Talan y a Snorri —bien por el oído musical del primero o por la habilidad para reconocer patrones insólitos del otro— se percataron de que los salmos de algunas novicias armonizaba a la perfección, haciendo coincidir todas las notas a la perfección.
Montero, con un silbido luego de tragar lo que tenía nuevamente en la boca, llamó a Pirata para que lo acompañara. Lentamente se levantó el perro, pero rápidamente se colocó junto al mediano. Pudieron ver que llevaba unas especies de alforjas pequeñas, atadas en una especie de chaleco.
Caminó a paso ligero, tranquilo, aún ante el frío circundante. Parecía estar disfrutando de ese tiempo.
En el portal del templo, Franerick le dio una palmada en la cabeza a Pirata, y éste se colocó junto a la puerta, sentado en sus patas traseras, mientras su dueño entraba detrás de los demás.
Con la curiosidad característica de los medianos, se acercó al ritual mortuorio que acontecía en el interior, pero no quiso interrumpir, por lo que se quedó junto al enano y al elfo. Y habló, no se iba a quedar observando embobado la situación.
-Buenos días, Catarina, mi nombre es Franerick Cienleguas, y con estos amables viajeros nos dirigiremos a las antiguas ruinas al norte de aquí... ¿sabe algo de ellas? ¿O de alguien que sepa?- preguntó directamente, con su sonrisa "Cienleguas", y hasta con cierta inocencia.
—No sois los primeros en hacerme esa pregunta —respondió la matrona preocupada—. En los caminos corren rumores de un mago que se instaló hace siglos en las montañas de Lunambrienta. Allí levantó su torre y la llenó de tesoros de incalculable valor, pero ya ha pasado mucho tiempo desde que el mago no es más que una fantasía que le contamos a los niños que no quieren irse temprano a dormir. No obstante, siguen llegando aventureros de vez en cuando, llenos de curiosidad, codicia y sed de aventuras. ¿Y quieren saber lo que pasó con ellos?
Que ninguno regreso. Un mago que se instalo hace siglos, rituales casi olvidados que tienen mucho que ver con el tiempo y decenas de aventureros desaparecidos o muertos. La cosa tiene mala pinta y mi parte cuerda me insta a alejarme de allí y proseguir la búsqueda del malvado rufian que me robó la capa de mi padre.
Pero la curiosidad que me genera todo este misterio puede más que mi sentido común ¿Qué clase de conocimientos perdidos se ocultan en aquellsa ruinas?
Tukk guardó silencio mientras Catarina arrojaba algo de información al grupo. Mientras la mujer hablaba del mago, observó a Snorri, parecía preocupado, mal asunto. Cuando la clériga terminó de hablar el enano entrecerró lo ojos.
—Codicia ¿eh? Ese podría ser el apellido del ladrón de Bertoldo —dijo para sí—. Vale, pues no hay más que hablar, tendremos que buscarlo allí dentro. El asunto de la maldición y el rastro del rufián nos llevan por el mismo camino. Mejor —dijo a sus compañeros—. Gracias señora, no molestamos más.
Tukk se despidió abruptamente de la clériga y salió de la capilla. El frío matinal vigorizaba y a pesar de enrojecer su bulbosa nariz hacía que afrontara la ascensión a las ruinas con buen ánimo. Observó al mastín aparcado junto a la puerta y le sonrió casi paternalmente. Le gustaban los perros, su la lealtad a prueba de todo. Se preguntaba cómo habría acabado este magnífico animal ligado a Cienlenguas, que empezaba a ser un dolor de cabeza con patas. ¿Acaso no se callaba nunca? Solía pensar que Talan hablaba demasiado, pero el mediano ¡incluso le había pisado sus líneas! Mientras esperaba a los demás se masajeó la sien tratando de alejar el incipiente dolor de cabeza que le asaltaba a veces desde que se había despertado esta mañana.
Entraron todos en aquel templo y Talan quedo asombrado por los salmos recitados por aquellas novicias. Algo hacia que aquello le atrapará sin prestar demasiada atención a la mujer que se acercaba a ellos. Franerick se adelanto a preguntar a la nueva matrona sacando al bardo de su ensimismamiento.
