Partida Rol por web

Finalmente Sílfide asintió conforme ante lo que le dijeron. Veis como si sois sinceros sí que puedo ayudaros. Dijo mientras se terminaba de materializar.

Llevais razón, dijo asintiendo, es muy probable que el Profesor Fathom supiera algo sobre Xin y sobre todo el plan del que habláis. No os ayudaré a luchar contra ellos, pero sí que sé a dónde les enviaron. Aunque no sé si alguno de ellos estará dispuesto a colaborar con vosotros. Especialmente Fathom. Minutos después, las plantas dle bosque parecíeron volver a moverse y tras ellas apareció el Hombre Verde. En el rostro etéreo de Sílfide se pudo observar una sonrisa y la mujer se acercó a él enrollándose con su cuerpo en el hombre árbol.

Os ayudaremos. Para eso necesitamos ir a la prisión de Freedom City. Los policías no nos van a dejar entrar, ni a vosotros, ni a nosotros. Les dijo. Así que tendremos que infiltrarnos. Está prohibido hablar con la gente encarcelada, aunque sea por una buena causa. Así que tendremos que organizarnos bien para poder llegar hasta ellos. Os ayudaremos. Pero no lucharemos ni nos involucraremos. Les dijo conforme. ¿Entendido?

Nereida asintió a los argumentos de sus compañeros y esperó la respuesta, una sonrisa apareció en su rostro cuando la mujer de aire convino en ayudarlos, sonrisa que se congeló cuando ésta habló de infiltrarse en la prisión.

-Eso no estaba previsto,- en su mente todo confusión, no sabía que no les permitirían hablar con los reclusos -una cosa es confiar en ellos hasta cierto punto y otra darles la oportunidad de liberar a los encerrados.- su corazón se aceleró y si ellos estaban también con Xin y volvían a caer en una trampa...

Intentó que su cara no reflejase nada de la lucha que tenía lugar en su mente, miró de reojo a Fran y lanzó lo que esperó fuese un grito mental que llegase hasta la asiática -¿Y SI ES UNA TRAMPA? ¿PUEDES SABER SUS INTENCIONES?-.

-Maldita sea Nereida, relajate y deja de gritar! Necesito concentrarme.- Respondia Fran mentalmente mientras seguia intentando urgar en la mente de Silfide. La mayoria de la gente no solia comprender bien la comunicacion telepatica, y que gritar mentalmente era tan molesto o mas como en el mundo fisico. Luego tendria una charla con los demas al respecto, pero la prioridad de la joven era otra ahora.

¿A la prisión?, ¿ahora?, no es algo que me guste la verdad, pero dije que te ayudaría y lo haré - dijo mirando a Francesca. Todos lo haremos, no hay más opción sino esa.

A Ikari le costó sintetizar las palabras de Sílfide, ya que pretendía que nadie en toda aquel edificio se diese cuenta de nuestra infiltración, sonaba bastante raro, algo alarmista, pero no dijo nada por el momento. Algo estaba intentando hacer Fran, ¿el qué?, podía intuirlo, pero no lo sabía con plena certeza, así que se mantuvo atenta sin decir mucho más.

El ver de nuevo al ser verde le tranquilizó, pero no del todo. La espera era más larga de lo que había imaginado, pero al menos seguían con vida y eso era mucho.

- Infiltrarnos en la prisión... 

Comentó Lemar como si estuviera pidiendo algo difícil.

- Nosotros no somos un grupo de infiltración. ¿Tienes tú acaso un plan?

Aquello era meterse en un problemón, pero estaba en juego la vida de mucha gente ahora mismo. 

- Sería mejor averiguar dóndo están los mercenarios de Xin.

Repitió, por si acaso se estaba obcecando en lo de la prisión innecesariamente.  

Jaime asintió con lentitud. Entendía el peligro de la situación, sabía que ambas criaturas eran villanos, pero si ambos se habían retirados para que nadie les dejara en paz, ¿por qué iban a intentar liberar a nadie?

Está bien, pero también intentaremos causar el mínimo número de bajas. Esperemos que sean cero meditó sobre la capacidad de Sílfide de ahogar a la gente desde el interior de su cuerpo. Ella podría dejarles inconscientes a gran velocidad, pero si se pasaba, el cerebro de la persona en cuestión sufriría daños irreversibles.

Intentaremos hacerlo sin que los guardias se den cuenta. Si entramos y salimos de la prisión sin que nadie nos note, será lo mejor. Sílfide, ¿hasta qué punto nos vais a ayudar a infiltrarnos? Si tenemos que trazar un plan, tenemos que saber vuestro grado de implicación andarse con rodeos ya era absurdo, mejor era decir todo claramente. Además, suponía las intenciones de Fran, y cuanta más información pudiese recopilar, mejor para prevenir.

