Partida Rol por web

A diferencia de las otras veces, el viaje fué tranquilo, acompañado por el suave olor de la propia Joanna, ese olor a rosas que parecía emanar de la chiquilla.

En un momento dado una imagfen empezó a dibujarse a su alrededor....

Ante ellos apareció un rico y fabuloso valle,  las casas estaban trabajadas en el paisaje, mezcladas con plantas que crecían en el lugar y formando una serie de bellas arboledas, pequeños valles frondosos y vistas encantadoras. El Gran Valle de Evereska y el muro de la ciudad alojaban la mayor concentración de elfos lunares que permanecen en Faerun; era un lugar donde se cultivaba la belleza y donde muy pocos forasteros eran bien recibidos.
pájaros, gatos y pequeña fauna silvestre de todo tipo eran numerosos, incluso dentro de la misma ciudad. Hay una increíble diversidad de árboles poco frecuentes fuera del Valle. Los más comunes el roble, boxwood, el nogal, shadowtop, duskwood, bluetop y árboles hojasazules, que eran esculpidos por los mágicos evereskanianos, una guirnalda más del valle en su real follaje azul.
Rodeado por la Muralla del Prado, el centro del valle tenía un anillo interior de pequeñas colinas. Las tres colinas más altas, conocidas como las Hermanas, formaban un triangulo prácticamente regular alrededor de la ciudad de Evereska. Las colinas eran rotas por el río Aguas Cantarinas, el cual fluía a través del lado occidental de la ciudad. Excepto cuando estaba oculta por la neblina o la fina lluvia procedentes del moribundo mythal durante el sitio de los espinardos, la ciudad en si misma era una maravilla de presenciar, comprendida por una serie de jardines de césped y terrazas arboladas con cristalinos riachuelos que desembocaban en pequeños charcos y fuentes. No había calles propiamente dichas, pero si caminos zigzagueantes, algunos de los cuales se hallaban cubiertos de vegetación y la flora local. Notas musicales, cantos y pequeñas criaturas del bosque llenaban el aire pero sin llegar a ser algo molesto.
Muchas casas eran trabajadas en el propio paisaje, mezclándose con el crecimiento de las plantas y dando lugar a una serie de bellas emergencias, depresiones y vistas espectaculares. Otras son espléndidas mansiones con muchas agujas y balcones que ascendían a través de los enormes árboles. Finalmente, algunas casas abandonadas.

Pero....que ha ocurrido? Y donde está Zizel? es lo primero que piensa el adivino. En seguida, sus pensamientos cambian de rumbo.
Hemos perdido la oportunidad de cazar a la tejedora!
El mago, se acerca a la pequeña niña y le dice.
Creo que nos debes una explicación, pequeña...cuéntanos...que has hecho?

Miro a su alrededor, el lugrube paisaje de la morada de la tejedora habia sido sustituido por un hermoso valle, paso la mirada por sus compañeros, pero no estban todos.
Faltan Askritt y Zizel...
Miro a Malakr que se acercaba a la pequeña a preguntarle.
No creo que lo hicera exactamente a proposito, dentro de ella duerme un poder desconocido...
Volvio a mirar el hermoso paraje en el que se encontraban.
Bonito lugar dijo con cierta tristez pero yo voy a regresar no pienso dejar a Askritt alli ademas hay que acabar con lo que se empezo.
Se arrodillo delante de Joana  quedando  casi a su altura aparto el pelo de la frente de la pequeña y le dio un tierno beso en esta.
No te preocupes mas, todo saldra bien, ahora me ocupare de Cedric.

Se acerco al cuerpo del aventurero y llamo al poder qu mystra le habia concedido para traerlo de vuelta con los vivos.

Alasa preparó el polvo de diamantes para resucitar a Cedric en cuanto muriese de nuevo, así como su bastón de curación para darle energía vital en cuanto hubiese resucitado.

- Este es un buen lugar para que te quedes tú Joanna, pero nosotros debemos volver, hemos dejado una tarea inacabada.

Aquel lugar era muy apacible, hermoso por naturaleza. No tenía ni la más remota idea de dónde estaba, pero estaba mucho mejor que aquel horrible lugar del que tan desesperadamente quería salir. Pero no estaban todos, y eso la extrañó. "Seguro que el hechizo que han lanzado no llegó al resto", pensó la pequeña.

