Descripción: Conocida antiguamente por ser el lugar de los primeros inmigrantes italianos, Little Italy se ha convertido en un conjunto de calles llenas de restaurantes italianos. Son característicos sus edificios rojos, parecidos a los del Soho. La zona cada vez es más pequeña y cada vez está más mezclada, hasta el punto que parece una parte más de Chinatown. Los pocos italianos "reales" que quedan son los que llevan la mayoría de negocios de Little Italy. La parte norte se conoce como NoLita y es más tranquila que el resto de la zona.

Botín y premios: (tirada de dados)+ cualquier cosa que se les ocurra que pueda haber en una tienda pequeña de barrio si interactuan en el evento. Tanto si ayudan al de la tienda como si lo atracan. Dejaremos cosas como: linterna, cosas para curar heridas pequeñas, comida, mecheros...

Personajes: Sky. Nibb

Eventos: Tienda abierta (12): El tendero pierde el seguro que suele tener toda tienda en esa noche de destrucción y abre su empleado más joven, Nibb, custodiándola con una escopeta (PUNTERIA +1). Una joven, Sky, acompañada de una amiga, le amenaza desde la calle porque quiere su chocolatina. Lleva un subfusil (PUNTERIA +1)

Otras características: Ocultación media, ...

Puntos de entrada/salida: 

• Norte (East Village): NoLita
• Oeste (Soho): NoLita
• Este (Lower East Side): Calles
• Sur (Lower East Side / Chinatown): Calles

Imágenes relevantes:

• Calles: 
• NoLita: 

LITTLE ITALY

Conocida antiguamente por ser el lugar de los primeros inmigrantes italianos, Little Italy se ha convertido en un conjunto de calles llenas de restaurantes italianos. Son característicos sus edificios rojos, parecidos a los del Soho. La zona cada vez es más pequeña y cada vez está más mezclada, hasta el punto que parece una parte más de Chinatown. Los pocos italianos "reales" que quedan son los que llevan la mayoría de negocios de Little Italy. La parte norte se conoce como NoLita y es más tranquila que el resto de la zona.

Entradas/Salidas:

• Norte: East Village
• Oeste: Soho
• Este: Lower East Side
• Sur: Lower East Side / Chinatown

Tamaño de zona: Pequeña

La zona italiana te da la bienvenida con su habitual letrero iluminado, con los colores típicos de su bandera. Es una de las zonas más coloridas de la ciudad y donde casi podrías pasar desapercibida con tu traje. Justo cuando estás atravesando el arco, oyes el anuncio de la Purga, seguido de varios gritos y silbidos lejanos. Por un momento te parece que los edificios se vuelven más rojos de lo habitual, pero por suerte no hay nada sobre ellos aparte de las luces de Little Italy.

La mayoría de las puertas de esta zona están cubiertas con tablones, aunque las ventanas no parecen tan seguras como en el Soho. Además de eso, se ven pocas flores azules en los balcones y todavía no has llegado a encontrarte a nadie por la calle. Es por eso, que oyes claramente gente hablando a gritos, a unas pocas manzanas de donde estás. No entiendes bien qué dicen, pero parecen algunas chicas y hay una voz masculina que reconoces inmediatamente como la de Nibb.

El hecho de reconocer la voz de Nibb fue una alegría, para ella. Al fin alguien a quien reconocía en toda esa gente extraña, aunque esperaba que no tuviera la misma idea que ella, los espacios viables para el Marketing de la tienda eran limitados y el hecho de compartirlos con otros folletos no era algo que le agradara.

Con esto en mente, trató de acercarse hacia el sonido de la voz de Nibb.

- ¡Venga, solo será un momento! ¡¿Qué te cuesta darnos una puta chocolatina?! No nos obligues a ser malas contigo... - las dos chicas estallan a carcajadas. 

- ¡M-marchaos! ¡No quiero tener problemas esta noche! - responde él.

