La mujer parecía ofendida. Sin duda ella sí que tenía tratos con el tal Juvinal Priator si sabía lo suficiente como para conocer uno de sus escondites, e insinuar que él se relacionaba con los "descuartizadores" no le había sentado nada bien.
— ¡Pero si nadie sabe quienes son! ¿Cómo no podéis saber eso? Llevan meses apareciendo cuerpos descuartizados. Primero fue esa noble, luego el tipo forastero con su nave, después le tocó a Callisto*... Algunos dicen haber visto de lejos figuras encapuchadas, pero si alguien estuvo tan cerca como para verlos bien, seguro que también está muerto. —
*Conocéis los nombres de los asesinado y no hay ningún Callisto, pero por el orden en el que los ha nombrado, podría ser la identidad del cuerpo que los de Resaca entregaron a los arbitradores para argumentar que también había víctimas en los bajos fondos.
Si, si, ya se que nadie sabe quienes son esos malnacidos, de saberlo seguro que ya les habrían dando una lección o estarían bajo el agua, a lo que me refería es que quizás Juvinal se había metido en problemas con esos tipos, estate tranquila, aquí todos somos iguales, tenemos que ayudarnos entre nosotros, los de allí arriba, - indico con una mano el centro de la ciudad-, no nos van a ayudar, para ellos no valemos nada, esos descuartizadores dan mucho miedo, lo ultimo que quiero es encontrarme o llamarles la atención, ya me entiendes.
Si veo que no nos cuenta nada mas interesante nos despedimos de ella y de Yantra y nos marchamos hacia el embarcadero de Celestina, a la granja de pescado.
- Jo-der - pensó Nero, vigilando los alrededores mientras escuchaba a "Gigi" hablar con aquella mujer. - Así que esos descuartizadores ya llevan tiempo, meses, haciendo de las suyas, presumiblemente empezaron por los peores barrios... - siguió rumiando Nero en su fuero interno.
Sorprendentemente, Gianna parecía haber conectado de algún modo con aquella desgraciada, y él asumió un papel menos agresivo, más a remolque de ella. - Llevo demasiado en la trena como para saber eso. ¿De donde han salido esos putos descuartizadores y qué cojones querrán? - dijo por lo bajo pero lo suficientemente alto para que la mujer le escuchara. Nero conocía lo suficiente la naturaleza humana como para saber que, si ella sabía algo más, seguramente lo diría para demostrar su superioridad y valía, así eran los habitantes de sitios como aquel, dispuestos a hacerte ver que sabían más que tú y que eran valiosos para algo - ¿Y nadie aquí hace nada? Los resaca suelen meter en cintura a quienes les vacilan, no? ¿Les dejan hacer? Joder...desde luego alguno de los jefes de los resaca debe estar muy cabreado. ¿no? - preguntó, intentando sonsacar alguna información sobre aquella banda, algún hilo del que tirar.
Buscó unos tronos y los dejó en la mano de la mujer, lo suficiente para dos o tres comidas decentes.*
- Yantra es un buen tío, y tú también. Gracias amiga. - le dijo.
Motivo: Indagar
Tirada: 1d100
Dificultad: 71-
Resultado: 39 (Exito) [39]
*No sé cuanto será eso. Tú dirás DM.
Pruebo con un indagar a +0 de dificultad.
4 grados de éxito.
Si das algún bono más, más grados.
Bueno, recojo el testigo de Nero, ya me he puesto al día. Menuda hay montada aquí. XD
Director: Te he cambiado el formato del texto. A ser posible, intentemos hacerlo todos igual para facilitar la lectura. (Negrita para hablar, cursiva para pensamientos, negrita+cursiva para susurrar; lo habitual en el foro)
La vagabunda ya no esperaba recibir nada, de modo que aceptó muy agradecida los tronos de Nero, y eso sin duda le soltó la lengua, o tal vez es que ya llevaba mucho hablado y no tenía autocontrol. En cualquier caso, contemplaba extasiada los tronos mientras los guardaba y continuaba con su conversación.
Nero: presumiblemente empezaron por los peores barrios...
