Esta es una pequeña guía de historia y cultura que se ha repetido en foros y webs desde la primera edición del juego de rol.
Fue escrita originalmente por John Wick y traducido para la web de La voz de Akasha por Mori Saiseki.
Supongo que la mayoría de vosotros ya conocerá esta información o ya haya leído estos relatos, pero por si acaso alguno no lo había hecho, creo que es un buen "prólogo" para jugar a L5A.
Si no ignoradlo ^^
El inicio del mundo
¿Ves el círculo que he dibujado, niño? ¿Dónde está su principio? ¿Dónde está su final? Por supuesto, no puedes responder, porque no hay respuesta para esa pregunta. Ha de haber un principio y un final, pero aquí no hay ninguno.
Igual que el círculo, esta historia no tiene principio ni final. Antes de este mundo había otro. Después habrá otro, y nuestras almas caerán en aquel, llevadas por el peso de nuestras grandes y pequeñas hazañas. Éste es el camino de las cosas, niño, un camino que debes aprender. Sólo conociéndolo hallarás la paz en este mundo de tristezas.
El inicio de este universo, como ha sido en todos, empieza en la nada. La nada estaba sola en el vacío, y así fue durante incontables años. Entonces, sin previo aviso, la Nada se dio cuenta de que estaba sola, y lo lamentó. Así se creó otro tercio. Finalmente la Nada se dio cuenta de sus debilidades y creó el mundo, y se arrepintió, deseando deshacer lo que había hecho. El arrepentimiento de la Nada completó el mundo y lo hizo pleno.
Cuando la Nada habló el universo se hizo. Al principio, la materia era como un huevo cuya cáscara dura se hubiera roto y mezclado con la delicada yema. Lo delicado se separó de lo duro y ascendió mientras el resto discernía. Ascendió aún más, pero parte de él dudó y se convirtió en el cielo y las nubes. El resto trepó durante lo que pareció una eternidad y creó el alto cielo. La materia dura cayó más y más hondo, no formando nada excepto el caos informe de una medusa. Y fue así durante muchos, muchos años.
El Sol y la Luna
Con la creación de los Cielos vino la creación de los Tres Dioses Cuyos Nombres No Pueden Ser Pronunciados. Reconocieron la necesidad de dar forma a la tierra bajo ellos, y juntos crearon a un hombre y a una mujer jóvenes para que le dieran forma y estructura. Para crear al hombre y a la mujer usaron sus nombres, y es por eso que ya no podemos pronunciarlos nunca más.
El hombre y la mujer nacieron en el Cielo y miraron hacia abajo, hacia la tierra informe, viendo la necesidad de darle forma. Descendieron en un arco iris y se dieron cuenta de que era como una medusa. El hombre y la mujer se preguntaron cómo darle forma, y se dieron cuenta de que la única forma de conseguirlo era darle nombre. Meditaron largamente sobre el nombre que darían al mundo, y cuando estuvieron listos besaron la tierra informe y susurraron su nombre. Mientras éste era pronunciado también lo fueron los suyos propios. La mujer se convirtió en Amateratsu, el Sol, y el hombre se convirtió en Onnotangu, la Luna.
Juntos flotaron por el Cielo y sobre la recién nombrada tierra mientras ésta tomaba forma. La tierra se separó del mar y del suelo fértil crecieron las plantas. En los cálidos océanos lo peces tomaron sus múltiples formas.En los cielos empezaron a crearse las fortunas, nacidas de los sueños de las criaturas que dormían más abajo. La Luna y el Sol giraron entorno al mundo una y otra vez hasta que todas las criaturas escogieron su forma. Entonces descansaron y miraron la tierra. Para su sorpresa, alguna de las criaturas empezaron a construir.
El Gran Sueño de las Naga
Estos constructores fueron llamados Naga. Eran capaces de cambiar su aspecto en muchas formas. Practicaban el arte y la guerra igual que los hombres hoy en día, pero en la era de las Naga no había hombres. También adoraban a las Mil Fortunas que bailaban en las estrellas y en las montañas cubiertas de nieve, igual que hacemos nosotros en la actualidad. Reconocían que la mayor de todas las Fortunas era la Diosa del Sol, la que llamamos Amateratsu.
