En sus años de vida jamas penso que llegaria a ver a un oficial de policia dandole un arma a un civil... pero entendio que si va a estar ahi, lo mejor es que se pueda defender; aunque solo sea un arma chica.
-Y cual seria el plan en caso de encontrar alguna de esas cosas? Los vemos y los matamos o los vemos y corremos?
Ok. ¿Y las hermanas Kelly a donde quieren ir?
El agente reflexionó unos instantes ante la pregunta de Sánchez. No había una respuesta correcta para ello, ni siquiera una respuesta que pudiera obligar a alguien a hacer algo.
—No sabría decirle, Sánchez —Trató de sonreír, pero no lo consiguió y siguió con aspecto serio—. No puedo aconsejarle que luche contra esa cosa y tampoco me parece sensato que huya, poniéndose en peligro de ser perseguido. Sólo puedo decirle que haga lo que su instinto le diga que tiene que hacer. Si puede pelear, hágalo, si precisa huir para salvar su vida, no dude en hacerlo... aunque a mí me ayudaría más que pelease —y ahora sí logró sonreír ligeramente al fin.
La respuesta del oficial hizo que su sentido de la aventura se encendiera de una manera impresionante y decidio seguir la conversacion en un tono jovoso.
-y dejar que te quedes con toda la diversión para ti? No lo creo correcto, pero para pelear son necesario mas armas- miro a la veterinaria la cual ya tenia un arma en su poder- Hay alguna posibilidad de conseguir algun arma sin ponerte en algun tipo de apuro?- No sabia xq pero dñse pregunto donde estaba la señora kelly- Por cierto, donde esta mi otra empleadora?
La petición al policía fue resuelta de inmediato, recibiendo la veterinaria un arma del calibre 38, aunque la mujer no entendía de aquellas cosas, aunque sí el mecanismo de funcionamiento, en un pueblo como aquel el ganado se sacrificaba de un tiro en la cabeza, no como en las ciudades donde había que poner la inyección sedante a la criatura.
- Muchas gracias... - fueron sus primeras palabras aceptando el arma -... No te preocupes, seré responsable con ella y no voy a separarme de ti, así que podremos apoyarnos en caso de necesidad... - afirma de forma convencida, girando su rostro hacia Rick cuando hace la pregunta de qué hacer si encontraban a esos..."bichos" -...¿No es obvio?... Si van a comerte, mátalas... Sin dudar... - respondió sin pensárselo dos veces, y es que debían eliminar aquel problema antes de que no hubiera solución a la expansión alienígena, pues creía que no había solo una criatura, si no varias, y si eso era así, más valía que no se reprodujeran o iba a ser aquello de todo menos divertido.
El chico nuevo pedía también armas, y aunque Chelsey consideraba que la petición era más que lógica, no le conocía y no podía apostar a que hiciera un uso responsable de las mismas, así que no abogó por él, permaneció pendiente de Peter Dwight, las decisiones que él tomase eran las que ella seguiría.
—Voy a hablarlo con el Sheriff, Sánchez, por desgracia yo no tengo más armas —dijo alzando ligeramente los brazos—. Pero estoy convencido de que te proporcionarán una. Todos tendríamos que estar armados en una circunstancia como esta —esa última frase la susurró como confidencia al joven.
Miró a Chelsey de nuevo. Vale, tenía que confesar que estaba oficialmente enamorado de esa mujer y no pensaba permitir que le ocurriese nada si él podía hacer algo para evitarlo. ¿Por qué nunca había pensado en ella de esa manera hasta este momento, en el que cualquiera de los dos podía perder la vida?
—Confío en ti para cubrirme la espalda —le dijo a Chelsey mirándola directamente a sus bonitos ojos—. Y no soy de los que se fían de otros, precisamente.
He dado por supuesto que mi personaje tenía un arma adicional en la tobillera (como muchos policías de ciudad). Ahora necesitaría que el Sheriff me diera permiso para armar a Rick Sánchez o que él directamente lo hiciese. No es algo muy normal lo de dar armas a civiles, pero la situación tampoco lo es...