Supongo que para mí infiltrarme no resultará ningún esfuerzo, pero preferiría que vinierais conmigo. Combinando nuestros poderes imagino que no supondrá ningún esfuerzo. Además, sólo vamos a hablar con ellos, no necesitamos llegar demasiado lejos. Dijo mirando a los que planteaban más dudas ante la misión. Luego contestó a Sonic, desconozco donde están los mercenarios de Xin, por eso vamos a preguntar a los que ya han detenido, quizá así podamos obtener algo de información que nos de una pista por dónde empezar. 

Por último miró a Jaime, a eso me refería, no haremos daño a nadie, no atacaremos y evitaremos al máximo que puedan relacionarnos con cualquier suceso que pueda manchar más nuestra imagen. Ya es bastante duro estar exiliado en esta ciudad, que nadie en todo el mundo nos acepte a los que somos así, como para ser encima odiados en Freedom City. Estamos retirados y no queremos que nadie vuelva a acordarse de nosotros y mucho menos para mal nuestro. 

Parecía que ya habían decidido todos que habría que ir allí.

Ikari estuvo tranquila y esperando a que alguien se moviese en la dirección a tomar. Ya era hora de ponerse manos a la obra, era lo que tenían que hacer. Pronto estarían en el lugar dichoso, pero, ¿les estarían esperando?, eso es algo que no iban a saber hasta no llegar.

Sus manos comenzaron a sudar.

Cómo detesto este clima.

No sabía muy bien qué pensar, aquello era bastante atípico. Se quedó pensativo, tratando de dilucidar si sus mentores calificarían esa acción como astuta o como suicida...

Algo tenían que hacer. No podían quedarse inactivos, tan sólo esperando. Sabía que ésta parecía la única opción. El único camino que se abría ante ellos.

- Bien. Vayamos pues y tú nos guías.

Era frase no sonaba en absoluto bien. Ser guiados por una delincuente, o ex-delincuente, pero tendría que darle un voto de confianza.

Lemar miró entonces a Tetis, tratando de ver su opinión en sus facciones, un poco temeroso de que el remedio fuera a ser peor que la enfermedad. "No, esto tiene que salir bien. Tenemos que conseguirlo". Se repitió varias veces hasta convencerse de ello.

Fran mantuvo la expresion seria y concentrada, frunciendo el ceño. Lo que proponia las supuesta excriminal era algo bastante peligroso a su parecer, pero...

-Chicos, Silfide parece estar siendo sincera en sus palabras.- Comunica la mestiza mentalmente a los demas.- Pero no deberiamos confiarnos, no puedo asegurarlo al cien por cien.

-Por mi parte acepto tu propuesta, pero que conste que es porque no tenemos muchas mas alternativas.- Admitio en voz alta, con tono amenazador.- Pero no te perderemos de vista. Y porque seas incorporea no creas que podras escapar indemne si me engañas.

Después de la regañina de Fran, la chica asiática pudo sentir un "¡Ups!" mental seguido de -Lo siento- y el tarareo de una canción de moda, Nerida comenzó a mirar a unos y otros, escuchando lo que decían pero intentando no pensar en nada. Cosa altamente difícil cuando se preguntaba cómo pensaban entrar y salir de la prisión sin ser detectados, a ella se le antojaba imposible, a no ser que -¡Creatividad!- eso era lo que siempre le decían que tenía que hacer para utilizar al máximo sus poderes -Supongo que yo podría infiltrarme por el sistema de cañerías, pero el resto...-.

Ni se enteró de la mirada de Sonic y se sobresaltó dando un respingo cuando oyó a Fran en su mente, aunque lo intentó maquillar haciendo ver que le había dado un calambre. Como toda respuesta se puso al lado de todos e hizo un gesto con las manos indicando que ella seguiría.

La etérea mirada de Sílfide se centró en la amenaza de Francesca. Aquellas palabras no habían ayudado en nada en la situación, así que la mujer de viento simplemente asintió y solo añadió unas breves palabras antes de fundirse con el viento. Está bien. Entonces nos vemos allí. Dijo justo antes de desaparecer.

Cuando quisieron dirigirse hacia el Hombre Verde, éste había dado varias zancadas hacia los jardines del parque y se difuminó con ellos.

Quizá esa fuera la hora de trazar un plan, o simplemente de tomar un taxi y dirigirse hacia la cárcel de Freedom City, y rezar porque una vez más Xin no se estuviera adelantando a sus planes.

Fran le mantiene la mirada dura a Silfide hasta que esta desaparece, y vuelve a centrarse en sus compañeros- Se que no deberia haber dicho eso ultimo, pero sigo sin fiarme de sus intenciones. Al menos ahora que sabe que no esta a salvo si nos la juega se lo pensara mejor llegado el momento. O eso espero por su bien.ç

Considerando que ya se ha justificado suficiente, Fran respiro hondo para dejar salir la tension, y cambio de tema.- Supongo que tenemos que ir a la carcel. 

