Partida Rol por web

Veo desaparecer a Tyler como un personaje de cómic... es imposible que no me parezca una especie de personaje sacado de una viñeta, con esa intensidad y puesta en escena tan propias de él. Cuando salgo del hechizo que Tyler emana recapacito en silencio sobre sus palabras mirando el cielo y rascándome bajo la barba. Caigo en la cuenta de que Tyra está allí, o estaba... hace un momento. La busco con la mirada y cuando la encuentro, la contemplo con curiosidad. ¿Seguirá siendo la chica de Tyler?¿Lo era realmente o toda esa historia eran sólo rumores? No sé por qué no acabo de ver claro ese asunto, y tampoco sé por qué le estoy dando vueltas ahora. No tengo ni idea de qué hora es, pero supongo que no falta demasiado para el alba. Cuando llegue el alba daré mi respuesta a la proposición de Tyler. La verdad es que no estoy muy emocionado al respecto. Bueno, es un camino, sólo eso. Desde hace un tiempo, especialmente desde las últimas horas, me siento como un animal. A penas pienso en mañana, en realidad sólo me preocupo del ahora. Quizá de eso vaya todo esto... en cierto modo me siento más tranquilo. Enciendo un cigarrillo sin prisa y exhalo una enorme nube de humo a mi alrededor simplemente para tener la sensación de estar envuelto en ella.  Si no hay nada nuevo de interés buscaré un lugar donde dormir un poco, me siento cansado, pero al menos no me muero de ganas de meterme un chute de Jet u otra mierda. Una cama limpia no estaría nada mal. Y a buscarla me encamino mientras saboreo las últimas caladas de ese pitillo pensando que si algún disparo lejano llega a mi oído no es asunto mío. Y que Lizzie está bien, porque Lizzie es a prueba de balas... la chica de kevlar.

¿Todos los días son así? Soltó una carcajada corta. No, no creo que eso fuera posible. Añade, con una sonrisa de tiburón, pensando en todo el plomo que va a volar en breve.

Ignoró sus preguntas sobre Pete y se mantuvo cerca del chaval. Al menos de momento. Seguía atento a los movimentos en la sala, para ver hacia donde iba a situarse el barullo. Aún no había aparecido la artillería pesada. El ritmo lo marcaría Lizzie y su gente. Dió unos golpecitos a su comunicador, para asegurarse que seguía activo.

Si las cosas van como han de ir habrá aquí una buena cantidad de fiambres y si nos interesa, Tuercas puede ser un buen canalizador de reputación. Si no interesa será buena idea mantenerme cerca de él y pelarlo. Una baja colateral entre tanto tiro.

Pareces un tipo listo. Siempre necesitamos tipos listos. Y oye, yo respeto tu deseo de ir por libre. Joder. Como no voy a respetarlo. Es de tener los huevos muy gordos. A mí me gusta usar a tíos con iniciativa e independientes, como tú, para movidas guapas. ¿Qué me dices? ¿Te molaría? Por supuesto, no hablo de currar gratis, joder.

Se le cayó el alma a los pies junto con la rabia que habia germinado cuando vió que no iba a haber jaleo. Escuchó a Tyler cruzada de brazos, como si contruyera un escudo para evitar que le afectara verlo así, tan guapo, tan seguro de si mismo. Le jodió más que la dejara con la palabra en la boca. Su mirada se perdió con él en la lejania mientras su pie derecho marcaba un ritmo imaginario, quizás efecto de lo que le habia inyectado Lock.

Se dió cuenta que la miraba con curiosidad - Empezamos como el culo, eh? - dijo en tono de broma viéndolo encenderse un cigarro. Se lo habria robado con descaro pero él también se merecia su momento de descanso de toda aquella movida.

- Yo voy a terminar la noche emborrachandome y bailando. Creo que aún queda fiesta para rato - dijo al aire más que nada mientras se peinaba con una mano y se volvia a meter dentro con sus caracteristicos andares. Aquella mierda parecia que duraba y si se metia en la cama seguramente solo serviria para dar vueltas y vueltas.

Tuercas te miro y sonrió.
Si joder, eso suena mejor que ser el chico de los recados y un carroñero, pero si yo entro mis amigos de mi banda también, y te vamos a salir caros. te dijo pero de repente te indicó con un dedo detrás tuyo mientras enmudecía.

