Partida Rol por web

Al igual que el guepardo que llevaba tatuado en el muslo, la mujer rugió de impotencia al percatarse de que ya apenas había nadie allí. Ya habá imaginado por los mensajes que la habían cagado pero bien. Tendría que haberse pirado antes aunque los rajaos de sus compañeros no hubieran querido.

No entendía como se podía estar en una banda y no tener los huevos necesarios para partirle la cara a quien te plantaba resistencia, pero si para aquel del que te hacia dudar si era de confianza o no.

Bajó del coche con ímpetu y se aproximó a grandes zancadas hacia donde estaba el joven de los subterraneos, dejando atrás rápidamente a Forst, Lock y Turok. - ¿Donde están Tuercas? - se notaba su voz alterada y su mirada no dejaba cabida a bromas ni respuestas ambiguas

Tuercas estaba distraido cuando Tayra lo asalto, en un principio iba a sonreir pero su actitud le hizo ponerse a la defensiva.

- ¿Donde estabais vosotros? - Quiso saber. Y como un espejo a la actitud de Tayra dejó de lado todo tipo de broma y empleó un tono acusatorio. - Pensaron que os tenía Barracuda, como no encontraron vuestros móviles en la red solo pudieron pensar en la única puta zona sin cobertura que hay ahora mismo en la ciudad, el territorio de los inmortal, están ahora mismo allí preguntando por vosotros. Y de paso por Petra. A nosotros nos han encasquetado el trabajo sucio y a  Rockie al vegestorio ese que trajisteis. - 

Llegado a este punto dejó de lado su actitud inicial y añadió de un modo más informal y a título informativo.

- Sea como fuera se ha ido a la mierda algo, hablaban de una ventana para hacer algo, algo que les dijo el viejo ese y creo que lo han abortado por buscaros. - 

Tayra se pasó la mano por la zona rapada de su cabeza, para acabar enterrando con frustración los dedos donde crecía más frondoso su pelo decolorado.  Se volvió de golpe hacia Forst, Turok y Lock -  No nos cogen el teléfono, así que habrá que ir hasta allí para evitar que hagan alguna tonteria - la rabia de sus palabras ocultaba el miedo que sentía en aquellos momentos. La última vez no habia salido nada bien.

Volvió al coche esperando que le siguieran, pero si no lo hacían, no tenia inconveniente en subirse al puesto de conductor e irse ella sola para allá

Lock volvía a llamar cuando Tayro se subió al coche, corrió para ponerse delante

- Espera!!! espera!!! espera!!! - Le dijo a Tayra. a voz engrito con las manos sobre el capó del coche como si lo pudiera detener con las manos. - No tienen señal, ya están allí. Llegamos tarde, si la han liado ya es tarde. ¿Qué vas a hacer al llegar? ¿Liarte a tiros? Sino están en un lío para entonces lo generaras tú. - Trató de detenerla para que no fuera a lo loco.

- De todos modos ¿Vamos a ir solos? No podemos ir allí de esta guisa sin más. Ya viste a los inmortal, no podemos competir contra ellos en armas ni fuerza de choque.- 

No esperaba que Lock se pusiera delante, pero su aviso llegó hasta ella como un puñetazo en plena boca del estómago. Tenía razón. Golpeó con furia el volante. Una. Dos veces.

Después intentó recuperar el control de la respiración mientras pensaba a toda maquina. ¿Y si llamaba a su padre y sus amigos? NO quería inmiscuirlo, pero lo necesitaba. Una familia para ayudar a otra familia. Su madre se enfadaria muchisimo pero....

El claxon acompasó cada uno de los golpes al volante de Tayra despertando las miradas del vecindario. La verdad es que al situación era desesperada. Tuercas observaba la situación desde el solar.

Había que tomar una decisión. Encontrar ayuda, pero todo era un riesgo. Ir, no ir, incluir a amigos... Solo estaban ellos, Tuercas, Jessie, Rockie y el tal Heisenberg por lo que habían dicho.