Descripción: Traducido como Distrito Financiero, es literalmente eso. En los rascacielos de esta zona se encuentran oficinas y sedes financieras, como la Bolsa de Nueva York, dentro de Wall Street. En esta zona también se puede encontrar el Monumento a las víctimas del 11-S y varias iglesias antiguas entre los rascacielos, en una zona conocida como Seaport. La mayoría de los apartamentos aquí son de lujo y disponen de terrazas en las últimas plantas para disfrutar de las vistas de la ciudad. Más al sur es donde se llega al Battery Park, desde el que sale el ferry hacia donde se encuentra la Estatua de la Libertad, además del ferry hacia Staten Island. 

Botín y premios: Munición (1d3 para conocer de que arma)/Esposas metalicas tiradas en algun lado (PERCEPCIÓN 2)

Personajes: NINGUNO

Eventos:

Asaltador de las profundidades (10): Un tipo sin armas y con una máscara de cabeza de bebé de juguete que se esconde bajo las rejillas de ventilación de la ciudad. Si alguien pasa por encima, le atrapará e intentará llevarle abajo y violarle. Es más inofensivo que otros, pero si ocurre durante una pelea o un tiroteo, puede ser muy puñetero. El asaltador puede moverse de una zona a otra si queremos hasta que alguien lo mate.

Cadáver con premio (8): Cadenas con candado. Caja de cerillas del bar de Jessie

Otras características: Ocultación baja, bancos muy protegidos...

Puntos de entrada:

• Norte (Tribeca / Chinatown): Wall Street / Seaport

Imágenes relevantes:

• Wall Street: 
• Monumento 11-S: 
• Battery Park: 
• Seaport: 

FINANCIAL DISTRICT

Traducido como Distrito Financiero, es literalmente eso. En los rascacielos de esta zona se encuentran oficinas y sedes financieras, como la Bolsa de Nueva York, dentro de Wall Street. En esta zona también se puede encontrar el Monumento a las víctimas del 11-S y varias iglesias antiguas entre los rascacielos, en una zona conocida como Seaport. La mayoría de los apartamentos aquí son de lujo y disponen de terrazas en las últimas plantas para disfrutar de las vistas de la ciudad. Más al sur es donde se llega al Battery Park, desde el que sale el ferry hacia donde se encuentra la Estatua de la Libertad, además del ferry hacia Staten Island. 

Entradas/Salidas:

• Norte: Tribeca / Chinatown

Tamaño de zona: Grande

El motor del coche volvió a ronronear cuando el señor K aceleró un poco más, dejando aquella moto olvidada y una posible vía para una trampa en el aire. Pronto os encontrabais dentro del distrinto financiero.

La noche mostraba otra cara de aquella zona pero las banderas ondeaban orgullosas igualmente. Un par de purgadores caminaban por la carretera, con botellas de alcohol barato en la mano sin bolsa alguna que las cubriera. Hacian bastante eses por los que era evidente su estado de embriaguez.

Un poco más adelante se encontraba vuestro destino, el Chase Bank. Las enormes ventanas estaban blindadas con recias persianas metalicas, menos una. Un Hammer estaba incrustado contra ella, dejando alrededor un reguero de esquirlas y cristales, y una via de entrada.

Ver el Hammer estampado contra la entrada le dio impresión, desde luego, aquello no parecía estudiado sino desesperado, pero bueno, era a lo que venía, podían seguir allí o no, pero el sitio parecía tranquilo, comprobó su arma y se ajustó la careta[1].
- ¿Listo? - Preguntó a K mientras bajaba la furgo que había aparcado a cubierto.
Sommerfield miró la entrada, no veía actividad.

- Echemos un vistazo a ver si podemos comprobar la situación antes de entrar. - Sugirió a K
Se acercaría con cuidado de no ser visto a comprobar las ventanas, buscando encontrar a sus objetivos y ver si tenían compañía o que demonios pasaba ahi dentro, sospechaba que seguían dentro si el coche seguía ahí.

