Partida Rol por web

Recopilación de información biográfica del Recluta Hideus. 

El joven Temán Hideus observo airado como los orcos saqueaban los escasos hogares de su poblado. Estaban arrancando las placas de metal de las paredes, esparciendo los cargamentos de diamantes y despojando al destacamento de guardias imperiales muertos de sus armas y protecciones. La lucha había sido corta.

Habían llegado en un meteorito que al caer había levantado una polvareda impresionante. Quizás no eran más de 30, pero en cuestión de 2 días habían logrado encontrar con suma precisión 4 asentamientos humanos, y reducirlos a escombros.

Hideus regresaba de la mina junto a su padre y 5 mineros más. Cuando se encontraron la escena, desde arriba de una colina que daba una vista panorámica de la situación.

“no os mováis, aun no nos han visto… lo mejor será que huyamos.”- dijo uno de sus compañeros-

Pero Hideus, lleno de rabia, le dio un golpe con el palo de su pico de minero. El minero cayo desmayado.- “ahí abajo han muerto nuestros familiares, nuestros amigos…” – dijo Hideus. Mientras por dentro despertaba un fuerte sentimiento de protección a su raza contra esa amenaza alienígena. “¡voy a bajar allí y a arrancarles la cabeza a esos cabrones verdes!”

“Valiente, pero solo lograrías convertirte en un divertido tentempié para ellos”

Una voz fuerte provenía de cerca suyo. Giro la cabeza y su corazón dio un vuelco al reconocer ante si a una escuadra de 5 marines espaciales. Había oído hablar de los marines: hacia 50 años habían tenido que intervenir para salvar un planeta vecino de un culto de fanáticos, o eso decian los rumores.

El sargento que había hablado no llevaba casco, ni siquiera le miro mientras pronunciaba esas palabras. Otro marine, en una armadura anaranjada, rastreaba el pueblo. Cuando anunció la situación de los objetivos a su superior, este elevo un grito al aire: “somos su ira echa realidad, hermanos. ¡Purgad al alienígena!”

“¡Por el emperador!” gritaron el resto, e iniciaron una carrera colina abajo. Con sus primeras ráfagas derribaron a varios orcos, que gritaron y atrajeron la atención del resto. El intercambio de disparos duro prácticamente 5 minutos. Algunas balas de los orcos rebotaban en las pesadas servoarmaduras, otras desgraciadamente parecían atravesarlas con preocupante facilidad. Uno de los hermanos cayo de un disparo desafortunado en la ingle, quiso seguir disparando, pero una lluvia de balas le alcanzó tanbien en el brazo, arrancándoselo y tirando el arma demasiado lejos. Sonrío pensando en el trato que darían sus hermanos a la alienígena que le había humillado de tal forma. Otros 2 marines tácticos cayeron cosidos a balazos por un piel verde que cargaba un arma muy pesada. El sargento le dio un final rápido de un certero disparo entre las cejas.

Cuando ya no quedaba ningún orco en el poblado un gran orco que blandía un arma a medio camino entre hacha y martillo gigantesco, acompañado de 5 orcos envalentonados apareció corriendo desde un bosque colindante al pueblo.

Hideus, que había estado siguiendo el combate a una distancia prudencial, se preocupo cuando vio que uno de los marines que quedaba era atravesado por la gran hacha de guerra, mientras el sargento se tenia que cubrir de una lluvia de disparos a apenas 10 metros de los acompañantes del noble orco, que se habían cubierto detrás de un vagón de metal. Miro a su alrededor rápidamente y encontró un rifle láser de uno de los desafortunados guardias imperiales. Si esos Marines habían muerto por su pueblo, en nombre de ese gran emperador, él no podía ser menos. Tenia que vengar a sus familiares. Apunto hacia el gran orco, la mira le temblaba, pero aguanto la respiración y la bala impacto… aunque la bestia pareció no notarlo. Se rasco la espalda en el lugar donde había impactado el disparo, arrancó su hacha del cuerpo del marine caído, y corrió hacia el sargento. Este lanzo su ultima granada contra los orcos que le tenían bajo fuego de supresión, saltando estos en pedazos, y corrió con su espada-sierra hacia el gran piel verde restante, disparándole las pocas balas que le quedaron en la pistola bolter, que no lograron detenerle.

En el combate mano a mano que aconteció, el orco bloqueaba cada estocada del marine, que tenia que hacer esfuerzos para no ceder a la ferocidad con la que el orco blandía su hacha. En un momento dado el alienígena propino una patada que hizo caer de espaldas al sargento.

