Partida Rol por web

Os movéis por la calle, con bastante sigilo, y tenéis la fortuna de no encontraros con ninguno de esos zombies.

Machete en mano se dirige al taller mirando a todos lados en busca de cualquier movimiento sospechoso.

-Vamos chica

Dice en voz baja apenas audible para ella que la tiene al lado.

Por un lado llegan Cristian y Patrick y por otro Felipe, Ann y Denis. No hay nadie mas en la armería y parece que el lugar ha sido saqueado recientemente.

- Oh, veo que hay mucha gente aquí... ¡hola! ¡hola! - Dijo Patrick. - No recuerdo vuestras caras y menos aún vuestros nombres, pero me presento, soy Patrick Steel y este es mi amigo Cristian Cerro. Cristian es unsuperviviente que me encontré hace unas horas en la farmacia y nos hemos hecho amigos. -

Steel sonrió mientras hablaba.

- He tardado en hablar por que quería conoceros mejor. Mirando a la gente se aprende mucho de ella y bueno, digamos que soy un experto mirando a las personas. -

Se acercó a la dama con una sonrisa.

- Por ejemplo, no hay que ser muy observador para decir que esta dama es una mujer muy hermosa, o que nuestro amigo de barba es un hombre misterioso, pero hay que ser muy observador para darse cuenta que este señor... - Se acercó a Denis. - Es un hombre de armas tomar. ¿No es cierto, caballero? Aquí en la armería seguro que podremos encontrar armas para todos, y algún rifle de caza para usted, no sé si me entiende. -

El ex-marine negó con la cabeza.

- Bueno, al parecer la noche me hace hablar mucho y descubrir muchas cosas, pero me alegro de estar junto a alguien que tiene mis mismos intereses. -

Ann se sonrojó un poco al escuchar las palabras de Patrick. - Ho-hola. Yo soy Ann Raiswill, un placer. Ellos son Denis  y Felipe. - Le contestó con una sonrisa. - Al parecer tenemos los mismos pensamientos todos. 

Denis escrutó con paciencia a la pareja, y prestó especial atención a las palabras de Patrick. Creo que tú y yo vamos a llevarnos bien, chico. Respondió mientras le señalaba con un cigarrillo que pretendía encender. Dame un rifle de caza y podréis cagar en el bosque, si os place. Ahora creo que sería buen momento para mover el culo y hacer de éste un lugar más seguro. 

- Oh, Denis, conozco a los de tu tipo. - Dijo Patrick. - Eres de esos que se guardan una bala en la recámara por si la necesitan. Vamos, de esas personas que antes de morir, se llevan consigo al que pillen, y eso es muy interesante la verdad. - Continuó el ex-militar. - Por mi parte, es una lástima no poder saber más nada sobre Ann y Felipe, pero supongo que si pasamos alguna noche más juntos, podré darme cuenta más o menos de qué vais cada uno. -

Patrick se sentó sobre el mostrador, junto a su compañero Cristian, y se quedó mirando la entrada al lugar con detenimiento. Sólo como un ex-Delta Force podría hacerlo.

- Creo que con un poco de trabajo, podríamos tapiar la ventana y hacer algún tipo de apaño con la puerta. -

Mientras tanto, Patrick se rebuscó en los bolsillos y sacó una caja con pastillas, que le arrojó a Denis.

- Toma, son medicinas. Las encontré en la farmacia junto con Cristian. Si eres quién creo que eres, seguro que les darás buen uso. Hay que mantener con vida a los que pueden en algún momento salvar a más supervivientes inocentes. -

Día 2 - Turno de día

Comienza un nuevo día y rápidamente notáis que algo no va bien, falta alguien...

No tardáis mucho en descubrir, a la entrada de la armería, el cuerpo sin vida de Ann. Alguien la ha asesinado mientras dormía. Y solo puede haber sido uno de vosotros, la pregunta es ¿quién?

- Pero qué... -

Patrick no podía salir de su asombro.

Miró a los hombres que quedaban allí, negó con la cabeza un par de veces, y se alejó de ellos hacia la entrada.

Señaló con la mirada a Denis.

- Tu... te he visto... he visto tu aura... tu eres un cazador... no eres un asesino... - Dijo con la voz entrecortada. - Y él... - Dijo señalando a Felipe. - él no sé que... ¿por qué? -

Denis no daba crédito a lo que estaba viendo, pero tampoco se tornaba muy expresivo. Patrik terminó su alocución, y Denis se acercó hasta él, y le agarró de la solapa, sin hacer mucha fuerza. Qué has visto, quien coño ha hecho esta barbaridad. Denis pensaba que Patrick sabía algo más, por algun extraño motivo. Dime ahora mismo quien ha hecho esta mierda.

Patrick se quitó con suavidad las manos de Denis de su solapa antes de hablar con tranquilidad.

- Pues suma dos más dos, Denis, dos más dos. - Dijo con el rostro serio. - Si he visto esta noche que tu eras el cazador, que tienes la capacidad de matar a alguien con tu muerte, por lo tanto yo soy el que puede ver las auras de los supervivientes, ¿quién queda en la ecuación? -

Patrick miró a Felipe.

