La calle era poco transitada y no se acercó mucha gente, tan solo un par de crios curiosos y algún adulto. El ruido de las sirenas comenzó a escucharse de fondo y en cuestión de segundos un par de coches patrulla se presentaron frente a la furgoneta.
¿Lo tiene? Preguntó uno de los agentes que se acercaba corriendo a la par que sujetaba su pistola y su cinturon mientras se movía. De fondo se escuchaban más sirenas.
Miro a los policías que se acercan.
Conocen al oficial Shaw?...si dejo a este hombre en sus manos, no quiero que lo trasladen hasta que el se haga cargo de todo...nada de tonterías que provoquen que perdamos el caso. En cuanto despierte, leanle sus derechos.
En cuanto veo todo controlado por aqui, entro corriendo en el edificio, en busca de Inna y la doctora.
Cuando Lucas volvió al deposito, Inna y la doctora habían desaparecido. También una camilla que había cerca había volado.
Corro hasta la cercana sala de urgencias de el hospital. De vez en cuando miro al suelo, para ver si hay alguna mancha de sangre en ella.
Numerosas gotas de sangre formando un rastro guiaron por el suelo a Lucas hasta la entrada al hospital. Era un hall muy espacioso y la chica de recepción tomaba notas tras una mesa-mostrador bastante espaciosa.
Le enseño mi identificación del FBI.
Soy el agente Kerensky...estoy buscando a la doctora Ainhoa que ingreso con una paciente por herida de bala en el pecho hace unos minutos...la hirieron en el tanatorio forense... La miro con intensidad, muy tenso y dando golpecitos nerviosos en el mostrador de la recepción.
La joven muchacha, una estudiante en prácticas, no se había visto nunca en un caso así, tenían ordenes de no dejar entrar a nadie, pero... era un federal...
Acaban de llegar... han ido a emergencias... Dijo señalando una puerta.
Bien...asiento a sus palabras. Si cualquiera que no sea yo le pregunta por ella, le dice que esta muerta y le da mi numero de teléfono. Le doy mi tarjeta. De acuerdo señorita?.
Sin decir mas, entro por la puerta de emergencias, buscando signos de actividad febril, como sin duda tendrían que rodear a un caso extremo como el de Inna.
Tienes que esperar un poco, para seguir el ritmo de los demás. Ya siento tener que frenarte...
Me siento en una de las sillas de recepción y miro si tienen el HOLA xDDD
La mujer miró un tanto extrañada al agente Kerensky, pero prometió cumplir las instrucciones que Lucas le pedía.
El agente del FBI cruzó la puerta y se encontró caminando por el estrecho pasillo del hospital cuando un grupo de medicos bajó corriendo y pasó por delante suya. Iban ataviados con ropas de emergencias, y parecía como en la serie de Urgencias.
Les sigo por detrás, sin molestar. Me cuelgo la chapa del cuello.