Partida Rol por web

Knights Code [+18]

Capítulo 5: El Dolor del Caballero

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26/10/2020, 16:45
Director

 Lo que había comenzado como un desayuno que prometía ser el inicio de un día tranquilo y, con suerte, sin problemas, terminaría torciéndose por las declaraciones directas de la princesa a su hermano. El ambiente inevitablemente se sentiría más pesado luego de que Artanis decidiese asegurarse como próxima heredera al trono...

 -Uhmm... -pero más que molesto o intimidado, el príncipe se veía confundido y preocupado. -. ¿A qué se debe, hermana...?

 -Arthas, nunca dude que podrías ser un excelente rey, incluso mejor que nuestro padre o nuestro abuelo, pero... El mundo se está torciendo, y contigo sin recuerdos te encontrarías débil y vulnerable sobre el trono... -declaró la princesa antes de cortar algo de carne de su plato para llevarlo a su boca, masticar, tragar, y proseguir. -. Ya han corrido muchos rumores sobre traidores en el castillo, y cuando se sepa la muerte del rey todo se intensificará más... El reino necesitará de alguien fuerte capaz de tomar decisiones duras, de alguien que tenga el conocimiento de toda su vida y no solo fragmentos que queden en su mente, alguien que sepa en quién confiar...

 -¿Piensas… que podría ser manipulado…? -dedujo entonces Arthas intentando disimular una mirada de reojo a Alanís antes de volver a su hermana, con clara expresión de preocupación. -. Yo… No sé qué decir… Ni siquiera estoy al tanto de lo que tiene a todo el mundo tan preocupado y atento…

 -Y precisamente por eso no estás listo para tomar el trono… Debemos ser realistas, Arthas: no sabemos cuando recuperarás tus memorias, o si al menos serás capaz de hacerlo… Hasta entonces, alguien debe tomar responsablemente el puesto que te pertenece por derecho… -la manera en la que lo explicaba dejaba claro que la princesa estaba consciente de que Arthas era quién debía estar en el trono, pero habían tantas cosas sucediendo actualmente que tal vez no fuese lo mejor para él ni para nadie.

 El príncipe terminaría quedándose en silencio unos segundos antes de suspirar y volver a sonreír ligeramente con honestidad.

 -Supongo que tienes razón… ¿Qué piensan ustedes? -les dirigió la palabra el chico. -. Creo que son los que mejor nos conocen y en quienes más podemos confiar, por lo que… ¿Creen que lo mejor para ambos, y todo el reino, es que mi hermana tomé el trono?

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26/10/2020, 16:46
Muramasa

 Al haberse encontrado con un rostro conocido, aparte de los vuestros, podrían confirmar que tal vez no habían pasado tanto tiempo dormidos como pensaban, o al menos Muramasa parecía tener la misma edad que la última vez...

 -Uhmm… -el sacerdote se les quedaría viendo durante algunos segundos en silencio, como estudiando sus nuevos aspectos luego del cambio que habían sufrido. -. En fin, supongo que estarán algo agotadas luego de lo que sea que les haya pasado, pero hay muchas cosas que aclarar, cómo qué Fío no mató al rey y Faith no es una traidora…

 Llevándose entonces el cigarro a la boca, el samurai buscaría una roca cercana de suficiente tamaño como para sentarse sobre ella.

 -Nos encontramos en el reino del este, cerca de la frontera con el nuestro y a algunos kilómetros del reino de las hadas… Glaius fue capaz de leer la magia con la que fue secuestrado Fío, por lo que dio con una aproximación de a donde iría a parar el otro lado del portal, haciéndose también la idea de que Faith terminaría con él… La confianza en el castillo está colapsando, así que fui enviado por el mismo diamante rojo para investigar a las hadas e informar de si todas son una amenaza o sí solo debemos preocuparnos del hada de fuego… -habiéndose acabado la mitad de su cigarro, apagaría el resto contra la ronca en la que estaba sentado, dejándolo tirado en el suelo. -. Entonces, ¿cuál es vuestro plan? Si vuelven ahora al castillo seguramente serán tachados de traidores y acusados de matar al rey, no creo que tengan muchas opciones más que cooperar y ver a dónde nos lleva todo esto…

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26/10/2020, 16:48
Director

 Una vez dentro de la tienda, Jonathan se quedaría prácticamente petrificado luego de haberse encontrado contigo, tomándose unos segundos luego de decir tu nombre antes de finalmente decir algo.

 -Cytla, y-yo lo lamento, se que no debería estar aquí… -mostrándose entonces nervioso y preocupado  al hablar, se cubriría el rostro con ambas manos. -. Dios, Lilith me matará si se entera de esto, pero… -volvería entonces a destaparse para verte. -. Luego de que finalmente dijeses que querías verme, yo… yo... ¡Tenía que venir a verte!

 A diferencia de cuando trataste con él disfrazada, ahora se le veía más expresivo y honesto, como si estuviese esperanzado de que sus palabras pudiesen servir de algo, pero a la vez temeroso de que simplemente empeorasen la situación…

 -Se que no me quieres delante de ti, mucho menos a solas… Pero no podía soportar más las ansias de tener una oportunidad de ver nuevamente tus ojos… ¡Cytla! -se percató entonces de algo. -. ¡E-Es cierto, contrate a una mercenaria para que te robase la espada y te llevase conmigo! -luego de haber confesado su osadía, se volvería a cubrir el rostro con las manos. -. ¿C-Cómo rayos se me pudo ocurrir que tenía el derecho de venir hasta aquí…? Debí haberme quedado en la guarida…

 Se le veía notablemente decaído, arrepentido, casi podrías decir que tantas emociones que debería estar sintiendo ahora le estaban rompiendo de alguna forma… ¿Sería todo aquello también una mentira…?

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26/10/2020, 17:23
Alanís Cromwell

Alanís se había mostrado bastante entusiasta con el desayuno, y de a poco se veía que su tendencia era tomar uno particularmente pesado, compuesto de proteínas mayoritariamente. Aunque fuera bastante relajada si estaba comiendo de forma privada y prefiriera comer carne a mordiscos (¿quizá por naturaleza? ¿quizá por gusto personal?) por ese momento se esforzaba en presentar modales y delicadeza cortando aquí y pinchando allá. Cuando cayó la propuesta, tenía los ojos cerrados en lo que bebía algo de zumo...y bebió más de lo que quería, sencillamente para mantenerlos cerrados unos segundos más.

