Laern se lleva la mano a la barba y se la acaricia mientras en sus labios se forma una sonrisa cómplice y no exenta de malicia.
- La verdad es que es la mejor idea que he escuchado hoy, aparte de que tú invitabas a una ronda, mi buen amigo. ¡Así sea!
Le devuelvo el guiño a Görg y me giro hacia Morz.
Jejeje, que lo haga Morz, seguro que se le da muy bien. Y es muy cierto que está descansado. La próxima vez yo me lo pensaría dos veces antes de dormir durante todo el camino pequeño amigo.
Con mi mano alcanzo al hobbit y le revolico amistosamente el pelo, para finalmente darle un pequeño golpecillo, por haber pecado de novato.
PNJ
Con cara de pocos amigos Morz empieza a decir con voz de pito. - No es justo, yo soy el más pequeño de todos, no tengo fuerza suficiente para cargar con todo. Jum... - Tras decir esto se da media vuelta a la vez que refunfuña.
Las palabras del hobbit provocaron carcajadas varias, y estas duraron por lo menos cinco minutos. EL pobre Morz se moría de la vergüenza.
Pero de pronto Laern contuvo la risa, y es que vio a unos quinientos metros de distancia dos antorchas que se movían, seguramente se tratarían de campesino, pero podría ser cualquier cosa.
El camino se empinaba un poco, trazando alguna curva, y al final podíais ver varias siluetas. Pero estaba demasiado lejos como para distinguir nada, eso sí, eran bastante grandes.
Cambio de escena.
Tras dejar atrás la aldea de Nolvil junto a sus pequeños y perdidos caminos llegasteis a la vía principal que conecta la capital del reino con la frontera del Sur. Debíais seguir esa vía varias horas más hasta llegar a la pequeña aldea de Montaña Jorobada.
Sin retrasos estaríais allí por la tarde.
Como siempre podéis seguir hablando o avisarme para cambiar de escena.
Por mí pasemos de escena. Ya tienes un voto a favor.
Se mantiene cauto ante las expectativas generadas en el grupo. Al parecer ya habían visitado la Montaña Jorobada anteriormente sin grandes resultados, ¿por qué debería variar los resultados con una nueva investigación? Meditabundo, se mantiene callado durante el viaje.
Otro voto a favor del salto.
Montaña Jorobada no me trae buenos recuerdos y parece que no soy el único. Un silencio incómodo se instala entre nosotros y esta vez no me siento con fuerzas para expulsarlo. Prefiero concentrarme en la misión.
¡Salto, salto salto!
Sipi, vámonos de aquí!
voto a favor del salto temporal
Nada extraño pasó durante el camino entre la aldea de Nolvil y la de Montaña Jorobada, de hecho fue excesivamente tranquilo pues no os cruzasteis ni con un campesino.
Nueva escena.