Sabían que llegaría un tiempo en que la Diosa del Sol se echaría a dormir y, por tanto, ellos también. Pero les preocupaba poco, pues su gente se había dedicado a la contemplación silenciosa, satisfecha con la creencia de que su civilización sobreviviría a cualquier catástrofe que pudiera sobrevenir. Eran orgullosos e infantiles y esa fue su perdición. El Gran Sueño llegó, pero no cuando ellos esperaban, y cuando el señor Luna atrapó a la dama Sol la era del hombre sustituyó a la era de las Naga.
Hijos del Sol y la Luna
Desde el principio el Señor Luna había perseguido a la Dama Sol por todo el mundo. Un día la atrapó, y mientras su luz se desvanecía las Naga cayeron, una por una, en un profundo sueño. Muchos meses después Dama Sol dio a luz a nueve hijos: Hida, Doji, Togashi, Akodo, Shiva, Bayushi, Shinjo, Fu Lenj y Hantei. El Señor Luna supo que cualquier niño que llevara en sus venas los elementos del Sol y la Luna crecería para ser mayor que él. Por ello, a pesar de las protestas de la Dama Sol engulló a los niños uno por uno. Dama Sol tuvo que pensar con rapidez, mientras Señor Luna engullía al primer niño dijo, "Mi Señor, ciertamente has de estar sediento tras semejante comida", y le ofreció una taza de sake. Señor Luna le dio gracias y la apuró. Después de cada niño ella repitió su oferta y él la aceptó, sin saber que en cada taza había una gota de veneno nadando en el sake. Cuando cada niño iba a parar al estómago del Señor Luna, conforme los devoraba se vertían incontables lágrimas de Dama Sol. A medida que caían lejos de los Cielos hacia la Tierra se mezclaron con la materia del aire y del viento. Finalmente, las lágrimas del Sol tocaron la Tierra y allí donde cayeron permanecen, silenciosas y dormidas.
Pronto, Onnotangu quedó tan borracho y obnubilado que no se dio cuenta de que ella había reemplazado al último pequeño, Hantei, por una roca. Señor Luna cayó en un profundo sueño y, mientras dormía, Amateratsu se llevó a Hantei y lo ocultó. Dama Sol explicó a su hijo que debía rescatar a sus hermano y hermanas. Le entrenó en las artes del combate, preparándolo para el momento en que su padre despertara.
Se dice que pasaron muchos años, y también se dice que pasaron muchos siglos. Cuando Señor Luna despertó encontró a Dama Sol y el joven Hantei esperándolo. La batalla que tuvo lugar fue grande; al fin, Hantei abrió el vientre de su padre y los niños y sus entrañas cayeron a la tierra. Onnotangu intentó en el último momento aferrar a los niños, pero sólo atrapó al pequeño Fu Leng. Hantei cortó entonces la mano de su padre, rompiendo su presa y haciendo que Fu Leng (y la mano amputada de su padre) siguieran a sus hermanos y hermanas en su caída. Pero mientras Fu Leng cía consiguió en el último momento aferrar a Hantei, arrastrando a su hermano hacia abajo.
La sangre de la Luna cayó a la tierra, encontrándose con los charcos informes que las lágrimas de Dama Sol habían creado. Allí donde se unieron la sangre y las lágrimas se mezclaron, formándose un hombre y una mujer de cada uno de los miles de charcos.
Fu Leng cayó lejos de sus hermanos y hermanas, en una profunda grieta en el lejano oeste. Atrapado bajo tierra luchó por alcanzar la superficie, pero ya no era el mismo. Los muchos meses enterrado le habían otorgado un oscuro conocimiento que envenenó su cuerpo y su mente, corrompiéndole en una burla retorcida de lo que fuera una vez.
