Los viajes cada vez se hacían más largos y pesados para Nikolai, sobre todo en aquellas tierras donde el paisaje apenas cambiaba. Fue un alivio que la gran figura de la montaña ahora estuviera más cercana para guiarles.
- Bueno, entonces tenemos claro que estamos en la dirección correcta. - dijo cuando Rashid les contó aquél cuento sobre el dios enterrado.
- Vamos a aprovisionarnos y aprovechad para preguntar a alguno de los aldeanos. Quien sabe, viviendo tan cerca, a la fuerza tienen que saber algo. O incluso podrían haber visto a las gemelas - con los ánimos levemente renovados, Nikolai avanzó al frente hacia la aldea.
Motivo: Ocultismo
Tirada: 1d100
Dificultad: 120+
Resultado: 12(+75)=87 (Fracaso)
Kitnawa se sentía incómodo. Una zona desprovista de espíritus era mala señal; si de verdad había un dios enterrado en esas montañas, tenía que ser uno muy poderoso y terrible. Necesitaba algo más de información, así que buscó a algún aldeano que pudiese darle más información sobre aquella leyenda.
Kanu viajaba con sus compañeros hacia las montañas "donde acaban los espíritus" con la firme esperanza de encontra algo de luz que aclararse toda esta extraña situación y que aportara alguna respuesta acerca de las gemelas. Todo esto le resultaba bastante frustrante.
Cuando el chamán se acercó preguntando por él, Kanu agradeció su mensaje profundamente. Por fin tenían una pista sólida, los espíritus, aunque habitualemente eran bastante crípticos, nunca se equivocaban. El muchacho aceptó de buen grado el trozo de corteza anudado como si de algún tesoro se tratase y, para mostrar su respeto al sabio, se lo colgó del cuello de inmediato. -Hacia el norte pues- pensó Kanu mientras se despedía del chamán con educación.
El joven aprendiz de Shamán, se estremece un poco cuando Rashid le comenta acerca de la zona sin espíritus, y de manera inconsciente se acerca un poco más a Adhyra. Su maestro le había hablado de esos lugares como zonas peligrosas para aquellos que se comunicaban con los espíritus y con frecuencia lo amenzaba con dejarlo en uno de esos lugares y no hacía los salmos adecuados... pero siempre le pareció eso, cuentos para niños. Y ahora iban de cabeza a uno.
-Si vamos a ese lugar, mucho me temo que seré de poca o ninguna utilidad. Mi capacidad para hablar con los espíritus no creo que sea muy útil en un lugar en el que no hay espíritus.- Comentó claramente nervioso a sus compañeros.- Por lo pronto sigamos la idea de Umar y vayamos a buscar información y provisiones.
Tirada oculta
Motivo: ocultismo
Tirada: 1d100
Dificultad: 120+
Resultado: 39(+150)=189 (Exito)
dejo hecha la tirada de ocultismo aunque no se si todavia vale
El viaje fue tranquilo... demasiado tranquilo para mi gusto, pues apenas sucedió nada minimamente emocionante -Que aburrimiento- me dije por enésima vez -Espero que al menos las montañas sean más interesantes- pensé.
Yo iría directamente- les dije cuando Umar propuso parar para preguntar y aprovisionarnos -Pero tal vez sepan algo de las gemelas, así que...- añadí con cierta esperanza. Al fin y al cabo, con ellas uno no se aburría. Tal vez acabase molido a palos, poro no aburrido.
Bueno, eso, yo quiero preguntar a un aldeano más informacion sobre la zona, a ser posible algun chamán o anciano que pueda saber más
Pasáis por varios pueblos intercambiando piezas cazadas por útiles varios y aprovisionandoos. Las gemelas empiezan a hacer apariciones en varios pueblos que os guían al siguiente y poco a poco os vais acercando a la cordillera que cada vez es más grande y próxima. Llegado cierto punto de vuestro viaje. En uno de los pueblos, os comentan que un pueblo a los pies de la cordillera ha sido destruido de la noche a la mañana. A todos os saltan las alarmas. Podría ser... Comforme os váis acercando, las noticias de otros pueblos os confirman el suceso, parece ser que los que han visto la zona la han declarado como un cementerio y todos los pueblos colindantes han maldito la zona.
Los que puedan sentirán las vías de la magia, notarán como cerca de la cordillera la magia se debilita por momentos. Aún no estáis en la cordillera, pero ya se empiezan a notar algunos efectos. Puede que sea un buen momento para hacer los últimos preparativos. Tenéis un nombre: Babama o zona maldita desde hace unos días, y tenéis el trayecto, pero estaréis seguros allí arriba?