- ¿Eh? -fue la primera contesta a Malkar- ¿U-una explicación? -prosiguió en su asombro para luego centrarse en la calmada actitud de Marco- Pero si no he hecho nada, Marco. Vosotros sois los magos...

No entendía muy bien, de hecho en absoluto, el por qué de aquella situación. Y menos que tuviera que ver con ella.

- Mi amiga me dijo que no dejará a Marco.

Respondió a Alasa secamente, tal vez porque comenzaba a sentirse arrinconada. Pero rápidamente recordó las anteriores palabras de Marco, y entre todas ellas que iba a resucitar a Cedric. ¿Y si era verdad que lo había hecho? No, eso era una locura.

- Kricco, ¿crees que lo he hecho yo? -preguntó con un toque triste porque si fuera el caso habría dejado a los otros allí- ¿A que no puedo hacer eso? No soy una maga...

Estaba alegre por que Cedric estaba siendo tratada, pero las expectativas de todos por regresar y dejarla allí hizo que arrugara el cejo.

Tras el viaje de ensueño, un despertar de maravilla. ¡Habían regresado! No pudo evitar sentir una enorme felicidad inicial al encontrarse en el lugar del que habían partido, la Ciudadela élfica donde esperaban sus iguales, donde habían abierto el primer portal que les lanzó a la aventura.

Pero fue un segundo, un ínfimo momento. Porque, inmediatamente, se dio cuenta de las implicaciones. No estaban todos, atrás habían quedado dos de los héroes, luchando aún, solos, quizá muriendo. Y la misión por la que todos habían arriesgado no sólo sus vidas, sino la esperanza del mundo, había fracasado.

Así, con la realidad invadiendo dolorosa su corazón, escuchó a sus compañeros hablar con la pequeña Joanna, la poderosa mano inocente que en su ingenuidad y buen deseo les había traído de vuelta, seguro. Vio a Marco ponerse a la altura del rostro de la niña, y hablarle con dulzura, y se acercó.

También comprobó, con alivio, que Cedric iba a regresar de la muerte, con un milagro de la bondad de los dioses. Suspiró, y en su pecho, cerca del suyo propio, la gema del corazón de aquel del que había tenido que alejarse, la inundó de calor. ¿Dónde estaría ahora Shenasil...? Era posible que muy cerca. Pero no podía averiguarlo, no quería. Debía partir de nuevo, y no podría soportar una segunda separación...

-Marco te ha dicho la verdad, pequeña gran maga. Nos has traído, y gracias a eso Cedric vivirá de nuevo. Es gracias a ti. Pero ahora los demás debemos volver, a acabar lo que empezamos. De un modo u otro, y no te sientas mal. Ahora ya sabes, estoy segura de ello, que hay motivos más grandes que la propia vida. Más importantes. Viste lo que hace esa alma negra, viste el dolor y el engaño. Viste el mal derramarse de cada rincón recóndito de ese gran infierno en el que estuvimos. Es más importante que eso sea vencido, que ese lugar desaparezca, que no que vivamos en paz lo que le quede a esta ciudad de estar en pie...

Se agachó también, y la abrazó. Era una despedida, pero también era un homenaje. Algún día ella sería la verdadera Reina entre reyes, Maga entre magos. La pequeña Joanna.

Tan brusco y grande había sido el cambio, que ahora podían sentir la tranquilidad y la bondad del sitio, como un ente vivo, un ente al que podían tocar y sentir.

Aún no había venido a recibirlos nadie, si descontaramos a los pájaros que parecía que con su trinar les daban muestras de alegria y contento por haber venido.

Poco a poco volvian a sentirse " limpios " y no mancillados como en aquel lugar de maldad. Asi mismo al invocar el conjuro para devolverle la vida a su compañero, le sorprendió por la intensidad del poder que sentía.

Se fijaron en Cedric, y ... podía ser posible ¿? estaba respirando. Volvía a haber vida en ese cuerpo

La arquera miró a su alrededor con extrañeza, con una idea orbitando en su cabeza, aunque no sabía realmente qué era lo que no comprendía.

Buscó con la vista la Torre, la Torre más alta, que había sido para ellos el inicio de su periplo. Allí había aparecido la mensajera del Lich, allí había empezado todo... Cuando la localizó, dirigió a ella sus pasos, sin decir nada más.

