Partida Rol por web

Ahí van las tiradas, que las primeras las hice con FUE, xD

¿Eh?  -dijo adormilada Panacea.  Se puso de pie lo más rápida que pudo y aguzó oídos puntiagudos y ojos verdes.  

Estaba soñando con un ser de brazos peludos.  Dejó en el campo una esfera de cristal hecha de agua de luna. 

No hacía mucho sentido, seguro seguía adormila'a. 

Amiggo, tranqui, no queremos hacer daño.  Sólo venimos a revisar.  Respeta y te respetamos.  -dijo, conciliadora. 

Panacea aguza sus gnomicos ojos,  y se concentra por un momento. 

Vi una sombra de una criatura, desaparecer en el fondo del pasillo, a muchos metros de aquí, por la puerta central, desde donde salieron las ratas.

¿ Lo seguimos? ¿Nos echó un hechizo? ¿Reconozco el hechizo?  ¿Será una trampa?  ¿Será amigo?  ¿Vino a espiarnos y se fue a buscar refuerzos?  -Panacea buscó evidencia de lo que fuera  que fue, antes de lanzarse a una carrera loca. 

¿Hay huellas que indique que es?

¿Es la persona con la que soñé?  

17/10/2019

Uyy, lo siento. Pensé que no sucedía nada en toda la noche. Como no posteó nada...

La mancha roja y las escamas, ¿las tengo cuando me despierto? ¿Lo sueño en el primer turno, el de Gael?

¿Va a hacer un posteo general en cada turno de guardia?

Un saludo

Hola Director, no me contestó. Supongo que lo hará en un post general, ¿no?

Un saludo.

Con el escudo alzado, el caballero seguía a la defensiva. Ahora con la gnoma en pie, pensó que lo oportuno era seguir levantando al resto.

- Zarandea a Lasar para que se despierte, que yo voy a hacerlo con Aramin.

Con la mano derecha trató de mover el cuerpo del clérigo, instándole a que les acompañara a enfrentar a aquella criatura que parecía acecharles y que en absoluto les respondía.

Sienten un zarandeo que los saca de su inconsciencia.

Rápidamente Augustus se monta en un caballo, indicandote y ayudandote a calzar una de las armaduras de práctica (aún completamente funcional) para que uses durante el viaje. 

Es un préstamo,  pero te protegerá -dice,  mientras se monta en uno de los dos caballos que trae Yerko.

Te deja un caballo. 

Al montar,  te das cuenta que es el mismo que habías dejado al entrar acá. Tambien notas que esta bien cuidado y alimentado. 

Sin mediar tiempo,  Augustus sale en su caballo después de un escueto Sigueme.

La verdad, te das cuenta que,  a diferencia de lo que creías,  galopan hacia la ciudad,  entran por la calle principal, luego de sortear dos pares de guardias y siguen derecho hacia la plaza que ya conocías.

Luego empiezan a moverse por la calle que se dirige al norte, desde la plaza central de la ciudad. 

Casi todas las casas se encuentran tapadas con gruesos tablones,  polvo acumulado en la mayoría de ellas,  ahora transformado en barro, debido a las recientes lluvias que han azotado estos días. 

Se ven restos de lo que antiguamente fueran grandes capillas,  una que otra escuela, durante aproximadamente 10 minutos,  cuando llegáis a una especie de muro (muy similar al que vieron en la entrada hace varios días atrás), solo que esta parte de la ciudad,  el muro está muy lastimado,  sendos boquetes a lo largo del muro,  ya sea a izquierda o a derecha se pueden apreciar,  y lo que les llama más la atención,  ningún guardia se encuentra acá,  a diferencia de la puerta por la que llegaron unos días atrás. 

El empedrado se mantiene desde la ciudad,  solo unos cuantos metros saliendo del muro,  y unas pocas piedras, claramente olvidadas,  o muy enterradas, se ven de cuando en cuando en el camino o sendero que van,  directo hacia una agrupación de montañas,  que a vuelo de pájaro podría tomarles un día o tal vez un poco más a lomos de su montura sin apurar.

Avanzan casi insanamente rápido hasta llegar a una bifurcación en el camino. 

Mientras el camino más "grueso"  continúa entrando en las montañas,  en una estrecha garganta, al lado del cual un arroyo fácilmente vadeable viene saltando desde lo alto y se pierde entre unas grietas a su derecha,  otro camino toma el lado de la montaña,  elevándose rápidamente. 

Augustus se baja del caballo,  y empieza a revisar la bifurcación. 

Avísame si se acerca algo... - le dice a Ylian, mientras examina huellas.

Se puso la armadura lo más rápido posible, no estaba acostumbrada a cabalgar con armadura pero lo intentaría. Augustus confiaba en ella y si el creía que era necesario ir con armadura no le diría que no. Además ambas armaduras llevaban el símbolo de Mystra por lo que también era un identificativo que ambos venían desde el templo para ayudarles. - Muchas gracias Augustus. Le agradeció al enano mientras trataba de ponersela lo más rápido posible.

Cuando fue a montar el caballo se sorprendió gratamente y se acercó a él para acariciarlo en la cabeza dándole un abrazo al cuello. Cuando se separó miró a Argolan y le asintió para avisarle de que estaba lista para el viaje. No sabía si el buho le correspondería pero entendía que viajaría con ella. Mientras se montaba hablo en un susurro al caballo. - Siento pesar más que la última vez y le dio una cariñosa palmada en el cuello.