"Cuando caiga el último Akodo"
Tan pronto como los hijos el Sol y la Luna tocaron la tierra dejaron de ser divinos. Aunque no eran tampoco hombres mortales, ya no eran dioses. Miraron a su alrededor y descubrieron los inicios dispersos de la humanidad, y supieron lo que debían hacer. Los humanos estaban desnudos y eran ingenuos, como niños recién nacidos, y los Hijos del Sol y la Luna hicieron ese juramento: "Os enseñaremos los caminos del mundo y os protegeremos de su maldad. Servidnos con humildad y obediencia y mantendremos nuestra promesa."
Los hijos del Sol y la Luna, excepto el atrapado Fu Leng, decidieron realizar un torneo para ver quien de ellos debía gobernar el mundo. Hubo una competición de velocidad, una de fuerza, una de astucia y muchas otras. Togashi prefirió no participar en el torneo, pues miró a sus hermanos y hermanas y supo el resultado. La prueba final fue un gran combate.
El Señor Hida confió en su gran fuerza para guiarle en la batalla, pero fue rápidamente vencido por la rapidez y precisión de los golpes de Shinjo. La rapidez de Dama Shinjo resultó ser su perdición. El Señor Bayushi utilizó su ímpetu para cogerla con la guardia baja y, con sus trucos y distracciones, derrotarla. El Señor Shiba, sin embargo, era demasiado astuto para tales engaños. Observó los trucos de Bayushi y sus acciones no se vieron afectadas por las distracciones. Luego, el Señor Shiba debía enfrentarse a Dama Doji. La esbelta y hermosa mujer retrocedió y esperó a que Shiba golpeara, sabiendo que su hermano aprendería demasiado si observaba sus movimientos. La paciencia de Shiba se agotó; atacó y fue derrotado con rapidez por la técnica de Doji. Entonces Akodo avanzó. Conocía la táctica de Dama Doji y la usó contra ella. Finalmente, sólo Akodo y Hantei quedaron en el campo de batalla. Lucharon con el amor de los hermanos, pero conforme la batalla crecía en intensidad, también lo hacía el temperamento del primero. En un momento crucial la furia dominó a Akodo. Hantei sintió la rabia de su hermano y la usó contra él. Fue un descuido el que provocó que Akodo perdiera el duelo, un error que podría haberle costado la vida. Dado que Hantei perdonó a Akodo, éste juró a su hermano que él y su familia le servirían. Togashi, que observaba la batalla desde la distancia, murmuró: "Cuando caiga el último Akodo también lo hará el último Hantei."
La Dinastía Hantei
Al final del torneo se decidió que la dinastía Hantei gobernaría a los demás. Hantei declaró que los hijos del Sol y la Luna debían construir un imperio poderoso, uno que mostrara su devoción a su sagrada madre Amateratsu. Mientras Hantei ocupaba el trono, cada uno de sus hermanos y hermanas viajó a las tierras conocidas, reuniendo a los humanos y creando los Siete Clanes. Hida formó el Clan del Cangrejo, Doji el de la Grulla, Togashi el Clan del Dragón y Akodo el del León. Shiva formó el Clan del Fénix, mientras Bayushi hizo lo mismo con el del Escorpión. Por último, Shinjo creó el Clan del Unicornio.
Durante muchos años Hantei y los Clanes construyeron caminos, palacios y templos, y el Imperio floreció. Sin embargo, un día un ejército de criaturas malvadas y putrefactas atacó estas grandes obras de los hijos del Sol y la Luna. Eran las fuerzas del Fu Leng, que había caído lejos de sus hermanos y hermanas. Su dominio de la magia del mundo subterráneo era total. Armado con las criaturas que había invocado de los infiernos bajo la tierra, planeaba destruir el Imperio Esmeralda y reclamar las almas de los hombres mortales para su propia gloria y poder.
