Yûki cogió con delicadeza el rostro de él entre sus menudas manos - Mogami-sama no tiene que lamentarse. Ahora hay que descubrir quien osó hacerle esto y porque... Lamentará haber atacado tu Ryugujou...- sus ojos seguían mostrando dulzura a pesar de las palabras.
La joven se centró unos segundos en los labios de él. Parecia que se libraba una batalla dentro de ella, al final, con reticencia, lo soltó y puso distancia entre ambos
-Puede contar conmigo - hizo una profunda referencia para acompañar a su promesa.
Los labios de Tomohiro se posan sobre los de Yûki en un beso cálido, cargado de promesas y de sentimientos - Muchas gracias, Yûki-chan. Contaré con tu ayuda...
El corazón de Arisa golpea con fuerza dentro de su pecho, pero la noble no se deja llevar por el pánico. Los demás podrán considerar a la pobre criatura como un monstruo y ella incluso puede darles motivos para ello. Pero Arisa sabe que en el fondo lo único que desea la niña es todo el amor y el afecto que este mundo miserable le arrebató al ponerla en manos de un degenerado...