Tirada oculta
Motivo: Información (persuasión)
Tirada: 1d100
Resultado: 22(+60)=82
¿Entonces yo no saco nada? :(
Entre todos habéis conseguido encontrar a las gemelas y seguirlas. Pese a tus intentos por buscar información sobre la leyenda, toda la información parece contradictoria y poco fiable. Que si un dios, un espíritu, una bestia, un brujo, que si está enterrado, en una cárcel subterránea, sellado en el fondo de una cueva. Sin embargo, todos parecen tener claro que es mal augurio hablar de ello y te despachan rápidamente.
El rastro de las gemelas parecía hacerse más evidente conforme nos acercábamos a la cordillera, y las historias sobre la zona cada vez más alarmantes… a pesar de lo cual, nada destacable nos había sucedido a nosotros.
Para ser una zona maldita, es malditamente aburrida a más no poder- comenté aburrido una de las numerosas veces que nos detuvimos –A no ser que la maldición sea el aburrimiento de la zona- añadí, con un tono que indicaba que eso era una autentica maldición para mí –Así que mejor acabar cuanto antes- comenté.
Pues eso, Rashid opina que lo de hacer más preparaciones es un rollo, asi que emjor salir de una vez
A pesar del aburrimiento creciente que sentía, Rashíd había estado aguantándose sin liberar su frustración en sus compañeros, con la esperanza de que algo pasase que le librase de tal aburrimiento. Al fin y al cabo, una zona maldita tenía que ser interesante, y las gemelas eran una constante fuente de diversión… claro que a pesar de las historias que les habían contado en las aldeas, la única maldición que él podía apreciar era el que no pasaba nada interesante, y las gemelas, a pesar de que su rastro se hacía más claro, seguían sin aparecer.
No creo que aguante otra noche de guardia igual- pensó distraídamente Rashid.
Pues eso, si esta noche (o la proxima en la que me toque estar de guardia, supongo que lo normal es que cada noche hacemos turnos todos) no pasa nada (o no ha pasado nada), me pongo a hacer de las mias
Aquello era muy extraño. ¿Que tenían las gemelas que enseñarles? ¿Por que se mostraban esquivas y al mismo tiempo parecía que les estaban guiando? ¿Y que habría en aquella montaña? Kitnawa y Usiku se habían ido poniendo más nerviosos a medida que se acercaban al lugar. Aquella ausencia de magia, ese vacío espiritual, les resultaba extraño y ominoso. Una señal de desastre y decadencia. No comentó nada ante las palabras de Rashid; estaba más concentrado en observar el terreno, buscando algún lugar por donde acceder a la cordillera con relativa facilidad.
Kanu estaba preocupado por las informaciones que habían recibido acerca de la zona a la que se iban a dirigir.
-Esa zona sin espíritus es peligrosa para un shamán como yo- dijo con tono serio- Si no os importa me gustaría hacer un ritual para pedir la ayuda de los espiritus antes de ir. Puede que me lleve unas horas pero es mejor prevenir que curar, y prefiero no ser completamente inútil una vez allí- terminó de ponerle palabras a sus preocupaciones.
Esperó a que sus compañeros le contestaran antes de iniciar el ritual.
Nikolai se quedó mirando a Rashid con indulgencia. Escuchándole hablar uno solo se fijaba en su apariencia infantil y podía llegar a olvidar aquella fiereza que demostró cuando lucharon contra la serpiente. Sin embargo captaron más su atención las palabras del joven chamán.
Él mismo mismo nunca se había encontrado con un lugar como aquél, donde la sutil e inofensiva presencia mágica del ambiente parecía desaparecer por completo, y aunque le preocupaba en cierta medida no sabía que precauciones tomar contra ello, o qué era lo que pretendía hacer Kanu, pero entendía que para él debía ser algo importante.
- No tengo ningún problema en esperar algo más. De hecho, tal vez nos venga bien a todos hacer un alto para descansar, no parece que el resto del camino vaya a ser tan sencillo como hasta ahora - Era solo una suposición, pero confiaba en su instinto aunque lo que le indicase fuera un mal presagio.
Cuando Kanu comentó su idea de convocar a un espíritu, mis ojos se iluminaron de la emoción, pues desde luego eso era algo digno de ver.
