Joshua Drumer negó con la cabeza. En un artefacto muy peligroso. Les dijo. Y no debe caer en malas manos. Negó. No digo que vosotros vayáis a usarla de forma equivocada, simplemente digo, que si os lo arrebataran... sería quizá demasiado poderoso para vuestros enemigos, y si os la pusieran es muy probable que causara vuestra muerte. Lo único que os salva de no terminar en el cementerio son vuestros poderes y si os los quitaran, no habría nada que hacer. Así que será mejor que tratéis de acabar con vuestros enemigos combinando vuestras habilidades.
No tengo ni idea de dónde podremos localizarles. Dijo Fathom negando con la cabeza. Me temo que no os puedo servir de ayuda. Pero... dijo tejiendo una idea en su cabeza.Se puede decir que soy una personalidad bastante conocida en la ciudad, tan solo tendré que llamar un poco la atención para que la Liga del Crimen se ponga en contacto conmigo. ¡Seamos nosotros quienes tendamos una trampa a ese tal Xin y acabemos con todo el mal que quiere hacerle a esta ciudad! ¿Qué os parece el plan? Dijo mientras se preparaba para marcharse. Luego lanzaba una mirada de desprecio a Joshua, molesto porque por su culpa aún seguía manteniendo esa humana apariencia.
La situación le parecía realmente difícil. De repente parecía que dependían de Fathom para avanzar en el plan y tenían que ver la forma de hacerlo sin perder el control.
- Es un buen plan pero el problema es que la liga del crimen es mucho más poderosa que nosotros. No sé cómo vamos a lograr llegar hasta Xin o hasta su mano derecha en la ciudad.
Iban a tener que hacer un ejercicio de confianza pero claro que si no lo hacían estaban perdidos y si era una trampa del supervillano también lo estarían.
- No podemos permitir que Xin controle la ciudad. ¿Estamos de acuerdo?
Preguntó a los de factor cuatro para ver la convicción con la que respondían.
Ellos sabrán que intentaremos tenderles una trampa, en eso no me equivoco. Pero, ¿a alguno se le ocurre otro plan alternativo?, no, ¿verdad?, pues de momento sigamos el consejo del profesor.
Se giró hacia Sonic.
Siempre tendréis mi voluntad para apartar de este mundo a todo el que no conciba la paz en él. ¿Te vale mi respuesta? - concluyó sonriéndole.
El profesor Fathom contestó muy convencido, y de la misma forma lo hicieron los otros tres. Parecía que el plan, aunque iba a ser duro, requeriría mucha confianza en los que antes habían sido malos y ahora se habían puesto de su parte.
Ante grandes maldades, había que tomar grandes remedios y ese tenía pinta de ser un mal necesario.
Confiando en que Factor Cuatro no les traicionase, decidieron salir de nuevo de la prisión y optaron por ir a buscar a Jaime, era la siguiente pieza que les faltaba en ese puzzle.