Hideus se abalanzo con el rifle imperial en mano, y empezó a darle culatazos y golpes al orco en la espalda, atizándole con rabia. Ni siquiera había caído en usar la bayoneta del arma, de lo cegado que estaba de furia. El orco se giro, le miro de arriba abajo con desprecio, y de un golpe con el reverso de su hacha lo mando varios metros lejos por el suelo.

Temán Hideus. Minero de 13 años de un planeta del sistema Inanna, cayó de costado con los ojos cerrados, deseando tener la fuerza para derribar a esa monstruosidad. Al abrirlos pudo leer. “dispensa la luz del emperador sobre nuestros enemigos, y deja que su voluntad aga el resto”. Estaba escrito en el lado de un bolter. El bolter del marine que yacía partido en dos a apenas unos pasos.

Mientras el sargento luchaba con las fuerzas que le quedaban, agarrando con ambas manos su espada sierra bloqueando una ultima embestida del orco, que apoyaba todo su peso el el hacha, consciente de que al marine no tardarían en fallarle los brazos, y su arma se hundiría en su cráneo.

El cielo se lleno de silbidos, capsulas de desembarco estaban cayendo hacia esa posición.

Hideus vivió el momento a cámara lenta. Se puso de rodillas, lleno de moratones. Levanto el bolter sagrado, pesaba mucho más de lo que parecía, así que se apoyo en la rodilla. Apunto hacia el orco.

Disparó mientras gritaba: “¡por el emperador!”

Una ráfaga de disparos de bolter impacto desde la parte trasera de la rodilla del orco hasta su cadera, cortándole la pierna con suma facilidad. El orco cayo de lado, y el sargento marine de un gesto rápido se levanto, apartó el hacha del orco e hizo rugir su espada sierra mientras cortaba el cuello al Noble orco.

En ese momento aterrizo una capsula de desembarco encima de una casa cercana. De ella saldrían entre otros un apoticario que curaría al marine que aún yacía mutilado, y al sargento que sufría algunos daños leves por balas y cortes.

El sargento miro al muchacho, y le dijo, esta vez mirándole a los ojos. “de manera que te sientes como un marine espacial… vas a tener que probar ser digno de cargar con esa arma que tienes en las rodillas chico…o yo mismo me asegurare que te ejecuten por profanar el bolter sagrado de uno de mis hermanos.”
 

Tras la ceremonia de despedida a los muertos, con especial atención a mi madre y familiares de la colonia minera caída durante el asalto orco, me despedí de mi padre y acompañe al sargento Cess, el marine que había decidió tomarme para el capitulo. Para mi su figura exhalaba luz y gloria, y sentía un profundo respeto hacia él y hacia todos sus hermanos del capitulo.

El  viaje espacial fue más bien largo (viajamos sin saltar a la disformidad, dada la proximidad entre mi planeta natal y el planeta donde se ubica la fortaleza de los dientes de sable). Durante el Trayecto hable con otros dos chicos que deberían tener poco más de mi edad, asignados a diversas tareas de mantenimiento de la nave. Con ellos tuve la oportunidad de conocer por encima muchos detalles del funcionamiento básico del capitulo, o por lo menos la información a la que ellos tienen acceso. Los ratos que ellos estaban de servicio me dedicaban a leer las infinitas inscripciones en Alto gótico de la nave. Algunas eran larguísimos relatos sobre las batallas del capitulo, otras sobre hechos del pasado del imperio, más la mayoría eran alabanzas y cantos al Emperador. Podría decirse que ello solo consiguió prender en mí una llama de pasión y ganas de servirle, de ser su voluntad, de formar parte de aquella gran hermandad que representaban los dientes de sable.

Cuando por Fin llegamos al a fortaleza, el sargento Cess me acompaño hacia una sala de piedra donde en unas horas se llevaría a cabo la presentación de reclutas a un sargento de los Dientes de sable llamado Iah, del cual no había oído precisamente lindezas, durante mi trayecto espacial. Cess me dirigió unas palabras antes de irse. Había permanecido alejado y absorto todo el trayecto en nave desde Inanna II. No habíamos hablado desde que abandonamos mi planeta natal.