-Hmmm...no es secreto para nadie que Artanis es una persona fuerte que conoce sus armas y es estricta consigo misma. -sostenía el vaso ahora, observando los restos restos del contenido- Pero... princesa. A pesar de que el razonamiento es objetivamente correcto, se verá mal se mire por donde de mire. Literalmente está pidiendo el trono al día siguiente de que que estás cosas hayan sucedido, con el rey recién fallecido, la reina indispuesta, y el príncipe sin memoria.  Ese será un tumor más terrible que todo lo demás.

Dijo esto con neutralidad, pensativa.

-Como la mayoría, esperaba que la reina continuará gobernando en solitario a partir de ahora y hasta que las cosas estuvieran en orden...me extraña que no esté despertando aún. Pero, sin desviarme del planteo...es demasiado pronto para pensar en eso, aunque esto muestra que le preocupa profundamente el futuro inmediato. Sugeriría dar algo de tiempo al reino y la corte en general para sanar, promedialmente una o dos semanas. Si, es necesario que se tomen decisiones fuerte, pero también es necesario...conocer el corazón de las personas en tiempos así. Alguien que es meramente eficiente no ganará simpatía del pueblo, y la moral podría caer. Disculpe mi opinión de todas formas, ruego por qué no le sea ofensiva, y le recuerdo que está en todo su derecho de ignorarla ya que no soy nada especializada en el trabajo de los consejeros. Solo, es probable que el príncipe de recupere pronto, y la reina despierte de un momento a otro, esencialmente.

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26/10/2020, 17:45
Alanís Cromwell
Sólo para el director

Alanís necesitó mantener un poco más sus párpados bajos, porque inevitablemente hubiese lanzado una mala mirada a la princesa de otra forma. Una cosa era lo que podía decir, esforzándose por no sonar agresiva o desafiante, y otra era lo que pensaba realmente...que no estaba lejos de lo dicho, pero era más personal de lo que había establecido.

¿Cómo es posible que alguien cuya familia sufrió tanto ayer este preocupándose inmediatamente del trono? ¡¡No ha pasado ni un día y por poco y el cuerpo del rey sigue estando caliente!!

Si fuera Cytla estaría gritando esto ahora mismo. Se sentía infinitamente más indignada de lo que estaba dejando ver, y el planteo me causa sensaciones mixtas de estar presenciando un acto irrespetuoso, cruel y...muy sospechoso.

...

No le gustaba en absoluto la idea, pero no podía sacudirsela de la cabeza. Era la princesa, y aunque no fuera su protegida asignada, su juramento como caballero era para con toda la familia real. Sin embargo, no había forma de que no pudiera encontrar sospechoso un planteo así considerando todo. Con suerte estuviera equivocada, y solo se sintiera particularmente ofendida por tener los intereses de Arthas más presentes...pero hasta entonces, su mirada debía estar especialmente atenta. De había indulgido lo suficiente ayer, debía ser más que suficiente energía para mantener su mirada atenta a los alrededores y actitudes extrañas que pudiera avistar.

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27/10/2020, 16:58
Fío Edrielle

Se sorprendió muchísimo con el beso, pero fue lo que lo devolvió a la tierra y permitió que se serenara lo suficiente como para seguir hablando con más calma.
"Te prometo que el exterior es mucho mejor."

Al final se abrazó a los avalorios que su hermana le creaba, imitaciones de los originales pero el sentimiento era el mismo, aún mayor quizá ya que había sido creado por su hermana. Se puso el pendiente y el colgante, abrazándola. -Gracias... Fue caos quien le alertó y le hizo levantarse de un respingo, poniéndose delante de su hermana con los puños cerrados. No dijo nada pues estaba esperando unos segundos a ver como procedía el intruso... Aunque cuando la tenue luz les dejó ver quien era, sonrió y se relajó. -Así que no han pasado más que unos días... Quizá una semana como mucho... Parecía aliviado por ello a decir verdad. Se acercó al hombre quien se sentaría en una roca y se quedaría de pie, escuchándole de cerca. -Jamás tuve la intención de huir... ¿Como se encuentra Alessandro? Siento mucho... Que tuviera que presenciar aquello. Con eso, si Muramasa aún no había entendido quien era quien, quedaba claro que le hablaba Fío. -Deberíamos ir a ver a nuestra madre Faith, es la única que podría guiarnos en un momento así... Y contarnos sobre el hada. Miró entonces a Muramasa, sabía que la entrada a los humanos estaba prácticamente prohibida en el reino de las hadas, solo esperaba que llegar con los primeros hijos de la reina se calmaran y le dejaran pasar. 

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27/10/2020, 16:34
Cytla Calatia

Esta... desde luego era la última situación que me esperaba el día de hoy -Jonathan...- dije su nombre al encontrarme con él de frente mirándole con incredulidad y sorpresa, después de que Glaius se hubiera ido al almacén el cual le indiqué donde estaba para que se pudiera cambiar. Tanto él como yo nos quedamos en completo silencio, petrificados viéndonos el uno al otro... Esto no era como ayer, en que estaba disfrazada y hablábamos de "negocios"... esto era completamente distinto.

Al final él acabó reaccionando y empezó a hablar, poniéndose en plan modoso y temeroso tapándose la cara con las manos como si fuera un adolescente nervioso también diciendo que Lilith lo mataría si supiera que esta aquí -N-no te pongas así... eres muy mayorcito para hacerlo...- le dije intentando retomar la compostura, lo cual me costó pues... No estaba frente a Jonathan Santa el jefe criminal con el que negocié ayer y estuve hablando, ahora solo era Jonathan sin la actitud de negociador frío. Lo cual era mucho más difícil para mi afrontarlo, porque le veía más humano... y es más difícil odiarle, aunque se lo mereciera -No pude ir ayer, surgió algo grave... seguro que el mismo que robó la Rompetormentas te habrá dicho porque...- dije con ironía, seguramente imaginándome que él sabía porque no vine ayer a la cita que yo misma puse.

Jonathan se notaba que vino sin nada en la cabeza simplemente movido por el impulso... porque las cosas que estaban diciendo parecía estar diciéndolo nada más le pasaban por el cerebro sin pensar siquiera si eran cosas que debía de decir -Ca-cállate...- le dije en voz baja, mientras que él empezaba a ponerse más nervioso y hasta contar el plan de la "ladrona" que contrató -Cállate...- le volví a pedir, pero él ahora simplemente empezaba a preguntarse que derecho tenía para estar aquí y lamentaba haber venido -¡Cállate!- terminé diciendo...