Cuando aparecemos en ese paradisiaco entorno, no puedo más que mirar confundido a mi alrededor. No sé cómo, pero habíamos pasado del entorno más malvado y maligno que pudieras encontrarte, salvo el abismo, que supongo que eso sí que será chungo, a un entorno diametralmente opuesto, en el que la bondad se puede respirar en el ambiente.

Al ver el pecho de Cedric subir y bajar de nuevo, me acerco corriendo y señalando ¡Mirad, mirad, vuelve a respirar, sigue con vida! grito excitado. Una vez a su lado, me arrodillo y le doy un ligero abrazo, con cuidado de no dañarle demasiado.

Kricco aguardaba calmado entre los brazos de la pequeña, inusualmente comprensivo para ser un familiar.

- Joanna, claro que fuiste tú. ¿Cómo crees que cambié de color?

.

Era verdad. Estaban convencidos de que nuestra pequeña los había traído allí; pero resultaba tan increíble que no tuvo palabras para responder. Sin embargo…

- Pues no sé, Kricco. Pensé que fuiste tú quien cambio de color porque te gustaba  –le dijo a su pequeño amigo mientras observaba con la respiración entrecortada que Cedric había vuelto a la vida. ¡Era tan sorprendente el poder de la magia!- No sabía que lo hice yo, pero si no te gusta…

Resultaba muy confuso todo aquello, una extraña mezcla entre alegría y tristeza. ¿Y si morían el loco de Zizel y el magnífico Askrit? Al ver partir a la elfa hacia la torre…

- ¡Espera! –quiso detener sus pasos- ¡No sé qué tengo que hacer! ¡No sé cómo regresar!

Había expulsado el aire que con valor había reunido para admitir que la situación era muy difícil, y todo por culpa suya, así que sólo le quedaron lágrimas que sacar.

- No sé qué tengo que hacer… -balbuceó- Sólo quería salir de allí…

Dio un par de palmadas en el hombro del recien regresado, esto durara poco mas de un minuto amigo pero  haremos que te quedes definitivamente en cuanto esto termine, siento que sea tan incomodo pero es la unica forma.
Miro a Alasa que ya empezaba a preparar los materiales para el siguiente conjuro.
Ya veo que tu te encargas del resto, bien...
Se volvio a acercar a la niña y le revolvio el pelo cariñosamente.
Te he dicho que no te preocupes, elevo su voz para que alessëa pudiera oirlo tambien, voy a lanzar un recado hacia el hombre que nos llevo hasta los dominios de Acerak con suerte quizas nos pueda volver a llevar.
Tras sus palabras miro a sus compañeros para ver si alguno queria ñadir algo mas.
 

Alasa se acercó a Joanna, e incapaz de decirle nada simplemente la abrazó.

- No te preocupes cielo. Si hiciste algo fue con la mejor intención, y cuando una hace lo mejor que puede no hay nada que reprochar. Simplemente eres poderosa, la maga más poderosa que jamás ha nacido, sólo que como eres todavía pequeña todavía no controlas tu poder. Todos hemos pasado por eso, y sabemos lo difícil que es. No tengo ni idea de como podrías hacernos volver, pero supongo que es cuestión de que lo desees con tanta fuerza como deseabas salir de allí. Quizás te ayude pensar en Askritt, en que quieres rescatarlo a él también. Y no te lamentes por lo sucedido, salga bien del todo o no bien del todo. Ninguno de nosotros sabe si podríamos haber rescatado a Cedric de la muerte en un lugar tan horrible como aquel, quizás su alma no hubiese encontrado el camino de vuelta allí como lo ha encontrado aquí, o quizás su alma simplemente no habría querido regresar a aquel lugar tan maligno como ha querido hacerlo a este paraíso. Le has salvado la vida. Pero ahora intenta desear salvar la de Askritt también. Y si no te sale, no te preocupes, encontraremos otros modos.

La sacerdotisa no sabía qué más decir a aquella niña, así que enredó los dedos en sus rizos y le dio un beso en la frente antes de romper el abrazo que todavía mantenía.

Mientras alessea, ya estaba llegando a la torre, Cedric se levantó.