-Lo dejo a tu criterio -respondió el Sheriff a la consulta de Peter sobre las armas- pero a todos los que armes, llévalos contigo al operativo de la cigarrerría, así podrás mantenerlos vigilados.
—Por supuesto, Sheriff —respondió Peter al instante.
Abrió el mueble bajo llave que hacía las veces de armería y sacó de él otro revolver parecido al que le acababa de dar a Chelsey. También le dio una caja con veinticuatro balas además de las que tenía el arma en el tambor.
—Confío en que lo sepas manejar, Rick —le dijo con total confianza al joven—. Cuento completamente contigo para lo que vamos a hacer ahora.
Reunió en torno a una mesa a Chelsey y a Rick. Algún otro podría colarse en la pequeña reunión habida cuenta del poco espacio que había en una comisaría de pueblo como aquella. No había intimidad y no era precisa dadas las circunstancias.
—Bien, nos vamos a acercar a la cigarrería para ver qué con qué nos encontramos allí —anunció—. Los que lleven arma, dejarán que su índice descanse a lo largo del arma, no lo llevarán dentro del gatillo... eso tiende a causar desgracias. No sé si alguien tendrá alguna pregunta y si se nos quiere unir alguien más como apoyo... ¿voluntarios? ¡Owen!, ¿viene usted?
La idea no es excluir a nadie, sencillamente Dwight considera más aptos a aquellos que están armados, pero cualquiera puede venir a apoyar de la forma que quiera.
-Manos juntas, hombros rigidos, dedo indice fuera del gatillo y solo usarlo si se va a disparar... sencillo como pocas cosas. -la pistola que dwight le habia dado era bastante ligera, pero sabia que podia dar un buen daño si se la usaba bien. No contaba con la experiencia de los polis presentes, pero tenia los conocimientos suficientes como para no ser una carga.-Cuando se supome que marchamos a la cigarreria? Calculo que no es muy lejos de aqui. Contamos con algun plano del lugar a donde vamos? Por que no es buen plan que vayamos todos a ciegas- Se referia a todos cuando en realidad hablaba por el mismo. Era sabido que no conocia nada en el pueblo.- Por cierto Peter... si vas a pedir voluntarios, tendrias que usar alguna estrategia para llamar su atencion...- guiño el ojo y señalo el armario donde tenia las armas.- Todos quieren ser vaqueros alguna vez en su vida no?- dijo esto ultimo en tono ironico
El sheriff actuaba en su línea, no tomaba decisiones, la elección de su día a día más compleja siempre era si los donuts debían ser de chocolate o de crema, dejando finalmente las labores en manos de Peter. El policía se hizo cargo, dándole un arma a Rick, balas y reuniéndose con quienes lo desearan para contar el plan que llevarían a cabo
- Vale, no poner el dedo en el gatillo.... - dijo acariciando con la yema de su dedo la empuñadura, como si estuviera memorizando una lección, mientras el forastero Rick, decía algunas cosas más que determinaban una realidad, no era novato en el uso de pistolas -...¿Por qué sabe usted disparar armas, señor Sanchez?.... - preguntó más curiosa que por cualquier otra cosa -...La cigarrería no está lejos a decir verdad, y no sería mala cosa ir yendo y que se una quien lo desee... Aunque cuantos más seamos, mejor estaremos.... - No quiso decir una realidad, y más cebos vivos serían para el bicho alienígena.
La mujer miró a Dwight tras el último comentario del forastero -... Solo armas a quienes sepan usarlas, de lo contrario no harán falta extraterrestres para que nos matemos entre nosotros... - y esta era una manera de cumplir su parte, cubrirle las espaldas.
Yo quiero un arma.- Espetó tras haber estado tanto tiempo en silencio, no queriendo que la dejen de lado.- Está claro que iré con vosotros y si me dejáis desarmada acabaré siendo un problema.- Miró a las tres personas que estaban teniendo el liderazgo en la conversación sin saber si alguna de ellas cedería.- Venga, aunque sea un cuchillo, pero me siento más segura teniendo algo que simplemente mirando.