Al darte la vuelta te encontraste a Tyler que venía desde la barra, Bones se acababa de marchar.
¿Empiezas a ver cuales son las cosas que quiero cambiar, de las que te hable la otra noche, la primera vez que te lleve abajo? te preguntó mientras ponía en tu mano un pañuelo ensangrentado.
Por donde has subido, pon eso en el sensor bihométrico, pero no te quedes mucho. susurro en tu oido, mientras se tapaba una oreja con una mano.
Comprendiste que también llevaba el pendiente y supiste que no era solo una herramienta de comunicación. Hablamos luego. añadió con normalidad dándote un toquecito en el hombro como si acabaseis de volver de un partido de football.

Joder, conoces a Tyler te dijo Tuercas con entusiasmo Eres un pez gordo y todo.

Forst apenas asintió a las palabras de Tyler y tomó el pañuelo que le ofrecía con el disimulo inconsciente propios de los mindundis que se dedican a los trapis. El reclutador había adquirido ese hábito de sus tiempos de agente, cuando le daban cosas y uno las tomaba con natural disimulo sin plantearse siquiera qué era. Esos momentos de duda podían hacerte vulnerable y convertirte en el foco de miradas de la sala.

Cuando Tyler se alejó, Tuercas soltó su frase.

Pues ya sabes lo que tienes que hacer, chaval. Tenerme contento y no tocarme las pelotas con esa mierda corporativa de que eres un equipo con tus amiguitos carroñeros. Quizás donde pueda entrar Tuercas no puede ir una panda de chatarreros del yermo. Piensa en ello, chaval. Piensa en ello mientras voy a por una birra. ¿Quieres otra?

Y esperó a que asintiera (o no) para alejarse, colocar el trapo como había dicho Tyler y vovler cagando leches con las birras junto a Tuercas. Todo ese rollo del trapo ensangrentado olía a jodienda de las buenas y le habría encantado meter a Tuercas en todo aquello y evitar que le salpicara. Convencer al niño topo para que metiera él el trapo y luego pegarle un tiro, pero joder, se volvía viejo y sentimental, y le daba casi lástima la ingenuidad del nene.

Le iban a grabar los aparatitos de Pete, pero confiaba en que aquello formaba parte del plan. Del puto jodido plan que luego le confesaría el big boss. Y si no era así, bueno, debía de ser así. Era lo que tenía sentido. Cargarse a un viejo com él era mucho más sencillo.

¿De quién coño será la sangre?

Allí estaba la clave.

Dejó el pañuelo donde le había pedido Tyler y luego fue a por unas birras para el carroñero y él.

Tardaste en encontrar el sensor bihométrico en aquel desastre de almacén, mal iluminado, peor organizado y desde luego que nadie había limpiado en mucho tiempo. Cuando pusiste el pañuelo encima el panel se ilumino durante un segundo con una iridiscencia rara, ya que la pantalla permaneció negra, pero no tan negra como la oscuridad en la que estabas.
La puerta se cerro y sentiste que los topes del suelo se soltaron antes de que el ascensor comenzara a bajar nuevamente.
Ya sabías como se activaban y desactivaban las medidas de seguridad...
Esta vez bajaste un poco más el ascensor no paró al llegar al anterior nivel, pareció que bajaras un piso más. Las luces parpadearon antes de estabilizarte iluminando un corredor que tenía a la izquierda una serie de cañerías y a la derecha una serie de paneles inertes, al final del corredor pudiste ver algunas de esas pantallas iluminadas, pero estaban lejos habría fácilmente entre 30 y 40.
Las birras tendrían que esperar...

Suspiró y avanzó con cuidado. Parecía que estaba en la cabañita del árbol del chaval. Allí seguramente no habría nadie, pero nunca se podía estar seguro de nada. Avanzó hasta llegar a las pantallas encendidas, a ver de qué coño iba la fiesta y cual era la sorpresita de Tyler.

No pensaba en Tuercas, la fiesta o cualquier otra movida de la superficie.

