Partida Rol por web

Aventuras de la Legión del Trueno I

El alto concejo del trueno

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30/05/2013, 10:56
Gareth Bryne

El camino de regreso fue largo, y una vez pudimos salir de la zona, bastante tranquilo... lo cual no era algo que agradeciese, es más, una parte de mi hubiese deseado tener algún problema a la vuelta, algo en lo que ocupar la mente. Por desgracia, no hubo nada de eso, por lo que sin poder evitarlo, mi mente volvía a repasar una y otra vez lo que había pasado.

Los bandidos han debido quedar muy debilitados con todas las bajas que han tenido, y sin Walric para guiarlos, les será difícil organizarse... dudo que puedan causar muchos problemas en bastante tiempo- pensaba, intentando animarme con ello -Pero si Vargad y los demás tienen razón, el mayor problema es el bann, y lo que hemos hecho solo habrá servido para reforzar su posición- pensaba después, deseando que no fuese así, aunque sabía que Vargad era mejor que yo para percatarse de esas cosas, y que seguramente tenía razón -Si no nos hubiésemos confiado, si hubiese tomado mejores decisiones, podríamos haber capturado a Walric... y Magányos estaría vivo- me repetía una y otra vez, daba igual lo que hubiésemos conseguido, y daba igual lo que dijesen los demás, no conseguía quitarme de la cabeza que por mi culpa una compañero había muerto.

En esa dinámica pasé el viaje de vuelta, por lo que mi ánimo cuando llegué a la Fortaleza tormenta no era precisamente bueno. Tras dejar el caballo en los establos, me dirigí a los barracones a dejar mis cosas, pero lo que menos me apetecía era quedare allí dándole vueltas a lo mismo una y otra vez, por lo que fui hacia los baños, esperando que me despejasen la cabeza. No negaré que mi cansado cuerpo no agradeció el baño, pero seguía volviendo a pensar en lo mismo, así que al poco rato salí de allí y fui hacia el bar... si bebía lo suficiente, pensar no sería una opción.

Cuando entre pude ver a Sir Haguen en la barra, bebiendo solo. Pensé en ir con él, y que era el único al que conocía, pero la idea no acababa de convencerme... no parecía alguien que buscase compañia. Fue entonces cuando vi a Ciara, también sola y sentada en una mesa, por lo que tras ir a la barra y pedir 2 jarras de cerveza, me dirigí hacia donde estaba sentada.

Te importa si me siento- le dije mientras le ofrecía una de las jarras.

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30/05/2013, 17:51
Sondra Sotavento

Una vez cruzado el destartalado puente seguimos nuestro camino sin mirar atrás. El viaje trascurrió sin incidentes y pronto nos encontramos lo bastante lejos como para que una sensación de tranquilidad me invadiera. Pese a todo no llegue a sentirme segura hasta que tuve ante mis ojos la colosal estructura... habíamos llegado a  Fortaleza tormenta.

Tumbada en el catre y después de un placentero baño, mi mente no paraba de darle vueltas a algo.

Si pese  al apoyo de Ser Haguen la Legión no me acepta como uno de sus miembros ¿Donde iré?  Esta era mi oportunidad de empezar de cero... Pensé con tristeza.

Resuelta a no darle mas vueltas a la cabeza me levante y me dirigí a la taberna de la fortaleza, donde para mi agrado pude ver varias caras conocidas.

Mis pasos me llevaron a situarme a su lado y toque su hombro para llamar su atención.

-Lo he visto aquí solo y no he podido resistirme. Dije mientras miraba a Ser Hague con una sonrisa de oreja a oreja. A la próxima le invito yo. Es lo menos que puedo hacer para agradecerle su ayuda. Añadí luego.

-¿Puedo preguntarle algo? Sin esperar su respuesta continué
-¿Como es? Quiero decir... ¿Que se siente al formar parte de esta gran familia que es la Legión? En mi cara pese a querer disimularlo se reflejaba la melancolía y tristeza ante algo ilusionarte que quizá llegaba a su fin.