Y entonces, le crucé la cara con una bofetada para que se calmara y pusiera sus emociones en orden. Y lo reconozco, lo disfruté durante un segundo; pero Jonathan sabía de sobra que la torta que le había soltado podía haber sido mucha más fuerte... realmente fue una ostia para que se tranquilizara, más que de odio y con ganas de herirle -Cállate, y tranquilizate Jonathan... por favor... no se como afrontar esto y verte tan nervioso... no me ayuda nada...- le dije al hombre masajeándome la sien... ahora intentando relajarme yo -No estoy sola, en el almacén hay uno de mis compañeros cambiándose...- le avisé si él pensaba que estábamos solos en la tienda -¿Que... que quieres Jonathan? ¿Porqué contratas una ladrona para robarme...? ¿Porqué estás aquí...?

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30/10/2020, 11:56
Faith Edrielle

Acepté el abrazo sonriendo a mi querido hermanito después de entregarle todas las cosas. Sin duda me alegraba verle tan feliz... Pero esa felicidad no duraría mucho, pues unos extraños sonidos nos pondrían alerta en poco tiempo. Fio actuó extraño, me estaba protegiendo con su cuerpo, pero eso ya no hacía falta, igual que no hacía falta que me pusiera delante. Sabía lo capaz que era el y lo capaz que soy yo...

Por eso me puse a su lado tomando una de sus manos, quedandonos los dos al mismo nivel, protegiendonos mutuamente, e invoqué Aegis para cubrirnos.

Para nuestra sorpresa, fue Murasama quien asomó por el tunel y Fio pareció relajarse - Esperaba que no fuera más de unos días, siendo sincera - le mencioné a mi hermanito cuando empezó a decir todo aquello, pero sin bajar la defensa hasta que comenzó a decir que no eramos lo que pensaban. Justo entonces bajé la barrera - ¿Se me considera traidora? - Pensandolo bien... era hasta lógico - No quería que Alessandro pensara que le traicioné... - con aspecto cabizbajo, bajé hasta la mirada y las alas - Entonces no llegó a entender lo que le dije... ¿Y donde está Fair? Temo lo peor... - cosa que se extinguió al entender con las palabras de Muramasa que no lo habían cogido.

Viendo las opciones que planteaban tanto Muramasa como Fio, miré de uno a otro varias veces, sintiendo un tanto de temor. No podiamos volver al reino, no aún sin poder demostrar nuestra inocencia... Pero si ibamos con nuestra madre, probablemente nos encontrariamos con una posible acusación ante Fair... Era dificil decidir - Pero he aprendido de ti... A veces hace falta hacer sacrificios, y en este momento aunque no quiera hacer daño a Fio y aunque no quiera que Muramasa me vea como una traidora... Es necesario dar el paso - Yo... Tengo que volver a la mina, aunque... Visitar a nuestra madre no estaría mal y eventualmente podriamos volver al reino pero necesitamos demostrar que no somos traidores a la corona. - y acabé suspirando...

-Muramasa, te ruego que si realmente estás de nuestro lado al pensar que somos inocentes, no pienses mal de lo que voy a contar ahora... - y desviando la mirada a Fio y tornandola en preocupada miré a este - Y hermanito... no te alteres. - No podía decirlo de otra manera - Fair no es un hada mala... - desvié la mirada, pues sabía lo que significaban esas palabras en cuanto a reacciones. - Dejadme explicarme... Combatí contra el y averigüe más cosas de su pasado. Realmente el está obrando por su propia justicia y no por el nombre de las hadas. Si atacó al reino fue para vengarse al no haber recibido ayuda de los humanos para que su amor no estuviera muriendo. El mismo logró poner en estasis a su amor pero... No hay ninguna forma de que pueda traerla a la vida, tan solo yo... - Y antes de que pudieran pensar algo malo de todo esto, como que fui coaccionada o chantajeada o cualquier cosa, levanté la mano intentando ganar fuerza de valor.

-Pero si necesito volver a esa mina hablando con nuestra madre primero, no es para hacer algo bueno por Fair - las lagrimas ya empezaron a correr por mis mejillas en plena señal de lo que me dolió verla allí - Necesito devolverle la vida que le falta al amor de Fair, porque es Lily, nuestra hermana - y finalmente levanté la mirada para ver a Fio, mientras las lagrimas corrían en su curso.

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07/11/2020, 13:52
Baeric Griffith

La princesa dio su opinión respecto a porque debería ser ella la reina, argumentando con puntos bastante fuertes a decir verdad y uno de ellos era lo más importante, ¿Cuándo recuperaría Arthas la memoria?, no se sabía a ciencia cierta.

Pero cuando les preguntó a ellos…bueno, Artanis sugirió esperar, pero Baeric tenía otra opinión al respecto.

-Me temo que yo estoy con la princesa, perdón por la insolencia pero…el reino necesita estabilidad ahora mismo, necesita ver que a pesar de que el rey haya muerto, su heredero está dispuesto de subir al trono y tomar el mando.-Comenzó.-El pueblo llano necesita eso, estabilidad, ¿Qué imagen se dará cuando vean que el príncipe ha perdido la memoria y la reina no despierta?, no sabemos bien cuando puede cambiar esa situación, pero desde luego creo que lo más correcto sería subir al trono lo antes posible.-Exclamó con solemnidad.

-¿Cómo no se va a ganar la simpatía del pueblo?, ¿caer la moral?, más bien todos estarán preguntándose cuando se hará algo al respecto, necesitan ver que alguien se preocupa por ellos y por su bienestar, un vacío en el poder no hará más que crear incertidumbre y a la larga…alguien puede tratar de usurpar el poder. Ya vimos lo que pasó con el rey…¿Qué más pueden tratar de hacer esas malditas hadas?, no…desde luego la princesa necesita tomar el control ahora mismo.-Terminó por decir antes de cruzarse de brazos.

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09/11/2020, 02:38
Director

 Ambos herederos escuchaban con suma atención la opinión de ambos, siendo que ninguno de los príncipes diría algo al respecto hasta que finalmente ambos habían comentado.

 -Entiendo lo que dices, Alanís, pero no podemos permitirnos debilidades como esas. Baeric tiene razón al decir que cuando se anuncie el fallecimiento del rey el reino necesitará de alguien que los guíe, alguien que les diga que no dormirán sin alguien que vele por ellos… -se explicó la princesa antes de agachar la mirada. -. La reina no merece la carga de gobernar sola: ya ha servido mucho al reino, ahora es momento de que se tome el tiempo que necesite para pensar en ella misma y superar la muerte del rey a su ritmo… -aunque se mostró algo decaída, casi de inmediato volvió a alzar la mirada. -. No hago esto por conseguir el trono o querer preparar al reino para una posible guerra contra las hadas: lo hago porque no quiero que mi familia sufra más…

 Aquellas palabras de su hermana dejarían al príncipe sin habla, quién nuevamente les miraría a ustedes antes de dedicarle una sonrisa a la princesa.

