Partida Rol por web

Pues a ver, por partes...

Si relees verás que no digo que esté medio muerto por la herida según se la hacen... primero hago referencia a tus palabras, dices que Kanu está bastante debilitado, por eso entiendo que necesita ayuda y aprovecho la situación. Después, su personaje ha recibido un crítico. No es que te duela, que también, es que al recibir un corte serio empiezas a sangrar mucho, si la lógica y el funcionamiento del cuerpo no son suficiente para esto tenemos las normas del juego. página 58 del core exxet, desangramiento:

Desangrarse
Cuando un personaje recibe un crítico (incluso si no produce
efectos), ha recibido en un solo impacto una herida tan
formidable que el daño puede agravarse por la pérdida de
sangre. En este caso, pierde un punto de vida adicional por
minuto hasta que pueda tratar sus heridas y estabilizarse.
Atender una hemorragia de estas características requiere un
control de Medicina con una dificultad de Fácil (FAC). Cada 5
PV que pierda por este método, sufre también un penalizador
de –10 a la acción. Si mediante este daño el personaje llega a
cero PV, cae inconsciente y entra en un estado entre la vida y la
muerte, aunque deja de perder puntos por desangramiento.
El Director de Juego puede decidir, pasado cierto tiempo,
detener naturalmente la hemorragia si lo considera apropiado.

Llevamos un rato corriendo, lo que sube la tensión y el ritmo cardiaco, acrecentando la hemorragia. Por eso digo que supongo que esté fastidiado por la falta de sangre. También supongo que vayamos dejando un rastro de sangre estupendo para que lo sigan las serpientes y cualquier bicho con hambre de la zona.

Sobre lo de recibir respuesta y no... pues tiene que ver que estaba hablando antes de ponerse a lanzar el conjuro y la acción no ha sido para nada clara. Aunque haya dicho que su personaje me da una información yo no la tengo porque solamente ha escrito "te digo a cuanto está mi pueblo" en vez de "mi poblado está a unos dos días de camino". No voy a empezar una pelea con un chaman a un par de horas de viaje de su poblado donde puede haber cazadores o vigías cerca... Si le sigues sin ver la lógica ya no se me ocurre cómo explicarlo, será cosa mía. Ya ha lanzado el conjuro así que por mi eso lo dejo estar para no complicar más las cosas.

Miro asombrada el brazo del chaman, sin duda el favor de los espíritus es impresionante.-Bien entonces. Creo que sería buena idea que te acompañáramos hasta tu poblado o la morada de tu maestro para garantizar que llegues a salvo antes de que volvamos a nuestra aldea para informar, lo que ha ocurrido es muy grave, demasiado para ocuparnos primero de nuestro encargo, todas las tribus deben saberlo para evitar otra masacre. ¿Alguna idea mejor?- 

Incómoda por la situación Nira se mantiene al margen de la conversación.

Al escuchar las palabras de Lira asiento levemente, conforme con la decisión.

El sol está empezando ya a descender. Aún os quedan un par o tres de horas de sol. Os sentíis algo cansados por el viaje. Y aunque la sensación se acrecenta en Kanu por todo lo que ha pasado. El creer que estáis fuera de peligro os calma algo. Desde luego, debéis avisar, pero a quién?

-Parece que hemos perdido a las serpientes, supongo que será seguro descansar aquí. Has perdido bastante sangre joven chaman, y no hemos descansado apenas esta noche. Quizá debiéramos dormir un poco antes de continuar.-

Si, debo darle las gracias a tu hermana por devolver mi sangre a la Madre.- dice el joven aun resentido por el profundo corte de su brazo -Estoy de acuerdo en descansar, así de agotados no creo que vayamos muy lejos- dice Kanu- ¿Como hacemos las guardias?

-Buscaré algo de comida.- Ignoro la pregunta del chaman y me alejo para cazar algo para poder comer y reponer las fuerzas plenamente.

-Duerme lo que necesites en cuanto encontremos un sitio adecuado, esta noche nos encargaremos nosotras de buscar comida y bebida y de montar guardia. Tras una herida así necesitas descansar.- Respondo al chaman evitando a duras penas responder a su puya. 

Kanu se apuntó aquella pequeña victoria, pero era lo suficientemente inteligente como para no forzar la situación. Es mas, su  Maestro le había enseñado los dones de la cortesía que eran igualmente validos para espíritus y para hombres... o mujeres en este caso.

-Disculpad mi impertinencia- se retractó el joven por el tono grosero con el que se había dirigido a las dos muchachas- Nunca había recibido una herida tan profunda y menos viniendo de otra persona. ¿Todas las mujeres de vuestro pueblo son tan temperamentales y habilidosas con las armas? mi maestro me proporcionó algo de entrenamiento para evitar ser golpeado mientras llamo a los espíritus en mi auxilio, pero apenas pude ver el tajo que Nira me lanzó.