K bajó del coche y amartilló su arma antes de seguirte. Se oía ruido dentro. Era vidente que hoy era la Purga y no había personas dentro resguardándolo. Aquel banco era de los normales. Sencillo y funcional. De los de suelo embaldosado y paredes de pladur con falsos techos por donde estaba instalada la iluminación, los sistemas de vigilancia y el aire acondicionado.  El hall estaba despejado y al fondo se veía a un tio enmascardo custodiando una puerta que se encontraba al lado de las cajas

Llevaba en sus manos un escopeta semiautomática y tenía el cuello retorcido hacia atrás, pues estaba hablando con alguien que parecía estar tras aquella entrada. K esperaba instrucciones desde la puerta, pues él no se había asomado, y tú todavía no te habías movido....

Sommmerfield tras retirarse a un sitio donde fuera imposible verle, tras ese vistazo inicial le dijo en susurrós a K
- Solo He visto uno al fondo, escopeta, habla con más dentro. - Le explicó. -  Voy a avanzar hasta el coche, para cegarlos con las luces, a ver si puedo birlarselo, dame fuego de cobertura mientras subo al coche y doy las largas para cegarles, luego en cuanto arranque el coche te retiras hasta la furgoneta y nos reunimos cerca, si siguen al Hammer puedo ir al control de esas chicas tan simpáticas que vimos antes, si les digo lo que están haciendo, igual se apuntan a robar al ladrón. - Expuso de ese modo su punto. - El punto de encuentro, si nos separamos, salga bien o mal es el butrón en la estación de Metro - 
- Sino nos siguen, pues deberán salir a pata y podremos atosigarlos en su marcha.- 
Sommerfield miró a K y le preguntó 
- ¿Conforme?
Hablaba muy bajo, solo para ellos dos y se forzaba por no empezar a hablar rápido, presa de lña excitación y la anticipación, sus ojos brillaban por la adrenalina subiendo, y por las ganas de acabar con aquellos hijos de puta.

- No creo que hayan dejado las llaves puestas. Yo al menos no lo haria - habló con voz solemne y pragmática - pero si sabes puentearlo... yo te consigo el tiempo - Esperó a que respondieras y si se seguía adelante con el plan él se apostaria en un lateral para poder cubrirte tal y como le habías pedido.

Sommerfield se metió en el coche como un gato, con el pulso a cien, resonando en sus sienes. Pensaba que el verían en cualquier momento, ese tio u otro que no hubiera visto, tenía la seguridad de K le cubría, joder, no estaba lo bastante bien pagado. Se coló en el coche sin que hubiera una reacción entre ellos y con auyda del cuchillo, desmontó el panel de debajo del volante para juguetear con los cables de arranque.
La tranquilidad duraría hasta que el motor hiciera el sonido de arrancar , momento en que daría las largas para que no pudieran apuntarle a él y con la mirada gacha metería marcha atrás para sacar el coche de donde estaba hacia la calle mientras disparaba por la ventanilla para obligarles a cubrirse y no darles ocasión a dispararles o acercarse con esa escopeta.
El neumático chirrió en las baldosas y ...

Quien lo diria, pero conseguiste deslizarte sigiloso al interior. Medio agazapado y usando el enorme cartel que promocionaba una hipoteca inigualable, alcanzaste el coche. Con el corazón latiendo en tu garganta abriste la portezuela y entraste. Te paraste a escuchar y parecia que nada cambiaba. Hiciste el puente y ahí es cuando notaste el cambio en los sonidos del ambiente.

Ya todo fue veloz. Caótico. Disparos. El tuyo y el de alguien más. Cristales rotos. El motor que rugia reverberando en el interior del embaldosado edificio. Alguien hablando a gritos. O era un grito de dolor. No te dio tiempo a distinguir, pues sacaste el coche, bajaste de la acera con un fuerte bamboleo y ya estabas sobre el asfalto.

Más disparos en el interior....

Sommerfield colocó el coche en la carretera y esperó dos segundos cubriendo la salida con la mirilla del arma antes de arrancar. Joder, no podía esperar más. Metió la marcha y arrancó.
- Joder k! - Dijo frustrado cuando el coche había cogido la suficiente velocidad como para obligarle a mirar adelante y dejar de apuntar con el arma.
Condujo con la cabeza algo gacha por si le llovían balas.
Si se había quedado dentro ahora no podía volver a por él, estaban avisados y le dispararían a placer debería volver a por él de otro modo, buscar una situación ventajosa.

