Partida Rol por web

- Ezto ez muy cudiozo - Kamtrak hace un pausa y analiza seriamente lo que está pasando con las flechas, tratando de encontrar una solución al viento. Con todo es incapaz de darse cuenta porque sucede lo que sucede así que finalmente hace lo que haría cualquier goblin que se precie... Olvidarse de la imposibilidad de acertar sus disparos y volver a intentarlo

Yoda revisa su arco y sus flechas buscando algún indicio de que algo haya sido saboteado o dañado. No es normal fallar dos tiros seguidos. Minuciosamente, o al menos al nivel que él puede llegar, lo revisa todo a conciencia.

Gracias a la rapidez de su Huargo y de su diminuto tamaño el pequeño verde esquivo los numerosos ataques mientras blandia su lanza al aire esperando dar algo que no fuera amigo.
-HAG!!!! Moriz malditoz!!! dejar en paz al bueno de TRecirk!!

Bolwock continúa blandiendo la espada con velocidad a la vez que trata de esquivar los numerosos ataques que recibe. ¿Dónde escondían a tantos humanos en una ciudad tan pequeña? Cada vez le cuesta más mantenerse de una pieza y las flechas siguen siendo artificialmente desviadas.

Una cosa es segura: si son derrotados los buitres se darán un festín; si logran la victoria, seguramente hasta los buitres serán engullidos.

El sargento Melmak observa impávido como ningún humano se atreve a atacarle despues del primer encuentro, empieza a reir babosamente mientras se vuelve a lanzar a la carga.

Grurkl se alzaba en mitad de los humanos como una fortaleza goblin casi inexpugnable. Con cara de aburrimiento seguía haciendo volar su bola-pincho contra los cuerpos de los humanos. Era tedioso, sí, ya le decía su madre que las masacres eran lentas y aburridas... pero que tenían como recompensa un gran festín. Tan aburrido estaba que un bostezo le hizo perder el compás de los golpes que hasta el momento había conseguido encadenar con cierto éxito.

La horda avanza temiblemente sobre la masa de campesinos, que no es capaz de contenerla y acaba escapando despavorida hacia la retaguardia. Tan solo algún valiente se queda y lo paga con su vida.

La horda celebra con júbilo su victoria, mas cuando miran a su alrededor, ven lo que han conseguido conquistar; ¡¡¡un pueblo en llamas!!!. El fuego se ha expandido rápidamente por más de la mitad del pueblo. Y es entonces cuando entienden porqué los campesinos huyen (aparte de porque son campesinos) y es que aquí queda poco por lo que luchar.

De quien tampoco se ve rastro es del conde, ni de su cohorte.

- Ganamos! Ganamos - el grito surge de lo profundo de la garganta de Kamtrak, quien no tiene interés en analizar detalles tan prosaicos como la falta del conde ó el riesgo que significa el incendio del pueblo

- Donde eztá la comida que vinimoz a buzcad? - pregunta mientras mira a su alrededor - Zegudo que va a eztad cozida. Ufa! La cadne cduda ez maz dica - agrega seguro de sus prioridades - pedo zi ez todo lo que hay puedo comed cadne cozida zin pdoblemaz -

Las llamas siguen extendiéndose por todas partes e incluso amenazan con cerraros el paso, convirtiendo el pueblo en una trampa mortal.

Podeis ver gente y animales que sigue escapando de las llamas, hacia la puerta este del pueblo (la contraria de la que atravesasteis vosotros).

Yoda se pone a bailar de alegría mientras una lágrima de felicidad le resbala por la mejilla.

Una sonrisa goblinoie se extendía por toda su amorfa cara, aún se lo ponían más fácil, huían y dejaban la espalda totalmente al descubierto, que más podía pedir, arma en alto cargó contra la espalda del primero que se encontraba en su camino y de paso se alejaba de las llamas en dirección a la puerta este.

Aún feliz por la gloriosa victoria que ha conseguido la horda, Kamtrak empieza a sentir como se le calientan las posaderas, por lo que, al mirar a sus espaldas observa como el fuego gana fuerza y los comienza a poner en peligro

- Ezto ze eztá poniendo caliente - comenta mientras, poco a poco se adentra en el pueblo, en dirección a la otra puerta - Padeze que eztoz humanoz conozen la zalida - se explica mientras que, con su arco en la mano les sigue los pasos - Y quemadon el pueblo antez de huid - decide en un rapto de lógica goblinoide - debemoz salid de aquí pada matadloz y que no comamoz cadne quemada -

Los humanos huyen ante la ferocidad de la horda y Bolwock los sigue henchido de orgullo. Las llamas avanzan inexorablemente, pero lo más sensato es seguir a los campesinos ya que todos corren en la misma dirección y eso solo puede significar una cosa: hay una salida.

Además, por algún lugar han debido escapar el Duque y sus hombres.

- ¡¡Zeguidme zoldadoz!! ¡¡El Dioz de la Guerra eztá de nueztro lado!! ¡¡Aniquilemoz a loz humanoz!!

Grurkl, con un rugido, empezó a perseguir a los humanos tan pronto como pusieron pies en polvorosa:

-¡¡¡ No codaiz que va a zed peod!!! -

Vilmente y por la espalda le atizó un bolapinchazo al primer humano que le cuadró.

Sin saber que es lo que esta pasando adentro sigo tratando de apagar por lo menos uno de los costados de la puerta con tierra y lo que encuentre para poder entrar a ver que es lo que ocurre adentro.

Maldicion esto no se apaga mas tan solo si tuviera agua por aca seria mas facil

Los humanos corren hacia la puerta más próxima, pero al ser perseguidos por la horda,algunos de ellos son aniquilados sin piedad. Sin embargo, muchos consiguen escapar.

Mientras el incendio se sigue extendiendo, a pesar de los intentos de SHSHSH por apagarlo. Resulta más que evidente que sus esfuerzos no sirven de mucho.

Al llegar a la puerta de "salida" del pueblo, Kamtrak se detiene un momento, confundido por la situación - Pedo... no eda que nozotroz teníamoz que entrad? Podqué eztamoz zaliendo? Y zi ahoda noz invaden loz humanoz? -

Sin embargo, más allá de sus dudas existenciales, el sargento de arqueros era, ante todo un guerrero, por lo que tomó otra flecha y se dedicó, tranquilamente a cazar a los citadinos que huían de su propia ciudad. Su primer flecha, certera, se clavó en la nuca de una mujer que huía con un niño en brazos, atravesando, además de a la mujer, a la criatura que bramó aterrada cuando quedó "enflechada" a su madre

-¡¡MUEZTE"!!! ¡¡MUEZTRE!!!-Gritaba mientras trinchaba el cuerpo de un muerto, desde hacia un par de minutos, hasta que las mandíbulas de su huargo al masticar pantorrilla y el calor del fuego lo sacaron de su "frenesí".

Miro a un lado y a otro mientras su animal comia.
-Oye Canthus... etto... ¿Y los demas? EI!! deja de comer y escucha!.-Le dio un capon, por suerte para el pequeño verde, el animal estaba entretenido y ni se inmuto.

-¡A por hay!-dijo antes de tirar de la correa del "can" para que se dirigiera hacia el resto.
-JEFE"!!! JEFE!!! Ez to... Zargento!"! zargento!!, que digo yo que a donde vamoz?¿ no teniamoz que buscar al Duque ese?¿ que tenia la comida?-Pregunto a Melmak gritando a su oido mientras su montura no dejaba en su empeño de llenar su barriga.