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30/05/2013, 19:28
Cassandra Adelchi

Por fin dejaron atrás el valle y con ella su prueba, cuyo resultado no conocerían hasta un nuevo amanecer. El viaje transcurría con tranquilidad, algo que no conocieron desde el momento que arrancaron sus pasos, discutiendo como pasar desapercibidos como un grupo de ávidos mercenarios. Pese a todo lo habían conseguido y el descanso devolvía poco a poco el ánimo de la iracunda Cassandra, reflejado en sus comentarios de lo ocurrido llenos de nostalgia como si de una lejana anécdota se tratara. Menuda nos preparó Sir Haguen en el bosque, os acordáis cuando casi consigo degollar a dos lobos a la vez,…
Las bromas se sucedían y la distancia se hacía más liviana,…si hubieses amenazado a los bandidos como lo hiciste con los mercenarios, valiente Erackand, estoy segura que Waldric hubiera intentado alistarte, incluso seducirte…
También ayudaron los momentos de camaradería,…temí mucho por tu vida, Ciara, me alegro de verás de que lo consiguieras y que salvaras a Amon, pareció que lo habías sacado del mismo infierno, no quiso dejar bandido con vida, tras una carcajada se ruborizada consciente la similitud que había en ambos en ese aspecto. 
Sin embargo era fácil ver en los ojos de los aspirantes a legionarios que su charlatanería no bastaría para paliar esa sensación de derrota que los inundaba por la muerte de Magányos, cosa que ella misma había estado superando desde su primer intento desesperado por salvarle.
Hasta que las puertas de le devolvieron a la realidad, su aventura llegaba a su fin. Gracias Sir Haguen, ha sido un honor luchar a vuestro lado. Contestó con solemnidad a su instructor del que poco sabrían a partir de entonces. Se retiró entonces como el resto para descansar y acomodarse para una previa celebración del resultado, fuera o no un éxito, algo que de cualquier forma se merecían.
Su hermosa figura cruzaba entonces el umbral de la puerta bar, desprovista de su armadura y con ligeras prendas de telas exóticas. El pelo por primera vez suelto en una larga y rojiza melena repartida entre su espalda y su pecho como las raíces de un gran árbol. Una imagen que rompía esa guerrera que todos habían conocido, salvo por el pequeño filo que se abrazaba a su pierna.
Se alegró de inmediato al ver a Gareth y a Ciara, aquellos con los que más sentimientos había compartido, dirigiéndose entonces grácil y ajena a la presencia de Sir Haguen. Se sentó junto al elfo y recogió la jarra que Gareth se había servido, con gran habilidad. Espero que tengáis ganas de celebrarlo, pase lo que pase mañana, esta será nuestra alegre despedida. Para entonces su brazo ya había abrazado a Ciara apretando su hombro con intensidad y su imborrable sonrisa se dedicaba a la mirada del líder que les había llevado hasta ese momento.

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30/05/2013, 20:44
Erackand Goldhammer

El baño limpió su piel y la comida restableció su vigor. El camino, aunque duro, fue un mero paseo para su constitución de oso. Pero su orgullo, roto y recompuesto rápidamente intentando buscar de un modo extraño una nueva forma de honor se había desconyuntado cuando vio cómo decapitaban a Maganyos.

Prometió conseguir que vivirían todos y que sobrevivirían, les pidió que confiasen en él y falló a Maganyos. Se habría dado cabezazos en la pared si hubiese servido de algo. Pero nada lo traería de vuelta. Erackand Goldhammer, el guardia de élite de Orzammar, hijo del capitán de la guardia, guerrero admirado y caído en desgracia no sabía qué hacer.

Ensimismado bajó a la taberna y con ojos cetrinos cogió una cerveza. Era muy floja pero quizá si bebía suficientes ... Vació una jarra y otra y otra después de aquella y luego pidió otra más y cuando comenzó a sentir los ojos turbios y la mente extraña sacudió la cabeza, hizo un ruido extraño, como de hartazgo y salió un momento fuera. Vomitó y se sintió mejor. No era fácil tumbarle completamente, pero estaba completamente determinado a embrutecerse. De modo que pidió otra jarra y otra después.

