Stu y Maude regresaron al East End. Debían avisar al padre Saúl de la posible relación entre la estatuilla y las desapariciones de los chicos. Estaba empezando a atardecer cuando entraron de nuevo en la iglesia de St. Paul. A esa hora acababa de terminar la misa de la tarde y el padre Saúl estaba recogiendo la Biblia del altar mientras el padre Elías revisaba que nadie se hubiera olvidado nada en las bancadas de la iglesia.
El padre Saúl era un hombre mayor, de aspecto inofensivo, con nariz aguileña y una incipiente calva. Su voz irradiaba una calma y serenidad que raramente se veía trastocada, aunque había quien decía que su furia, cuando despertaba, era como la de un volcán. Resultaba casi imposible creérselo en esos momentos en que, como ahora, se dirigía de forma amable hacia sus feligreses. Para él nadie parecía estar por encima de nadie. Y era de los pocos que trataba a Stu como el hombre que algún día sería en lugar del chiquillo que era en ese momento:
—Joven Stu, Maude. Me alegra veros. Me ha contado el padre Elías el desagradable incidente de esta mañana.
Stu asintió a las palabras del padre Saul
- Buenos días, padre - Dijo a modo de saludo ante todo. - Hoy ha sido un día raro, como buenamente puede, comenzó con lo que parecía un golpe de suerte, encontré lo que parecía un curioso que quería conocer el barrio, así que me ofrecí de guia y pensé que podría ordeñarle hasta dejarlo seco(legalmente hablando), una vaca bastante gorda, ya me entiende. - Explicó - Pero el fulano acabo sin dientes ni sesos en un coche en mitad de la calle... - Stu comenzó de ese modo a exponer los hechos desnudos tal cual habían ocurrido, sin ningún tipo de interpretación. Habló de todo lo que había ocurrido aquel día, soltando todo como podía, de forma atropellada.
Llegados a este punto tomó aire, pues iba a decir una puta locura.
- Creo que las desapariciones de niños están relacionados, las desapariciones han ocurrido siempre cerca de accesos a las alcantarillas y el punto de encuentro estaba mas o menos en el cetro de todos esos accesos y lugares donde desaparecieron los niños, además esas huellas, me recordaron a las huellas que dejaría una rana gigante y el rastro de agua hasta el río y la impresión de que vinieran del rio nadando... no lo sé padre, no sé que pensar... - Reconoció Stu desconcertado.
- ¿Por que tanto jaleo por una estatuilla por mucho que valga? ¿No puede valer tanto, verdad?- Estaba frustrado por no entender de que coño iba todo aquello.
tengo que organizar mis notas, son un poco caóticas, me faltan nombres en ellas y los motivosp or los que hemos dado dos pasos
EDITA GUARDIÁN: No suelo hacer esto pero he modificado tu post poniendo un texto más coherente y pasando las notas a la sección que corresponde (ésta):
Los dos sacerdotes atendían a todo lo que el muchacho estaba soltando de forma atropellada. De vez en cuando intercambiaban alguna mirada entre ellos pero fue en el momento en que Stu mencionó a la rana gigante cuando ambos se miraron indicando que la locura que pensaba Stu puede que no fuera tanto.
—Una rana gigante...— le dijo el padre Elías al padre Saúl —¿Y si lo del hombre pez tiene sentido?
El padre Saúl asintió gravemente.
—Y Stu confirma lo que sospechábamos: las desapariciones tienen que ver con el alcantarillado. El mendigo de Whitechapel habló de un culto demoníaco. Si Dios existe ¿por qué vamos a dudar de la huella del diablo? ¿Y si han invocado una criatura que haga ese trabajo sucio?
Se volvió hacia Stu:
—Eres un muchacho muy inteligente y muy valiente, pequeño Stuart. Voy a necesitar que vayas en busca de Freddy y lo traigas aquí. Y quisiera hablar también con ese tal Clive Donovan. Si la estatuilla a la que se refieren tiene valor para esa gente puede ser el cebo que necesitamos para que salgan de la oscuridad donde se han pertrechado. Y si los encontramos a ellos hay esperanza de que encontremos a los niños. Elías: acompaña al pequeño al punto de encuentro para protegerlo. La noche ha caído.
Luego se volvió hacia Maude:
—Querida para ti tengo otro encargo. Voy a necesitar que vayas a buscar a los Driscoll. Si sucede algo quiero tener el músculo necesario para enfrentarme a ello y esos tarugos me deben algunos favores.
Maude se PNJiza y desparece de escena.
¿Stu va con Elías al punto de encuentro? ¿O quiere preguntar algo más?
Stu miró sorprendido a los adultos. No daba crédito que la respuesta para esas locuras fuera un "Tiene sentido" Tras recuperarse de la sorpresa asintió.
- ¿Entonces me cree? ¿Eso puede ser? - Se quiso asegurar confundido - ... ¿Tras todo esto hay personas? - Preguntó inspirando y afirmando su determinación. - Bien, vamos. ¿Algún consejo si nos encontramos con problemas de ranas ? ¿Algo que crea que debo saber? - Dijo antes de ponerse en marcha -
siento el post anterior, pero después de verlo escrito todo seguido con comas, me parecieron muchas ideas en muy poco espacio y muy pocas letras y me pareció infumable de leer. Al poner la <ul> quise hacerlo mas visual.