El nuevo camino
Hantei y los Clanes reunieron un ejército para combatir a los trasgos, ogros y oni cambiaformas de Fu Leng, pero ni la magia ni el acero podían derrotar su brujería maligna. Cada batalla obligaba a Hantei a retroceder. Finamente, mientras su ejército harapiento se preparaba para el asalto final en las llanuras de Uichimani, un hombrecillo con la cabeza rapada vestido con una túnica fue a visitar al emperador Hantei. El hombre se presentó como "Shinsei", que significa "Nuevo Camino". Prometió al Emperador que podía derrotar a los ejércitos de Fu Leng, más Hantei no se sintió impresionado. Ordenó que echaran al hombrecillo, pero cuando los guardias intentaron tocar a Shinsei los derrotó a todos sin usar un arma. Entonces se volvió al Emperador. "Déjame tomar a siete guerreros para enfrentarme a tu hermano. Con ellos detendré los ejércitos que avanzan por tus tierras. Hantei se sintió intrigado. Pasó una noche entera interrogando a Shinsei mientras su hermano Shiva anotaba cada palabra. Las notas de esta conversación, llamadas el Tao de Shinsei, se encuentran aún en la biblioteca del Emperador y en la de todos sus Clanes. Al final de la velada Hantei quedó convencido. Deseaba enviar a sus hermanos y hermanas, pero el hombrecillo sacudió su cabeza diciendo "No. Han de ser hombres mortales, pues la fortuna favorece al hombre mortal." Hantei comprendió la sabiduría de estas palabras y envió a un guerrero de cada uno de los clanes junto a Shinsei. Los llamó Samurai, que significa "sirvientes".
Pasaron muchas semanas y los ejércitos de Fu Leng se fortalecieron y ganaron terreno en cada batalla. Pero un día su poder se desvaneció misteriosamente, y en un momento crucial los ejércitos de Hantei cargaron. Las filas de la oscuridad se rompieron y huyeron. Hantei supo entonces que Shinsei había, de algún modo, cumplido su promesa. Anticipándose al retorno de los héroes preparó una gran fiesta por su victoria, pero solo un samurai regresó... Era el samurai Escorpión, portando doce pergaminos y una mano de obsidiana encantada. "Esconde estos pergaminos", dijo, "puesto que fueron la perdición de Fu Leng". Tras ésto, el samurai Escorpión murió. El Emperador prohibió que se rompieran los sellos de los pergaminos y confió el deber de ocultarlos y protegerlos al Clan Escorpión. Luego, ordenó a los Cangrejo construir una gran muralla entre el Imperio y las tierras oscuras del mundo subterráneo, conocidas como las Tierras Sombrías, para proteger a Rokugan de su maldad. Los clanes de la Grulla y el León juraron proteger al Emperador. Doji fue elegida como el primer campeón del Emperador, mientras Akodo dirigía los ejércitos en el campo de batalla. Los Dragón y Fénix escogieron los caminos de la contemplación. Ambos clanes tomaron el Tao de Shinsei y lo incorporaron a su propio conocimiento de la hechicería. Por último, el Clan del Unicornio abandonó el Imperio para descubrir que había más allá de sus fronteras.
Mil Años de Paz
La época llamada los "mil años de paz" fue muy tranquila. Los Clanes luchaban por el territorio, ganaban influencia política en la corte y construían los cimientos de la filosofía que Shinsei dejó tras de sí. El Emperador Hantei y sus hermanos y hermanas envejecieron y sus hijos asumieron sus responsabilidades y deberes. Conforme avanzaba el tiempo, cada Clan desarrolló su propio carácter.
En el lapso de mil años la población creció hasta los 30 millones, incluidos dos millones de samurai. Las fuerzas de los Siete Clanes han crecido y menguado, los límites políticos han sido redibujados y peleados muchas muchas veces. Pero algunas cosas nunca cambian, sólo crecen y maduran. Cada Clan ha crecido desde sus inicios, trasformándose en una fuerza distintiva. También se han desarrollado "Clanes Menores", pero ninguno ha sido tan significativo como los Siete Grandes Clanes que nacieron de los Hijos del Sol y la Luna.
EL CLAN DEL CANGREJO
Durante mil años, el Clan Cangrejo ha cumplido con su deber de guardar al Imperio Esmeralda contra los horrores de las Tierras Sombrías. Sus samurai están entre los mejor entrenados de Rokugan. Sus escuelas enseñan las formas en las que un ejército más pequeño puede derrotar a uno mayor, ya que ese suele ser el caso cuando los ejércitos de las Tierras Sombrías asaltan las fortalezas Cangrejo, y los samurai son superados en número al menos en una proporción de tres a uno.