Pasaste por delante de depósitos, cámaras mas bien, tras pasar por delante de la segunda te parecieron cámaras hiperbáricas, 7413-A, 7413-B, 7413-C.... estaban numeradas y así sucesivamente avanzaste al lado de ellas hacia el fondo del corredor, las cámaras estaban conectadas a corriente, y a otros tubos que transportaban aire, sustancias que no sabías que función podrían tener.
Todo parecía viejo, bien mantenido, pero viejo, des actualizado, como si toda la instalación tuviera 15 años o así. Era como un viaje al pasado, los controles de las interfaces que rodeaban las pantallas de información, las propias pantallas, la ausencia de conectores para interfaces neuronales...
Seguías avanzando sin perder detalle de lo que tenías a tu alrededor.
7413-S.
Al final llegaste a la primera pantalla iluminada. No te hizo falta ni medio segundo para ver lo que estabas viendo, aquello eran constantes vitales, habías estado antes en la UCI, lo que fuera que estuviera dentro de la cámara se mantenía vivo de forma artificial y al ver como se condensaba el aire alrededor del tanque también se mantenía hibernado en alguna especie de criogénesis.
Aquello iba a más allá de tus sueños(o pesadillas) más descabellados, podías ver en las cámaras que aún tenían signos vitales el bulto de un cuerpo. El cristal empañado te evitaba ver dentro del tanque, tampoco sabías demasiado bien si querías mirar.

Aquello le pareció una mierda de las gordas. Una especie de jueguecito de dr. Frankenstein. ¿Sería aquello el origen de toda la mandanga de Los Portadores?

Buscó en el panel algún indicador de la identidad de su ocupante más allá del código de la cámara. Por allí habría, quizás, un ordenador con datos de aquella gente. Buscó en la oscuridad algún bulto que pudiera ser un ordenador. Seguramente sería igual de viejo que todos aquellos mamotretos. Se sentía cómodo en aquel entorno. No desentonaba.

Aquella gente llevaba años en hibernación por algo. Se palpó de forma inconsciente el pañuelo ensangrentado de su bolsillo.

¿De quién coño será la sangre del pañuelo?

Empezaba a dudar que fuera de Pete, Tyler o quien coño fuera que estaba detrás de esto. ¿Para qué había enviado Tyler allí al viejo? ¿Qué pensaba hacer con esos polos de carne? Despertarlos? Debía conocer su identidad para decidir. Aquello se podía poner muy jodido.

Si la primera encendida era la S había unas cuantas que ya habían dejado de contener algo. Un momento... Fue a una de las vacías, una de las primeras, para comprobar si tenía un ocupante muerto o bien si estaba realmente vacía. Cualquier indicio que mostrara que allí había estado alguien que había salido de allí con vida.

Todas las cámaras abiertas y desconectada tenían polvo encima acumulado de años, pero antes de haber quedado relegadas al olvido parecían haber sido limpiadas concienzudamente. Todas parecían tener, además sistemas de soporte vital bastante avanzados.
Al final, a media luz conseguiste encontrar un terminal que manipular(estaba al final de la sala), al principio, tras pulsar algunos botones no conseguiste hacer despertar al terminal, pero viste un sensor biométrico similar al del ascensor.
Cuando pusiste el pañuelo encima del sensor el terminal despertó de golpe.
Bienvenido sujeto R. dijo una voz sintética. Llevas 200 ciclos de retraso de tu último scaner, por favor entre en la capsula para comenzar, si por el contrario desea otra cosa indíquelo.
Como otros sistemas informáticos que conocías en la pantalla te sugirió una especie de historial de otras consultas anteriores, la primera que te mostraba era la más reciente y databa de hacía casi cuatro años. Se repetía mucho el escaner mencionado. Pero navegando hacia atrás pudiste ver entradas de un tal "Markus Heisember". Casi una década te distanciaba de el tal Markus.
El tal Markus hablaba de las iteraciones "O", "P", "Q" refiriendose a ellas como fracasos prometedores. Pero lo que mas te llamo la atención fue un video sobre la iteración R, la susodicha iteración R era un niño. Al lado del tal Markus estaba el arquitecto y parecían muy satisfechos de su logro. Mientras tanto el niño los observaba de forma analítica y cauta.
Enlazado a ese había un sin fin de vídeos diferentes... el niño haciendo gimnasia(día 3), el niño hablando(día 15)... pruebas de combate con fuego real(día 60).... y así seguía durante casi 3 años.

El reclutador suspiró, algo cansado. Aquello iba de crear superhumanos, o alguna mierda similar. No era nada nuevo. Desde que se descubrieron las terapias génicas había sido algo recurrente en la mente humana. Y Tyler parecía ser el primero en serlo. ¿Qué precio habría pagado? Siempre se paga un precio para esas cosas. El niño probeta pagaba el suyo.