¿ Que ha pasado?¿Donde estamos? - Su mirada era dejaba ver que no entendia lo que aababa de suceder.

Este lugar lo reconozco, no es .... ?

la torre era el lugar más sagrado que tenían. Cuando vió a los dos guardianes consumidos en el suelo, apenas reconocibles por algún trozo de tela que aún quedaba, su mente empezó a reunir fragmentos de información  que había vivido en los últimos tiempos.

Alessëa, no pudo evitar que su mente volviera  al encuentro   que habían tenido lugar  hacía dias  en Myr Drannor , recordó como  la enviaron junto a un pequeño grupo para que fueran a investigar entre las peligrosas ruinas, según les habían informado un peligroso hechicero drow  había encontrado la forma de localizar el desaparecido  libro de la verdad infinita, el famoso grimorio de Alundel, uno de los mas poderosos magos elfo, de  cuando el antiguo reino elfo estaba en pleno esplendor, pero cuando fueron hacia alli se encontraron con un grupo de aventureros o mas bien con el único superviviente del mismo, su estado era lamentable y sus heridas no solo parecían haberle afectado a su cuerpo físico si no también a su espíritu.  Bras, que es asi como se llamaba,  era un clérigo de Lazhander. Según les relato la vieja colina de Myt Drannor , la que todos rehuían,  había tomado nueva forma.

Alessëa, no pudo evitar que su mente volviera  al encuentro   que habían tenido lugar  hacía a apenas unos dias  en Myr Drannor , recordó como  la enviaron junto a un pequeño grupo para que fueran a investigar entre las peligrosas ruinas, según les habían informado un peligroso hechicero drow  había encontrado la forma de localizar el desaparecido  libro de la verdad infinita, el famoso grimorio de Alundel, uno de los mas poderosos magos elfo, de  cuando el antiguo reino elfo estaba en pleno esplendor, pero cuando fueron hacia alli se encontraron con un grupo de aventureros o mas bien con el único superviviente del mismo, su estado era lamentable y sus heridas no solo parecían haberle afectado a su cuerpo físico si no también a su espíritu.  Bras, que es asi como se llamaba,  era un clérigo de Lazhander. Según les relato la vieja colina de Myt Drannor , la que todos rehuían,  había tomado nueva forma.

Su mente recordó asi mismo las palabras de su amado.

Mientras has estado fuera ha llegado un mediano, y es portador de malas noticias. – Recordó como se acerco a ella con el rostro turbado, y le cogió las manos entre las suyas con mas candor del necesario. Mientras las mantenía entre las suyas, los pulgares de el acariciaban dulcemente las manos de ella y sus ojos parecían perderse en los suyos.

El mediano se llama Yalashad, y nos ha informado de la perdida de Eanor. Se han ordenado dos dias de luto por su perdida, aunque nadie se ha atrevido a decírselo a tu hermana, me..menos después de lo ocurrido. Desde que volvió no es la misma y..y no me refiero a su aspecto, si no  a su carácter. Dioses, parece que una sombra se extiende por el mundo y nos ha atenazado con fuerza y su abrazo amenaza con acabar con toda cosa conocida. Una lagrima se deslizo temerosa de sus hermosos ojos.

Shenasil  se acerco un poco mas, si ella no le conociera tanto no se habría dado cuenta de la lucha que tenía lugar en su interior. Shenasil suspiró…  Pero eso no es todo, nos ha traído noticias de una profecía

Cuando el señor bajo la montaña pierda su reino
y el dragón de escamas púrpuras yazca en el frio suelo
 Myr Drannor vera alzarse al dios muerto y
Los doce dejarán de bailar, el mundo les vera de nuevo
entonces aquel cuyo nombre teme ser nombrado
saldrá de la Guardia oscura y su reino
durara hasta el fin de los tiempos
hasta los mismos dioses le temerán
su poder no conocerá límites y
no habrá lugar donde puedas guarecerte

El consejo se ha mostrado preocupado al saber que parte de la profecía se ha cumplido.

La cosa se ha complicado un poco cuando Yalashad ha dicho conocer al traidor, imagina, la disputa que se ha ocasionado en el consejo. Dice que conoce a Zizel, el hombre que atrapasteis en Myr Drannor, el que despertó a Moander, el consejo esta dividido y te ha pedido que tu intervengas