— Algunos creen eso, pero no, comenzaron seguro por una noble. — repitió con sinceridad la pobretona — A nadie le importaba un carajo hasta que comenzaron a aparecer por aquí abajo, y entonces fue cuando se lio la tremenda. Los que podían huyeron o se escondieron, y los que se quedaron casi no hablan de ello, creen que así los dejarán tranquilos. —
Nero: ¿Y nadie aquí hace nada? Los resaca suelen meter en cintura a quienes les vacilan, no? ¿Les dejan hacer? Joder...desde luego alguno de los jefes de los resaca debe estar muy cabreado. ¿no? -
— Lo están. Para que la tríada al completo se haya reunido esto debe ser muy grave. Si esto no se resuelve podrían convocar una guerra. — La vagabunda se calló de repente, como si se hubiera dado cuenta de que había hablado de más. — ¡Tengo que irme! — y agarrando a Yantra por el costado se lo llevó de allí a toda prisa, con el pobre desgraciado aún murmurando — No, no. Tienen que protegerme. Tienen que protegerme... —
Nero, tenías 3 tronos sueltos apuntados en el equipo, pues redúcelos a 0. Para alguien como ella eso servirá para comer basura caliente un par de días.
Nero reprimió una sonrisa al escuchar a la mujer hablar atropelladamente, casi empujando a las palabras para salir de su boca mientras miraba con ojos golosos los tronos, pocos a ojos de Nero, en sus manos, pero estaba claro que para ella eran un alivio para su miserable condición.
Asintió interesado cuando la mujer le confirmó lo que ya sabían, pero ahora ya podía darlo por hecho. Quien fuera que estaba cometiendo esos asesinatos, se estaba granjeando muchos enemigos. No parecía importarles a quién se pusieran en contra.
- Casi...casi parece que estén buscando una guerra civil, enfrentando a todas las facciones. - razonó en su fuero interno.
Con la última frase de la mendiga, le llegó la confirmación a tal pensamiento. - Guerra. Guerra en el horizonte. -
Se despidió con un gesto de los dos cuando salieron casi corriendo, la mujer tenía la expresión de quien había hablado demasiado, la había visto demasiadas veces a lo largo de su carrera para no reconocerla, pero no tenía que temer por Nero, si no por aquello que estaba matando o por la más que posible guerra en ciernes.
Cuando se alejaron lo suficiente, Nero tocó el hombro de su compañera - Vayamos a ver al tal Juvinal, seguiremos el hilo, a ver qué pescamos. - sus botas resonaron por la calle sin preocupación, como habían entrado, como si fuera el amo del lugar.
Dm, mis disculpas, pero el anterior post lo escribí desde el móvil y no sé cómo poner negrita, etc...y se me olvidó mencionarlo en "notas".
Vamos a ver al tal Juvinal.
Poco más se podía sacar de allí, bastante les había contado aquella mujer, con un gesto de cabeza me despido de Yantra, - tranquilo Yantra, te quedas en buenas manos amigo...
Con un gesto de asentimiento escucho las palabras de Nero, nuestro siguiente paso era encontrar a ese hombre en el almacén que nos había indicado aquella mujer, - vayamos haber si encontramos a ese hombre, haber que mas nos puede contar de lo que esta sucediendo en esta ciudad.
Con una posible pista que seguir, los acólitos deciden apostar por la dirección que les ha dado la conocida de Yantra. No tienen garantías, pero no estaba muy lejos y no perdían nada por acercarse a ver si lograban averiguar algo.
La antigua planta de procesamiento de pescado no estaba en buenas condiciones, pero como escondite podía ser un lugar tan bueno como cualquier otro. Aún apestaba a productos químicos y a mar, y las pocas vallas de alambre que la rodeaban ya estaban desprendidas en varios lugares.
El interior del edificio parecía un laberinto de maquinaria y basura. Antiguos montacargas en desuso y cubiertos de telarañas yacían apiñados junto a las paredes de un patio interior, iluminados por la poca luz que provenía del techo abierto, pero tras un poco de búsqueda, lograron encontrar signos de que alguien había vivido allí, o al menos había estado de paso.
Un trozo de pared caído daba paso a una gran sala cubierta de colchones viejos y medio rotos, algunos muebles desvencijados, artículos gastados de drogadictos, botellas vacías y restos de comida. En el centro de la sala había un bidón que seguramente habría servido para contener una hoguera, pero en aquellos momentos estaba fría y apagada, y alrededor de la misma, tres cadáveres retorcidos.
Por segunda vez en un solo día, los acólitos se encontraban frente a las víctimas de una matanza a sangre fría, y con el mismo patrón que las anteriores, dos de los cadáveres tenían las extremidades rotas en ángulos extraños, pero uno de ellos había sido totalmente descuartizado.
Haced ambos una tirada de Perspicacia (+20) aparte de lo que queráis hacer.
