Partida Rol por web

Habiendo dado aquella explicación a Levan Audex, pese a no poder darle nada más ante la incapacidad de portar objetos encima por el mero hecho de que hasta hacía apenas un par de minutos estaba siendo rehén de uno de esos miembros de la "Banda Berde", este muchacho se dispuso a marcharse.

-Bueno pues yo me voy ya... -Comentó mientras se largaba del lugar, haciendo un leve gesto con su sombrero a aquellos dos- Ya nos veremos por el pueblo, en la ámbula...

Finalemnte Saliendo túnel por lo que todos del grupo se habían metido escasos minutos antes, este muchacho vestido de verde andó por la misma cueva que tanto ellos como sus compañeros habían usado, y junto a él, sus dos Pokemones lo acompañaron, tanto aquel Pokemon volador bastante mullidito y como el otro similar a un Pikachu grisáceo.

Tan solo mirándole por encima de mi hombro mientras se marchaba, no intentaría más tratar de convencerlo o perseguirlo para que dejara esa cobardía y tomara un poco de acción como venganza por lo sufrido. En lugar de eso tan solo le seguí con la mirada, en parte decepcionado y en parte apenado por tener que lidiar con esto en menos ventaja de la que podría haber tenido. Espere hasta que tanto él como sus compañeros se hubieron marchado para desviar la mirada de su dirección, suspirando en el proceso- Bueno, supongo que estamos de vuelta los tres solos en esto -llevé la vista al frente volviendo a escuchar sus palabras en mi mente, y al momento entendí perfectamente cuál era la finalidad de esas bañeras y como las usaban.

Por un momento me planteé lo que antes me parecía una locura, mire en dirección al túnel que recorrimos antes- Airi, peque... Necesito que hagas una cosa. Quiero que vuelvas por ahí, y recuerdas el túnel por el que te querías meter. Pues crúzalo y espérame al otro lado, que Oki vaya contigo ¿vale? -era más seguro para ella seguir por ahí y evitar la trampa que se preparaba frente a nosotros, ya me encargaría yo de buscarme la vida para atravesarla y recoger a la pequeña para ir con el resto del grupo.

Me quedé embelesada mirando a aquel Altaria cuando llegó con el chico de verde. Era tan majestuoso... 

- Céntrate, Airi - me di un par de suaves cachetadas en las mejillas para volver al asunto que teníamos entre manos.

Si aquel chico había sido rescatado aquello quería decir que nuestros compañeros habían conseguido vencer a los enemigos. Talvez si podías alcanzarlos...

- Gracias por la información - dije despidiéndome del chico - dile a la sanadora que está en el pueblo que venga con agua curativa. Vamos a necesitar mucho.

Luego centré mi mirada en Levan, que parecía decepcionado. Y no era para menos, el chico se había ido sin dejarnos al menos uno de sus pokemon para ayudarnos.

- No te preocupes, Levan, Oki y yo estamos aquí para protegerte - traté de darle ánimos con una sonrisa. El chico había estado protegiéndome así que yo también quería hacer lo mismo por él. Pero Levan tenía otros planes - oeri, ¿cómo te podemos dejar sólo? Podrían atacarte.

Preocupada, miré a Oki y luego en dirección al agujero por el que me había colado poco antes.

Aunque Levan Audex tenía un plan en mente que consistía en meter a Airi Wada junto con su propio Pokemon, Oki, por el hueco aquel; la muchacha no parecía estar del todo convencida, pues pese a que comprendía lo que este quería hacer, no se había movido para hacerlo y, por el contrario, expresó sus preocupaciones a su compañero de Guild.

El pequeño Pokémon se rascaba la cabeza contra una de las paredes en su camino hacia el túnel que habían indicado cuando la mirada de la niña sobre él hizo que se girara hacia este soltando un suave grito en un tono bajo que aún así se escucho muy agudo debido a que así era su voz. Entonces dio un par de cortos pasitos más hacia donde iba sin desviar la mirada de la niña.