El resto del grupo fue llegando y poco a poco el humor de Erackand fue mejorando. Tal vez, con aquellos compañeros, si le admitían, podría encontrar el respeto por sí mismo que tan desesperadamente buscaba.

…si hubieses amenazado a los bandidos como lo hiciste con los mercenarios, valiente Erackand, estoy segura que Waldric hubiera intentado alistarte, incluso seducirte… dijo Cassandra alegre.

Claro moza, hasta podría haberse enamorado de mí, a pesar de la barba.

Esperó pacientemente hasta que llegase Vargad.

Ven hermano, voy a enseñarte a beber como un enano.

Y el tiempo discurrió. Tal vez las afrentas doliesen algo menos, tal vez ...

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31/05/2013, 02:45
Amon Erhmantraut

El viaje por el Bannorn sobre las monturas que había conseguido Sir Haguen fue mucho mejor de lo que fue el viaje a pie que le precedió. Estuvimos juntos viajando mientras algunos hablaban de manera distraída mientras que otros como yo guardamos silencio. A pesar de mi poca interacción con el resto en palabras, si estuve presente en ánimo y reí con los comentarios graciosos de otros.

Finalmente llegamos a la Fortaleza Tormenta, puerta que divisé cuando ya estaba encima nuestro. Nunca he sido alguien muy alerta y se nota. Al momento de cruzar el umbral analicé el motivo de mi silencio y entendí que fuera de comprender a cabalidad el aporte de nuestro logro y la misión cumplida, en realidad quedé con gusto a poco.

Acabamos con la amenaza inmediata de los bandidos. Quedan menos, mal organizados, no liderados de un líder terrible y cazados como animales por los hombres del valle. Pero habría disfrutado más acabando hasta el último de ellos y luego eliminando la amenaza que significa el Bann, pero siempre estuve consciente de que somos poco para llegar tan allá. Tal como dijeron otros, investigar eso es labor de la Legión del Trueno, pero el hecho real es que nosotros no somos aun la Legión del Trueno y quizás nunca lo seamos. Ir allá solo habría sido buscar nuestra muerte sin obtener mucho resultado.

Ahora estoy en el interior y me dirijo a los baños donde limpio mi cuerpo con gran dedicación para sacarme la suciedad que llevo desde la última posada en la que nos alojamos. Disfruto cada gota de agua que baña mi cuerpo hasta quedar limpio por fuera y por dentro, pues mi interior se calma de culpa y frustración en cada segundo.

Después llego finalmente al Bar y veo a Sir Haguen sentado junto a Sondra, lugar al que no me dirijo para no interrumpir. Luego veo a Ciara, Cass, Gareth y Erackand en una mesa, hacía donde voy y me siento. Pido una jarra de cerveza y les saludo:

 - "Hola a todos. Espero que no se hayan hartado lo suficiente de mí durante nuestro viaje para que me aguanten un rato acá, antes de lo que sea que nos espere mañana. Por mi parte he disfrutado mucho la compañía de ustedes, todos ustedes."

Miro alrededor y veo que Vargad aun no ha llegado, por lo que mis palabras son sinceras, ya que es él el que ha dado la nota gorda y ha sembrado las semillas de la división del grupo con sus prejuicios y sus intolerancias. A pesar de todo, no le tengo rencor, sino que siento pena de él, por todo lo que el Círculo ha afectado su pensamiento y como ellos le han lavado el cerebro hasta el punto de no ser capaz de ver a su alrededor.

Bueno, no hay peor ciego que el que no quiere ver. Además, de una u otra forma, no volveremos a vernos lo suficiente como para que intente dañarme de alguna manera, por lo que me desentiendo del problema que significa un mago de pocas miras.

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31/05/2013, 04:08
Director

Sir Haguen miró con cierta incomodidad a la bella Sondra que se había sentado junto a él. El ex caballero esperaba que la mujer estuviera buscando compañía, o al menos eso esperaba dada la cordialidad inesperada de aquella mujer. –No he ayudado en na...- respondió a medias pues Sondra seguía hablando. Al final, cuando esta formulo su pregunta, Sir Haguen se limito a encogerse de hombros para después llevarse algo de alcohol a la boca.