No me jodas que esto va del pequeño niño prodigio queriendo liberarse de sus papis... Murmuró para él mismo.

No sabía quien era ese Markus, pero todo parecía indicar que debía ser un cinetífico. Que estuviera al ladito del Arquitecto ya era algo.

¿Qué será eso del scaner? Intentó bucear un poco en las tripas del ordenador en busca de pistas.

Tras un rato husmeando archivos encontró unas referencias vagas sobre la degradación genética del sujeto R. Podía ser cualquier cosa, desde una decrepitud física, a una alteración mental, desarrollar enfermedades... Quizás meterse en el tanque otra vez revertía el proceso, pero Tyler no se metía hacía 200 ciclos, fuera lo que fuera eso. ¿Se estaba dejando matar a propósito? ¿Quería evitar seguir siendo el niñito de Markus y el Arquitecto?

Si aquello se sabía en la banda no iba a gustar mucho. Al final hacían las mismas mierdas que en las corporaciones.

Se guardó el pañuelo en el bolsillo. Al menos ya sabía de quién era la sangre.

¿Qué quieres de mí, chaval? Se preguntó, en otro murmullo.

Allí descansaban un puñado de iteraciones nuevas. Ese tal markus era un tío ocupado. Y no debía andar lejos.

Desde la consola pudiste acceder a más proyectos, la numeración no era parecida, tampoco su naturaleza, pero había material para leer una semana.
Virus que atacaban únicamente a marcadores genéticos. Inyecciones que mejoraban rendimiento muscular, endurecimiento de huesos. Drogas más adictivas. Había cosas que afirmaban curar cosas como la cyber psicosis, potenciadores del intelecto, pieles miméticas, regeneración celular perfecta... Todos tenían origen en el proyecto 7413. Era el sujeto R por piezas ¿Listo para ser comercializado?
También había muchos archivos relativos a otros sujetos de pruebas. Cientos y cientos, todos del barrio. Con un historial médico completo. Joder, medio barrio eran coballas de laboratorio.

Menuda bomba, pensó el viejo. Ese mierdas del Arquitecto usa a la basura del barrio para su negociete. ¿Para quién trabaja? Ese Markus lo debe saber... Si se entera de esto Lizzie o sus supernenas no iban a dejar piedra sobre piedra.

Ya era demasiado mayor para pillarle por sorpresa, pero no dejaba de joderle descubrir que ni entre las ratas del yermo uno se podía librar de la sombra de las corporaciones.

Si aquello lo hacía correr entre los chicos se iba a liar una gorda de verdad. Quizás por eso gente como Bones tenía ese trato tan especial. Formaba parte del plan B.

¿Qué quieres de mí, chaval? Repitió, en otro murmullo. Buscó algo donde guardar esa información pero, por supuesto, no encontró nada donde guardar la info. Se encogió de hombros, al fin y al cabo, todo aquello no iba a desaparecer mañana... O sí, a saber.

¿Y ahora?... Buscó algún acceso a alguna especie de sanctasanctorum donde el capullo ese de Markus o sus chicos deberían tener sus oficionas, laboratorios... Debía haber por allí un acceso.

Allí no había nada, los tuvos se perdían en la pared y los suministros venían de otro sitio, también parecía en desuso, el proyecto 7413 había acabado hacía algunos años. Ya fuera por que había alcanzado sus metas o por que no las había alcanzado y se había agotado la paciencia de la gente.
Allí poco más tenías que hacer además de que no sabías cuanto tiempo ibas a permanecer sin que Pete u otro apareciera para echarte. A fin de cuentas habías entrado con un “carnet” robado

Se fue de allí. No quería forzar más la máquina, y siempre podía volver a entrar cuando quisiera. El pañuelo de Tyler era, en realidad, una buena muestra de confianza. Podía acceder con su ADN a cualquier otro rincón con sensores biométricos. Y seguro que había por allí más rinconcitos oscuros donde poder ir a meter algunos sustos.

Creo que puedo contar con la niña de Tyler y el hacker resentido. Si añado al topito Tuercas y a Rookie... Quizás hasta Bones. Al final vamos a poder montar una banda dentro de la banda.

Fue pensando mientras desandaba el camino para volver a la sala.