 -Me parece bien, hermana -concluyó. -. Realmente no me siento capaz de gobernar de esta manera… No veo justo que las personas que han confiado en la corona tengan que depender ahora de un rey sin recuerdos. Si estás en lo correcto y nuestra madre no está a gusto con la idea de gobernar sola, apoyaré felizmente tu coronación.

 Justo entonces las puertas del comedor fueron abiertas por los sirvientes, permitiendo la entrada al jefe de mayordomos, Marshall.

 -Sus majestades… -hizo una educada reverencia de saludo a los herederos, ignorando totalmente el hecho de que compartían mesa con ustedes. -. Vengo a anunciar que su majestad la reina finalmente ha despertado de su sueño y se encuentra en el jardín principal esperando poder reunirse con ustedes luego de vuestro desayuno.

 -Iremos de inmediato -respondió Artanis por todos, por lo que el mayordomo se retiró tan pronto como llegó, momento en el que podrían continuar con la comida sin más interrupciones.

 Partirían entonces al jardín principal del castillo donde los príncipes podrían reunirse con la reina. Aquel lugar que ocupaba una buena parte del castillo gozaba de la luz solar gracias a la ausencia de techo, siendo decorado de tal forma que imitaba un exterior abierto a pesar de realmente estar dentro del territorio de las murallas reales. Grandes árboles, arbustos, caminos y portones: ciertamente sólo la realeza podría permitirse un jardín como ese, y todo gracias a los dedicados trabajadores que velaban por la vida de las flores mientras los demás se preocupaban por el reino.

 He allí, parada bajo la sombra de un árbol, la reina miraba una mariposa azul que se posaba sobre su mano con gracia y delicadeza. Recostado en el tronco del mismo árbol estaba Eldruin, el caballero encargado de cuidar a la reina luego de lo sucedido.

 -¡Madre! -se apresuró el príncipe al verla, acercándose para poder entablar conversación con ella; en cualquier otra situación Arthas seguramente la habría abrazado, pero dado que no tenía recuerdos… Era natural que en él estuviese el sentimiento de cariño a una madre, pero no el que tenía antes. -. ¿Te encuentras bien? ¿Cómo te sientes?

 -Fue un despertar duro, pero ya me encuentro mejor… -aseguró la reina dedicándole una sonrisa a los dos herederos antes de dejar que la mariposa volará libre. -. Eldruin fue muy amable al ponerme al día de todo lo sucedido…

 El jujin al fondo se mantendría en silencio mientras miraba hacia otra parte, serio pero naturalmente relajado.

 En ese momento unos sirvientes llegaron para empezar a preparar algo de té sobre una mesa de roca que había cerca, siendo que la familia real no tardaría en tomar asiento. Una vez con el té servido, Eldruin se acercaría y tomaría la taza que correspondía a la reina, bebiendo un muy pequeño sorbo de la misma antes de devolverla y asentir a la mujer; ¿estaba comprobando si no estaba envenenada…?

 -Te tomas muchas molestias, Eldruin… -insistió la reina.

 -Con todo respeto, preferiría evitar a toda costa aumentar el número de funerales de miembros de la realeza… -respondió dando a entender que cualquier prevención era poca teniendo en cuenta el fallecimiento del rey.

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09/11/2020, 18:01
Director

 Por más que intentases mantener su nerviosismo bajo control, para Jonathan parecía imposible no actuar como si cada palabra que saliese de su boca podría empeorar la situación más de lo que ya lo estaba, y tan equivocado no estaba dado que el mero hecho de estar juntos de aquella manera ya era bastante complicado no solo para él, sino también para ti…

 -E-Entiendo totalmente que no hayas ido incluso si no hubieras tenido una razón… Pero desconozco lo que pudo haber sucedido… -se explicó intentando mantenerse estable con el tema. -. Mi aliado en el castillo me es leal, pero no ciegamente, por lo que imagino que si no me ha informado de nada es porque lo sucedido afecta a todo el reino…

 Pero tras haber explicado su situación con el informante, volvería a romperse y caer en la desesperación, actuando ansiosamente hasta que finalmente le callaste con una bofetada que le dejaría totalmente descolocado. No seria tras unos segundos de shock que reaccionaría y posaría suavemente una mano sobre su mejilla, girando lentamente el rostro para verte nuevamente y escucharte atentamente.

 -Entiendo… -concluyó antes de tomar aire y colaborar para mantener todos sus sentimientos y poder tratar contigo debidamente, aunque era imposible para alguno de los dos negar que a ambos les afectaba hablar frente a frente de esa manera, tal vez más de lo que esperaban… - Primero que nada, quiero que sepas que contraté a la ladrona porque necesitaba la espada de vuelta, y no me sentía capaz de venir a pedirtela… Supuse que te resistirias si veías a alguien entrar a robar tu tienda, por lo que propuse a la ladrona que también te secuestrase para poder explicartelo todo yo… Lo lamento… -se disculpó antes de continuar explicando. -. Verás… Tengo información que tal vez les pueda interesar a los caballeros… -al decir aquello, metería la mano en su chaqueta para luego sacar de esta un trozo de piedra que cabía perfectamente en la mano. Por la forma tan particular que tenía parecía haber sido tallada hasta asemejarse a una gema talla esmeralda, siendo que por uno de sus lados estaba grabado un extraño símbolo rúnico rojo. -. Últimamente he estado en contacto con unos comerciantes de runas de auto-mejora: parece ser un invento enano que no salió a la luz. Al parecer, quienes las usan pueden fortalecerse física y mentalmente volviéndose capaces de combatir más allá de sus límites, pero es… experimental… -en caso de que quisieses examinar la runa, te la entregaría sin poner resistencia alguna. -. Tal vez hayas escuchado que hace varios días la princesa fue atacada por unos bandidos cuando fue a visitar a un Jujin… -Perceval... -. Esos bandidos poseían algunas de estas runas, y parece que uno las usó demasiado y acabó muriendo debido a que su cuerpo no pudo soportar los efectos… -habiendo explicado aquello, añadiría. -. Tengo entendido que tiene alguna relación con el hada criminal que les ha estado dando problemas, y que precisamente tuvieron inconvenientes para poder llevar a cabo una audiencia con un representante enano… Tal vez estas cosas puedan serles de utilidad para seguir un rastro y conectar todo…

 Jonathan parecía dispuesto a entregarte la runa sin queja alguna, siendo que finalmente adoptaría una expresión un tanto más seria y firme.