Sondra sintió que el legionario le daba la espalda y que no le diría nada, pero súbitamente este empezó a hablar.

-No soy yo el indicado para responderte eso, no soy de los que hacen amigos y solo he tenido una familia en la vida. Pero hablando por los demás, te puedo decir que de lo que escuchado, todos se sienten muy unidos entre si, prácticamente se podría decir que todos se consideran hermanos. Una vez que sean legionarios y estén allí afuera, su líder por mas antiguo que sea será simplemente uno mas de ustedes, un miembro de la legión del trueno, un guardián del reino. Aunque claro, siempre puedes encontrarte a alguien como yo que no cree en esas tonterías-.

Algo retirados de estos dos, se encontraban el resto de los legionarios. Dialogando placidamente recordaban sus aventuras al tiempo que bebían sin reparos. El rumor de su éxito ya se había corrido sin muchos detalles a lo largo de la fortaleza y ya otros aspirantes les habían felicitado al igual que muchos legionarios, sobre todo los recién integrados.

Notas de juego

Todos: Intentaré responder rápido a sus post, probablemente una vez por día sin importar si postean poco o mucho. Eso si, consideren que el tiempo se me viene encima y que por tanto habrá que finalizar esto pronto, a mas tardar el lunes entramos con el asunto del consejo. Si quieren fraternizar y darle buen fin a su relación de equipo aprovechen estos 3 días.

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31/05/2013, 04:22
Ciara Tinuviel

Ciara no puede evitar sonrojarse ante el comentario de Cassandra, así como tampoco pudo disimular la alegría y calor que sientió al ver como sus compañeros van llegando y la van acompañando. Sin duda se siente feliz de que Cassandra y Gareth decidan juntarse con ella a beber, y de más honrada al compartir la mesa con Erackand. Casi imperceptiblemente desvía una mirada a Sondra que se juntó a beber con Haguen - ¿De qué estarán hablando? Sin duda son dos personas muy duras, es normal que tengan algo de qué hablar - Desde que había comenzado el viaje Ciara no había tenido un momento de completa paz con sus compañeros, la sensación era extraña, pero agradable. La camaradería hace que la elfa se deje llevar y tome una o dos jarras de cerveza, quizá no bebería tanto como Erackand, pero ya se empezaba a sonrojar y le costaría un poco volver a la cama en línea recta si seguía bebiendo, por lo que prefirió cambiar por agua por el resto de la noche. 

En cuánto Ciara encuentre un hueco en la conversación y sin dirigirse a nadie en especial: - La verdad ha sido muy gratificante compartir el viaje con ustedes.

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31/05/2013, 16:50
Vargad Targen

Tras el largo viaje llegamos por fin a la Fortaleza del Trueno, en cuyas puertas Sir Haguen nos revela su aprobación hacia nuestros actos.

La verdad, aunque nuestro éxito no ha sido mayúsculo debo estar bastante orgullo, el objetivo era dificil, nuestra preparación nula y nuestro grupo demasiado dispar. Lo único malo es la muerte de Magaynios aunque, a decir verdad, me hubiera dolido mucho más que hubiera muerto cualquier otro. Salvo Amon, claro está.

Tras darme un largo baño y usar mi magia para curar los últimos vestigios de mis heridas me pongo una muda limpia y me dirijo a la cantina. Es solo cuestión de tiempo que los líderes de la Legión nos llamen por lo que espero aprovechar el tiempo con mis compañeros, recuperando mi cuerpo y, especialmente, mi mente, torturada por el uso excesivo de magia.

Nada más bajar veo a mis compañeros sentados hablando alegremente, salvo Sondra, que habla con Sir Haguen, apartados del resto. Erackand me invita a beber y, aunque no veo que sea mala idea, debe esperar -Claro hermano, siempre me atrae aprender cosas nuevas. Pero déjame un segundo. Ciara, ¿puedes venir un momento?

