La historia del mundo de Krynn se registra en el enorme Iconocronos, escrito por el inmortal Astinus de Palanthas. Incluso después de la misteriosa ausencia de Astinus después de la guerra de Caos, la Orden de los estetas sigue su tarea y se encarga de registrar la historia. Estos volúmenes se guardan en la Gran biblioteca de Palanthas y están disponibles para todos los que estén interesados.
La historia de Krynn se divide en eras, que separan y describen las épocas significativas que se han vivido.
La Era del nacimiento de las estrellas: una era sólo conocida por leyendas, canciones y escrituras religiosas. Durante esta época se forjó el mundo de Krynn y se crearon las razas mortales.
La Era de los sueños: una época de mitos y leyendas, donde poderosos héroes del bien lucharon contra el mal y la gente aprendió lecciones que serían importantes para eras posteriores. A esta época pertenece la Leyenda Huma, el poderoso caballero que lucho contra los dragones portando la mítica Dragonlance.
La Era del poder: las fuerzas del bien dominaron este período, en el que la civilización alcanzó su cénit y las razas malignas fueron subyugadas o rechazadas. Durante esta época las razas mortales demostraron la trágica ignorancia que finalmente significó el final de su edad de oro. Todo ello desencadeno el primer Cataclismo cuando el sumo sacerdote mortal trato de alcanzar la divinidad y los dioses castigaron su osadía.
La Era de la desesperación: esta era estuvo marcada por las enfermedades, el hambre y la guerra. La paz sólo podía conseguirse a un enorme precio. Aunque también fue una era de redescubrimiento, en la que la gente de la tierra destrozada volvió a conectar con su pasado y restableció su relación con las deidades. Al final de esta era el mundo cambió para siempre debido al segundo Cataclismo. A esta época pertenece Tanis Semielfo y su compañeros, los gemelos Majere, Tasslehoff Burrfoot, Goldmoon y Riverwind
La Era de los mortales: también llamada Quinta Era, es la era actual, la gente de Krynn ha aprendido a dirigir su propio futuro y ha descubierto que incluso los más elevados pueden caer y los más humildes levantarse por encima del resto.
El mundo de Krynn sufrió importantes cambios durante y después del Verano de Caos. Algunas masas terrestres quedaron drásticamente alteradas al mismo tiempo que algunas tierras se elevaban y otras retrocedían; las tres lunas desaparecieron, siendo reemplazadas por una única luna; la disposición de las estrellas cambió y los dioses se fueron.
Hubo especulaciones sobre por qué los dioses partieron de Krynn a principios de la Era de los mortales. Algunos decían que los dioses habían huido por miedo a Caos, mientras otros mantenían que abandonaron el mundo para salvarlo de Caos. Pasarían años antes de que se descubriera la verdad: el mundo de Krynn fue robado a sus creadores.
Takhisis, la Reina de la oscuridad, descubrió la manera de mover Krynn a través del éter hasta otro lugar del cosmos. Se alegró de este descubrimiento, ya que significaba que, si podía arrebatar el mundo, sería su único gobernante. Sin embargo, Takhisis fue incapaz de llevar a cabo su plan durante miles de años, ya que el resto de dioses siempre estaban presentes y preparados para reaccionar y contrarrestar la poderosa magia necesaria para robar el mundo. La inesperada liberación de Caos le proporcionó su oportunidad.
Mientras el resto de dioses se unían a los mortales para luchar contra las fuerzas de Caos, Takhisis se mantuvo apartada de la batalla, ganando tiempo y esperando el momento correcto para atacar. Cuando el resto de dioses estaban debilitados y distraídos, usó las energías que había reunido durante incontables siglos para arrancar a Krynn de su lugar en los cielos y huir al lugar secreto que había preparado tiempo atrás para recibirlo. El resto de dioses de Krynn Rieron incapaces de detenerla. Algunos, como Sargonnas, habían quedado tan gravemente heridos por Caos que apenas tenían fuerzas para sobrevivir. Los dioses sólo pudieron contemplar con consternación el lugar vacío en los cielos donde antes brillaba su amado mundo azul. Lo buscaron, pero no podían notar a su mundo ni a su gente. Incluso Zivilyn, que puede ver todos los tiempos y todos los lugares, era incapaz de ver nada excepto el futuro fantasmal del Krynn robado.
