Partida Rol por web

Ante la petición de John de asegurar la tienda, la rubia no dudó en entrar la primera. Cautelosa y sigilosa como una gata mientras avanzaba, acechando tras posibles escondrijos donde pudieran emboscarlos, pero en principio todo estaba tranquilo. Hizo un gesto a Wendy para que entrara y se cambiara mientras ella misma se ponia encima otra de las chaquetas y tomaba un larguisimo pañuelo de uno de los maniquis para cubrir con suavidad el apósito que ocultaba su herida. Los enemigos siempre se envalentonaban ante los heridos así que mejor disimular y ya de paso, era una barrera más por si volvia a abrirse y sangrar.

Cuando acabaron, mientras la novia le preguntaba a su amigo, ella se acercaba a él para ayudarle a ponerse la prenda que habia cogido para él. Quizás estaba más cerca de lo debido mientras le ayudaba a meter el brazo por una manga y le alcanzaba la otra por el otro lado. Quizás tampoco era necesario que le subiera ella la cremallera. Si no fuera porque el rostro ahora expuesto de la chica no mostraba ningún signo de coqueteo, cualquiera habria pensado que si.