La respuesta sorprendió a Talan, sabían que la magia abundaba en aquel lugar pero no esperaba escuchar sobre la torre llena de tesoros. Los cantares y leyendas de Luzaria pasaron rápidamente por su mente buscando aquella clara referencia. Por su talento y afición conocía todas las leyendas de sus tierras que en ocasiones utilizaba como base para crear sus propias historias o entonar en una taberna en busca de unas monedas. A su mente acudió el nombre de Almir Eldricht, un famoso mago de generaciones antiguas que había construido su torre en las montañas y había atesorado riquezas incalculables.
Una vez que identifico a Almir Eldricht como el mago que vivía en las montañas muchas otras estrofas acudieron a su memoria. Había sido un poderoso y avaricioso mago, las leyendas hablaban sobre grandes hazañas para héroes, nobles y reyes en todos los rincones del mundo conocido. Por supuesto sus servicios no eran baratos, lo que le hizo engrosar sus riquezas, pero sus servicios eran muy precisos. Talan permanecía con la vista perdida en el vacío mientras recopilaba toda la información que recordaba, cuando el gruñón enano abandono la estancia masajeándose la frente.
— Señora, no hablará de Almir Eldricht. Era un poderoso mago apreciado y codiciado por muchas personas poderosas de su tiempo. — Echando mano a su zurrón para sacar sus libros de canciones y buscar algunas de las mas representativas. — Mirar aquí, esta recogido. Sus hazañas eran poderosas y seguro que su guarida no esta desprotegida.
Primero perdón por la tardanza en escribir. Los primeros días de cada trimestre son un poco complicados de curro pero ya van llegando a su fin.
He mirado y creo que el mago no tenía nombre, lo he llamado Almir Eldricht si no es así le cambio el nombre.
Quiero activar mi movimiento de Conocimiento de bardo, espero que te parezca adecuado.. Todos los magos famosos que han echo algo memorable tienen un hueco durante generaciones en los cuentos y leyendas de Luzaria. He narrado para justificar el movimiento y como lo se. Pero si quieres que complete algo solo tienes que pedirlo, le va a doler de verdad a ese enano gruñón. JAJAJAJA Quiero saber en que era un especialista Almir Eldricht, para saber que magia nos podemos encontrar en su guarida.
-Vamos- le dijo al enano -¿No me vas a decir que no es atractivo hablar de tesoros y objetos de incalculable valor?- le dijo codeando un poco al que antes había amenazado.
Así era Franerick: de buen llevar rápidamente. Y estaba por dirigirse a la puerta junto al enano, que le quería hacer un par de preguntas, pero justo escuchó que el elfo seguía hablando con la mujer. Sin mediar palabra, dio media vuelta y se quedó escuchando.
-¿Lo conociste?- preguntó, cuando pudo ver que tenía un libro -Ah, lo leíste ahí, ¿es así?-
Bigotes correteaba entre la manga derecha, y la espalda, como si estuviera ejercitándose, sabiendo que dentro de poco habría acción...
La nueva matrona negó con la cabeza.
—Aquí en Pasombrío le llamamos "el viejo puntiagudo" o "Tom Temblores". A los niños les decimos que los frecuentes temblores de tierra son porque está enfadado. Ya saben, cuentos para que se porten bien. Supongo que usted habrá notado que nuestros edificios tienen la base y los cimientos bien reforzados —dijo, refiriéndose a Tukk—. Tengo entendido que los de su pueblo* tienen gran pericia en asuntos de geología y arquitectura.
»Me temo que no sabemos mucho del mago, solo sabemos que existen unas ruinas y poco más. Aunque la matrona Eufrozina, que en paz descanse, mencionó que corrían leyendas de criaturas que secuestraban ganado y parroquianos a partes iguales. Pero eso, en teoría, fue hace siglos. Puede que no sea más que una leyenda.
*Refiriéndome a los enanos, obviamente.
Hasta donde Talan ha podido leer, todos los textos que mencionan a Almir Eldricht lo describen como un "geómetra". Inmediatamente le viene a la mente Félix Schreiber, el mago que mencionó ayer Snorri. Sus fuentes conectan a ambos eruditos de una forma tan esotérica que no es capaz de saber si eran colegas de profesión o la misma persona identificándose con varios nombres.
Tiene la certeza de que era un hombre muy escrupuloso, obsesionado con la perfección geométrica hasta límites desquiciantes, y que muchos de sus experimentos eran repudiados por sus colegas de profesión. Exploración de dimensiones desconocidas, pruebas anatómicas aberrantes y un sinfín de horrores similares.
Ya que Talan os enseña el texto, lo dejo para que lo leáis todos ^^