Después de aquél día tan movido, todos descansáis oportunamente, pese a que aún tenéis el temor de estar en peligro, la noche pasa sin ningún problema. Cuando despertáis, más o menos frescos, emprendéis la marcha. Las trampas que ponéis durante la noche están vacías y por más que buscáis algo que cazar, el último rastro que encontrais parece de hace unos días. Sin embargo, los frutos comestibles parecen intactos. La selva se mantiene tranquila y silenciosa, como si una catástrofe estuviese a punto de ocurrir. Sin demasiados signos de vida, la selva se os antoja mucho más terrorífica que cualquiera de vuestras peores pesadillas.

Inquietos, camináis entre el denso follaje durante el día. Conforme que va pasando el día y os alejáis de Babuka, empezáis a ver signos de vida, huellas recientes y algunos pájaros. Las chicas, acostumbradas a sobrevivir por su puño en una tribu muy guerrera, consiguen sin problemas alguna pieza que comer mientras Kanu encuentra alguna fruta con la que acompañar la carne. Tras el segundo día, Kanu por fin logra ver algunas trazas en el bosque de Caraazul. Un árbol completamente teñido de sangre de antílope, una pirámide formada con 4 cráneos de ave en la base y un craneo de pantera en la cima, e incluso una extraña formación de piedras pequeñas formando un círculo que no había visto hasta ahora pero que seguro que es de su mentor y maestro.

Es cuando pasáis por el lado del círculo que escucháis una voz.
- Por fin! Pensé que no llegarías a socorrer a este pobre mono araña.
Os acercáis a la voz para ver como un hombre viejo está rascando una rana verde con un palo y restregando el palo en una hoja de árbol. A su lado, un mono parece esta teniendo convulsiones, y aún así, el hombre parece tranquilo. Levanta la mirada mirándoos y sonríe.

Es caraazul que tras ver el estado de Kanu, su discípulo, se acerca a verlo. Tras un exámen rápido, mira a las chicas de arriba a abajo. Se vuelve con el mono y tras doblar la hoja y fregarla entre ella, se la mete al mono en la boca. Tras esto, se dirige hacia el círculo, donde os invita a pasar y explicarle lo sucedido. Tras el relato, Caraazul da las gracias a las chicas y las manda a las dos  de vuelta a su tribu para que expliquen lo sucedido, no sin antes darles una piel de antílope como agradecimiento por cuidar de Kanu y asegurarles que un espíritu les protegerá en el viaje de vuelta.

Volvéis a vuestra aldea. Los Mafumbo os reciben con las caras largas, algunos de tristeza, otros de decepción. Parece que ya han llegado las noticias a la aldea. Pero algo empieza a apartar a la multitud. Es Kama, vuestra casi madre, que empieza a dar golpetazos a un y a otro guerrero con su bastón hasta que llega a vosotros. Se lanza hacia vosotros en un abrazo tan efusivo que rompe a llorar.

Kama os pide mil perdones. No se imaginó lo que podía pasar. Y se muestra arrepentida una y otra vez. Ante todos, habéis fallado la prueba. Y vuestra única manera de reponer vuestro error, es volver el año que viene a Babuka y realizar allí la prueba de nuevo para que vuestro honor quede restaurado y os acepten como guerreras Mafumbo de pleno derecho.

Tras una semana, os enteráis que no ha habido ningún superviviente en Babuka. Todos han muerto, y nadie ha conseguido encontrar a los extranjeros que huyeron del lugar.

Pasáis un año entero entrenando como nunca antes lo habíais hecho. Nadie quiere entrenar con vosotros, pues en este último año, le habéis puesto tanto interés en mejorar, que pocos son los que se atreven a recibir un golpe vuestro. Incluso los veteranos, aunque os dominan fácilmente, alguna vez se han llevado un golpe lleno de ira y frustración y poco a poco dejan de entrenaros. Kama y vosotras dos sois las únicas que estáis por la labor. Y sin embargo Kama no está a la altura de unas guerreras como vosotras. Sin embargo, dedica toda su atención en vosotras, procurándoos ungüentos curativos y toda clase de hierbas para que vuestro entrenamiento sea productivo.

Al cabo del año, estáis preparadas, y volvéis a Babuka a cazar a algún depredador. Una vez allí, todo está bastante desierto, pero... ha habido movimientos humanos recientemente, veis una hoguera que no hace demasiado que estaba encendida, restos de comida que algún pájaro carroñero ya ha picoteado y algunos roedores que se han acercado a por los huesos.