 -No me malentiendas, no hago esto por conseguir tu perdón, sino simplemente porque pienso que es lo correcto… Me he convencido de que sin importar lo que haga no podremos volver a ser como antes, pero al menos me gustaría esforzarme por estar mejor que ahora… -concluyó agachando la mirada momentáneamente antes de volver a verte. -. Entonces... ¿A los caballeros les interesaría la ayuda de los bajos fondos para investigar las runas...?

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09/11/2020, 21:23
Muramasa

 -Para ser exactos, ni siquiera ha pasado un día… -corrigió Muramasa respecto a las ideas que pudiesen tener sobre el tiempo que llevaban dormidas. -. Alessandro regresó al castillo algo… preocupado. Cuando se enteró de la muerte del rey, informó que te vio irte por voluntad propia por un portal del hada criminal -respondió a Faith respecto a su estado de traidora. -. No parecía querer aceptarlo, pero con la muerte del rey y el secuestro de Fío… El castillo se está dividiendo: unos creen que son inocentes, otros les matarán si los encuentran… Desconozco como están los demás ahora; me separé del grupo apenas tuve la oportunidad, dado que Glaius me habló con la mente o algo así para decirme que hacer y dónde encontrarlas… 

 Explicando los motivos de su llegada aquel lugar, y como había dejado las cosas antes de irse, Muramasa escucharía atentamente como planeaban ir a hablar con la reina hada, momentos antes de que Faith empezase a comentar detalles de los que nadie tenía información hasta ahora…

 -Uhm… -aquella triste historia dejaría pensativo al samurai, quién tomaría la calabaza de su cinturón para beber un poco de su contenido antes de decir algo al respecto, siendo que daría tiempo a Fío a consolar a su hermana si así lo hiciera. -. Lily, ¿no? ¿El hada de fuego…? -dedujo el hombre mientras miraba la calabaza, acercandola por si alguno de los dos quería beber de ella. -. He leído un poco sobre las primeras hadas y su destino al nacer… Regalos de paz, ¿no? Las hadas de fuego y agua fueron entregadas al sur… Tal vez lo sucedido tenga que ver con… -quedándose callado durante unos segundos, negaría con la cabeza. -. Olvidenlo, solo es una teoría, pero en todo caso informaré a Glaius luego para que se encargue de investigar -dicho eso, se colocaría de pie. -. No les mentiré: no tengo motivos para desconfiar en ustedes, pero tampoco para confiar ciegamente. Espero entiendan que me guarde información que vea apropiada: sin tener seguridad de si son o no aliadas, es peligroso ir contándoles todos mis pensamientos, aunque no penséis que simplemente estaré detrás de ustedes vigilando cada paso… Si veo que tomáis un camino que demuestre su inocencia, colaboraré en lo posible por ayudarles...

Notas de juego

 Ya pueden cambiar sus imágenes, por cierto.

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11/11/2020, 01:34
Alanís Cromwell

Alanís escuchó y esbozó una muy leve sonrisa, para asentir.

-Princesa, solo...por favor, no trate de llevar todo por su cuenta. Sus caballeros estamos para que pueda apoyarse en nosotros todo lo que sea necesario, recuerde eso.

Luego de esto, guardó silencio, y cuando recibieron la noticia de que la reina estaba de pie, se sintió un poco aliviada de forma evidente de que fuera del rey, finalmente la familia real se confirmara como lo bien que podía estar, físicamente al menos.

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11/11/2020, 02:18
Alanís Cromwell
Sólo para el director

¿Como se atrevía a sospechar de la princesa?, se dijo esto inmediatamente. Pero a pesar de esto no conseguía sacudirse el mal gusto.

Muy pronto...

Y muy injusto para Arthas le planteen algo así cuando no recuerda quien es.

Pero a la vez puedo empatizar en que expresa...lo mismo que hacemos nosotros, como caballeros. También nos gustaría poder cargar lo más posible con la esperanza de que nuestros señores puedan estar más confortables. Pero...en su caso hay cosas que solo ellos pueden hacer, como quienes eligen el futuro de este reino.

Esperaré y confiaré...tanto en los sentimientos de la princesa, como en que Baeric sea capaz de cuidar de ella de la forma más eficiente posible. Y yo...mantendré a Arthas seguro mientras esta tormenta pasa, y después también.

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12/11/2020, 01:04
Cytla Calatia

Escuché lo que dijo Jonathan sobre que realmente no sabía nada de lo que pasó en el castillo porque su "aliado" no le es cien por cien leal... -No te cuenta eso pero si que te roba armas que destrozan castillos... claro- dije con clara ironía mirando a Santa con seriedad -Dije que iría... y se lo dije a Lilith... hubiera querido hacerlo o no, le di mi palabra a ella de que iría, por lo que hubiera ido si no hubiera pasado algo- le dije con seriedad absoluta... dejando ahí claro dos cosas: iría porque se lo dije a Lilith, y dejando caer algo como "yo cumplo mi palabra, no como otros".

Mi bofetada tuvo un buen par de efectos positivos: me desestresó a mi y me gustó arrearle, y parece que centró a Jonathan en la situación para que dejara de parecer un adolescente timorato. Pero realmente... le entiendo; porque ahora mismo ambos somos una hecatombe de sentimientos impredecibles y encontrados, aunque a mi desde luego me es más fácil disimularlo.

Lo primero que me dijo... fue explicarme su plan de como contrató a una ladrona para volver a tener la espada de vuelta, y de como también le pidió que me secuestrara para poder explicarme todo... Todo aquel plan estúpido se lo escuché con cara fría y seria -Lo se, conocía tu estúpido plan... y ya que no lo has escondido...- le dije simplemente... y entonces, le lancé a Jonathan para que lo cogiera... una bolsa con 30 monedas de oro -Considéralo el reembolso... porque no pienso robarme a mi misma- le dije a Jonathan para que él mismo atara los cabos. Pero ojo... no lo hacía por simpatía, de hecho ni tenía pensado decírselo, pero ya que ha sido tan tonto de explicármelo y no ocultarlo le doy la cortesía de devolverle el dinero. Punto -Y no, no pienso "devolverte" a Rompetormentas. Me da igual que quieras recuperarla ahora... no habérmela dado, no pienso dejar un arma tan peligrosa en tus manos; y ese "aliado" tuyo se ha pasado tres pueblos y se le caerá el pelo cuando le quite de en medio- le dije de forma firme y seria a Jonathan. No pensaba devolverle la espada que robó y luego me dio a mi.

