Partida Rol por web

La sala en la que os encontrais está hecha, como todas las demás de piedra. El techo se encuentra a unos 15' del suelo y en 4 direcciones se encuentran las salidas de esta sala.

Casi última, Amira rompió filas y se adelantó hasta donde le esperaban su equipo y el medio de transporte. Una vez se hubo calzado todas sus pertenencias, rompió la vara, y una súbita fuerza la arrastró hasta algún plano que ya había visto, pero tan fugazmente como ahora. De repente se encontraba en una habitación cuadrada y monótona, junto a otro hombre.

La muchacha era esbelta y bella, de pelo tan blanco como la nieve. Llevaba bastante indumentaria, sin duda mágica por los intrincados diseños que la adornaban, así como una ballesta y una lanza. Su piel estaba adornada por tatuajes, incluso en la cara, aunque de naturaleza puramente decorativa.

Suerte que no me tocó con un adefecio

Saludó con una simple inclinación de cabeza, y comenzó a escrutar los alrededores.

-Hora de moverse. No tardaremos en toparnos con otro grupo- dijo. Comenzó a caminar, y se notaba que intentaba disimular sus pasos y también su figura, pero también se notaba que su entrenamiento en tales tareas era practicamente nulo.

Rompí la vara con determinación y me vi transaportado a la sala junto con, al parecer una maga de algún tipo...

Tras mirarla con detenimiento asentí ante su comentario...

Sin embargo, necesito un poco de tiempo - le digo mientras invoco mi cuchilla, con forma de espada larga -

Me enfoco psiónicamente con una acción de movimiento e imbuyo mi cuchilla para poder realizar un impacto psíquico en mi siguiente golpe con ella...

Luego, desmaterializo mi cuchilla y comienzo a sacar un exilir de furtividad de mi mochila...

¿Quieres uno? - le pregunto refiriéndome al elixir - Te ayudará a ser más silenciosa...

-No, gracias- dijo Amira, despreciando el ofrecimiento con un gesto.

Lo último que quiero es ser primera sangre porque un sabelotodo intentó envenenarme.

Como quieras - le dije mientras me encogía de hombros - No seré yo al que tomen desprevenido  - termino con una sonrisa, tomando la poción de un trago -

Puedes "ir a la cabeza" - agregué - Yo te seguiré oculto - terminé con una sonrisa -

Por cierto - le dije cuando la idea se me cruzó por la cabeza - ¿Eres capaz de encontrar las trampas que podamos encontrar en el camino? -

Si no lo es, ya tenemos otro inconveniente añadido a la lista - pienso mientras espero su respuesta -

Cuando termino de hablar, pongo en funcionamiento mi anillo y me vuevlo invisible, para luego comenzar a caminar tras "mi compañera" con paso sigiloso y cauto...

Amira se movía lo más silenciosa que podía, aunque ello no daba mucho resultado.

-No, no puedo. Ahora cállate- le espetó al tipo detrás suyo, y volteó para encararlo. No había nadie. Tomó la lanza entre sus manos. -¿Dónde estás?- inquirió, con tono amenazante.

Ufff... - pienso cuando me da su respuesta - Esto estará complicado...

Aquí - le digo, como si ello significara mucho - Pensé que habíamos quedado en que te seguiría estando oculto - le dije - No te preocupes...no necesitas ser tan...precavida - paranoica, pensé para mis adentros - No te haré daño...¿Qué beneficio podría ofrecerme? - le pregunté y no pude evitar esbozar una sonrisa cuando hice la pregunta... aunque, por mi tono, dejaba bien en claro que no quería que respondiera nada, sabía perfectamente los pros y los contras que matar a un compañero podía significar-

Ahora camina - le dije con tono un poco enfadado, ya empezaba a impacientarme - No servirá de nada que esté oculto si tu te la pasas hablandome - terminé -

Cuando irá a entender que no voy a hacerle daño - pienso mientras espero que se mueva, para poder seguirla y empezar, de una vez por todas, con lo que vinimos a hacer a éste torneo... -

-Deberías haberme avisado que te volverías invisible...- le reproché. Sin más dilaciones, continué mi avance. Me colgué la lanza a la espalda, para sacar la ballesta y cargarla con un virote. A continuación, seguí caminando lentamente, mientras prestaba atención al entorno.

Seguí, oculto y en silencio, unos pocos pasos a mi compañera...

Pretendía seguir con la misma conducta, caminando tras ella e intentando encontrar contrincantes... 

Guíanos  - le susurré al oido inclinándome hacia delante, una vez llegué hasta su altura -

vi el movimiento, pero he tenido un dia de perros hoy entre el trabajo(jefe inaguantable) y novia(jefa de la que si te quejas te pega XD). Mañana os pongo la nueva sala que tengo un montón de escenas aún por leer. Sorry.

que cualquiera de los dos me ponga un post tipo "cambianos de sala" para que me salga en novedades mañana, please

los jugadores se van a la sala 19

La sala en la que te encuentras está hecha, como todas las demás de piedra. El techo se encuentra a unos 15' del suelo y en 4 direcciones se encuentran las salidas de esta sala.