En poco tiempo conseguimos llegar hasta el viejo almacén que nos había indicando la amiga de Yantra, aquello parecía completamente abandonado, lleno de basura y vieja maquinaria, pero tras avanzar un poco entre tanto desorden encontramos signos de que allí había vivido alguien, y por desgracia parte de esas personas estaban allí muertos, otra vez habíamos llegado tarde, los descuartizadores habían pasado por allí y habían dejado su seño...
Me pongo en guardia ante cualquier cosa que se pudiera mover en aquel sitio, cada vez la cosa pintaba peor, - parece que volvemos a llegar tarde otra vez, tengamos cuidado Nero, no me gusta este sitio...
Motivo: Perspicacia
Tirada: 1d100
Dificultad: 55-
Resultado: 92 (Fracaso) [92]
Llegaron rápidamente al lugar, pues Nero conocía la zona y no era difícil dar con ella, ahora eran refugio de desgraciados y maleantes, pero habían sido una planta de procesamiento de pescado, un lugar donde los hombres y mujeres fieles habían podido ser útiles al Imperio, como tenía que ser, pero como todo en aquel planeta, estaba en ruinas y abandonado, con la mácula del desorden y la desidia, marcas inherentes a la herejía. - Mens sana y corporem sano. - repitió en gótico alto en voz baja, una máxima que había aprendido en su entrenamiento como Arbitres.
Tras una corta búsqueda, hallaron el lugar donde el tal "Juvinal" tenía su escondite, una sala reacondicionada con utensilios de segunda o tercera mano, apenas algo a lo que llamar "hogar" para aquella escoria. Pero lo interesante no estaba en los cacharros claramente utilizados por drogadictos para sus vicios, si no los cadáveres que había alrededor del típico bidón-hoguera.
Los cuerpos estaban destrozados, exactamente igual que habían encontrado al resto. - Mierda, tienes razón, se nos han adelantado o simplemente, vamos muy retrasados. Hay cosas que no sabemos y eso nos está haciendo ir a remolque, y me jode. - le contestó a Gianna. - No toques nada, nos va a tocar llamar a los Arbitres para que vengan a recoger todas las pruebas que puedan, tanto aquí como en el bar. - dijo, dando una vuelta despacio y fijándose en todos los detalles que pudo absorber con su mente analítica. Su mano buscó un lho en su boca, pero no tenía y se la pasó por encima de la misma, secando los labios que se había mojado al pasar la lengua.
Un poco nervioso por tanta muerte, desabrochó el seguro de su pistolera para sacar más rápido el arma si es que hiciera falta.*
A través del microcomunicador, avisó de los dos descubrimientos y pidió que vinieran a acordonar las dos zonas y recoger pruebas para llevarlas al precinto arbitres, allí sus compañeros y los especialistas bioligis estudiarían todo para intentar obtener más información.**
Motivo: Perspicacia
Tirada: 1d100
Dificultad: 82-
Resultado: 26 (Exito) [26]
Tirada oculta
Motivo: Buscar pruebas o rastros de los asesinos, algo que se hayan podido dejar
Tirada: 1d100
Resultado: 29(+62)=91 [29]
Tirada oculta
Motivo: Saber prohibido "sectas", por si tras tanta escena del delito tengo suficientes datos para tener alguna pista sobre qué secta puede haber sido o si es un ritual de una secta, qué ritual, para qué sirve..
Tirada: 1d100
Resultado: 84(+42)=126 [84]
5 + 1 = Seis grados de éxito (si para la tirada de perspicacia se usa la vista, tengo un +10 extra por mi talento lo que implicaría un total de 7 grados de éxito. :)
*Paranoico. :P
Tiro Buscar en oculto, he aplicado "vista", si no se aplica, sería con 10% menos.
Tiro también otra cosa, por si se me ocurre algo (en el motivo lo tienes explicado, DM).
** Aviso al CG y que manden gente a recopilar pruebas y llevarlas a la base, para que mis compis y el resto de pnjs puedan investigar también.
¿Sabemos de la existencia de algún destacamento de G.I. en éste planeta?
Un breve examen del lugar no dejaba lugar a dudas de que habían opuesto resistencia. Había cuchillos rotos y mellados por el suelo, casquillos vacíos dispersos, aunque los acólitos no llegaron a encontrar las pistolas, así como agujeros de bala en algunas paredes, muy parecido al escenario que habían visto el día que llegaron, en el domicilio de Bal Gray, solo que los cadáveres no estaban en tan mal estado como los de la "Cola del Gusano", estas víctimas debían de ser más recientes.