En cuanto te acercas a la zona, puedes escuchar más nítidamente los gritos. Parecen dos chicas, que están riéndose frente a un Nibb bastante nervioso. Cuando llegas a la calle, ves que la tienda de Nibb está sorprendentemente abierta. Hay un par de tablones en forma de cruz tapando la puerta, pero parece que es todo lo que han podido montar para protegerla. Nibb está frente a ella, armado con una escopeta, mientras que un par de chicas manchadas de sangre y con poca ropa están paseándose a su alrededor, de forma bastante torpe. Llevan subfusiles, pero los sujetan como si fueran de juguete. Ni ellas ni Nibb te han visto llegar todavía.

- ¡Niiiibb! ¡Quiero! ¡Mi! ¡Puta! ¡Chocolatina! - canturrea una. Te empieza a quedar claro que ambas están borrachas o lo aparentan muy bien.

- Mira, Sky, no quiero tener que herir a nadie... - empieza Nibb, pero una ráfaga del subfusil lo interrumpe, impactando las balas contra varias paredes por fortuna, mientras la tal Sky hace una mueca.

- Ñañañaña, no quiero tener que herir a nadie, buuu Sky me da miedo... ¡Que parece que tengo yo más huevos que tú! - la chica se ríe burlándose de él y aunque le ves más tenso, conoces lo suficiente a Nibb como para saber que no es alguien que dispararía a matar. 

La muchacha sentía curiosidad por lo que estaba pasando, a fin de cuentas, donde había problemas significaba que había gente y donde hay gente significa que esta gente puede ver publicidad. Por lo que, sacando de su riñonera unos cuantos boletos y folletos, la muchacha se acercó a la zona para saludar.

-¡Hola! -Exclamó tratando de sorprender a los presentes- ¿Hay algún problema?. ¡Pues sé como podemos resolverlo!. ¡Tengo bales de descuento muy calentitos por aquí!. ¿Quien quiere un 5% en Juegos de Mesa que no contengan la palabra "Dragones" "Mazmorras" o "Diversión"?.

Por un momento tanto Nibb como la chica se quedan desconcertados con tu entrada y se paran en seco, mirándote. Nibb tarda unos instantes en reconocerte pero finalmente te mira tanto asustado como asombrado. Las chicas, por su parte, tardan más o menos lo mismo en darse cuenta de lo que tienen delante y se ríen a carcajada limpia. 

- ¡¿Pero qué clase de... payasa eres tú?! ¡Jajajaja!

Mientras las otras se están riendo, Nibb aprovecha la confusión para disparar con su escopeta a la tal Sky, con tal mala suerte que la bala no llega a rozarla. Sky y la otra se dejan de reír y la chica dispara directamente contra Nibb. El pobre tendero se choca contra la pared que tiene detrás y se escurre poco a poco por ella, tosiendo sangre y abrazándose el abdomen, mientras te mira sin que sepas muy bien qué te quiere decir. 

La zona italiana os da la bienvenida con su habitual letrero iluminado, con los colores típicos de su bandera. Habitualmente es una de las zonas más coloridas de la ciudad. Sin embargo, esta noche te parece que los edificios se vuelven más rojos de lo habitual, pero por suerte no hay nada sobre ellos aparte de las luces de Little Italy.

La mayoría de las puertas de esta zona están cubiertas con tablones, aunque las ventanas no parecen tan seguras como en el Soho. Además de eso, se ven pocas flores azules en los balcones y no parece que haya nadie por la calle. Es por eso y por la pausa de chistes, que oyes claramente gente hablando a gritos, a unas pocas manzanas de donde estáis. No entiendes bien qué dicen, pero parece que eres el único que se ha dado cuenta por el momento y Mike no parará a menos que se lo digas.

