Partida Rol por web

     Como una exhalación, Numaios cruzó la zona cubierta de humo y cargó con fuerza contra los enemigos que se ocultaban en la sala de su derecha. Luchar contra enemigos que dominan el combate a distancia y ponerse al descubierto no era buena idea. Lo mejor sería ir eliminando la amenaza sala por sala como en cualquier abordaje estándar. Era la clase maniobra que los marines utilizaban para limpiar los complejos cerrados. De ésta forma podría trabajar, recibiendo una cantidad de fuego limitada. Con un rugido, descargó contra el xeno un golpe capaz de partir en dos a enemigos muy superiores.

Numaios que se lanzó a la carga a ciegas se quedó parado en mitad del pasillo, el Marine, ansioso de entrar en combate se lanzó en un alocado sprin que no le llevó a nada, ya que tan pronto como recorrió la distancia, el serpiente de hierro se dio cuenta de que perdió fuelle y se quedó a la mitad.

Haydn lo imitó, atravesó la cortina de humo y se colocó al lado de él para apoyarle... ahora podían ver con claridad que estaban practicamente rodeados

Laocastus atravesó la extrañamente espesa nube de humo a la carrera, siguiendo a sus hermanos a la batalla, el cañón de fusión zumbando entre sus manos con excitación ante la inminente incineración de xenos.

Los taus se vieron sorprendidos por la carrera de Numaios, pero en seguida, una voz resonó por el sistema de comunicación de los xenos y que los marines pudieron escuchar con facilidad...

 - ¡Shas'ui! Shas korst'la ¡Gue'la kanyon oresh! - animados por aquella voz, los tau alzaron sus poderosas armas de fuego y acribillaron a Numaios casi a quemarropa

¡SHAS SHAS! - bramaron con fuerza después de que la sala se llenara de destellos azulones que acribillaron al serpiente de hierro. El marine se vio superado, y numerosas alarmas saltaron en la interfaz del casco alertando que sufría numerosas brechas por la armadura, al margen de que notaba como la sangre manaba de su interior.

Por otro lado, Haydn sufrió el mismo destino que Numaios, recibió numerosos impactos sobre el siendo herido de gravedad como numaios...

Tomando el ejemplo Numaios cargo contra el enemigo que se cubría detrás de la esquina inferior. Mientras corría desenfundo la espada psíquica y la pistola bolter. Disparo* hacia los TAU que estaban al fondo del corredor, mientras que con la otra mano preparaba un golpe contra el TAU que tenia frente a él.

Los TAU que estaban a la izquierda habían freído a tiros a su hermano y no saldrían indemnes.

Castor avanzó hasta atravesar la pantalla de humo y se posicionó junto a la pared para tener un mínimo de cobertura. Su atención se centró inmediatamente en un enemigo que estaba en su línea de disparo y con los reflejos fruto de años de entrenamiento levantó el bolter y disparó con certera puntería. Un enemigo del Dios-Emperador pronto abandonaría este mundo.

Jaden avanzó todo lo rapido que pudo y atravesó la cortina de humo.

     El Serpiente de Hierro recibió un volumen de fuego capaz terrorífico y gruñó con fúria. - ¡¡Arggg!! Apretó los dientes, pues poco podía hacer ahora salvo intentar eliminar la amenaza lo antes posible. Lanzó tres furiosas estocadas que destrozaron a la enclenque criatura que tenía delante, en una danza de sangre y vísceras lanzadas al aire.

Numaios, colérico por lo sucedido destrozó a uno de los taus a melee, pero gracias a la inercia que había tomado dio un corto salto hacía su izquierda y partió por la mitad a otro xeno... Ahora se encontraba frente a frente con más enemigos dentro de aquella sala, los cuales le miraban fijamente, frios en apariencia ya que el casco cubría sus grisaceos rostros, pero Numaios podía oler su miedo.

Por otra parte, Haydn Cargó contra dos Taus que uno de ellos cayó muerto por el peso del Cruziu Arcanum que soltaba chispas al sentir la sangre azulona del tau...

Laocastus se desplazó al centro del pasillo. Había elegido como su objetivo los Tau al fondo de la sala, y necesitaba el espacio para evitar golpear a sus hermanos de batalla. Enfiló el disparo con precisión sistemática. El aire se llenó del olor del ozono al salir el chorro recalentado directamente contra los Xenos.

Los taus abrieron fuego nuevamente contra Numaios, el cual había acabado con dos compañeros suyos... la salva llenó al marine de impactos, muchos atravesaron el pesado blindaje del serpiente de hierro pero ni por asomo lograron herirle en lo más mínimo...

Por otra parte, los taus del sur estrecharon filas para lanzar una salva contra Haydn y Asteron, se desplegaron rápidamente pero no se atrevieron a disparar por su compañero que andaba en combate cerrado...

Loacastus logró volatilizar a cuatro xenos de un solo dispar, como anteriormente, los alienigenas desaparecieron dejando volutas de humo y restos de polvo...

Castor avanzó por el pasillo aprovechando la cobertura que le proporcionaban sus compañeros y optó por hacer lo mismo con el capellán y el psíquico.

- ¡Granada de fragmentación a mis 10! - subvocalizó por el transmisor mientras pulsaba el botón dispensador de su cinturón.

Con premura lanzó su granada al grupo de tres taus que había un poco más adelante a su izquierda. El lanzamiento parabólico fue perfecto y cayó justo a los pies del grupo, impactando a todos.

Los tau aguantaron estoicamente la detonación de la granada... fueron heridos, pero sus armaduras les protegieron de la gran mayoría del daño que pudieran haber recibido...

El Tau que tenia a su lado no tenia muchas posibilidades de salir de ahí con vida, estaba junto a Haydn y Asteron dos buenos luchadores en combate. El bibliotecario ataco al Xeno con su espada iba bien dirigida hacia este y la carga psíquica que contenía era incluso mas peligrosa que el daño del arma

El golpe parte en dos al guerrero de la casta del fuego y de pero todo el poder psiquico del la espada es absorbido por las vísceras del TAU.

Ncesito que tires 1d100

El tau al que se enfrentaban el capellán y el bibliotecario cayó muerto por el poder del arma psíquica mientras chorros de energía azulona salpicaban la armadura del psíquico. Asteron, trató de consagrar su alma a la disformidad nuevamente pero esta vez un eco de la energía maligna de aquella dimensión atravesó el portal que todo psíquico usaba para invocar sus poderes... realmente no fue nada grave, pero toda la comida se fue pudriendo a ojos vista. Restos de alimentos de los operarios muertos se fue deshaciendo rápidamente e incluso los cadáveres de taus y humanos muertos por igual...

Jaden observó la situación a través del visor de su casco, los taus del fondo de la sala no parecian querer ponerse en el campo de vision de Laocastus lo que les daria algo de respiro, Numaios no parecia estar en un peligro inmediato, pero el Capellán Haydn y Asteron estaban totalmente rodeados. Desenganchó otra granada de fragmentación y la lanzó a un grupo de taus alejado. Desgraciadamente calculó mal la fuerza y la granada pasó de largo.