Tras lograr que la hechicera se aparte un momento del resto del grupo me siento a su lado, en un lugar apartado. Te debo una disculpa, aunque no me arrepiento de mis actos. Los apóstatas son seres peligrosos y se debe ser precavido con ellos. Quiero que sepas que si mis sospechas hubieran sido ciertas te habría matado sin dudarlo-de mi túnica saco un pequeño libro que dejo sobre la mesa.

Observa-continúo, abriendo el libro por su última página, donde está escrito en sangre el nombre de Erackand Goldhammer. Paso páginas hacia atrás, mostrando nombres de numerosos individuos, hasta pararme varias veces en algunos tachados, también con sangre -los nombres aquí escritos son de mis hermanos, de personas en las que confiaría la vida, personas que se han ganado mis respetos. Estos tres, los que están tachados, murieron en manos de apóstatas. Eran buenas personas, magos de El Círculo, bondadosos y excepcionales. Quiero que veas que los magos no inscritos a El Círculo son peligrosos. La mayoría son seres orgullos de una avaricia sin límites, dispuestos a matar a cualquiera. No es tu caso, por suerte. Incluso en el propio Círculo se cuelan algunos de estos individuos-mi mirada es clara, directa hacia Amon.

Sigo pasando páginas, parando en algunas con nombres tachados, para que Ciara reflexione sobre mis pérdidas. Finalmente llego a la primera página, al primer nombre, tachado con sangre seca y antigua. El nombre no es otro que el mío -Ciara, me temo que hemos nacido en lugares muy dispares. Yo he aprendido a valorar El Círculo pues ellos me salvaron de la muerte hace muchos años, cuando estuve encerrado en una prisión. Nuestro pueblo, los elfos, son casi esclavos de los humanos, seres inferiores que, según ellos, no se merecen nada. Nosotros, tu y yo, tenemos un don, la magia, un poder que puede hacer de nosotros personas de prestigio, importantes-mis palabras revelan mi propio el objetivo, el cual solo he reconocido a unas pocas personas, la mayoría ya fallecidas -es nuestro deber lograr que nuestro pueblo sea tratado mejor, que se le reconozca un puesto digno en la sociedad. Quiero que, si aceptas, consigamos juntos ese objetivo. Puede que El Círculo te acepte, si viajas conmigo. Eres una buena persona, encantadora. Quiero que, si sientes algún vínculo de hermandad conmigo, firmes con tu nombre en este manuscrito, ligando así nuestros destinos en un mutuo respeto.

Tiendo el libro a Ciara, mirándola fíjamente, con decidisión y simpatía.

Tras su respuesta me acerco a Erackand y apoyo mi mano en su hombro -Enséñame ese noble arte, hermano.

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31/05/2013, 20:11
Sondra Sotavento

Di un largo trago a mi jarra de cerveza mientras esperaba la respuesta de Ser Haguen. Esta parecía que no iba a llegar nunca,  pero entonces las palabras comenzaron a surgir de su boca.
Por sus palabras, la Legión del Trueno era todo lo que yo esperaba, todo lo que necesitaba.  Sin embargo no puede guardar silencio ante la actitud de Ser Haguen y quise hacerle entender mi postura aun a riesgo de que se molestara.

-Ser Haguen se que le importara un cuerno mi opinión, pero aun así tengo que decirlo. Dije mientras refrescaba mi garganta con un nuevo trago. Esa coraza que le protege de los demás le hace mas mal que bien. Seguro habrá pasado por cosas horribles en su vida, yo también, pero aislarse del resto del mundo acabara  destruyéndole por dentro. Cuando termine la frase me puse en pie y termine de un trago lo que quedaba en mi jarra. Después hice ademan de irme junto a mis compañeros, pero me detuve  y me gire hacia Ser Haguen.

-Venga conmigo y siéntese con nosotros, al fin y al cabo usted también a formado parte de todo esto, es uno de nosotros. Dije mientras le guiñaba un ojo y continuaba mi camino.

Cruce la taberna hasta la mesa de mis compañeros y al llegar salude a todos efusivamente. Algunos se tomaron mejor que otros mis besuqueos, pero  ninguno pareció molestarse demasiado.