Después de aquello... me enseñó aquella piedra que traía, la cual no tardé en coger para examinarla por mi misma. Aunque ahora mismo no hablaba, si que le estaba escuchando, el tema de las runas de fortaleza prototipo, el incidente en el que se vio involucrada la princesa y el jujin, la hada criminal que parecía orquestar todo... Sin duda Jonathan estaba bien informado sobre todo, cosa que no me sorprendía lo más mínimo conociéndole y sabiendo a que se dedica.

Al final por fin se parecía más al Jonathan "jefe" al que podía odiar con más facilidad... lo cual me tranquilizó -Bien... porque no te serviría- le dije de forma seria. Con solo lo que parecía un ofrecimiento a ayudar no iba a arreglar nada conmigo... la herida que me abrió es mucho más profunda que eso. Ante su pregunta final, me quedé mirándole con seriedad en silencio -¿Y que pretendes ganar con ello Jonathan?- le pregunté con seriedad -¿Nos puede interesar la ayuda de los bajos fondos? Si, y mucho porque se como trabajáis y los buenos resultados que podría dar cooperar habiendo siendo parte de ello... ¿Pero confío en que tus objetivos se limitan a mejorar nuestra relación? No, para nada- le dije mirándole con frialdad y hablando de forma cruda y directa -No confío en ti Jonathan ni en tus intenciones... gracias a ti no confío plenamente en casi nadie por el daño que me hiciste, el corazón que me rompiste en mil pedazos y la inocencia que me arrebataste. Si de verdad queréis ayudar al reino, quiero que Lilith en persona me lo confirme pues de ella si me creo su palabra... y con eso confiaré en que los bajos fondos y los caballeros cooperaran, no en ti. Y si de verdad quieres empezar el largo camino al perdón...- entonces, después de haber dicho aquellas duras palabras, di un paso hacia adelante, acercándome aún más a Jonathan, quedando prácticamente casi pegados con las caras peligrosamente cercanas la una de la otra -Empieza haciéndolo... pídeme perdón a la cara, mirándome a los ojos y jurándolo. Y luego dime algo que de verdad me demuestre que vas en serio, algo que nadie sepa de ti que ni yo misma supiera en su momento, y que luego lo pueda confirmar como cierto por mis propios medios... Porque antes pude llegar incluso a amarte de corazón sin saber nada de ti; pero ahora no puedo ni empezar a confiar en ti otra vez sin pruebas de ello- le dije de forma clara. Una parte de mi, vengativa y mezquina, quería pensar que realmente no quería pedirle perdón, que simplemente quería que me dijera algo que luego poder usar para coger sus ilusiones y pisotearlas, traicionarle de forma ruin y sádica, que viviera en sus carnes el mismo dolor y la misma decepción que experimenté yo... pero... otra parte de mi, la que no quería reconocer y odiaba seguir teniendo en mi interior y en mi corazón roto, quería verle arrepentirse, verle tomar el camino de la redención, e... intentar de nuevo lo nuestro... y que funcionara... Porque Jonathan siempre ha sido mi primer amor, no hay odio suficiente para borrar esa huella en mi alma, aunque ahora mismo esa huella me arda y me duela de tenerle tan cerca mía pero que el odio me haga quererle lo más lejos posible de mi.

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12/11/2020, 16:52
Baeric Griffith

La princesa estaba de acuerdo con lo que dijo Baeric, incluso el príncipe parecía dispuesto a no llevarle la contraria a su hermana, un movimiento bastante sabio y de buena intención, apoyaría a la princesa con la coronación.

Por su parte el caballero halcón asintió con la cabeza, al menos hasta que avisaron que la reina había despertado y esperaba en el jardín. Con cortesía y obediencia Baeric siguió a la princesa hacía la ubicación, encontrándose así con una conmovedora escena, un reencuentro entre la familia…aunque también algo bastante tenso a decir verdad.

Ante el gesto de Eldruin, Baeric no tardó en intervenir.-Tiene razón alteza…es mejor ser precavidos, más con los acontecimientos recientes.-Admitió con honestidad y era cierto, ¿quien sabía cual sería el siguiente peligro?

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12/11/2020, 20:53
Fío Edrielle

Las palabras de Muramasa eran tranquilizadoras y alarmantes a partes iguales, se quedó firme, escuchando y estaba por volver a hablar cuando Faith le pidió que no se alterase, lo que hizo que se pusiera en alerta completamente. ¿Qué tan grave podría ser lo que dijera como para esas palabras? Escuchó atentamente las palabras de su hermana y su primera reacción fue... no tener ninguna, se había acostumbrado a contenerse pero una voz en su cabeza pronto le dejó claro que ya era libre de tal prisión mental. Sin tardar mucho más que un poco tras la explicación, las lágrimas brotaron de Fío y se abrazó a su hermana con calidez y tristeza. -No. No se puede... devolver a la vida un... ser vivo sin que sea... un... muerto viviente... ¿No?. Realmente el no era versado en esa clase de magias, pero había visto a Glaius practicar la nigromancia con seres inertes, transformándolos así en meras marionetas, reflejo lejano de lo que alguna vez pudieron ser. -Nuestra hermana... No le hagas eso a nuestra hermana. Sabía que tenía que consolar a Faith, pero se sentía temeroso de las ideas de su gemela. -Solo... Si me lo pides... Te ayudaré... Ya que no se podía negar en absoluto a nada que ella le pidiera hacer. - Sea... lo que sea, todo saldrá bien. Miró a Muramasa quien ahora ofrecía licor de su calabaza y Fío la tomó con un gesto de agradecimiento, mojando sus labios tomando un muy pequeño trago, lo suficiente como para que Caos disfrutara de un sabor que quizá hacía eones que no probaba o quizá nunca lo había hecho y totalmente ínfimo como para que a Fío no le hiciera efecto. Besó en la mejilla a su hermana y le tomó de la mano, devolviéndole antes la calabaza a Muramasa para entonces escucharle. -Entiendo lo que dices. Yo tampoco confiaba en que no hubiera sido yo hasta que contacté con caos. Llevó una mano sobre su pecho y se sonrojó. -Quizá contacté demasiado. Acabó tomando las manos de su hermana para mirarla fijamente a los ojos. - Faith... Si lo que dices es lo que deseas, está bien... Acepta mi consejo, vayamos a ver a madre primero. Ella sabrá como llevar a cabo todo sin peligro, es su hija también, el dolor es compartido. 

