Partida Rol por web

El que avisa no es traidor... pero sigo diciendo lo mismo. Si el Sombra aparece, deberas irte de prisa... y si no lo haces por las buenas, te obligaré yo por las malas. Te dice con una sonrisa mientras se cruje los dedos.

Freya hace un gesto con la mano mientras vuelve a sentarse en el suelo.

Sí, sí, claro... os dejaré aquí tirados con un sombra cabreado, no te preocupes.

Asiente irónicamente mientras vuelve a acomodarse, esta vez con ambas piernas cruzadas y mirando a Robert de nuevo.

Te falta una pregunta por responder.

Eres... un Jinete... ¿cuánto tiempo hace que lo eres? ¿Dos semanas? ¿Un mes? No tienes experiencia, pero eres una Jinete. Perdón por ser tan sincero, pero sé que harás lo que quieras cuando la situación lo requiera. Yo simplemente estaba dando mi punto de vista. Puedes tomarlo o dejarlo. Allá  tu. Te dice otra vez con una sonrisa mientras se encoje de hombros.

Los brujos continúan trabajando sobre el cuerpo de Robert, trabajando y murmurando más cosas, que Ryan ya no te traduce.

Freya sonríe de medio lado sin dejar de mirar a los hechiceros.

Sí... gracias por tu sinceridad, pero... no me refiero a esa pregunta.

Levanta la vista para clavar la mirada en la de Ryan, sin ninguna sonrisa en la cara esta vez...

¿Quién eres? Porque no me creo que un pueblerino normal haya sobrevivido a un sombra.

No somos un poblado normal, ni gente normal. Verás... la mayoría tiene grandes aptitudes para la magia y con eso, podemos repeler los ataques de un Sombra... aunque las bajas siempre son considerables. Todos tenemos la capacidad de lanzar hechizos, en mayor o en menor medida, pero bueno, a lo que iba... ¿al final te quedarás aquí no? Te pregunta Ryan mientras los hechiceros comienzan a realizar gestos con las manos en movimientos muy rápidos y a cantar una especie de salmo.

Freya no responde. Simplemente esboza una sonrisa, dando por terminada la discusión mientras se acomoda mejor en el suelo sin perder detalle de lo que pasa en la choza.

Si Durza venía hasta aquí, y ella estaba fuera, tendría que entrar para recuperar a Robert. Además, dijera lo que dijera el "muchacho", no iba a dejar sola a quella gente contra un sombra. Total, él la quería a ella, y si la conseguía, no habría ninguna de aquellas "bajas" que había nombrado antes Ryan.

Y fue en ese momento cuando ocurrió...

Una sombra comenzó a surgir del cuerpo de Robert... toda la maldad que allí se encontraba comenzaba a tomar forma dentro de la cabaña...

Los ojos de Ryan se tornaron azules... como el cielo mientras que los de los diez brujos que se encontraban allí, se pusieron blancos como la nieve.

No pasaron más de dos segundos y una risa sepulcral comenzó a sonar en la sala mientras la nube negra tomaba forma...

Freya se pone en pie, sin dejar de mirar la sombra que va cogiendo forma y se coloca junto a Ryan, encarándola y preparada para enfrentarla cuando sea necesario. También mira de reojo a Robert y la reacción de su cuerpo a la salida de la "oscuridad" que tenía dentro.

Kirah, ¿lo sientes?

Pregunta con el ceño fruncido y sin perder la concentración.

La sombra lentamente salió por completo de Robert y se quedó allí, flotando sobre el suelo mientras tomaba forma humanoide.

Los brujos gritaron fuerte y a los cuatro vientos: ¡SOMBRA! mientras que Ryan comenzaba a tensar los músculos al mismo tiempo que sus ojos se tornaron completamente blancos.

¿Pensabáis que os ibáis a librar de mi tan facilmente? Dice Durza cuando entra en escena tras aglutinarse la sombra.

Perdoname por esto. Te dice Ryan al mismo tiempo que te coge la mano y la de Robert.

Como una exhalación, sientes como tu cuerpo se despega del suelo y comienza a desaparecer muy rápidamente de la sala donde te encontrabas. Tus oídos aún están allí durante unos segundos más, y logras escuchar los gritos agónicos y de dolor de los brujos que intentaban luchar contra él.

Después, la luz cegadora de la magia de Ryan se va desvaneciendo, mientras que comienzas a ver los ojos de tu dragona que te mira dulcemente, sabiendo que ahora vendría la reprimenda. Robert cae desmayado junto a tus pies, ya curado. Notas como su respiración es más tranquila y constante...

Freya se da la vuelta enseguida para encarar a Ryan.

¡¿Pero qué te crees que haces?! ¡Llévame de vuelta! ¡Ahora mismo! ¡Nos quiere a nosotros! ¿No lo ves?

Habla medio gritándole y gesticulando mucho con los brazos. ¿Quién se había creído para transportarla en contra de su voluntad? ¿Cómo había sido capaz de dejar tirada a tanta gente? ¿Qué iba a pasar con todos ellos?

Vete de aquí. Ellos estarán bien. Ahora toca escapar. Te dice Ryan mientras te sonrie.

Sé que te sentó mal lo que hice, pero era necesario. No podrías contra él y no puedo darme el lujo de perder a un Jinete. Así que vamos, debemos regresar a Ellesmera. Creo que allí te esperan.

Freya gira dando una vuelta alrededor, observando el punto donde debe estar Durza.

¡Pero...! Vuelve a mirar a Ryan. Se supone que... la razón de la vida de un jinete... ¡es salvar la vuestra! ¿Cómo puedo irme sabiendo la cantidad de muertes que va a causar ese desgraciado por mi huída? ¡Mi vida no vale más que la suya!

Añade, señalando con un brazo extendido el punto donde está la aldea.

No te preocupes por ellos. Morirán, pero regresarán mucho más fuertes, eso te lo puedo asegurar. Ahora, es hora de que te vayas, no podré protegerte contra el Sombra si nos descubre y está claro que si tu mueres, no regresarás mas fuerte que antes como los míos... ni tampoco regresará tu dragona. Hazme caso, vete. Nos volveremos a ver pronto. Te dice girándose hacia la aldea, intentando ver que está pasando allí.

Un poco a regañadientes todavía, Freya monta a Robert sobre Kirah y da la espalda a Ryan.

Seguiré agradecida con los tuyos. Pero no te perdonaré esto.

Luego sigue acomodando a Robert todavía dandole la espalda al rubio.

¿Estás bien? ¿Podrás llevarlo?

No quiere hablar sobre el incidente. Kirah lo sabe muy bien. Acababa de poner a toda una aldea en peligro por salvar a Robert. Sabía perfectamente que no habría podido con Durza... pero irse y dejarlo allí, no le parecía justo. Algo podría haber hecho. Siempre se puede hacer algo.

Claro que puedo con él... y contigo. Dice mientras agita las alas demostrando que ya se encuentra en perfectas condiciones.

¿Regresamos? Continúa mientras notas como si te guiñara un ojo.

Aún de mal humor, Freya asiente y se sube a lomos de la dragona, detrás de Robert para tenerlo controlado y que no caiga durante el vuelo. Se sube de un salto y sin problemas, demostrando que ya está acostumbrada a esa acción.

No dice una palabra, tampoco a Kirah. En cambio, busca la forma en que podría haber vencido a Durza... la forma en la que volver a esa aldea con la cabeza alta y no arrepentida por lo que había causado. La dragona ya sabía donde tenía que ir, así que ni se molesta en ver por dónde van siquiera, de modo que se sobresalta cuando aterrizan al ver que ya han llegado.