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De Príncipes y Marqueses

Aparte de los criterios de orden urbano, la principal diferencia entre la Camarilla francesa y la Camarilla americana reside sin duda en el principio político de la Hegemonía. Este principio fue impuesto por el Príncipe de París sobre sus pares provincianos desde finales del siglo XVII y actualmente es considerado por muchos como el equivalente vampírico del concepto de la Monarquía Absoluta. En la práctica es un principio simple que confiere al Príncipe de París una autoridad suprema sobre el conjunto del país, convirtiendo a los "Príncipes" de provincias en sus vasallos, que ya no ostentan el título de "Príncipes", estrictamente reservado a François Villon, sino el de "Marqueses", que expresa claramente su subordinación a un poder superior.

Históricamente el título de Príncipe fue conservado hasta finales del siglo XVIII por los gobernantes Toreador del sur de Francia, antes de que fueran destruidos por los acontecimientos de la Revolución Francesa. La Restauración monárquica permitió a los Toreador parisinos recuperar el control del país y consiguieron extender la Hegemonía sobre el conjunto de los Feudos de Francia. La Hegemonía de los Toreador de París sobre el resto de Francia explica en gran parte por qué los Ventrue franceses no han renunciado jamás a recuperar el poder que tuvieron durante la época medieval y que actualmente es una sombra pálidad frente a sus poderosos parientes del Reino Unido y Alemania. Desde su instauración, el Principio de la Hegemonía Toreador ha suscitado feroces controversias y los partidarios de la restauración del título de "Príncipes" a los Marqueses y de los poderes de los que han sido privados, han tomado el nombre de Praxistas, del término "Praxis", que designa el derecho de los príncipes a reinar sobre sus dominios. En sus orígenes, el movimiento praxista agrupaba principalmente a los viejos Ventrue conservadores, partidarios del regreso al antiguo orden. Sin embargo, la causa praxista se ha extendido entre los adversarios políticos del Príncipe de París, que vne en ella una oportunidad excelente para llevar a cabo sus propias ambiciones.

Extracto del manual Francia Nocturno, 
por Olivier Legrand y David Osmont. 
Trad. Alexander Weiss

La organización política de las ciudades de la Camarilla

La secta está compuesta por 6 clanes: Brujah, Malkavian, Nosferatu, Toreador, Tremere y Ventrue. Hasta hace poco los Gangrel también pertenecieron a la secta, pero la abandonaron en masa.

La organización de la secta recae sobre los Justicars y el Círculo Interior a nivel global, y en los Príncipes a nivel local.

Organización Global

Los Justicar funcionan como los jueces de la secta. Se ocupan de los crímenes a gran escala, y de todo problema que se escape de las manos de un Príncipe. Cada Justicar posee un grupo de Arcontes, vámpiros con cierto poder e influencia, que actúan por él en asuntos menores.

En la cima del poder se encuentra el Círculo Interior, compuesto por líderes de cada clan. Solo se reúne cada trece años, en Venecia, para decidir el rumbo general de la secta, y quienes reemplazarán a los actuales Justicars.

La mayor parte de los grandes problemas de la secta a nivel político se soluciona en cónclaves. Estos son declarados por un Justicar. Son una especie de reunión-debate, donde se intenta solucionar el problema. Es una de las pocas situaciones en las que se puede retirar el cargo a un Príncipe sin un golpe de estado.

Organización Local

Cada ciudad posee un Príncipe, normalmente el Vástago más antiguo y apto para el puesto, que funciona como el líder. Este es seguido por la Primogenitura, compuesta por los antiguos más poderosos de cada clan. La importancia de ambos varía de una ciudad a otra, en una siendo el Príncipe prácticamente omnipotente, con una Primogenitura sin ninguna importancia, en otra siendo la Primogenitura quienes tienen el control, siendo el Príncipe su marioneta.

Aunque algunos Vástagos tienen más poder que el Príncipe y la Primogenitura a nivel global, cada ciudad podría ser escrita como una ciudad-estado, independiente de las demás ciudades, con su propio funcionamiento y leyes.

Los demás cargos varían de una ciudad a otra. Los más comunes son:

♦ El Sheriff (también llamado Alguacil) es el brazo armado del Príncipe funcionando como guardián del Tradiciones, y ejecutor de los infractores.

♦ Las Arpías existen como criaturas sociales, que trafican con rumores, y pueden presentar una notable influencia sobre las opiniones del Príncipe respecto a otros Vástagos. No suele entregar formalmente este cargo, sino que quien lo merece simplemente lo alcanza, siendo más un cargo teórico que otra cosa.

♦ El Látigo es el representante de un Primogénito frente a su clan, manteniendo a sus miembros al día respecto a la política, y ocupándose de la política interna del clan.

♦ El Senescal es el segundo al mando del Príncipe, y "heredero" de su cargo. Su elección puede ser todo un problema, ya que la decisión es mutua entre el Príncipe y la Primogenitura.

♦ Guardián del Elíseo es quien organiza el Elíseo, y decide que reuniones pueden hacerse en él.

♦ El Azote se ocupa de proteger la frontera de la ciudad, y asegurarse de que toda persona que no sea bienvenida, y que no se haya presentado ante el Príncipe sea castigada. Muchas veces el cargo pertenece a Assamitas contratados.

Un elemento importante de toda ciudad es el Elíseo. Es un lugar neutro, en el que la violencia no es aceptada, a riesgo de sufrir un serio castigo si se incurre en la misma. Los Elíseos suelen ser lugares de cultura, como museos y teatros, aunque un club nocturno, o el refugio de un vástago también pueden serlo.

Extracto de Camarilla (Vampiro: la mascarada)
en https://es.wikipedia.org/wiki/Camarilla_(Vampiro:_la_mascarada)