- Si todo el mundo recibe un arma, entonces yo también quiero una. - intervino Claire, que no tenía demasiado claro por qué ahora todo el mundo quería ir a la escena del crimen, pero desde luego no se iba a quedar sola, y mucho menos desarmada.
La pregunta no lo tomo del todo por sorpresa, pero no esperaba que viniera de la doc.- Internet tiene la respuesta a todo... bueno, casi todo. Aun no creo que sepa mucho de lo que pasa aqui- Miro a las dos chicas que parecian estar rogando por tener algo de accion sin medir a lo que se enfrentaban.- Estan seguras de llevar un arma? tal vez podrian ayudar trayendo cosas que podrian ser utiles, como linternas, algun tipo de defensa para no estar tan expuestos...- Busco la aprobacion de peter en esto, aunque el podria no pensar lo mismo.
no estoy tratando de ponerlas como fuerza nula... pero si sus personajes me disparan... las mato!
—De acuerdo —cedió Peter—. Van a llevar un arma todos ustedes. Al primero que vea haciendo una tontería de cualquier tipo con ella se la quitaré y probablemente le dispare en el culo.
Miró a Chelsey entendiendo perfectamente lo que había querido dar a entender y, resignado, se acercó de nuevo al armario de las armas. Cogió armas de defensa, revólveres. Si las armas de fuego valían, esas eran tan buenas como cualquier otra y, si no eran de utilidad contra la criatura, daría lo mismo llevar un tanque.
Las repartió diciendo pequeñas frases a cada uno para darles confianza.
—Isobel, te pido por favor que uses el arma sólo cuando yo te lo diga... o en caso de que veas que la necesitas y nadie puede cubrirte —le sonrió—. Lo último que querría era que te hicieses daño, ¿de acuerdo? Ah, y ¿amigos?
Después se acercó a Claire.
—De acuerdo, tú también quieres un arma. No hace falta que te diga la responsabilidad que esto supone, así que voy a suponer que actuarás como yo sé que lo vas a hacer —no obstante, no pudo evitar decir una última cosa—. Pero ten cuidado, ¿de acuerdo?
Se paró a mirar el grupo durante unos segundos.
—De acuerdo, ¿algo que decir antes de salir hacia la cigarrería?
No sé si la señora Kelly está activa todavía o no... ¿alguien lo sabe?
Quitando las típicas pistolas de feria o de los centros recreativos, aquellos que funcionaban con un juego de matar monstruos, nunca había tenido contacto con las armas de verdad, esas que pueden matarte. Sintió el peso del revólver en su mano, el frío del metal y lo bien que se adecuaba a ella al ser pequeña. Tuvo la inercia de poner un dedo en el gatillo mientras apuntaba al suelo, un movimiento tan fácil que a la vez podía resultar tan peligroso… Realmente tentador.
Cuando les diga a mis amigos que he tenido una de estas no me van a creer.- Aunque estaba alumbrada por el arma siguió escuchando al policía, alzando la mirada tras terminar los avisos.- Nada de tonterías, lo capto.- Se colocó al lado de Rick ya que decidió estar en su grupo desde que le dio esa pequeña confianza en el veterinario.- Intentaré cubrirte.
Ni idea, la verdad.
Mientras los demás discutían sobre el plan, la señora Kelly comenzó a quejarse de que le dolía la espalda y, finalmente, decidió volver a su hotel. Que los jóvenes se ocuparan del asunto.
Le hable por el off-topic y no me constestó, así que mejor la dejamos afuera. Queda el personaje disponible por si surge la posibilidad de usarlo como pnj.
-Claro que iré. Quiero detener a esas cosas.
-Yo también voy. Alguien tiene que recolectar evidencias.
-¡Ay, mi amor, ten cuidado con eso! -exclamó la abuela de Isobel al ver cómo le entregaban un arma a ella y a los demás.
Y así, todos se dirigieron al lugar de trabajo del viejo John Smith, que había resultado ser también su tumba.
Cierro esta escena y abro una nueva