El Daimyo del Clan Cangrejo siempre ha sido de la familia Hida, descendientes directos del primer Hida que cayó del cielo, y que juró al primer Hantei que su dinastía protegería el Imperio de los asquerosos ejércitos de su hermano oscuro, Fu Leng. La familia Hiruma fue la primera en seguir a Hida a las Tierras Sombrías. Su devoción a la familia Hida es bien conocida en el Imperio. A menudo, los guardaespaldas del Daimyo son de la familia Hiruma. Aunque la familia Kuni ocasionalmente produce samuráis, esta familia se ha consagrado a descubrir los secretos de las Tierras Sombrías, y por ello la mayoría de sus miembros se ponen las túnicas de los shugenja. La historia de la familia Yasuki es bastante curiosa. Durante las primeras guerras de los Clanes de hace más de mil años, la familia había jurado lealtad a la familia Doji. Pero durante la guerra, traicionaron a los Grulla y juraron lealtad al Señor Hida. Una afrenta que nunca ha sido perdonado.
Al contrario que otros Clanes, a los Cangrejo no les importa tanto la sinceridad, y sin dan más valor a la honestidad. “No hay mentiras entre aliados en un campo de batalla,” es un viejo dicho que todo samurai Cangrejo sabe y entiende. Llevan esta filosofía desde el campo de batalla a la corte, y se vuelven iracundos con gran facilidad cuando creen que les están mintiendo. Los Cangrejo ven la situación política de forma muy simple. Los fuertes tienen más derecho a gobernar que los débiles. Aquellos que no pueden proteger el Imperio no se merecen gobernarlo. Debido a la derrota del primer Hida a manos de Hantei, miran con respeto a la dinastía Hantei. Pero, si en algún momento un Hida pudiese quitarle el trono al Hantei que gobernase, lo harían sin dudarlo.
EL CLAN DEL DRAGÓN
Hay tan poco que se puede decir con certeza sobre el Clan Dragón. Fueron fundados por el Togashi hace mil años, un samurai que rehusó luchar contra su hermano por el derecho a gobernar. Su rehúso fue tomado por Hida como un acto de cobardía, pero Hantei era lo suficientemente sabio como para saber que Togashi había rehusado porque ya sabía el resultado: su propia derrota a manos de su hermano. Togashi luego se retiró a las montañas y construyó un monasterio donde permaneció durante muchos años. Hasta que en el templo no se le unieron tres samurai – Mirumoto, Kitsuki y Agasha – no fue fundado el Clan Dragón. Desde entonces, todo lo demás que se sabe solo se saca de la especulación.
Se rumorea que hay muchas Órdenes secretas en el Clan. Una Orden, los Ise Zumi, se han ganado el reconocimiento de Rokugan. Su práctica de tatuar todo su cuerpo con elaborados diseños, símbolos y dibujos es más conocido que entendido. Las historias de Ise Zumis saltando de sus caballos, respirar fuego, escupir veneno y cambiar de forma son tan prolíficas como entretenidas. Sus shugenja son igual de misteriosos. Usan poderes que ningún otro shugenja puede explicar, pero cuando hablan con shugenjas de otros Clanes, los demás Clanes dicen que los Dragón no entiende los principios básicos de la magia. Los Dragón siempre parecen desafiar ser definidos.
El Clan Dragón también es el primer Clan en enseñar la “técnica de las dos espadas.” Los samuráis Dragón son famosos por su estilo de katana /wakizashi, y aunque los alumnos de la Academia Kakita se burlen de ella, lo hacen para proteger el honor se su academia y no por falta de respeto por ese estilo. De todos los Clanes, los samurai Dragón son vistos como los más devotos a la religión de Rokugan. Son literalmente “poetas–guerreros,” maestros tanto de la espada como de la pluma.
