Partida Rol por web

A punto de replicar a la nueva pulla de Elgast, las palabras se le atravesaron en la garganta al oír las palabras que dejó Drim tras de sí justo antes de encabezar el desfile del grupo a través del portal. ¡Simbiontres! Pero, ¿cómo? ¿Ahora resulta que no lo tiene claro? Su aprensión ante esa última advertencia lanzada a traición dejó a Ravmeer paralizado mientras los demás iban seguiendo los pasos del Valiantor. Ya todo era suficientemente confuso y peligrososin tener que hacer frente a la contingencia de unas largas vacaciones en Malignatus como huésped de una casa menor cuya única credencial hasta el momento era la de un mozalbete aficionado a pelearse con demonios y antinomistas.

Una vez Justin hubo expuesto en voz alta y con enorme exactitud la situación en la que ahora se hallaba, asintió al piloto y dedicó unos segundos a contemplar el extraño artilugio de piedra que no habían conseguido manipular. Parte de él deseaba quedarse allí, pero como Justin acababa de indicar no había muchas opciones... Enfundó su blaster para lanzarse hacia lo desconocido con las manos por delante, precavido, y convencido de que terminaría arrepintiéndose de lo que estaba a punto de hacer.

Y así el último de los viajeros atravesó el portal. La sala nuevamente quedó en silencio...