-Dejalos que vengan, una vez que prueben la pizza con piña que hago, me harán una estatua y todo - Replicó enderezándose y levantando la barbilla, tratando de imitar la expresión de los próceres que se veían en edificios públicos. Pronto la herida le reclamo y entre un quejido de dolor se largó a reír por su propia broma y más por su estupidez, lo que naturalmente trajo más quejidos entre las risas. 

El ofrecimiento de su compañero picó su interés -Oh Mike si realmente nos consigues galletas ahora, será a tí a quien te haré un busto y todo - Se reclinó contra el asiento apretando un poco los dientes pero con una sonrisa satisfecha. Habían comprado tiempo para esos dos "Aprovechenlo" 

"Los italianos son peculiares" Fue el primer pensamiento que le vino a la mente al ver todo es barrio tan rojo que se parecía más a la zona que denominaban del mismo color. Salvando porque allí no había nada más que recordara a prostíbulos. -No parece estar muy activo - Murmuró observando las ventanas y balcones, ver flores en esa noche se le hacía casi parte de un dibujo animado. -Retiro lo dicho - Giró la cabeza intentando detectar bien de donde prevenían los gritos -Mike por allí, hay gente discutiendo a los gritos - Informó señalando la dirección, mientras intentaban captar algo más.

Consigues que Duke se ría de tus aires de superioridad por la pizza y que se ría aún más por el quejido posterior. 

- Prefiero que hagas el busto de otra persona... O que me dejes una cara más bonita en su defecto. - se ríe Mike. Las risas en el coche se detienen en cuanto señalas la dirección de los ruidos, parándose a escuchar ellos también - Tienes razón. Siento que no tengáis descanso, pero el deb...

Mientras Mike termina de hablar, estás pendiente de los alrededores y a apenas una manzana ves la cara de aquel que casi te mató. El tipo de la máscara de calavera, apuntando hacia vuestra dirección. Antes de que te dé tiempo a avisar, un balazo suena en las calles y todo a vuestro alrededor se oscurece. Los gritos del principio paran un momento para dejar paso a otros gritos de sorpresa cuando ven que toda la calle se ha quedado a oscuras. 

- No sé vosotros, pero esto me está dando una puta sensación de deja vu o como se diga... - murmura Duke, preparando su pistola.

Todos en el vehículos os quedáis quietos y en silencio, esperando alguna otra bala o sorpresa... Pero no llega ninguna.

-Vamos que no estás tan mal - Respondió riendo un poco por la broma, antes de su mención y de que el silencio se instaurara como un manto sobre todos. 

La cara del tipo de la calavera le subió el corazón a la garganta -¡Mike cuida... - El disparó llegó antes casi pensó que había muerto cuando el mundo se extinguió en la negrura de las calles -Hijo de puta - No esperaba encontrarlo tan pronto, ni que los tomara por sorpresa de esa manera. Sus ojos tardaron algunos segundos en acostumbrarse a la oscuridad y empezar a usar la poca luz que venía del cielo para orientarse. -¿Como mierda supo que veníamos aquí? - Murmuró para Duke calzando su arma al hombro. Aquello no podía ser una coincidencia. 

-Mike, ¿puedes agachar la cabeza y pasarle por encima a este hijo de una galleta? - Preguntó al tiempo que apuntaba aún desde dentro de la camioneta. El tipo era peligroso, cuanto antes pudieran sacarlo de juego mejor. -Es una jodida trampa - No podíamos jugar en su terreno, nos fusilaría en cuanto diéramos un paso fuera, probablemente había tomado gente de rehén con ese mismo objetivo. No pensaba abandonarlos, pero no iba a jugar bajo las reglas de ese forro. 

Tras los segundos en los que no parece llegar ninguna otra bala, notas cómo todos en la furgoneta vuelven a tomar aire. 

- A lo mejor estaba esperando a que nos marchásemos, el jodido cabrón... - te responde Duke en voz baja. 

- Mientras no nos estrellemos... Que no se diga. - dice Mike, encendiendo las luces de la furgoneta y volviendo a arrancar en la dirección a la que le señalas.