-Aun estáis así... Dije en señal de desaprobación al ver lo “frescos” que se encontraban. ¡Ehhh el de la barra!¡Aquí tenemos sed. Llene estas jarras! Dije a todo pulmón entre risas mientras me acomodaba junto a Gareth con la jarra aun en alto.

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01/06/2013, 00:05
Gareth Bryne

¡Oye!, pero que...- empecé a decir cuando note que alguien me quitaba mi jarra, pero me calle cuando vi que era Cassandra... aunque me costó un poco reconocerla, pues no iba vestida como de costumbre -Bueno, pues yo tengo la intención de emborracharme, así que creo que voy a tener que conseguir más bebida- dije, simulando resignación, por lo que fui a por más. Una vez en la mesa, empecé a beber, mientras charlaba con Sondra y Cassandra, y también con Erakrand, que se nos unió al poco rato.

Claro Amon, siéntatate y bebe algo- le dije a Amon cuando llegó para luego mirar a Ciara, que había cambiado la cerveza por agua -Vamos, no seas así, bebe un poco más- le dije, ofreciéndole otra jarra... estaba claro que no estaba acostumbrado a beber tanto -Sondra, siéntate, así se habla, dile a Ciara que no puede beber solo agua... ¡bebidas para todos!- le dije cuando llegó.

Ya estamos todos... o al menos todos los que habíamos vuelto- pensé, sin poder evitar acordarme de Magányos -Creo que aun no he bebido bastante- me dije.

¡Por los caídos!- grité, levantando la jarra.

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01/06/2013, 00:40
Sir Haguen Danprhel

Sir Haguen escuchó con atención lo que Sondra le decía sin girar su vista hacia ella, y ante sus sabias palabras el es caballero se limitó a responder –Eso ya lo he escuchado antes, nada puede destruir algo que ya ha sido destruido por dentro-.
Sondra temió que con esas palabras Sir Haguen la dejase marchar, pero para su sorpresa le acompaño hasta donde estaban los demás. Sorprendidos, todos guardaron silencio al verlo llegar por un tiempo que pareció ser una eternidad.
Fue el mismo Sir Haguen quien rompió el silencio al levantar su baso de cristal en lo alto –Salud por los nuevos legionarios. Que la vida les aguarde un largo destino y que tanto sus sueños como sus metas logren cumplirse-.
A pesar de sus palabras Sir Haguen se notaba tan serio como siempre y no se le veían reales intenciones de que quisiera quedarse con ellos. Sin embargo el hecho de que se hubiera levantado de donde estaba para darle sus buenos deseos era una clara señal de que se habían ganado su respeto y quizá incluso su admiración. Incluso los había llamado legionarios por lo que era muy probable que sus palabras ante el consejo hubieran sido positivas para ellos.

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01/06/2013, 11:38
Erackand Goldhammer

Erackand vio llegar a Vargad y se sorprendió al verle acercarse a Ciara y mostrarle el libro. Su mirada era aprobadora.

Nadie dijo que fuese arte o fuese noble, aunque es muy divertido. dijo respondiendo a Vargad

Ciara pidió agua y Gareth intervino con muy buen criterio.

Bien dicho. El agua sirve para bañarse, aunque algunos se la beban. Yo sólo la bebo cuando no puedo beber otra cosa.

Luego se dirigió a Ciara

Si no puedes con el alcohol no bebas o mejor come algo.

Sir Haguen apareció a su lado. Erackand le miró un momento y recordó las duras palabras y el empujón que aprovechó para darle cuando estaba disfrazado de mendigo. Cogió una silla y la puso a su alcance.

Sientese y beba con nosotros.

Coreó con fuerzas los brindis de Gareth y Sir Haguen. Miró al mozo. Al final había sido buena idea su liderazgo. Le había cogido el tino y él estaba mejor sin grandes responsabilidades ni quebraderos de cabeza.

Se levantó y alzó la jarra.

Escuchad camaradas. Voy a enseñaros a beber como enanos. Hay que beber la jarra en menos de cinco segundos. Quien se moje la barba pierde. Paró un momento a reflexionar. O la barbilla.