El olor a goma quemada dejaba claro lo mucho que habias pisado el acelerador al salir pitando de allí. No sentiste ningún balazo en tu dirección por lo que llegaste hasta el metro sin percances. El agujero seguía allí y ahora te percatabas de una pintada de la banda de Marcelo en la pared.

Un autobus azul con las lunas tintadas pasó cerca tuya. El reloj de tu muñeca dejaba pasar el tiempo muy lento...

Sommerfield se había detenido cerca de la boca de metro en lugar ligeramente cobijado para que el coche no llamara la atención desde lejos.
K no estaba en el punto de encuentro y cada minuto pesaba (a saber que le había pasado) y si lo tenían que era lo que podía pasar, así que sin dilación se encaminó hacia el control de las chicas, esperaba que aquel control fuera algún tipo de medida de protección y no otra cosa, por que sino iba directo a la boca del lobo.
La pintada de la banda de marcelo le robo algunos pensamientos, no sabía casi nada de aquella banda, solo rumores descabellados. 
En el momento que había decidido su curso de acción y estaba metiendo la primera para arrancar  mientras ese autobus pasaba cerca...

Era evidente que fuera quien fuera el que estuviera al volante del autobus estaba pisando el acelerador para chocar de frente contra ti. Tenias el coche en marcha así que no te fue dificil maniobrar para esquivarlo y que se estrellara a unas cuantas decenas de metro de la boca de metro. El humo empezó a salir con fuerza del capó y algunos gritos amortiguados del interior del bus. Curiosamente, la puerta no se abría ni nadie salia del transporte.

A lo lejos viste llegar a K. Su mascara tenia algunas salpicaduras de sangre y estaba algo despeinado, pero poco más.

Sommerfield arrancó haciendo derrapar el coche y saliendo en dirección hacia donde llegaba K mientras disparaba contra el conductor del autobús y mantenía la distancia con el Bus que parecía coger marcha lentamente como para algo acorde al tamaño de ese enorme vehículo.
Y cuando pasaba al lado de K abría la puerta y gritaba "Salta dentro!!!!!"

Debido al humo y las lunas tintadas, no podias ver al conductor, pero tu disparo impactó en uno de los cristales, dejando salir los gritos histericos y de terror del interior. Y aún así nadie salía del interior

K, a pesar de que su juventud habia quedado atrás hacia un tiempo, pudo meterse en el coche, aunque su pie derecho fue arrastrado por el asfalto un corto trayecto, logrando que jadeara de dolor antes de lograrlo alzarlo.

- ¿Porque cojones no salen del autobus? - gruñó mientras se agarraba la rodilla, incapaz de tocarse el pie herido. Estaba claro que había visto como aquel enorme transporte azul chocaba.

Cuando empezaste a sentirte a salvo miraste por el espejo retrovisor y viste otro coche. Y lo viste a él, a Holland, al volante. Su mirada desquiciada y rabiosa mientras pisaba el acelerador

La imagen vibraba en el retrovisor, pero pudo distinguir a ese hijo puta, ni siquiera traía la máscara, tenía que estar cabreado. Sonrió como un cocodrilo y los ojos le brillaron.
- No lo sé, luego volvemos, pero ahora tenemos compañía. Agárrate, agacha la cabeza y liiiiiiisto para devolver el fuegooooooooooo. - Dijo Sommerfield con una cadencia juguetona.
- Dibújale otro agujero en ese culo que tiene por cara. - Sugirió a K ofreciéndole su arma de fuego mientras dejaba escapar los nervios, la presión y la adrenalina en una risa histriónica e histérica.
- O hazle hacer vueltas de campana reventándole una rueda... Lo del agujero en la cara lo podemos dejar para luego.- Exclamó en voz alta mientras el motor se revolucionaba.
Tenía que mantenerse delante mientras le daba la oportunidad a K para hacerle otro agujero en la cara a aquel bastardo.