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14/11/2020, 11:34
Faith Edrielle

Acogí a Fio entre mis brazos apretandolo suavemente y cargando mis lagrimas sobre su cuerpo igual que el podría hacer sobre el mio. Atentamente escuché la reacción de mi hermanito en primer lugar, siendo que sonreí en el proceso - Bobo. ¿Te crees que si la única forma de traer a nuestra hermana fuera con nigromancia volviéndola como un muerto viviente lo haría? - Negué con la cabeza sonriendo poco a poco. - Pero si que necesitaré de tu ayuda, pues sin ti dudo que pueda hacerlo sola. - Le aseguré pues depositando mi completa confianza en mi hermanito.

-Como tu Fio, yo también contacté muy a fondo con Ordinem... y al fin entendí mi poder, tanto su alcance, como su uso. Por eso se que puedo dar vida a aquellos que la están perdiendo y puedo incluso crearla. Lily no está muerta aún, está muriendo lentamente gracias a que Fair la encerró en un cristal mágico de la mina, así que aún podemos influir en ella antes de ocurra nada malo. - incluso busqué eliminar todas sus dudas de que lo que tenía en mente pudiera ser malo, tan solo para que viera que mi plan era factible.

No obstante asentí ante el consejo de Fio de manera solemne - Por eso quiero hablar con ella. Debe saberlo y será la mejor que pueda ayudarnos - nuestra madre sin duda pues lleva consigo el poder más grande de todas las hadas.

Frente a lo que hablaba Muramasa tan solo podía escucharle y mirarle con confusión cuando dejó algo a medias a causa de la duda razonable. Negué con mi cabeza y sonreí despejando las lagrimas de mi rostro - No te preocupes Muramasa, entiendo que prefieras estar en ese punto, y aunque tu información nos serviría de mucho para saber más sobre el resto de hadas dispersas por los reinos, juro en nombre de la familia Edrielle que te daremos motivos para que tu confianza en nosotros crezca y no te daremos motivo alguno para que creas que la traicionaremos. No volveremos a las guerras de antaño, tan solo forjaremos una nueva paz. - mi determinación pues me llevaba a querer conseguirlo.

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21/11/2020, 16:44
Director

 Tal vez aquellas serían las mejores palabras que Alanís podría dirigir a la princesa en aquel momento, siendo que la chica se limitaría a asentir antes de continuar con lo que les quedaba de almuerzo; Artanis no parecía querer seguir discutiendo el asunto, pero ciertamente parecía que tendría en cuenta las palabras de la protectora de su hermano…

 De igual forma, la opinión de Baeric parecía ser una que muchos de los presentes en el jardín compartían, a pesar de que claramente era preocupante y triste tener haber llegado al punto de tener que mantener esa mentalidad…

 Con la familia real sentada alrededor de la mesa, tomando el té que les habían servido los sirvientes hace poco, serían testigos de un incómodo silencio que reinaba en el jardín, solo interrumpido por el ruido de las ramas agitándose suavemente por el viento…

 -...Madre, yo… -intentó dar inicio a una conversación la princesa, pero tan pronto como abrió la boca se vio interrumpida por la propia elfa.

 -Hijos, necesito contarles algo… -confesó la reina antes de soltar un pesado suspiro, mirando con cierta tristeza a ambos. -. Han pasado muchas cosas recientemente, y seguramente continuarán sucediendo, por lo que quiero contarles mi sincera opinión… Verán, hace muchos años me case con el rey principalmente por motivos políticos; se podría decir que prácticamente fui obligada, pero no quiero que piensen que me he sentido así toda mi vida, pues con el paso del tiempo conocí realmente a mi esposo y aprendí a amarlo, por lo que no me arrepiento de nada -declaró dando unos segundos para que todos fuesen procesando sus palabras, siendo que al continuar agacharía un poco la mirada. -. El caso es que, según pasaban los años conocí como era Artorias, y también vi como el tiempo y las responsabilidades me lo arrebatan al punto de hacerle morir en una cama por artes oscuras… Estoy segura de que él tampoco se arrepiente de nada ahora que al fin descansa, pero no puedo quitarme la idea de que pudo haber tenido una vida mejor si… su destino no hubiese sido escogido por su herencia -alzando entonces otra vez sus ojos hacia sus hijos, añadiría. -. Actualmente no me encuentro bien sentimentalmente para gobernar, pero tampoco quiero dejarles el peso de todo lo que está sucediendo a uno de ustedes dos… A lo que quiero llegar es que… Tal vez sea momento de que otra familia tome el trono.

 En ese momento la mirada del príncipe solo podría expresar sorpresa, a diferencia de su hermana quién mostraría clara molestia antes de responder a las palabras de su madre.

 -El reino está bajo una amenaza… ¿y tú quieres que huyamos…? -preguntó con clara indignación.

 -No es eso, hija, es solo que… no veo justo que tengan que pasar por esto… -se excusó la reina, cuyos ojos delataban que aquello tampoco era de su agrado.

 -¿Y entonces qué? ¿Es justo para el reino que sus líderes desaparezcan y algún noble egocéntrico tome el mandato? ¡Ahora más que nunca se necesita a los Aztora en el trono! -declaró la princesa mientras golpeaba ambas palmas de las manos contra la mesa, colocándose de pie para encarar a la reina.

 -¡Tal vez los Aztora seamos el problema! ¿Has pensado acaso en los motivos por los que alguien se tomaría la molestia de amenazar con una guerra luego de años de paz…?

 -¿Insinuas que nosotros provocamos esto…? ¿Y que es justo amenazar a todo el reino por eso...?

 -Yo… -entonces, la reina se quedó sin palabras, incapaz de dirigirle la mirada a sus hijos.

 -Agradezco que nos digas esto, madre: ahora se realmente que no serias capaz de tomar el trono sola…

 Y tras decir aquellas palabras, la princesa se dispondría a retirarse a paso rápido y malhumorado.

 -¡H-Hermana! -buscando arreglar aquella situación donde no fue capaz de intervenir, el príncipe se levantaría e iría detrás de Artanis, siendo que ustedes tendrían que ir detrás de ambos como guardianes que eran, siendo que dejarían a la reina con Eldruin como única compañía…

 -... -aquel lobo que al igual que ustedes había guardado silencio durante la conversación de las chicas finalmente se acercaría a la reina. -. Hizo lo que consideró mejor para sus hijos…

 -Yo ya cumplí con mi labor como reina, no me siento capaz de continuar gobernando, pero dejarle toda la responsabilidad a mis hijos... -dejó sus palabras sin respuesta, bebiendo entonces otro sorbo de su té visiblemente deprimida. -. Déjame a solas, Eldruin, necesito un largo tiempo para reflexionar…

 Mientras tanto, la princesa parecía recorrer el castillo sin ir a ningún sitio en particular, teniendo a su hermano, y por lo tanto a ustedes, siguiéndole por todas partes hasta que finalmente se detuvo en medio de uno de los pasillos al ser prácticamente atrapada por Arthas.