Como te dije, iré a ayudarte donde nos digas - le contestó a Francesca.

Después de todo, fuesen o no a la cárcel primero, habría que pasar por allí en algún momento. No es un lugar al que le gustase ir, porque no soportaba el olor que emana de esos sitios, pero su palabra era su palabra.

A Ikari solo le preocupaba una cosa, que les tendiesen una emboscada.

Nereida se quedó con el ceño fruncido y la boca entreabierta durante unos instantes, hasta que al cabo reaccionó.

-¿Nos vemos allí? y se marcha... ¿Ya está? -su tono era de cierta indignación -¿Y como se supone que entramos nosotros? Yo podría intentarlo por el sistema de abastecimiento de agua, pero vosotros ¿Jaime ya podrás manipular la mente de todos los guardias para que no "os vean"?

Una mano reposaba en su cadera y la otra la iba moviendo para enfatizar cada cosa que decía.

Bueno, no deberia ser muy dificil para nosotros entrar.- Responde Fran a Nereida tras pensar unos segundos.- No se supone que colaboramos con la policia? Si decimos que vamos a comprobar que los socios de ella siguen asegurados nos creeran. El problema sera actuar sin levantar sospechas para que ella pueda hablar con ellos.

Cruzando los brazos bajo el pecho, Fran resoplo y comenzo a caminar lentamente. Lo unico que les faltaba era ganarse la enemistad de las fuerzas de seguridad de la ciudad, y habia mucho riesgo de lograrlo si esta infiltracion salia mal.- Dado el caso yo tambien puedo intentar manipular mentes, como Jaime, pero con mucho esfuerzo y quedando bastante agotada.

Jaime escuchó las palabras de Sílfide y notó como el frío rodeaba su corazón y le paralizaba. Él no había contribuido en el pasado a que hablaran bien de los de su "clase", pero cuando la necesidad apretaba... Los recuerdos acudieron a su mente, y el remordimiento pudo con él. No había hecho nada por ponerse en contacto con ellos, y ahora no sabía nada de nada...

Pero ya estaba Fran para quitarle esas ideas de la cabeza. La muchacha no parecía comprender la situación y podía haberla liado en un descuido.

Ya es suficiente, no le demos más vuelta. Vayamos a la cárcel. Recordad que la única forma que tiene Sílfide de ayudarnos a entrar sería dejando inconscientes a los guardias quitándoles el aire, y no es la forma correcta.

Las palabras de Nereida le removieron por dentro Sólo tengo que intentarlo, a ver si es posible. Si en la distancia puedo controlarles, no es necesario dar explicaciones. No sabemos quién puede estar aliado con Xin. Si no puedo... Pues veremos otras alternativas.

Vaya pequeño lío se estaba formando. Sonic no era capaz de saber dónde quería encontrarse Sílfide con ellos.

- Si conseguimos que nos permitan hablar con Fathom, ella podría entrar con nosotros, invisible. No sé si es ese su plan. Pero tampoco va a ser fácil convencerlos de eso. A mí se me ocurre, Fran, que si les decimos que la Liga de la Libertad y la Familia Atom están en peligro y Fathom sabe algo importante, quizá accedan a que lo veamos. Esos héroes son muy conocidos.

"Más que nosotros, y eso habría que arreglarlo. Aunque no somos precísamente el típico grupo de superhéroes". Se quedó pensativo un momento. Quizá no era su destino hacer las cosas por las brutas, como hacían los otros. Ni ser populares. Eso era una mierda, porque a él le gustaría ser popular, y ahora se estaban metiendo en un camino que iba en la dirección contraria.

- Y si hay que entrar a las malas, yo puedo nublar el oído a los guardias para que no nos oigan. Francesca o Nereida quizá podrían adelantarse un poco para ir detectando guardias. 

Opciones habían. Era cuestión de intentarlo.

Fran asintio muy efusiva cuando Sonic propuso su idea- Si, algo asi me referia. Si tenemos una excusa plausible nos dejaran entrar sin problemas. Creo que tu o Tetis, que sois mas conocidos en la ciudad, deberiais solicitar esa reunion.- No pudo evitar sonreir un poco al ver que los planes iban tomando forma. 

- Si es lo que quieres, puedo ir yendo a echar un vistazo. Ya me he infiltrado otras veces en carceles- Añade la joven desviando un poco la mirada. No era agradable recordar su pasado criminal incluso cuando tenia su utilidad.- aunque admito que ninguna era tan segura y sofisticada como esta. Pero se lo que hay que mirar. Silo dilo y me pondre en marcha