Martín buscan por las puertas de las salas vacías en busca del extasiado teniente Gallagher. Cuando Patrick entra en la primera de las puertas, próxima al ascensor que ha abierto sus puertas, siente como el frió le invade las entrañas, y sin esperárselo, Gallagher le propina un empujón lo suficientemente fuerte como para derribarlo a él y a Martín, corriendo ágilmente hasta el ascensor y desapareciendo tras él mirando a ambos personajes y sonriendo sarcásticamente. Realmente esa cara era espantosamente horrorosa.
Tras unos instantes, baja la enfermera de recepción, temblorosa aún por haber visto al paciente Gallagher escapar corriendo y tan excitado hacia la salida, para perderse por los nevados bosques.
Patrick y Martín intentan alcanzarlo, pero es inútil, parece increíble que un hombre sedado hasta la médula haya sido capaz de conseguir semejante proeza.
Cuando bajan y se reúnen con el resto del grupo no pueden dar crédito a lo sucedido, y deciden retirarse a casa del ricachón Bruce en busca de descanso y un poco de buen vino.
24 de DICIEMBRE
Por la mañana, algo resacosos, deciden visitar el instituto anatómico-forense para entrevistarse con el doctor encargado del cadáver de Walter mason.
Patrick, un policía perteneciente al MIT de Scotland Yard, hace buen uso de su influencia y el doctor Alan Redhorn les entrega la ficha completa de su examen forense. El asesinato parecía haber sido brutal, entre desgarros por todo el cuerpo y las entrañas, el corazón le fué desgarrado salvajemente así como dos orificios en la yugular del cuello. Quizás lo más llamativo de cara a la investigación fuera que entre sus uñas fueron encontrados restos de sotana, típicos entre frailes, monjes o sacerdotes.
Ya por la tarde, se encontraron con el teniente encargado del caso que Gallagher "dejó" por fuerza mayor. No fue fácil, pero finalmente consiguieron una cita en Hyde Park, en el centro de Londres. El frío y la nieve arreciaban con un viento y una niebla que impedía la visibilidad total del paisaje.
El encuentro con Ross estuvo marcado por el sarcasmo y la ironía, aunque finalmente Patrick, excompañero del cuerpo de Ross, consiguió arrancarle el nombre del individuo con el que Mason se iba a encontrar la noche que lo asesinaron, John Carter, al parecer, líder de una secta religiosa. "un loco", dijo Gerald Ross.
Tras el encentro con el teniente, fueron a un pub de Londres para debatir sobre todo lo acontecido en el útlimo día, cuando se acerca la hora de la cena de navidad...
La Cena
Conforme se va acercando el momento de la cena de navidad, Patrick se despide del grupo para recoger a su hermano Brian en el aeropuerto, mientras el resto se dirige a casa del rico Bruce, que posee un ático en uno de los mejores barrios de Londres.
Cena en casa de Bruce Douglas
Tras un par de días cargados de acción, misterio, drama y superstición, el grupo de investigadores de la Merrick House decide tomarse una noche de relax para pasar la nochebuena en casa de Bruce.
No falta de nada, abundante comida, bebida por doquier, y la sorpresa de la noche corre a cuenta del anfitrión Bruce, quien consigue quedar con tres amigas para pasar la velada.
Tras la cena y el jolgorio, Martin e Ignacio deciden bajar a un establecimiento chino a por más bebida.
Mientras, el resto de presentes pasan el rato diviertiéndose con las chicas hasta que vuelvan con las reservas.
La Cena, con Patrick y Brian Dingwall
Una vez Patrick se despide del resto del grupo, se dirige al aeropuerto a recoger a su hermano Brian, del cual no sabe nada desde hace meses.
El encuentro resulta emotivo y cargado de buenos presagios, rememorando viejos tiempos y otros quizá no tan viejos. Llegan a una casa rural a pocos kilómetros de Londres y la cena no se hace esperar. Durante ésta, la conversación se centra en la muerte de los padres de ambos, llegando a poner los nervios a flor de piel por tan trágica y misteriosa muerte.
Tras la cena y tomar unas copas de champaigne, Brian decide retirarse a su cama y Patrick, tras unos minutos, opta por lo mismo.
Pero algo pasa, el frío invade la casa instantes antes a temperatura ambiente creada por la chimenea principal, que le hace recordar a Patrick la escena vivida en el psiquiátrico cuando seguía a Gallagher por los pasillos de ésta. De pronto algo se oye, algo que proviene de la habitación de Brian, al parecer es una conversación, pero es inteligible lo que se dice. Tras unos segundos, el sonido de cientos de cirstales rotos cayendo al suelo hace acelerar la visita al cuarto de Brian.
Efectivamente, el cristal de la ventana ha estallado en mil pedazos, y aunque la habitación se encuentra vacía, una ojeada al exterior hace descubrir a Patrick un terrible e inesperado suceso, Brian se encuentra boca abajo, sobre un enorme charco de sangre provocado, aparentemente, por la caída.
