La jueza parecio casi envidiosa cuando la vio a Luz venir en su propia boca sin compartir un poco con ella, pero ni bien la pequeña fue desbordada por ella misma la jueza estuvo lista para recibir su parte de esa venida. Al terminar de mancharla con su esperma, ella suspira y con su mano va moviendo mucha de esa crema de su rostro a su boca para seguir saboreándolo.
“Uff…al final me manchaste…” comento observando su ropa. “Supongo que ya no importan las sutilezas.” Afirmo y notando sin dificultad como se preparaba por mas. “Si puedo verlo, asi que te dare un premio.”
Dicho eso se acomodo en al agua para dejarle a la vista su cadera con ambos agujeros listos para la acción. “Ve por el culo…” le dijo mientras movia sensualmente su cadera de cadena invitándola a venir a ella. Viendo esa vista tan sexy te preguntabas si de estos comportamientos salían las leyendas de las sirenas que atraían a los hombres a su perdición.
mi punta se incrusta con dificultad en su ano, voy apretando cada vez mas y gracias a mi anterior corrida consigo al fin meterla del todo dentro de ella, sin duda esta realmente apretado haciendo incluso que durante los primeros minutos me duela la vara por la presión, es solo tras un tiempo que consigo soltar su interior lo suficiente como para que se ajuste a mi pene como un guante, con energías totalmente renovadas no paro de embestirla mientras que juego con sus ubres, estirando sus pezones como si la tratara de ordeñar.
El tiempo pasa y tras unas horas el trasero de la jueza ya esta totalmente suelto y arruinado por mis embestidas, puedo sentir como deformo su estomago y con unos últimos movimientos de cadera termino en ella, un chorro, dos chorros, al igual que antes mis bolas no paran de expulsar mi semilla hasta el punto de abombar su estomago tras ello me levanto satisfecha mientras que la jueza se desliza extasiada de mi herramienta, cayendo con un sonoro chapoteo en la charca de semilla que se había formado bajo nosotras, unos leves espasmos recorren todo su cuerpo, con una sonrisa en mi rostro levanto su cabeza con cuidado y la beso con cariño.
-Espero que te haya gustado-digo apartando con cuidado el esperma que le dificultaba la vision para luego llevárselo a sus labios-Aun queda el tritón, no?-digo sonriente-sera mejor que le echemos un vistazo.
Sin vergüenza alguna comenzó a gritar la jueza enfrente tuyo mientras la penetrabas, habia una combinación de dolor y placer en ella pero nada extraño si se pensaba en el tamaño de tu espada. Con el tiempo fue mar fácil meterse pero no por eso bajaron los gritos, sino que ahora se unian gemidos mas largos.
Fue antes que vinieras en ella que la habias sentido venir un par de veces y volverse mas estrecha. Cuando viniste la mujer se dejo hacer todo lo que Luz quisiera. Llenandose de la abundante semilla de ella y mostrando un estómago inflado como la otra sirena no muy lejana a ellas. Al final termino cayendo al suelo contenta de lo que habia pasado teniéndose como podía el estomago y devolviéndole el beso a ella.
“Me encanto…el triton no sabra lo que le viene. Igual déjame que me limpio un poco.” Dicho eso se retiro unos minutos.
Tras sacarle el demonio al triton también te encontraste otra vez recorriendo el palacio aunque ahora tenias al lado a una jueza muy contenta. Por lo que te arriesgabas a pensar que todo saldría mejor que antes, lo que no fue incorrecto ya que te llevaban al trono a conocer a la reina.
La reina era una mujer peliroja con un pelo tan atrayente como la figura de todo su cuerpo, incluyendo unas piernas que no tenían sentido en el gobernante de ese reino. Pero este ultimo detalle no parecia importarle mucho a sus siervos por lo que debía ser mas normal de lo que pensabas.
“Buenas tardes elegida, Soy la reina Talise. Me han contado mucho de ti y agradezco que liberaras a dos de mis ciudadanos…” comento pareciendo tener algo de prisa y mirando con algo de gravedad a la jueza. “Por eso te premiaría con la mejor cena que podría darte mi reina junto con otros regalos, pero no tenemos mucho tiempo. Hemos sido invitados nosotros tres…” dijo señalándose a ella a ti y Arius que se encontraba hasta hace poco casi escondido en un rincón.
“Keropis pide nuestra presencia y la tendrá cuanto antes.” Dicho eso se despego de su trono y empezó a mover una comitiva por su palacio. “Tus demás seguidores están bien. Si tienes una pregunta dime, que tendre que responderte mientras nos movemos.”
Adelanto un par de cosas, pero igual pensa como que esta sigue un poco mas hasta que quieras cortarla y la otra escena pasa luego de esta.
Aca la escena: https://www.comunidadumbria.com/partida/espada-sag...
Bueno, de camino Luz hace lo tipico de abrazar a todos sus compañeros con alegria, preguntarles que tal les ha ido, etc
Aparte de eso nos podemos meter directamente en la siguiente escena >w<
ok. Todos estan bien aunque no tuvieron tanta fiesta como Luz :)