La puerta de la sala de enfermería está cerrada. Tecleas códigos al azar en el pad de acceso, pero no logras que la puerta se abra. Nerviosa, gritas en voz alta.
—¿Hay alguien ahí dentro?
Te sientes ridícula nada más decir estas palabras. Ridícula y enfadada por la situación. Golpeas la puerta varias veces. No sabes por qué pero tienes la intuición de que alguien se esconde en esta sala, alguien que no quiere verte. Golpeas varias veces más antes de darte por vencida y marcharte.
Más adelante te preguntaré acerca de un objeto. Recuerda:
8%
De todos los que tenian más posibilidades de sobrevivir, claramente Vaiana Simons era la que menos opciones tenía. Al menos desde la perspectiva de Comut Von Biems que, de cabeza, estaba contando cuántos clichés de películas de terror estaba haciendo... y eran demasiados.
-Esta la palma. -Dijo sin ningún tipo de tapujos- Un asesino enmascarado de la ventilación.
Turing le decía cosas muy raras sobre objetos a la chica. Kas fue tomando nota mental y haciendo combinaciones de condiciones posibles he imposibles... Siempre bebiendo café claro, en su taza circular con pigmentos amarillos y hecha con carbono pero sin hierro.