En la mesa del escritorio descubre una carta del más que posible asesino, un tal Urchudan.
Sin pensarselo, Patrick se tira por la ventana en ayuda de Brian, pero para su desgracia descubre cómo sus entrañas han sido desgarradas, le ha sido arrancado el corazón, y su cuello pasado de vuelta y media, una horrible escena que hace mella en el expolicía.
Cerca del cuerpo, encuentra una extraña cruz que no es capaz de coger con las manos, pues al hacerlo le quemaban sus manos. Lo recoge en una toalla húmeda y se la guarda en el bolsillo.
La mente de Patrick da vueltas, confundiendo al expolicía, y se encuentra en un pozo oscuro del que le resulta difícil escapar.
La salida de Ignacio Sansegundo y M. Martín al chino
Tras descubrir no sin cierto horror que no quedan botellas alcohólicas para continuar con la fiesta de navidad, son martín y sansegundo quienes deciden acercarse a un pequeño comercio regido por un chino que lleva, según Bruce, varios años en el barrio.
Para su sorpresa, creen ver al bueno del teniente Gallagher, es posible que esté en Londres ? cómo habrá llegado ? qué razones puede tener para estar ahí ? los estará siguiendo ? Las dudas abarrotan sus mentes mientras deciden seguirlo por entre los callejones.
Al llegar no si cierta dificultad a la azotea de uno de los edificios, tienen una corta conversación con el teniente, aunque no llegan a sonsacarle gran cosa. Gallagher murmura algo acerca de un gran hombre que le ha dado la vida eterna.
Pobre loco - Se dicen.
Tras unos segundos de tensión, Gallagher escapa tirándose literalmente desde la azotea, pero para su sorpresa no encuentran cuerpo alguno cuando llegan abajo.
La vuelta al piso de Bruce se hace silenciosa, pensativa.
NAVIDAD
Patrick aparece sobresaltado en casa de Bruce a altas horas de la madrugada. Ha sido una nohe tensa, cargada de emociones, y Patrick no parece haber vivido una cena de nochebuena mejor. Brian Dingwall, hermano del ex policía, había sido asesinado a pocos metros de su hermano de la misma manera que Walter Mason, y lo más chocante, Patrick descubre una carta del mismisimo asesino, un tal Urchudan, será éste el asesino que buscaban ? La forma de asesinar a sus victimas había sido brutal y horripilante, pero también estaba Gallagher y su asombrosa transformación, qué diablos estaba ocurriendo ? Toda esta historia no era más que un quebradero de cabeza.
Parece que Brian estaba metido en algo gordo, pues Patrick descubre entre sus pertenencias un libro llamado Hijos de Satán, cuyo autor era su propio hermano.
Casualmente, John Carter era el líder de dicha secta, y estaba citado con la primera víctima, Walter Mason, asesinado de la misma forma que el escritor.
Qué relación podría haber entre esta secta y los asesinatos del tal Urchudan ?
Patrick descubre una extraña cruz con puntaa afiladas en el cuerpo de Brian, y el objeto no parece que sea normal, Gary se hace con él y lo entrega a Klodzinsky, quien intentará descubrir su origen.
Para colmo, Klodzinsky advierte al desconcertado grupo que John Carter fue hallado muerto a primera hora del día, al parecer había sido una navidad de lo más movida.
Siguiendo el rastro que Urchudan había dejado con la carta de Brian, el grupo se dirige al Hotel Pompadour, en Edimburgo. Se trata de un hotel importante y resulta muy esplenderoso. Se encuentra muy alborotado y lleno de gente debido a las fechas, pero eso no impide que en recepción observen una siniestra figura ataviada con sotana que responde al nombre de Bellini. No se llamaba así el cura que se pegó un tiro en Highgate Cementery ? Tras los últimos acontecimientos, cualquier cosa parecía posible, pero no, la lógica tenía que vencer a las especulaciones paranormales.
El Caledonian es el restaurante del hotel, un lujoso comedor lleno de comensales de lo más extravagantes. Ahí, el cura se presenta como el Padre Vincenzo Bellini, y resulta ser el hermano del padre muerto. Tiene una extensa conversación con el grupo de investigadores y descubren en una de las mesas a Kevin MacDougall, quien dice conocer a Urchudan, y que además no es un hombre, se llama Morag Urchudan y asegura que se trata de un vampiro.
El padre Bellini comenta sobre sus trabajos de indole paranormal en su Roma natal, y confia plenamente en el extraño hombre, sin embargo hablar de vampiros, estacas y cruces continuaba sonando a película de terror barata.
A Patrick le importaba bien poco si se trata de un vampiro o el demonio en persona, cuando la tuviera delante ajustaría las cuentas con lo que mató a su hermano, fuera lo que fuese.