La mayor rareza de aquél escenario estaba en el cadáver desmembrado, el que debía de ser la víctima principal. No se habría diferenciado mucho de los demás, de no ser porque alrededor de su cuello había una cadena de plata adornada de pequeños huesos, y en sus bolsillos había piedras y talismanes adornados con curiosas runas que no tenían sentido para el veterano arbitrador.
Ni bien Nero había terminado de comunicarse con los Arbites, una voz los alertó. — No tan rápido. — Un tipo con gastadas ropas de cuero y varios rasgones apareció de un lateral, no exactamente del mismo lugar por el que habían entrado ellos, pero los acólitos tenían la desagradable sensación de que se había tomado su tiempo para observarlos, y no era el único. Nero había visto de reojo un par de figuras más que se ocultaban entre los restos de chatarra y las pilas de desperdicios a su alrededor. El tipo que había salido, sin embargo, se había mostraba con las manos en alto, pero mantenía una distancia prudencial con los acólitos.
— No os alteréis, me dan igual los arbitradores; solo quiero hablar e irme de aquí antes de que nos interrumpan. Habéis llamado la atención de gente importante, me han pedido que os entregue un mensaje. Quieren que sepáis que los cinco estáis invitados a reuniros con la corte de los reyes andrajosos. —
Nero contempló extrañado el que parecía ser la víctima principal, es decir, el verdadero objetivo de aquellos asesinos. Tenía unas piedras y talismanes, junto con un collar, todo ello con símbolos extraños y runas, que al arbitres se le escapaba su función.
Esperaba que a sus compañeros más intelectuales no.
Un ruido leve le puso en alerta, pero antes de que le diera tiempo a moverse una figura ya había salido de su escondite y estaba avanzando cautelosamente hacia ellos con las manos en alto, para demostrar que no era una amenaza, al menos de momento. - Maldita sea, ¿cómo me he dejado coger con la guardia baja? - se recriminó a sí mismo.
A punto de sacar la pistola, se detuvo cuando se percató de que otro par de figuras estaban también observando desde otros escondites, y probablemente, hubiera alguno más que no hubiera visto. Alzó la mano derecha haciendo un gesto tranquilizador hacia "Gigi" para indicarle que no iniciara las hostilidades aún.
- Así que por fin hemos hecho el suficiente ruido para llamar la atención de alguien que manda de verdad... - pensó Nero. - ¿Y se puede saber quienes son esos "reyes andrajosos" y porqué nos debería interesar a nosotros verlos? - preguntó con descaro.
No es que no supiera quienes son, pero si aquel hombre largaba la lengua y le contaba algo que no supiera, eso que se llevaría, y bueno, poder saber si realmente existían o no esos tan nombrados por la baja estofa era desde luego un aliciente. Quizá descubrirlos le valiera una mención de honor, y desde luego, un buen alimento para su ego. - Nadie hace nada por nada. - se recordó a sí mismo, con su típico cinismo.
Tirada oculta
Motivo: Saber (INT)
Tirada: 1d100
Dificultad: 40-
Resultado: 11 (Exito) [11]
Tirada oculta
Motivo: Indagar
Tirada: 1d100
Dificultad: 51-
Resultado: 72 (Fracaso) [72]
Dejo una tirada para ver si se algo de estos "señores". Dejo la tirada hecha con mi INT base, y mira a ver qué habilidad o bono se aplicaría, por favor, DM.
Dejo otra con Indagar por si sirve para sonsacarle más información.
Director: Por supuesto que sabes quienes son esos señores. Son los autodeclarados líderes de Resaca (la versión oficial de las fuerzas del orden es que su existencia es un mito y un engaño para encandilar a las masas con títulos grandilocuentes)
Nero: Edito para añadir una frase y darle más sentido a mi acción. Gracias. :)
Mientras Nero daba las noticias al cuartel general de lo encontrado en aquel lugar me alejo un par de pasos, por un momento creo ver una sombra que se mueve en la distancia, pero aun no me he girado para hacerle una señal a Nero cuando una voz se oye a unos metros de distancia, con rapidez sujeto con firmeza mi arma pero ante el gesto de Nero y las palabras poco amenazadoras del intruso la mantengo preparada pero sin apuntarlo directamente, justo cuando estoy a punto de responderle Nero se me adelanta por lo que me mantengo callada, me mantengo alerta intentando controlar nuestra retaguardia por si tenemos que hacer una retirada táctica.