- Tu dirás. Sé que vais juntos y podéis ser amigos y probablemente, ambos me matéis a mi por que venís juntos... y ahora piensa... he salvado a Cristian de dos Zombies, he venido aquí, te he dado medicina sabiendo quién eres, y me preguntas quién ha hecho esta mierda... Si lo único que quieres son mis cosas, pídemelas y te las entrego... pero no dejes que este hombre salga de aquí con vida... ha matado a Ann, delante de nuestras narices... -

Denis no respondió a los comentarios de Patrick, ni trató de tranquilizarle. Se giró lentamente hacia Felipe, inspiró la última calada de cigarro que le quedaba, y, tras lanzar la colilla, se dirigió a Felipe. Habla. Dijo exhortativamente, mientras le miraba las manos y le hacia una señal para que se las mostrara para ver si había restos de sangre. 

- Yo voto por él. - Dijo para terminar Patrick. - Y lo digo delante de ambos, para que veáis que no oculto nada de nada. -

habíamos llegado a la armería y al parecer no estaba vacía, un tipo llamado Patrick y un tal Cristian estaban hay, fueron bastante amables a nuestra llegada, así que la desconfianza que les tenia fue apartada de mis pensamientos, fui de muy poco hablar ese día, no tengo una explicación para eso pero de ves en cuando cruzaba algunas palabras con Denis y con Ann, las cosas marchaban bien y la noche había llegado tan oscura y tenebrosa como la misma entrada del infierno. Todos nos fuimos a dormir temprano, las pesadillas rondaban en mi cabeza durante toda la noche y me desperté al día siguiente empapado en sudor y por una discusión que mi consiente empezaba a oír. Abrí mis ojos y vi como mis compañeros peleaban verbalmente, no comprendía por que lo hacían, fue solo unos minutos mas tarde cuando todo encajo en mi cabeza, la noticia me cayo como un baldado de agua fría, Ann había sido asesinada. el Señor Patrick me señalaba con un dedo acusador.
-por que no cierras el pico antes de culpar a alguien sin saber, yo desconfió mas de ustedes dos- señala a Cristian y luego a Patrick
-he vivido pesadillas mas siniestras que esta y jamas perdí la cabeza, tú puedes comprender eso aunque aun eres muy joven para haber vivido lo que yo viví, me doy cuenta que eres un ex soldado, bueno hijo, déjame decirte que yo soy un ex general y a pesar de toda la gente que mate durante mi campaña, durante el ascenso a lo que ahora soy, siempre tuve HONOR!!! y aun lo tengo, no mate a esa mujer y jamas mate a alguien que no se lo mereciera- finiquito mis palabras erguido y con el ceño fruncido

- Muy bien general... - Dijo Patrick tranquilo. - Si esa es toda su defensa, el honor y toda esa palabrería que acabáis de soltar, estamos salvados. -

Patrick miró a Denis.

- Verás Denis, esto es más que sencillo. Me da igual a quién votéis ambos, como si me queréis sacrificar a mí por el bien común. Pero aquí y ahora, te voy a decir algo. - El ex-marine se puso firme. - Mi misión aquí es cargarme a cuantos cabrones asesinos como este encuentre antes de que nos vengan a rescatar. Estoy seguro que no está sólo y que en otras localizaciones, también hay asesinos matando a supervivientes inocentes tan sólo por el hecho de matar. -

Apretó los puños, haciendo que los nudillos se tornaran blancos por la presión.

- Y así como te digo esto, te digo que me da igual morir por vuestras manos, pero una cosa ten clara, este asesino... - Continuó señalando con la mano a Felipe. - ...no saldrá vivo de aquí esta noche. Me da igual morir, ya lo he dicho, pero antes de que me matéis, me lo cargaré con mis propias manos. -

-aun me sigues juzgando, Denis me conoce, ya hemos trabajado juntos, sabe que no soy acecino, si nos ponemos a votar, creo que el que estaría caminando por la cuerda floja serias tú- doy unos pasos hacia Patrick.
-pero no quiero que nadie muera, si no confían en mi, entonces me iré- dirijo la mirada a Denis.
-sabes que era lo que debíamos hacer aquí, tomar armas y llevarlas a nuestros compañeros para reforzar el colegio- miro al suelo para luego poner de nuevo los ojos en Patrick.
-Denis, volveré al colegio, hablare de lo que acaba de ocurrir aquí, si no vuelves para el día de mañana, sabre que este cabrón fue el que cometió esta masacre y te juro que lo buscare para partirle el culo, que me dices. Ademas no sabemos si el asesino vino hizo esto y se fue, las acusaciones las estan basando en palabras vacías-

Nadie va a moverse de aquí. Buscaremos las armas. Y luego ya veremos. 

- Venga hombre, Denis, ¿De verdad confías en una persona que dice que quiere irse para avisar a los demás? Lo que quiere es salir de aquí para evitar que lo mate... Y si, Felipe, sé que soy yo el que camina por la cuerda floja por que sois amigos, aún así, tengo una misión que cumplir y como ya dije, no le temo a la muerte. -

Se quedó mirando un rato a Felipe, con rostro serio.

- Y sé que lo más probable es que me votéis a mi, claro, os conocéis. Pero vuelvo a repetirte, Denis, piensa, he visto tu interior, sé que eres una persona capaz de darte cuenta de estas cosas pero sobre todo, que eres una persona de bien. Si me matáis a mi, y luego dejas que este asesino se vaya del lugar, la muerte de Ann y la mía habrán sido en vano, por que seguirá matando en otro lugar. -