Y para demostrarlo engulló la jarra toda de un solo golpe. Quien se preocupase en medir el tiempo se daría cuenta de que no había llegado a los tres segundos.

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01/06/2013, 18:04
Cassandra Adelchi

Su entrecejó se cerró hacia Vargad cuando apartaba a su acompañante de la mesa, pero al percibir sus intenciones prefirió dejar que resolvieran sus problemas con diplomacia, aunque no podía evitar leer de cuando en cuando los ojos de la frágil Ciara. Corta el rollo Amon, le dijo agarrandolo del cuello y obligándole a sentarse, rápidamente se acercó traviesa a su oído para susurrarle, si consigues derrotar a Erackand en un duelo de cervezas, me desnudaré para tí. Estaba especialmente atractiva esa noche, a pesar de ser un elfo, sabía bien como explotar sus encantos y camuflarse entre los humanos, algo que su extraño acento ayudaba a confundir.

¡En paz descansen y no regresen! Contestó alzando la jarra junto al grito de Gareth, sus mejillas comenzaban a sonrojarse, el peso de sus corazones se aligeraba en forma de un candente sentimiento de victoría. Estaba orgullosa y satisfecha de haber conseguido que Sir Haguen les llamara legionarios, aún exisitiendo la posibilidad de que el consejo rechazara su nombramiento.

Tras ver la enorme habilidad del enano, no dudó en implicar a más gente en su travesura. Apuesto a que Sir Haguen puede mejorarlo, ¡quién da más! Sus ojos buscaron los de Gareth y Amon, en pos de provocarles.

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01/06/2013, 20:22
Amon Erhmantraut

Comienzo a beberme la cerveza cuando escucho las palabras que Cassandra me dice al oído, momento en el que mis ojos se abren como platos y me pongo un poco colorado. Mirándola de arriba a abajo noto que tiene una belleza enorme y muy, muy sensual. La verdad es que a pesar de toda mi personalidad solo tengo dieciocho años y nunca he visto a una mujer desnuda, pues en el Círculo solo me encerraba a estudiar y no tenía muchas relaciones sociales que digamos.

Le contesto sin dudarlo:

  - "¿Ganarles en un concurso de beber? ¡Les mataré a todos si es necesario para vencer!" -Digo entre risas mientras levanto la jarra y vuelvo a hablar- "¡Yo les venceré a todos!"

Sigo bebiendo al momento que me doy cuenta de que nunca he bebido demasiado e imagino que eso me jugará en contra, pero que no me importa si está la posibilidad de vencer. Solo me juega a favor que Erackand ha bebido harto antes de llegar a la mesa, por lo que tiene parte del trabajo hecho.

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02/06/2013, 18:57
Director

-Lo lamento pero no bebo por diversión- dijo Sir Haguen con su característico tono. –De hecho he de retirarme ya, tengo que salir de nuevo mañana y embriagarme esta noche sería un grave error. El mismo consejo les doy a ustedes, no es buena idea que en su presentación ante el consejo tengan efectos secundarios por este borrachera-.

Sir Haguen se mostraba algo apurado, quizá realmente tuviera prisa o quizá simplemente no le gustaba convivir del modo en que el resto lo hacia. –Solo he querido felicitarles y desearles buena suerte. Recuerden todo lo que han aprendido y no dejen de aprender cada vez mas; les espera un largo y difícil camino en el cual su experiencia será fundamental. Que pasen una buena noche, nos veremos con suerte en unos cuantos días-. Concluyo Sir Haguen para enseguida retirarse del lugar.

Notas de juego

Todos: Se va el tiempo señores, ya no pueden hablar con Sir Haguen, no por que no puedan gritarle sino por que no podremos postergar esto mucho mas. Mañana pasado el medio día estaré actualizando.

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02/06/2013, 21:09
Ciara Tinuviel

Ciara se muestra invadida cuándo Vargad la separa del grupo, bajando la mirada y apretando fuerte su jarra le responde: - Yo... lo siento, no puedo firmar tu libro. Yo... me quiero quedar aquí. Luego espera a que el elfo le deje para volver con el grupo.

