Partida Rol por web

Pone cara extrañada - ahm no es tuya, entiendo... ahmm no yo no pensaba quedarme allí, buscaré un medio de irme... pe...ro... por qué no podría quedarme en el planeta al que vamos?

- No te lo aconsejo - responde él rápidamente. - Es probablemente el antro más espantoso en todo el sector Ralixx. No dejaría allí a solas ni a mi peor enemigo.

Koran vacila por un instante.

- Supongo que si no das el follón podré dejarte en algún lugar más agradable. Además, Naiara querrá hablar contigo.

-Vale, te lo agradezco... - le mira de reojo y luego mira el panel de mandos - ahm quien gobierna esta nave? cuando tienes que repostar?

- Mike era el piloto, aunque sé lo suficiente para llegar a nuestro destino sin problemas. Y los depósitos están cargados al máximo, así que no tienes de qué preocuparte.

Koran hace un gesto invitando a la chica a acompañarle.

- Lástima que esta no sea la Eclipse. Habría algo de Naiara que te pudieras poner. - añade mientras hace un gesto con la cabeza. - Me temo que tendrás que seguir con esa ropa un tiempo. En breve nos recogerá la Eclipse y ya veremos qué hacemos contigo. ¿Te parece bien?

De acuerdo - da un suspiro - otra vez ese ya veremos qué hacemos conmigo... maldita sea... en cuanto pueda me largaré, ni quiero ser un estorbo para este tipo ni menos tener que dar explicaciones de la muerte de Mike a su hermana, ahhh que horror - Eclipse ahm, vale claro sin problemas... y cuanto tiempo queda para llegar a Vashjar?

- Poco. Estaremos allí en unas horas.

Koran conduce a la chica hacia uno de los camarotes. Al abrir la puerta, le señala el cuarto y a continuación el panel de control de la puerta.

- Espero que no te importe. Detesto hacer esto, pero aún no sé cuánto puedo confiar en ti. Cuando lleguemos a nuestro destino volveré a abrirte, ¿de acuerdo?

Ella le sigue cuando le indica su camarote y le mira a el y al sitio en cuestión, luego, el panel de control - bueno... pues igual confianza que yo en ti... no te digo... - dice medio sonriendo y dando un par de pasos al que va a ser su camarote o su cárcel hasta que la deje salir. Tras entrar se gira, se cruza de brazos y le dice - hay lavabo en este camarote... al menos?

- Claro encanto. Ese cubículo de ahí.  - comenta señalando una pequeña puerta en la pared del fondo. - Pero descuida, dentro de poco estaremos fuera de esta nave.

Koran espera a que Beatrix entre en el cuarto y comienza a manipular el panel de la puerta.

- Como ya dije antes, no es nada personal. No te lo tomes a mal pero necesito dormir un par de horas antes de llegar.

El joven aprieta el botón y la puerta se cierra con un débil zumbido.

Si no vas a intentar nada en esas dos horas avísame porque puede que aceleremos ese tiempo y pasemos a una escena nueva.

Cuando cierra la puerta, Beatrix da un suspiro, se va al "lávabo" y ve el retrete - ufff - se mira en el espejo - menos mal que no necesitaré usarlo nunca... cubículo pssiiii ahora lo entiendo - luego, sale y se sienta en la cama apoyándose en la pared, apaga la luz y se pone a pensar en todo lo que ha sucedido, en la oscuridad se relaja y cierra los ojos para recargarse de energía.

El tiempo pasa pero tú no has conseguido sacar nada en claro. Sigues como al principio, sin saber quién (ni qué) eres ni lo que hacías en ese laboratorio. Tampoco sabes nada acerca de lo que harás a partir de ahora ni adónde irás.

Sumida en tus cavilaciones de pronto percibes cómo la nave sale del hiperespacio. Al poco tiempo escuchas como se abre la puerta. Frente a ti, tu misterioso acompañante te hace señas para que le sigas afuera.

Tras un aterrizaje bastante rápido, salís de la nave. Os encontráis en el espaciopuerto de una ciudad desconocida. Recorréis un par de calles y entráis en otro de los muelles, donde os aguarda un carguero ligero de tipo corelliano.

- Bueno Beatrix - Koran parece algo nervioso. - Te presentaré a los chicos. Por cierto, yo soy Koran.

El joven le ofrece formalmente la mano y le hace gestos para que camine junto a él hacia la nave.