Dejando para más tarde la discusión todos siguieron a Calmidorian por el pasillo. Al final del mismo les aguardaba una escena aterradora.
Había una piedra central de color negro, tallada con varios símbolos. Parecía una versión más pequeña de la que los había traído hasta aquel lugar, aunque su posición parecía fija. De ella salían varios cables que recorrían las paredes. Y colgados del techo estaban los tres seres vivos que parecían ser humanos, aunque su cuerpo arrugado dejaba muy poco que intuir... Estaban terriblemente marchitados, como si los hubieran exprimido hasta el último poro, sin pelo y sin dientes... Parecían tres machos, aunque era difícil determinar porque llevaban unas túnicas grises cubriendo su cuerpo. Pendían del techo colgados por unos cables extraños: tenían una parte de mecánicos pero también estaban recubiertos de una substancia pegajosa que recordaba a la carne. Incluso palpitaba de vez en cuando. La escena provocaba repulsa incluso en el curtido estómago de Calmidorian. Las paredes de la sala estaban recubiertas por paneles mecánicos mezclados con esa misma carne palpitante. ¿Qué demonios era todo aquello? Estaba claro que los cuerpos exánimes servían de fuente de energía pero ¿para qué? ¿Y qué significaba aquella substancia? ¿Era un ser vivo? ¿Algo así como un simbionte? Desde la entrada de la caverna - de unos doce metros de lado - no se vislumbraba ninguna otra salida aparente.
Seth permanecía inmóvil en la sala, contemplando los tubos con cierta fascinación mientras Vincent tomaba notas de todo lo que estaba viendo. En aquel momento entró el resto de la comitiva procedente del pasillo: Drim con la mitad de sus hombres, Meixar y Elbrian, conducidos todos por Calmidorian.
Estáis todos juntos de nuevo.
Vicent observa aquella amalgama de formas y cables... Era evidente que parecía una réplica a menor escala de la piedra que los había traído hasta allí, pero parecía tener otras funcionalidades adcionales. Sin embargo se veía incapaz de comprenderlas...
No pasas la tirada. Tenía un modificador de -2 porque nunca has visto nada similar en tecnología conocida...
Calmidorian mando detenerse con un gesto brusco, aun estaba asimilando lo ocurrido en la habitacion anterior y controlando sus propios impulsos cuando volvieron a reunirse todos.
-A eso me referia Drim, acaso vos sabeis de que se trata, creo que la respuesta es obvia, pero teneis idea de la razon y os pido que no deis orden de disparar a semejante aberracion hasta que todos estemos de acuerdo, los impulsos se pagan hijo del duque.-Termino mientras con su brazo derecho y palma abierta señalaba aquella maquina venida de las mismas pesadillas de Fausto.
El piloto contempló absorto el lugar al que habían sido conducidos, relegando al olvido las opiniones que habían ido creciendo dentro de él al presenciar el enfrentamiento ocurrido en la sala de los cadáveres.
Quizá más adelante, cuando no hubiese oídos indiscretos cerca, podría hablar con Meixar al respecto. No cabía duda de que, si el sacerdote quería que acabaran con ellos, había encontrado una buena forma de conseguirlo.
Pero eso no importaba por el momento. Ahora su atención era requerida por la impactante decoración de esa sala.
Independientemente de la forma en que eran utilizados esos cuerpos, la dirección de los cables dejaba claro el objetivo final. No era otro que suministrar a la piedra la suficiente energía para poder ser utilizada.
Tened cuidado con la piedra. - previno - Creo que consiguieron abrir aquí un portal, pero por desgracia se encontraron con algo que vino del otro lado. Una criatura que no esperaban y que los masacró en su búsqueda de la salida.
Era una opción tan válida como cualquier otra. La cuestión era ¿una criatura, que busca la forma de escapar, se entretendría apilando los cadáveres en el exterior?
Elbrian lo dudaba. De lo que sí estaba seguro es que allí podía estar su billete de vuelta.
-Bien, este es otro portal, sin duda debemos usarlo, pues no hay ningún otro camino. Ya podemos prescindir de la ayuda prestada por la amable e imprudente casa Valiantor.
Tras esas palabras Meixar se encaminó hacia la piedra negra y subió a ella cruzandola.
Vincent , no pudo evitar que el loco sacerdote se lanzase a lo desconocido ...
- Espere .- Grito intentando evitar el paso final , - no sabemos como funciona o si es un protal de verdad o solo lo que hemos venido a buscar .- Dijo esperando que el loco se detuviese y sobre todo que no los arrastrase a ellos a lo desconocido .
Con dos cojones si señor ... como te lance a la pared y te enchufe a los cables vas a ver
El sacerdote se subió a la piedra, impulsivo como siempre. Sintió un leve cosquilleo...
De repente los cuerpos colgados del techo se tensaron, como si recibieran una descarga. Su estertor silencioso reflejaba de la mejor de las maneras el dolor que debían estar sufriendo, si es que todavía eran conscientes de algo.
Hubo un fogonazo que deslumbró a todos...
... y donde había estado Meixar ya no había nada.
Continuamos sin Meixar en Nieve Ensangrentada (cont.)