- Hola Yerko. ¿Cómo estas? Hace días que no nos vemos. le saludó - ¿Cómo está este caballo aquí? Es con el caballo que me dejó montarlo para venir hasta aquí, pero pensaba que había vuelto a su casa. Gracias por alimentarlo Yerko, es muy buen caballo. Le dijo a Yerko con curiosidad.

Pero no tuvo tiempo para hablar con Yerko pues en cuanto el enano la vio montada salió a la carrera hacía las afueras del templo, sonrió a Yerko antes de partir y el caballo no tardó mucho en comenzar a seguir el ritmo del caballo de Augustus.

EL enano no habló durante el viaje, parecía muy preocupado y se sorprendió al ver como iban en dirección a la ciudad. Miró al enano extrañada pero no dijo nada. Las casas estaban muy protegidas con gruesos tablones que llevaban tiempo allí puestos. La gente estaba temerosa por lo que pudiera pasar y protegían todas sus pertenencias.

Había edificios abandonados y cuanto más avanzaban más abandonado lo veía todo incluso una parte de la muralla cerca de otra entrada echada totalmente a mal y sin vigilancia. Nadie protegía aquella puerta a diferencia de la otra por la que habían entrado. No tenía sentido lo que estaba viendo, algo pasaba allí. Salieron por aquella puerta en dirección a las montañas y todo lo que había en aquella parte estaba desolado. No preguntó nada pero quería saber que ocurría en aquel lugar y se notaba inquieta.

Al llegar a una bifurcación, que llevaba hacia hacia lo que parecía el interior de la montaña siguiendo el río por un lado y por el otro hacia la montaña, Augustus bajó del caballo y la pidió que vigilara la zona. Se quedó un poco sorprendida pero rápidamente lo entendió. Estaban de camino directo hacia la amenaza de la ciudad, seguramente a recoger información del lugar y de la amenaza. Entendió que Augustus se puso a buscar huellas o indicios que le indicaran el camino más transitado por los goblins.

Aunque prefería haber bajado con él a encontrar pistas, ya que estaba muy acostumbrada a investigar se mantuvo en el caballo esperando atenta a si alguien se acercaba a ellos. Mandó a Argolan que vigilara los alrededores con un vuelo rápido para que no les sorprendieran mientras ella miraba a un lado y a otro. No veía nada extraño y el ruido del río pasar distraía sus sentidos.

Augustus finalmente se decide por seguir el camino que sube.

Con paciencia revisa si se ve algo raro por los alrededores... justo cuando sienten un temblor fuerte.

Algunas rocas empiezan a caer desde la montaña, pequeñas, como si fueran guijarros.

El olor a lluvia y los cielos oscuros a ratos, que amenazaban mal tiempo, repentinamente empiezan a oscurecerse.

Augustus y tu suben, encuentran cerca del camino de subida un cadaver que lleva ya varios dias, es de un goblinoide, a medio comer por buitres.

La preocupacion roza el rostro de Augustus como una sombra oscura.

Debemos apresurarnos, algo oscuro yace por acá cerc...

La frase queda inconclusa. Un gran temblor en la montaña que siguen subiendo los sacude.

Augustus apura el paso hasta llegar en algunos minutos a la cima.

Sin embargo, el clima cambia abruptamente, y luego del gran temblor, se suceden varias replicas, a la vez que los cielos se empiezan a aclarar.

Un caballo viene bajando, completamente solo, a medio galope la montaña.

Al decidirse Augustus por el camino a seguir Argolan finalizó su vuelo sin haber encontrado ningún peligro que les acechara. Algo raro notó el enano pues se puso a mirar alrededor pero Ylian que confiaba plenamente en el búho iba a avisarle de que no había ningún peligro cuando se dio cuenta de que no era eso lo que había llamado la atención al enano. las capacidades de su sangre le habría echo percibir algún temblor en la tierra antes de que esta se sacudiera con violencia.

Ylian trató de mantener el equilibrio mientras el celestial alzó el vuelo para evitar el temblor y dar margen a la muchacha para no caerse. La climatología a su vez cambió por completo y no hizo más que preocupar a la muchacha. No sabía que estaba pasando y la cara de Augustus no era precisamente de tranquilidad. Estaba asintiendo a las palabras del enano cuando otro temblor puso a prueba de nuevo su estabilidad sobre la piedra.

- ¿Qué pasa? le preguntó preocupada.

Este le respondió acelerando el paso casi indicándola que hasta que no llegaran a la cima no lo sabrían por lo que esta se movió tan rápida como pudo asegurando los pies, para no caer en el siguiente temblor, a cada paso. No tardaron en subir a la cima, los temblores se replicaban y abruptamente todo ceso y el cielo comenzó a aclararse.

Desde la cima vio un caballo descendiendo la montaña, huyendo hacia un lugar seguro por lo que dedujo que la dirección que debían de seguir era la contraría a la que llevaba ahora el caballo.

- Esto es muy raro Augustus, la naturaleza en si misma tiene unos ciclos más marcados y estos cambios radicales no han sido naturales. El caballo huía de aquella zona. ¿Crees que deberíamos seguir en aquella dirección?