Motivo: Perspicacia
Tirada: 1d100
Dificultad: 35-
Resultado: 74 (Fracaso) [74]
El hombre misterioso negó con la cabeza y comenzó a retroceder unos cuantos pasos hacia atrás, sin perder de vista a la pareja de acólitos — Ya he entregado el mensaje. Eso es todo lo que tengo que decir. Venid al anochecer al "puente sabatino" en el distrito VI. Solo vosotros cinco, sin trucos. No les digáis nada a los arbitradores, si cualquiera de ellos aparece cerca de allí, lo sabremos. Y aseguraos de que no os sigan; os están vigilando de cerca... —
tras sus palabras, el hombre continuó retrocediendo hasta abandonar el lugar por completo, pocos segundos después los acólitos también notaron como los hombres que permanecían ocultos se alejaban de allí lentamente; hasta dejarlos de nuevo en la soledad y el silencio de aquél lugar de masacre.
A Nero no le gustaba, para nada, que un arrastrado como aquel le diera órdenes, pero tuvo que envainársela y apretar los dientes mientras veía como aquel pazguato se alejaba y finalmente, desaparecía con el resto.
Que se atrevieran a darle órdenes a un arbitres... - piensa Nero, ya no eres sólo un arbitres, ahora eres un acólito de la Inquisición, un representante de los grandes y sagrados Ordos, y aquí no todo es blanco o negro, hay muchos matices de gris para llegar al objetivo, pero si alguien traspasa alguna vez la lex imperialis... - pensó, tratando de calmarse.
Miró a su compañera - No parece que nos quede alternativa, pero me gustaría saber tu opinión. ¿Qué piensas? - le preguntó.
Quizá ella tuviera un punto de vista con el que él no había contado y le diera una nueva perspectiva al asunto.
Tras unos segundos de tensión aquellos hombres se marcharon como habían llegado, la frustración se mostraba claramente en la cara de Gianna, otra vez parecía que eran marionetas, aquella sensación ya la había vivido no hacia mucho y no queria volver a pasar por aquello, pero por el momento solo les quedaba una alternativa, por peligroso que fuese tenían que acudir a aquel lugar.
-Uhh, no me gusta nada que me digan lo que tengo que hacer, y menos esta chusma, pero por desgracia no nos queda otra que acudir a la cita, quizás allí podamos saber quien son esos descuartizadores y lo que esta pasando en el planeta..., lo que me mosquea es lo que dijo ese tipo, dijo que nos estaban vigilando de cerca, lo que no me queda claro es si se refería a los arbitres o a quien coño..., con rabia descargo mi furia dando una patada a lo que tengo mas cerca.
Nero asintió, coincidiendo plenamente con ella. Ni le gustaba que le mangonearan, y tenía la sensación de que allí había algo más. Y tampoco le había gustado eso de ser "vigilado", pero en su profesión no era raro sentirse observado, es más, la mayoría de los suyos disfrutaban llamando la atención.
Un sólo vistazo a la armadura negra y el casco con el águila, junto con las armas reglamentarias que solían llevar los arbitradores, era suficiente para calmar los ánimos y mantener el orden. Éstos representantes de la ley tenían, en muchas ocasiones, potestad para actuar, detener, juzgar y ejecutar a cualquier infractor de la Lex Imperialis. Dependiendo del jefe de precinto, la política podía ser más o menos expeditiva.
- Bien, esperemos a que vengan los arbitradores a recoger todo ésto y volvamos a base. Allí hablaremos con el resto. - no hacía falta decir más.
Nero encendió un pitillo de lho y, con su forma característica de coger el cilindro, siguió observando alrededor buscando alguna pista.
Tirada oculta
Motivo: Perspicacia
Tirada: 1d100
Resultado: 100 [100]
Mientras esperaban la llegada de los arbitradores, Nero continuó examinando el lugar a conciencia, dispuesto a no dejar ni un rincón sin buscar. Mientras apartaba un puñado de escombros, se apartó con una sacudida de dolor cuando un fragmento afilado atravesó la tela de sus ropa y notó un repentino pinchazo en el brazo. La herida era insignificante, un simple punto rojo que goteaba sangre, se pasaría en un minuto con un poco de saliva... pero el dolor no desaparecía, de hecho iba a peor. La siguiente vez que Nero miró sus manos sus dedos se retorcían como culebras, carentes de huesos y parecía que iban a estrangularlo!!!