 -¡A-Artanis, debes calmarte! -intentó controlarla el chico.

 -Arthas… -le encaró la princesa, sin poder disimular la molestia que sentía en aquellos momentos pero aún así intentando ver a su hermano con cierta calma y comprensión debido a su estado. -. Ya no podemos depender de nuestros padres: el rey no está, y a la reina no podemos castigarla con el peso de reinar en la situación actual… Ni siquiera nosotros estamos aceptablemente bien para tomar el trono, por lo que debes centrarte en recuperar tus recuerdos. Yo… Intentaré despejar mi mente. Alguno de los dos debe estar preparado para tomar el trono… -concluyó antes de mirar de reojo a Alanís, volviendo su atención en Arthas. -. Yo iré a encargarme de que los preparativos para el anuncio del fallecimiento del rey sean correctos. Tú ve con tu novia a un lugar al que solías ir; seguramente ella debe saber alguno.

 -Por supuesto, hermana -respondió entonces el príncipe con una sonrisa. -. Todos se están esforzando por superar lo que está sucediendo, yo no puedo quedarme cruzados. Haré lo posible por intent-espera, ¿novia? -fue tras unos segundos que reaccionó, girando a ver a Alanís durante unos instantes antes de volver a ver a su hermana con cierto rubor en el rostro. -. ¡E-Ella no es mi novia! -aclaró rápidamente.

 -Claro… -respondió la princesa con esa expresión de “no me lo creo”, dirigiendo entonces su atención hacia la caballera dragón. -. Alanís, debe haber algún lugar que mi hermano soliese visitar contigo para hacer algo; entrenar, entretenerse, no lo se. Lleválo e intenta que reviva sus recuerdos -entonces, voltearía el rostro hacia Baeric. -. Nosotros iremos a hablar con Marshall sobre los preparativos. Ya hemos alargado demasiado el anuncio del fallecimiento del rey, y será menos doloroso para el reino si es anunciado y confirmado por el castillo a que corran rumores por toda la ciudad.

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21/11/2020, 17:39
Director

 -Lo se. Cuando no llegaste… supuse de inmediato que algo muy grave debió suceder. Entiendo completamente que no hayas ido… -concluyó confirmando que sabía bien que eras alguien que cumplía su palabra, a diferencia de él…

 Por supuesto, la primera reacción de Jonathan al escuchar que sabías de su plan fue de puro arrepentimiento, pero su sorpresa no pudo ser disimulada al ver que le devuelves el dinero y le sueltas aquel comentario que es más que suficiente para que se de cuenta.

 -Oh, Dios… -sintiéndose como un completo imbécil, se daría una palmada en el rostro mientras la otra aún sujetaba la bolsa de monedas. -. Soy un imbécil… -afirmó antes de escuchar tus siguientes declaraciones, siendo que parecía esperarse que no le darías el arma de Zedron tan fácilmente, así como que su infiltrado en el castillo seguramente perdería la cabeza en cuanto supiesen quién es. -. Comprendo… Supongo que estará bien en tus manos…

 Entonces recibiría aquella respuesta que, por más que estuviese preparado para escucharla, le sería difícil disimular lo que le hacía sentir. El chico simplemente te miraría en completo silencio, intentando mantener la expresión de seriedad mientras sus manos temblaban ligeramente ante la impotencia de saber que tenías todos los motivos para usar aquellas palabras.

 -Yo… Quiero hacer lo correcto -concluyó con la mirada agachada. -. Estoy cansado de ser el malo, de ser “el jefe”. Nada de eso me sirve si he perdido lo único que realmente quise en mi vida -obviamente refiriéndose a ti, siendo que ante tus demandas él alzaría la vista para verte fijamente a los ojos. -. Lo lamento, Cytla. Juro que me lamento cada segundo por haber hecho lo que hice. Pero… No tengo nada para decirte -agachó nuevamente la cabeza. -. En ese entonces tú ya sabías todo sobre mi, y desde aquel día no he hecho nada que alguien más no sepa… -concluyó antes de mirar la tienda, apartándose de ti para caminar hacia una de las espadas que estaban a la venta. -. Pero… Haré lo que sea para demostrarte que me arrepiento…

 Jonathan tiraría entonces la bolsa con treinta monedas de oro hacia el mostrador, alzando las manos para tomar la espada y bajarla de su lugar y luego desenfundarla, viendo el filo de la misma: en tu tienda solo se vendían cosas de calidad, por lo que no era sorpresa que aquella hoja pudiese cortar limpiamente lo que se le pusiese en frente…

 -Haré lo que sea… -y sujetando la empuñadura del arma con la mano izquierda, extendería su brazo derecho hacia adelante y, apenas dándote tiempo a darte cuenta de lo que haría, lanzaría un veloz y certero tajo hacia su brazo dominante expuesto.

 -¡JONATHAN!

 Entonces, un grito sumado al ruido de la puerta abriéndose de golpe provocaría que el chico detuviese su amputación, dejando a la hoja rozando su brazo de forma que un pequeño hilo de sangre cayese de este. Aquella persona que había abierto la puerta de una patada no era otra que Lilith, tu mentora.

 -¡Será mejor que corras porque como te agarre te arranco la entrepi… -claramente estaba molesta por algo, pero no le tomaría mucho percatarse de que tu también estabas presente, y que Jonathan estaba con una espada en mano apunto de quitarse el brazo. -. ...Oh… 

 -Lilith… -suspira Jonathan apartando la hoja de su brazo. -. Lamento haberme escabullido para venir aquí, pero necesitaba hablar con Cytla…

 -Aún sigues con vida, así que supongo que no la has cagado mucho… -concluyó tu mentora entrando a la tienda para verlos más de cerca a ambos. -. 

 -En fin, creo que llegas en buen momento -añadió el chico antes de mirarte a ti. -. Cytla, soy capaz de hacer todo lo que me pidas si así me acerco más a tu perdon, pero si necesitas que sea Lilith quién te diga que estoy arrepentido y que mis intenciones de ayudar al castillo son puras… Aquí la tienes…

La mujer claramente estaba incómoda. Una cosa era tratar individualmente con cada uno sobre el asunto, y otra era estar con ambos presentes cara a cara tocando asuntos del castillo y su vida... Era innegable que incluso alguien que no supiese nada de ustedes dos podría sentir el ambiente pesado, sobre todo ahora que Jonathan había mostrado estar dispuesto a perder el brazo por su pasado...