—Ojalá pudiera darte respuestas joven Stuart, pero me temo que yo tengo más preguntas que tú ahora mismo. Los caminos del señor son realmente inexcrutables.
Luego se volvió hacia Elías:
—Cuida de él. Y no solo con plegarias.
Se acercó al reflectorio y regresó con una caja que abrió mostrando un colt. El padre Elías lo cogió con soltura y comprobó la munición dándole una vuelta al tambor. Luego lo sopesó de forma profesional para finalmente asentir.
—Marchad hijos míos y volved con las respuestas que necesitamos.
¡Sin problema por el listado! El meter esa info facilita mi tarea en el fondo,pero simplemente el sitio es en notas. ¡No caerá sobre ti la ira Demiurgana como si hubieras puesto negritas! :D
Te dejo un turno más de 'nos vamos' porque estoy sincronizando tiempos con tus compañeros...
Las palabras de Saul hicieron que tomara conciencia de lo serio de la situación, no sabía que habían descubierto en sus indagaciones por su lado pero la presencia del arma afianzó la sensación de gravedad de la situación y al tomarse la en serio las preguntas que tenía en la cabeza cobraban una relevancia mayor ¿Y bueno, porqué no preguntar? Tras ser despedidos por Saul solo pudo preguntar a Elias de la que se preparaban para irse(coger abrigos, gorras, sombreros)
- Disculpe, pero cuando me imaginé la conversación pensé que no me iban a creer, me imaginé otra charla muy diferente(una en la que iba a tener que intentar convencerlos) ¿Que han averiguado ustedes por su lado? - Dijo Stu modulando su voz para que no sonara excesivamente exigente o que lo quería presionar a hablar.
la imagen de saul es demasiado amable.... me la imaginaba mas ... no sé, no sé que esperaba XD Supongo que esperaba una cara como la del demiurgo tal como me la imagino cuando ve negritas XD
El padre Elías caminaba a la par de Stu. Lo miró con cierta curiosidad y luego esbozo media sonrisa.
—El padre Saúl tiene razón: serás un hombre a tener en cuenta.
Siguieron andando un rato por las callejas y por un momento Stu pensó que no respondería a su pregunta. Pero finalmente volvió a hablar:
—Últimamente la ciudad se ha vuelto loca con el tema del espritismo. La mayoría no son más que estafadores, locos o ambas cosas. Pero el padre Saúl y yo hemos visto... cosas. Pensamos que habían quedado atrás pero las desapariciones de los niños encajaban en ciertos sucesos del pasado. A veces creemos que el mal ha sido vencido y en realidad solo duerme parar recuperar fuerzas en el futuro.
Con aquella críptica respuesta seguían hacia el punto de encuentro.
Temed la ira del hombre amable. ¿Eso no está en la Biblia? Si no está deberían ponerlo :D
Me alegra que los PNJ logren sorprender de vez en cuando.
Stu miró a Elias dubitativo un instante, luego miró al frente y camino unos cuantos pasos a sulado. Así que lo del espiritismo no siempre era una bobada y hacía tiempoque había pasado, entonces estaban rematando un trabajo del pasado mal realizado. Las cosas pintaban bastos.
Tras unos cuantos pasos más esbozo una sonrisa que acompaño de una risa muy leve.
- Me ha dejado casi como estaba, padre... - Dijo de buen humor abandonando el tema, Elias había dicho todo cuanto quería decir, si quería decir algo más lo haría y sino, no lo haría, era lo que quedaba. - ¿Cree que encontraremos a algunos de los desaparecidos a tiempo?
La conversación era serena, pese a lo serio que estaba, empezaba a estar decidido a hacer todo cuanto estuviera en su mano, no todos los chicos que habían desaparecido le caían bien, pero algunos si y otros que si le caían bien podían acabar corriendo la misma suerte.
Aunque dadas las circunstancias, Stu tenía que ser precavido y no fiarse demasiado de nadie. Eso de que eran los buenos y luchaban contra el mal.... el sabía que era un carterista, aquello no era bueno y el padre Elias y Saul le cobraban protección, Fredi era un poli corrupto, ninguno era un santo y a veces un demonio lucha contra otro por conveniencia, pero seguía siendo un demonio.
No podía no desconfiar un poco de ellos, pues a fin de cuentas ellos guardaban sus secretos y sus cartas boca abajo podía ser cualquier cosa. Pero por otro lado, no tenía en nadie mas en quien confiar.
¿esta escena no es visible para todo el mundo? ¿y ese cambio?
—Espero que sí, muchacho, espero que sí.
Pero el rostro del padre Elías no podía ocultar su preocupación. Era un hombre duro, criado en las calles y seguro que había hecho muchas cosas de las que probablemente se hubiera arrepentido realmente. Stu estaba seguro que de muchas otras no. Sabía que aunque el padre Samuel y el padre Elías eran buenos con la comunidad no dudaban en aplicar la fuerza cuando era necesario. ¿Acaso su Dios no era igual? Bondadoso con los obedientes pero implacable con los que se desviaban del recto camino.
La extraña pareja se sentó en la entrada de la tienda. Stu sabía que la puerta, aunque arrimada, estaba sin cerrar. Pero el padre Elías se apoyó en el escaparate y encendió un cigarro.
Jajaja. Sí que lo es, pero los demás destinatarios están ocultos para que sepas en cada momento con quien estás. En realidad Maude a partir de ahora también estará oculta que está desaparecida.
Estoy pendiente también de la otra escena para reuniros.