Gianna se lo encontró gritando de terror, agitando la mano en el aire y apartando enemigos invisibles a manotazos hasta que finalmente tropezó agotado y se quedó en el suelo mirando alrededor medio aturdido. Su mano era normal y no le pasaba nada. Al poco encontraron la causa de sus alucinaciones. Un inyector abandonado entre los restos de escombros, aún rezumando un poco de líquido negro, debía ser con lo que Nero se había pinchado en el brazo por accidente.
La espera se hizo eterna, pero con un poco de paciencia un destacamento de arbitradores finalmente llegó al lugar. Ninguno parecía especialmente contento de hacer aquella tarea, al fin y al cabo los distrito de las cloacas eran los peores para ser enviado, pero tomaron nota de todo, tomaron varias imágenes con un pictograbador y recogieron los cuerpos en bolsas para cadáveres. En poco más de 1 hora, los acólitos estaban de vuelta en la base, al refugio de la torre de Haarlock, parecía que habían pasado una eternidad investigando, pero apenas habían estado toda la mañana recorriendo la ciudad. De hecho, llegaron a tiempo de que les sirvieran el rancho de la tarde.
Claudius, Arcturus e Isolda aún no habían vuelto ni tampoco se habían comunicado. Los Arbitradores enviados a Karib tampoco habían vuelto de modo que tampoco podían contar en ese momento con Constantine. Tal vez debían enviar un mensaje al resto de acólitos para asegurarse de que todo iba bien.
Tirada oculta
Motivo: Nero se pincha el dedo con una aguja de Obscura por accidente (alucinación)
Tirada: 1d100
Resultado: 52(-30)=22 [52]
Nero te llevas 1 punto de locura y una valiosa lección, las pifias existen xD
Aturdido, aún estaba pensando cómo se había pinchado. - Joder Nero, si llega a ser algo mortal, te mueres por imbécil. - se recriminó a si mismo. Gracias al Emperador, había quedado todo en un susto mayúsculo y quizá alguna pesadilla recurrente en noches oscuras y tensas, pero Nero apechugaría con ello.
Ya de vuelta en la base, no sabían nada aún del resto de sus compañeros, ni del otro grupo de Arbitradores. Con poca paciencia en esos momentos para esperar a tener noticias, el arbitrador buscó un aparato de radio con fuerza suficiente para llegar a los comunicadores de sus compañeros. Una vez localizado, cogió el micro y apretando el botón con unas extrañas runas, pero que sabía que era para hablar, transmitió - Aquí Nero, estamos de vuelta, tenemos noticias interesantes. ¿Necesitáis ayuda? Reportad. -
Punto de Locura apuntado. También ésto me enseña a preguntar cómo funcionan en ésta partida lo de los Puntos de Destino, porque en mesa hubiera gastado, probablemente, uno, de saber que me podía suceder algo así. No pasa nada, pero a partir de ahora cuando tire en oculto pondré siempre "en caso de pifia, repetir tirada con PD, por favor".
XD
El mensaje reverberó con un eco metálico en los oídos de Nero y Gianna por el canal que tenían abierto. Tras unos momentos de silencio se escuchó el característico chasquido cuando un nuevo comunicador abría las comunicaciones:
— Claudius al habla. Todo bien, también hemos averiguado algunas cosas. Volvemos a la base para informar. Cambio y corto. —
Parecía que no se tendrían que preocupar mucho por el resto de los acólitos, y tampoco tuvieron que esperar mucho tiempo; en alrededor de media hora el vehículo que habían tomado prestado volvía al interior del recinto de los Arbitradores y los acólitos salían de su interior ilesos.
Nero: Es la gran desventaja de las tiradas ocultas. De hecho, la mayor parte de las veces prefiero que no se hagan ocultas, ya que en Dark Heresy suelen depender más de los niveles de éxito o de estar enfrentadas con otra tirada enemiga. Además, que sean ocultas estorba bastante a la hora de saber si necesitas gastar un punto de destino.
"en caso de pifia, repetir tirada con PD, por favor"
Regla de la Casa: si se saca un 100 en una tirada, además de ser una pifia absoluta, no se podrán utilizar puntos de Destino para cambiar el resultado. Esto puede implicar desde la humillación a la muerte del personaje de las formas más horribles imaginables.
¿Qué gracia tendrían las pifias si se pudieran evitar con tanta facilidad?
Cambiamos de escena.