Partida Rol por web

Controlarlo todo, eso es lo que debes hacer. Lo que siempre has hecho. Todo ordenado, todo controlado. Si alguien se salta las normas, surgen los problemas. Y tú no quieres que surjan problemas. Estás confuso, desorientado, pero sabes que lo más importante ahora es reconducir la situación. Solucionar los problemas. Controlarlo todo. Aunque te cueste recordar a qué te refieres exactamente.

La sala está en silencio. En el centro de la sala, tu atención permanece fija en las pantallas. Las cámaras instaladas sobre las pantallas me permiten ver que ni siquiera parpadeas. Contemplas las imágenes que se repiten una y otra vez sin descanso. Hay un hombre de pie en la sala de durmientes, junto a una de las cunas. Acaricia la cuna con una mano, mira en su interior con una mezcla de miedo y cariño. Después pulsa el botón de apertura y, antes de que la cuna termine de abrirse, sale de allí. Durante un instante crees que ese hombre estaba llorando. Ella despierta instantes después. Inspira como si fuera la primera vez que lo hace. ¿No es emocionante? A mí desde luego me lo parece. Ella tiembla. Sale torpemente de la cuna y mira a su alrededor. La imagen se funde en negro. Aparece de nuevo el hombre de pie en la sala, en un bucle eterno. Decides marcharte de allí, así que te abro la puerta antes de que tengas tiempo de volver a pensarlo.

Era evidente que a Comut todo aquello le parecía extraño, pero no tanto como el sueño que tuvo mientras este se encontraba placidamente dormido. Haberse visto la maratón de películas de Sherlock Holmes, junto con aquella antigua serie de televisión y aquella otra más antigua y aquella otra aún más antigua... casi daba lástima los reboots que le hacían, ojalá Mickey Mouse hubiera puesto sus zarpas antes en la "Licencia de uso común" antes para destrozarlo, al menos así no habría tantas re-interpretaciones de un personaje de "dominio -AHORA- popular".

-Mñeh... A Comut no le satisface. -Comentó sin demasiados miramientos ante la grabación- Seguro que ser película porno Alemana... esas siempre son raras. A Comut no le gusta ese estilo. Es poco patriótico.

Tras comentar aquello, este se dispone a continuar con sus quehaceres.

¿Qué hago viendo esto? Yo estoy para cosas más importantes. ¿Espiar a otra persona? Y para colmo a una persona que mira a otras por una pantalla. ¿Hasta dónde llegará esto? ¿A verse a uno mismo?

Yo debería estar en una de esas cunas, conservandome para cuándo surgiera algo más interesante. ¿Dónde está mi maldito desayuno?

No estaba seguro de lo que acababa de ver en la pantalla. La escena de la cuna y el hombre era cuando menos inquietante y demás no dejaba intuir nada de ellas.

Miré con extrañeza el papel con las notas musicales en él intentando formar en mi cabeza el sonido que representa cada una de ellas.

¿Una melodía?

Messieurs. Creo que la puerta nos invita a continuar. Esas imágenes tal vez digan algo pero con la información que tenemos no sabría ni siquiera entender que significan. ¿Un nuevo nacimiento? La cuna parece algo bastante significativo, ¿no creen?

—¿A ver?—le echó un ojo a la partitura—Da da da da dá da da da daam—Tarareó. Y luego lo mismo pero más grave—Do do do do dó do do do doom. D-cof, cof, cof—al intentar tararear la tercera frase se atragantó.—Esto no es para ser cantado.

Qué visión más extraña. ¿Para qué alguien miraría eso en las pantallas pudiendo ver una buena película o serie, acompañado de una buena cerveza? Pero por lo visto había que controlar. No se sabía bien ni por qué ni para qué ni a quién ni qué ni nada de nada, pero había que controlar. Pepe dio unas fuertes palmas para llamar la atención. _¡¡Eaaaa!! ¿Qué pasa con esta nave? No nos han traído aquí para girar números o hacer cuentas de niño de escuela. ¿Y qué es este papel? Miró a su alrededor. _¿A ver dónde están las mujeres de esta nave? Yo les canto y ustedes se ponen a perrear. Miró a Puagó. _Ehhh bigoteee. Nosotros salimos de cunas y ni siquiera entiendo qué pasa.

-¿Seguro que significa algo?-preguntó Adán con tono quejoso. El niño no parecía precisamente conmovido por las emociones del hombre, quizás debido a su juventud no las entendía, o más bien, no las quería entender. Había estado callado y distraído durante aquellos minutos que había estado resolviendo el puzzle, pero una vez este había acabado, había vuelto a su faceta más molesta.

-A esto le faltan notas.-señaló en cuanto le echó un vistazo al papel.

Miro las imágenes y frunzo el ceño mientras saco del bolsillo un chupa que, a pesar del tiempo, se ha mantenido fresco. Lo abro sin apartar la vista de la pantalla Que raro... Digo antes de empezar a saborear el caramelo y decidir que ver aquello una y otra vez no iba a responder a mis preguntas. Decido marcharme y tratar de averiguar algo en otro lugar.