Eso está mejor, esto promete- pensé entusiasmado… aunque claro, dicho entusiasmo se esfumo en cuanto escuché el tiempo necesario para el ritual, que cayó como un jarro de agua fría -¿¡6 horas!?- me dije, pues no pensaba que tardaría tanto –Seguro que Thimba podría hacerlo en pocos minutos- pensé.
Si quieres...- dije en un tono similar al de un niño al que le habían engañado con dulces para que se tomase una medicina horrible –Espero que valga la pena- añadí enfurruñado.
- ¿Crees que los espíritus querrán acudir? -comentó Kitnawa a Kanu- Según las palabras de los lugareños, temen este lugar. De todos modos, si estás decidido a realizar el ritual, yo podría ayudarte.
Estando todos de acuerdo, Kanu empezó su ritual. Se le veía bastante nervioso. La última vez que hizo esto, estaba en compañía de su mentor. Ahora sin él, se encontraba algo perdido e inseguro. Empezó a mirar las piedras, una a una mientras las valoraba para recoger una de ellas. Tras pincharse un dedo y hacer unos símbolos en la piedra con su sangre, tapó la piedra con arena. Recogió unas hierbas, que habían por la zona en abundancia, y empezó a machacarlas entre dos piedras. Cuando estuvieron bien machacadas, cogió dos grandes hojas y las puso entre medio de las hojas, como si quisiese que aquella masa reposase, las dejó en la tierra mientras empezaba a recoger tierra y hacer montículos de ellas alrededor de la tierra. Finalmente se desnudó y tras pintarse unos símbolos invisibles con agua, se echó abundante tierra en los símbolos, haciendo que la arena absorviese el agua de aquellas zonas que se había pintado con agua, dándole un aspecto algo extraño. Por suerte para Kanu, no habían chicas en las proximidades, eso le hubiese dado algo más vergüenza: pero el ritual era el ritual y debía seguirlo.
Tras esto, destapó las dos hojas y el fuerte aroma de las hojas inundó la zona en la que estabais. Una zona árida y algo rocosa al pie de la montaña. Cuando se sentó donde había dejado las hojas, rodeado de montículos de tierra, cerró los ojos y empezó a relajarse con el fuerte olor del bálsamo que había hecho. Los demás observabais detrás del último montículo, donde Kanu os había indicado. Estábais presenciando la invocación de un espíritu, y fue tremendamente aburrido. Tras una hora con los ojos cerrados, donde Kanu no hacía más que respirar siempre al mismo ritmo, empezó a entonar un cántico extraño. Pero lejos de amenizar, aquél cántico monótono, soso y con un ritmo casi nulo, os hacía caer dormidos. Cuando Kanu por fin abrió los ojos, fue para darse cuenta que había preparado demasiado poco bálsamo. Que necesitaría mucho más. Tras preparar de nuevo el bálsamo en grandes cantidades, volvió a repetir el proceso. Por suerte, pensasteis, los montículos estaban puestos y ya se había pintado el cuerpo.
Finalmente, estabais todos durmiendo cuando un temblor de tierra os despertó. Mirásteis a todos los lados, sin saber que era, Kanu abrió los ojos en ese momento y empezó a entonar un cántico diferente, esta vez con más intensidad. Y entonces, a la para que nuevos temblores, los montículos de arena empezaron a unirse entre ellos con la misma tierra, formando una especie de círculo mágico. Instantes después, un trozo circular de tierra se desplomó justo delante de Kanu. En ese momento, Kanu cogió la piedra que había escogido y la puso encima del agujero mientras seguía con sus cánticos. Tras unos breves momentos de tensión, observásteis como, de repente, una tromba de rocas y arena salió del agujero hacia la mano de Kanu, desapareciendo en la piedra que había escogido convenientemente.
Kanu os miró hacia vosotros y sonrió, lleno de sudor. Lo había conseguido. Tras esto, se derrumbó en la tierra y se quedó dormido.
¿Y ya está?- pensé decepcionado cuando el ritual finalizó. Había esperado pacientemente, no me había dormido… bueno, en realidad sí, pero solo un poco así que no contaba y todo para nada. Había esperado algún ser extraño, incluso algo parecido al encuentro con el dios serpiente, pero en lugar de eso, tan solo había visto un montón de tierra y rocas moverse y desaparecer dentro de una piedra. Lo cal no estaba mal, pero desde luego no valía toda esa espera.
Me voy a dormir- dije enfurruñado, consolándome con el hecho de que al menos mañana nos pondríamos en marcha.