Partida Rol por web

EL CENTRO COMERCIAL

-Número máximo de ocupantes: 20

-Número actual de Ocupantes: 6 / 20

-Seguridad: 5

-Recursos A: 8

-Recursos B: 5

DÍA 0

Hacía ya un mes, mas o menos, desde que se desatara el infierno. No demasiado tiempo pero si lo suficiente para que todo el mundo supiese ya lo que era un zombie. Muchos habían muerto y lo que era aún peor: muerto y vuelto a la vida como zombies...

Lo sabías, un simple arañazo o mordisco era suficiente para infectarse, conocíais los síntomas. En menos de 24 horas te convertías en uno de esos monstruos. La única forma de matar a un zombie definitivamente es destruyendo su cerebro, ya sea con un tiro en la cabeza o aplastando su cráneo, nada demasiado agradable.

Por esta o aquella razón, ahora mismo os encontráis en Umbria City, una ciudad infestada de zombies. La buena noticia es que en ocho días los militares vendrán a rescataros, la mala es que hay que aguantar ocho días.

No os conocéis de nada pero tendréis que colaborar para sobrevivir. Eso si, tened cuidado, no todo el mundo puede ser lo que parece...

Después de huir un mes de sitio en sitio en mi bicicleta rosa, me hallaba en el centro comercial. No es que fuese muy grande, pero lo suficiente para que un grupo de supervivientes se cobijase en él. Además había muchas cosas chulas que podían ser de gran utilidad.

Todo lo escondida que pude me limité a observar al resto de personas del lugar. Todos parecían muy duros. Tenían que serlo para haber llegado hasta ahí.

Duros o afortunados...como yo misma.

De momento observaría, llenaría mi mochila de camping (la había cambiado por la del cole en cuanto pude) de alimentos y ropas abrigadas. Y esperaría. Seguro que alguno de los supervivientes había notado su presencia correteando por las sombras, pero hasta el momento la habían ignorado. ¿Serán de fiar?

Recuerda Vic lo que decía mama de los desconocidos. No hablar con ellos.

Tendría que cambiar eso de alguna manera... ¡claro! 

Sacando una libreta y un bolígrafo de la mochila escribo en varias hojas. Mi nombre es Victoria Sierra. ¿Tú quien eres?

Dejaría una de aquellas notas delante de los mayores. Y esperaría a que dejasen de ser desconocidos. Entonces podría hablar. Sonrío satisfecha con mi treta

Eché un vistazo a mi alrededor, eramos ocho, entre ellos habia un pobre abuelo y un hombre obeso, y no pude evitar pensar como habian podido sobrevivir. Tambien habia otras cinco personas que estaban en buena forma y con ellos, como grupo, seria mas facil seguir con vida.

De repente, vi una sombra moverse y el primer pensamiento fue -¡Han entrado! -pero no, era una niña rubia, la mire sorprendida, estaba asustada e intentaba esconderse y con voz alegre dije en voz alta:

- ¡Bueno, pues somos nueve! - mientras me acercaba a ella con toda la tranquilidad y paciencia que pude, observe que estaba escribiendo algo y con voz suave me dirigi a ella.

- ¡Hola! ¿Como te llamas?

¡Bien! Primera nota entregada. Parece ser que no era tan buena como yo pensaba pasando desapercibida.

ahora sólo tocaba esperar a que me dijesen sus nombres y ya no seríamos desconocidos. 

-Hola Victoria, -le dije cuando me enseño la hoja -yo me llamo Laura, ¿cuantos años tienes?

Alícia miraba a todos los supervivientes que estaban en el centro comercial, al parecer y por sus pintas, algunos de ellos se podrían valer por si mismo, exceptuando a la niña . -Diablos.. pobre cria.. Y otros dos, un anciano y otro bastante mayor, pero parecia no estar en forma

Me encuentro sentado en uno de los sillones de masaje del centro comercial con la funda de caza apoyada en mis piernas, con los ojos cerrados intentando descansar. Un mes, Rose, ya ha pasado un mes desde que esta pesadilla se desato por todo el mundo, o eso es lo que dice el locutor de la hora de los vivos, un tal, Buster of the field, y todavía no han encontrado una cura. Lo único bueno es que en ocho días el ejército vendrá a rescatarnos…

Abro los ojos observando a mi alrededor a los supervivientes que han conseguido llegar hasta el centro comercial, un grupo cuanto menos dispar, pero si queremos sobrevivir a los zombies, tendremos que arrimar el hombro. Y en eso aparece una niña entre las sombras. Se parece mucho, pero no es ella. Lanzo un suspiro y me incorporo despacio del sillón, notando un leve crujido en mi espalda. Maldita sea, como echo de menos mi cama – murmuro para colgar la funda de caza en mi hombro y caminar hasta el lugar donde se encuentran la mujer que la ha visto y la pequeña.

- Ya veo que eres una niña dura, Victoria. Yo soy Saúl – sonrío de forma cordial mientras busco entre mis bolsillos el ultimo paquete de caramelos Halls que llevo encima. Cojo uno de ellos y lo introduzco en mi boca – Es el ultimo que me queda, si lo quieres es tuyo – digo a la pequeña estirando mi mano con el caramelo sobre la palma de la mano.

Hola Laura. Tengo 12 años. Realmente todavía no, pero ya soy una mayorona. No pasará nada si digo que tengo 12

Eso es mentir, hija -resuena la voz de mi abuelita en mi cabeza. 