Así como la era anterior se centraba principalmente en la gente de Ansalon redescubriendo su pasado, la Era de los mortales trata sobre la gente de Ansalon mirando hacia su futuro. Con los dioses separados del mundo y amenazas nuevas y terribles en la forma de los dragones supremos, la gente debe aprender a luchar por su propio destino.
Durante los primeros años tuvieron lugar tragedias terribles, obligando a que algunas razas de Ansalon tuvieran que enfrentarse a dificultades que nunca habían experimentado anteriormente. Los infantiles y despreocupados kender fueron masacrados por Malystryx, la gran dragona roja. Los supervivientes quedaron “aquejados”, con la mente y el alma afectados por los horrores que habían presenciado, obligados a viajar hacia el oeste para encontrar santuario. El reino élfico de Qualinesti fue ocupado por Beryl, la señora suprema verde, que mostró su odio genocida hacia los elfos a quienes gobernaba. Los silvanesti, movidos por el miedo de que su recientemente recuperado reino también fuera ocupado por los dragones supremos, envolvieron sus tierras con un escudo mágico e impenetrable. Creyéndose seguros del mundo y sus problemas, finalmente descubrieron con horror que el Escudo los estaba matando lentamente.
Aún así, envueltos en la tragedia, los mortales de Ansalon demostraron fuerza y adaptabilidad. Las olvidadas magias ambientales de la hechicería y el misticismo fueron redescubiertas, dando nuevas armas a la gente para usar en su lucha contra los opresores. Se fundó la Legión de acero, una nueva organización en defensa de la libertad de la gente sometida a los dragones supremos y el número de sus miembros creció al mismo tiempo que se mantenía en secreto. Justo en el momento en que la esperanza estaba volviendo de nuevo al mundo, una extraña y poderosa tormenta barrió el continente. Y de la tormenta llegó una voz que proclamaba la llegada de un nuevo dios.
Años después del descubrimiento de la “nueva magia” de la Quinta era, los hechiceros y místicos empezaron a ver que el poder de sus conjuros disminuía. Ninguna investigación pudo revelar la causa de esta consunción, aunque los espiritistas empezaron a sospechar que existía alguna conexión con las crecientes legiones de espíritus que permanecían en Krynn; los espíritus no querían o no podían avanzar hacia el siguiente estadio del viaje del alma.
Durante la noche de la Gran tormenta, una joven llamada Mina salió de entre los truenos y relámpagos, hablando de un nuevo dios, el dios Unico, y empuñando poderes milagrosos que no se veían desde que desaparecieron los poderosos clérigos de la antigüedad. Arrebatando el control de los caballeros de Neraka, Mina inició una guerra en la que conquistó ciudades y naciones y derrotó a varios de los poderosos dragones supremos. La guerra terminó en Sanction, donde el Unico absorbió los poderes de los dragones supremos y lo usó para entrar en el mundo. La obra de varios héroes frustró los planes del Unico y reveló que en realidad se trataba de Takhisis, la Reina de la oscuridad, que había robado el mundo a sus compañeros inmortales para poder convertirse realmente en el único dios verdadero de Krynn.
El final de la Guerra de los espíritus significa el restablecimiento de los dioses de Krynn, aunque ahora en el panteón faltan los líderes de la luz y la oscuridad.
La magia concedida de magos y clérigos funciona de nuevo después de casi 40 años de ausencia, y los poderes ambientales de la hechicería y el misticismo funcionan sin el impedimento de las almas, que ahora siguen su viaje de nuevo.
La vida de mucha gente de Ansalon ha cambiado, quizá para siempre, debido a los turbulentos acontecimientos de la guerra. Algunos de los villanos de la Quinta era han sido derrotados, pero otros siguen presentes y están surgiendo nuevos poderes malignos. Esta es una época en la que harán falta héroes para modelar el futuro del mundo de Krynn.
Los dioses habían encontraron el mundo y volvía la esperanza al corazón de las gentes, pero nuevos peligros se ciernen sobre los habitantes de Krynn. Y aquí, cuatro años después de la Guerra de los Espíritus, en el 425 dC, comienza vuestra aventura.