- No te preocupes por eso, precisamente por eso quiero que vosotros dos crucéis por ahí... -dije con toda la calma del mundo- Yo iré de frente y vosotros por detrás, estarán distraídos mirándome a mí. Entonces si intentan hacerme daño podréis llegar a ayudarme... O quizás pueda pasar si que haga falta pelear -explique parte de mi idea sin entrar en detalles para que Airi pudiera entenderla y saber que no la estaba dejando de lado, sino que contaba con ella en todo momento, todo ello con una sonrisa en el rostro- Oki, es muy buen chico así que se mantendrá cerca tuya todo el rato y hará lo que le pidas hasta que nos reunamos de nuevo. Él cuidara de ti, tu cuidaras de él y los dos cuidaréis de mí.

Gracias a las llamas de Cu, el Growlithe de Tuathanach Glasraich, una zona algo más oscura y alejada de la cueva se iluminó, en concreto parecía ser un puente de madera que colgaba unos 20 pies por encima de ellos un poco más adelante, siguiendo el camino del río. Allí también se encontraban Eula Lawrence, Ketten Xhup y Touma Makoto, todos con sus respectivos Pokemon.

Ahora podían ver como el pasadizo del riachuelo continúa hacia arriba tras otro grupo de escalones desnivelados que se encuentran delante. Un sonido de cascada sale de una caverna mayor en algún lugar frente a ellos. Además de eso, un desvencijado puente se extiende sobre el hueco del pasadizo, conectando dos túneles que se encuentran a unos 20 pies de altura sobre la corriente de agua

Aunque gracias a las llamas también pudieron ver que en aquella zona, encima del risco desde el otro lado del puente de donde estaban sus compañeros también se encontraba una figura que parecían estar distraída buscando "premio" dentro de su propia nariz; a esta criatura la pudieron reconocer como uno de las bandidos de la "Banda Berde", en concreto con el que se enfrentó en solitario la jefa.

Al otro lado del desvencijado puente de madera el tercer muchacho que les había asaltado también pintado de verde, algo más grande que los otros dos también se levantaba de la roca en la que estaba sentado montando guardia y se colocó en la mitad del puente; este muchacho era el que tenía en su posesión a un Ekans y un Slowpoke.

-Vosotros no deberíais estár aquí... marcharos ya... -Le dijo a aquellos "intrusos"- O el Jefe me echará la bronca...

Saliendo desde la parte interior de ese saliente, aparecieron los dos Pokemon de Goblo, al parecer estos iban a ser quienes se iban a enfrentar a aquellos en caso de que decidieran continuar. Estos dos Pokemon se pusieron en el centro de aquel desvencijado puente de madera. Por lo que había que tener cuidado de cambiar las tornas en esta ocasión. Pues contra Goblo ninguno se enfrentó.

        Ekans         -         Slowpoke

Aún seguía dudando, pero decidí confiar en lo que Levan me dijo. Con actitud determinada asentí y acaricié la cabeza de Oki.

- De acuerdo, nos colaremos en el agujero y vigilaremos esperando tu llegado - miré a Oki para que me siguiera y comencé a caminar hacia el hueco - ten mucho cuidado.

Entonces, oí unas voces conocidas a lo lejos y vi como combatían nuestros compañeros. Nuevamente dudé si no sería mejor ir a ayudar a nuestros amigos, pero finalmente obedecí las instrucciones de Levan.

- Os esperaré donde quedamos, estaré alerta por si pasa algo dentro - y sin decir nada más eché a correr.

Y con esto dicho, la pequeña Airi Wada salió corriendo nuevamente a la zona de la Madriguera para poder atravesar aquel pequeño hueco que habían visto hasta la otra zona, y con ella como Pokemon acompañante, también se llevó al Aaron de Levan Audex, el pequeño Oki.

Desde mi posición me despedí de Airi con una sonrisa y un gesto de mano tranquilo, pero en cuanto esta desapareció en la distancia toda esa expresión desapareció por completo pasando a una completamente inexpresiva. Ladeé la cabeza a la vez que arqueaba mi cuerpo hasta tener una visual de la situación general en aquel puente por delante mía... Tiré la antorcha al riachuelo extinguiéndola por completo y camine sujetando bien fuerte el garrote improvisado. Tenía pensado cruzar por debajo del puente, encargarme o evitar a los que estuvieran en las puertas de la trampa más arriba y reunirme con Airi de nuevo, si ella no estuviera presente le rebanaría el cuello al jefe en cuanto se despistara un poco... Pero debía controlarme frente a la niña.