-Hideus. Ven Aquí, eres joven, pero yo también lo fui alguna vez, o eso creo. Obraste con Valor, o quizás con locura el día que nos conocimos. Pero si hoy estas aquí, y no bajo el suelo con una bala de bolter entre las cejas es porque tienes una deuda con el capitulo. Más que eso. Tienes una deuda el Emperador, por tomar  el arma de uno de sus más preciados guerreros y Haver interferido en un combate de los dientes de sable sin que se te pidiese. Como ciudadano imperial fallaste al sistema. Sin embargo, vi. En ti un gran potencial… Se que no me decepcionaras al pensar que serás capaz de superar las duras pruebas del Sargento Iah, y de todo lo que te espera en tu carrera como guerrero del capitulo, y tarde o temprano podrás redimirte ante los dientes de sable... y ante mi mismo.

Y salio andando con Calma de la sala, dejándome solo durante varias horas meditando, hasta que empezaron a llegar otros reclutas, y finalmente el sargento Iah.

"El orco" "No te preocupes, muchacho, pues tu alma es pura. No, el Orco significa otra cosa. Significa no rendirse. Significa seguir, aún cuando todo parece perdido. Es tu destino luchar aún cuando todos caigan a tu alrededor." 

Temán Hieus no podia quitarse esas palabras de la cabeza. Incluso en el inmediato momento en que se levanto para alejarse del lexicarium, su cabeza se lleno de pensamientos.

"El orco". Que ironia. Los seres más despreciables del universo, jamás podria perdonar a la raza que habia sesgado la vida de su madre y de su pueblo, y sin embargo, ese mismo ser le dava fuerzas para permanecer de pie ante todo.

De Manera que él estava destinado a aguantar, a mantenerse firme incluso ante las peores adversidades. Como podria lograrlo? Estava seguro de que bajo la firme tutela del capitulo lograria cumplir con los ponosticos del Tarot, y asi tambien con las esperanzas del Sargento Cess.

Tendria que trabajar con sus compañeros. Que les habria deparado a ellos el Tarot? no queria pensar en la posibilidad de ser el unico superviviente en un remoto futuro, del grupo de aspirantes que habian sido provados ese dia. No. Lucharia con ellos, y antes de que ellos cayeran, se asegruaria de dar hasta su ultimo suspiro para el capitulo. Se lo devia al Emperador.

Mentalmente Hizo un profundo analisis de su ser. Si tenia que lograr ser fuerte, devia de conocerse a si mismo mejor que a nada en el mundo. devia de decubrir como explotar sus puntos fuertes, y fortalezer sus debilidades.

[...Y al mirarse al espejo del capellán Melchior, lo unico que vio fue la voluntad del Emperador[...]]

Rasgos: 

Edad: 15 años

Altura: 1.77m

Peso: 74kg

Eventos:

Tarot: (14) efecto = +1 herida

Evento de entrenamiento: +2 WP ; Objeto adquirido:

Talentos

Hablar Idioma: Gotico Vulgar
 

Bendita ignorancia : -5 a las tiradas de saber prohibido (int)

Familiaridad litúrgica : Las habilidades leer/escribir (Int) y Hablar idioma (Gótico Clasico) (Int) se consideran habilidades basicas para los habitantes de mundos imperiales.

Hagiografia: Las Habilidades saber popular (Credo imperial) (int). Saber popular (imperio) (int) y saber popular ( guerra) (int) Se consideran habilidades basicas para habitantes de mundos imperiales.

Origen superior: El emperador esta conmigo. +3 Willpower.

Odio: Orcos

Entrenamiento con Armas Básicas: Láser

Entrenamiento con Armas CaC: Primitivas

Entrenamiento Pistolas: Proyectiles sólidos

Habilidades de Inicio

Awareness/Perspicacia (Int)

Carouse/Aguante (T)

Hablar idioma (Gótico Vulgar)(Int)

Saber popular (Imperio)

Navegación (Superficie)

Equipamiento Especial :

Sermones del Principio de los Tiempos

un libro pequeño encuadernado en cuero negro animal con el Aquila Imperialis grabada en oro en la tapa. Contiene los rezos del Emperador, alabanzas al Dios-Emperador en los primeros tiempos, cuando reunió a los Primarcas a su alrededor. Cuando lo utilicen para Meditar, recuperarán un punto más de Fatiga que lo normal.

Gasto de los 400 px

Entrenamiento Armas Básicas (Bolter) --- 100 px

Aumento +5 BS --- 100 px

Awareness + 10 --- 100 px

Concealment--- 100 px

Pack:

Resistencia: Falta oxígeno

Difícil de Matar

Tamaño +1

Fuerza antinatural

Resistencia antinatural

Autosangrado +1

Sueño ligero.