Bueno... once señorita Laura -digo un poco ruborizada -pero me queda poco para los doce.

Gracias Señor Saul. -le digo cogiendo el caramelo. En cuanto pueda se lo devolveré.

Me acerco corriendo a la otra chica, la que tiene pinta de ser muy dura. Y le tiendo una hoja de papel con la presentación.

Con las manos en los bolsillos no hacia mas que hacerse preguntas, que no servían de nada en una situación así.
Mierda toda esta gente haciendo lo que le da la gana en el Centro Comercial, ¿Que debería hacer? Detenerlos... meterlos en la garita... A la mierda, somos pocos y esto es muy grande, un grupo de 8 no come demasiado, ademas en 8 días nos sacan de aquí... puedo soportar 8 días.

Se coloco la gorra y decidió hacer un poco su trabajo -Bueno vamos a tener que organizar un poco esto si queremos sobrevivir 8 días no les pare...-Momento justo que la niña eligió para dejarla una nota a sus pies.
-Que carajo... ¿Como has entrado niña?-Echo un rápido vistazo a la nota.-¿Victoria Sierra? Muy bien niña yo aquí soy la seguridad.-Le contesto antes de dedicar su tiempo a algo mas productivo.

-¿Es de alguien esta niña? No deberían de corretear sin control niños tan pequeños por el centro comercial y menos ahora con toda esa mierda fuera.-Pregunto a los presentes, sobre todo a los callados.

Se agacha a la altura de Victoria. -Hola pequeña, yo soy Alicia, Estas con tus padres, o estas sola? Echa un vistazo alrededor, buscando alguien que guarde cierto parecido con la niña

Buenas master, tengo una duda sobre el calendario y como no se donde preguntrtelo te lo pongo aqui.

Segun las reglas, puedes cambiar de lugar en el turno de dia y en el de noche pero en el calendario no pone cuanto tiempo tienes para cambiar de lugar en el turno de noche.

¿ me lo puedes aclarar?

Gracias

-Hace un mes ya que no veo a mis padres. -digo con los ojos húmedos pero negandome a llorar. Soy una mujer y no debo llorar.Pero sé que están ahí afuera buscándome. Quizás estén en un lugar seguro. Esperando que los encuentre.

He estado...moviéndome con mi bicicleta de aquí para allá. Escondiendome siempre... He pasado mucho miedo. Y... ya sí me hecho a llorar abrazando a Alicia.

Cuando Victoria salio corriendo hacia una chica morena, pensé que iban juntas. Me giré hacia el hombre mayor y le mire con cara de sorpresa, sí, era viejo, no tenia la fuerza ni los reflejos de su juventud pero en cambio se le veia mas como una persona fria, serena, seguro de si mismo y no como un debil y asustado viejo.

Educadamente me dirigi a el:

- Hola Saul, ¿que arma tiene en la funda?- pero antes de dejarle responder, ya le estaba formulando una segunda pregunta aun mas personal. -¿Como a conseguido llegar hasta aqui?

Abraza a Victoria intentando reconfortarle. -Tranquila pequeña, seguro que estarán bien y pronto os encontraréis. Si quieres, puedes quedarte conmigo hasta que arregle mi coche y después vamos a buscarles, de donde vienes?. le sonríe dulcemente

Buenas master, tengo una duda sobre el calendario y como no se donde preguntrtelo te lo pongo aqui.

Segun las reglas, puedes cambiar de lugar en el turno de dia y en el de noche pero en el calendario no pone cuanto tiempo tienes para cambiar de lugar en el turno de noche.

¿ me lo puedes aclarar?

Gracias

No me había dado cuenta de ponerlo, gracias por el aviso. Ya he actualizado el calendario ;)

El mexicano vuelve de buscar cosas utiles entre el centro comercial y asegurarse de que no hubiera ningun "zombie" rondando por ahi, podria pasar alguna noche sin dormir, pero eventualmente tendria que hacerlo y querria tener conocimiento de que el lugar fuera "seguro".

Se sento cerca de los demas supervivientes y saco su machete para limpiarlo un poco de la sangre seca de los anteriores cadaveres que se topo camino al centro.

Miro al grupo un momento y decidio que necesitaria su machete a punto para los 8 dias restantes, las balas del segurata podrian encargarse de unos pocos, pero alli fuera no habian solo unos pocos y su machete no tenia limite de uso mas que sus propias fuerzas.

Al ver como la mejicana se hacia cargo de la niña solo le rondo una cosa por la cabeza.-Un problema menos.-Se quito la gorra para secar su frente de sudor, los focos encendidos daban mucho calor.

- No es necesario pequeña – respondo a Victoria. Ya hay alguien que se encargara de cuidarla. Pienso al escuchar a Alicia. Y justo cuando estoy a punto de regresar al sillón, Laura se acerca hasta donde estoy, haciéndome unas preguntas.

- Es una de las cosas que me ha ayudado a sobrevivir en este pequeño infierno. Espero que en estos ocho días no sea necesario recurrir a el – respondo a la primera pregunta – Digamos que el diablo sabe más por viejo que por diablo – digo sonriendo y comienzo a caminar de nuevo en dirección al sillón.
 

De pronto, un ruido invade la estancia y veis aparecer a un hombre, jadeante. Tal como va vestido, cualquiera diría que acaba de abandonar una sala de operaciones.