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02/06/2013, 22:42
Sondra Sotavento

Cada brindes que hacían mis compañeros lo celebraba dando vítores y golpeando la mesa con la jarra. El liquido de su interior se derramaba sin control, pero poco me importaba, supongo que la bebida comenzaba a hacerme algún efecto.

-Ser Haguen quédese un poco mas, no sea agua fiestas. Dije fuera de tiempo ya que él ya se había marchado.

-Solo falta un poco de música... Dije mientras buscaba algo entre mis cosas. Tocare para vosotros, algo que aprendí de mi padre.

Me lleve la armónica a los labios y tome aire al tiempo que colocaba mis manos en posición. La melodía surgió del instrumento tal y como la recordaba. Mientras tocaba las lagrimas comenzaron a caer por mis mejillas. Lloraba de alegría por haber conocido a tan buenos compañeros. Tambien de tristeza al saber que quizá no volviera a verlos.

Toque una y otra vez esperando que este momento durara para siempre...

 

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04/06/2013, 01:31
Gareth Bryne

No sabía que le había dicho Cassandra a Amon, pero parecía haber funcionado, pues parecía decidido a vencer a Erackrnad bebiendo, cosa que yo también me propuse.

Así se hace Amon, demostremosle que los enanos no son los unicos que saben beber- le dije -Y, si vencemos a nuestro amigo enano pues... no sé ¿se os ocurre algo?- añadí... se notaba que hacía rato que la bebida había eliminado cualquier pensamiento coherente de mi cabeza.

Al poco rato, Sir Haguen dijo que se iba, aunque Sondra intento detenerlo sin mucho éxito -Eso, no se vaya- le dije yo también a Sir Haguen, aunque algo tarde -Bueno pues más para nosotros- dije al ver que se había ido ya. Luego empezó a tocar Sondra algo de música, y la verdad es que lo hacia bien... o al menos me lo parecía, y en mi estado, seguramente cualquier música me parecería buena.

Eso es música- le dije entre canción y canción -Vamos Ciara, acompáñala cantando- añadí

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05/06/2013, 03:40
Director

La noche se había asentado ya en plenitud y la madrugada estaba a unas horas de llegar cuando el grupo decididlo por fin dar terminada la reunión para retirarse a descansar. Al día siguiente tendrían la reunión ante el alto consejo del trueno, y si las cosas les iban bien, probablemente serian nombrados legionarios.

Notas de juego

Ultimos turnos.

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05/06/2013, 04:59
Director

La mañana llego fresca y luminosa para los aventureros quienes habían tenido que enfrentar todas aquellas dificultades en los últimos días. Ahora todo quedaba atrás, no mas pruebas, no mas difíciles entrenamientos.

Afuera se podía escuchar la faena de los nuevos reclutas quienes probablemente habían estado despiertos desde muy temprano. Ellos ya habían pasado por todo eso y sabían lo difícil que era; pocos lograban llegar a la prueba final en la cual ellos sentían habían salido victoriosos también.

Tras un rápido y placentero desayuno, el grupo se dispuso a presentarse ante la sala del consejo en fortaleza tormenta. Ya habían estado en aquel edificio antes, conformado por una gran torre algo destruida rodeada por amplio edificio en forma de anillo, el centro mando de la fortaleza o también llamado la torre del trueno, era el lugar mas simbólico de aquel lugar. Allí solo los mas importantes de entre los legionarios tenían sus habitaciones, aunque rara vez permanecían en ellas. Además se decía que allí estaban guardados importantes documentos y objetos que la legión había ido acumulando durante su corta existencia.

En el edificio central, se encontraba la torre misma, la cual se creía originalmente era de 8 pisos, ahora los últimos dos estaban destruidos y eran inaccesibles. En el 6º piso, el mas alto en la actualidad, era donde se encontraba la sala del consejo de la legión del trueno, lugar donde el alto consejo debatía y planificaba todas las operaciones que la legión habría de desempeñar en nombre del rey. Allí afuera, el grupo de ahora solo 7 personas, esperaba a ser llamados.