EL CLAN DEL ESCORPIÓN
Si hay algo que no quieres que se sepa, en algún lugar, un Escorpión lo sabe y se asegurará de que tú sepas que lo sabe. Así es como sobreviven, guardando los secretos de los demás. Los Escorpión nunca han tenido a los samurai más fuertes o a los más hábiles shugenja, y por ello han usado la única ventaja que tenían. Se aseguraron de que los otros Clanes no confiasen en ellos, y convirtieron esa falta de confianza en un arma. Nunca sabes si un Escorpión dice la verdad, o si miente, ya que puede sacar ventaja con cualquiera de las dos cosas. En una sociedad que valúa la sinceridad sobre la honestidad, nunca podrás comprender totalmente las maquinaciones de los Escorpión.
Todos los Escorpión llevan máscaras. Cada máscara es única de un individuo determinado, pero la intención es la misma. La máscara está diciendo, “No puedes confiar en mi.” Pero como los Escorpión tienen tanto poder temporal que muchos se ven obligados a hacerlo. Hay muchos relatos de samurai que se ven envueltos en una trama Escorpión, y una vez que descubren la verdad, cometen seppuku para evitar que siga adelante el plan. Pero entonces la historia acaba mostrando que es eso exactamente lo que quería el Escorpión.
Con su reputación de traición y engaño, uno se pregunta porqué existe aún el Clan Escorpión, porqué los demás Clanes no se han unido para aplastarles. Por un hecho muy simple: los Escorpión tienen los Pergaminos Negros. Después de la Caída de los Hijos de Sol y Luna, hubo una gran Guerra entre los Clanes y el ejército de las Tierras Sombrías de Fu Leng. Solo Shinsei y sus Siete Truenos fueron capaces de destruir a Fu Leng, y el secreto de su muerte está escrito en los doce pergaminos que guarda el Clan Escorpión. Solo el Daimyo del Clan conoce donde están los doce Pergaminos. Además, cualquier samurai envuelto en una trama Escorpión llevaría una gran vergüenza a su familia. Ser engañado por un Escorpión es quizás la mayor vergüenza que un samurai o un shugenja podría llevar a su familia. Todo el mundo sabe que los Escorpión saben algo de todo el mundo, y nadie quiere admitirlo.
EL CLAN DEL FÉNIX
Los misterios del universo son los dominios del Clan Fénix. Hace mucho tiempo, antes de que el hombrecillo que se hacía llamar ‘Shinsei’ llegase a Rokugan, el pueblo adoraba a las Siete Fortunas. Eran dioses volubles que eran fácilmente satisfechos y fácilmente enfadados, que bendecían a cualquiera que lo pidiese adecuadamente y maldecían a aquellos que no lo hacían. Los secretos cánticos y rituales que se usaban para comunicar con los dioses era guardados por una orden de hombres santos llamados shugenja. Estos shugenja practicaban sus artes en un lenguaje solo por ellos conocido, escrito sobre pergaminos que se pasaban de padres a hijos.
Cuando Shinsei llegó al Imperio, los shugenja adoptaron su filosofía de los Cinco Anillos y la incorporaron a la religión de las Siete Fortunas. Esta fusión creó una totalmente nueva filosofía para que los shugenja meditasen sobre ella, y nadie piensa mejor sobre la naturaleza de la realidad que el Clan Fénix. Hay tres familias en el Clan Fénix, y solo una de ellas tiene una escuela de bushido. Las otras dos están dedicadas a entrenar shugenja, y ninguna otra escuela de shugenja de Rokugan se les puede comparar. Están dedicadas a la búsqueda del conocimiento. De todos los demás Clanes (incluso los Grulla), el Fénix es el menos militar. Prefieren la paz antes que la guerra y solo entran en ella si se ven forzados a hacerlo. Al menos, los Grulla están dispuestos a defender las tierras de sus aliados. Un shugenja Fénix siempre buscará la solución pacífica de un problema, incluso cuando su enemigo está derruyendo sus murallas con catapultas. En cambio, un samurai Fénix es distinto. La familia Shiba es responsable de guardar las murallas del Clan Fénix, y aunque también son los Daimyos del Clan, las verdaderas decisiones son tomadas por los cinco Maestros Elementales de la familia Isawa. Los samurai Shiba samurai a menudo han encontrado dificultades para obtener el permiso del Concilio de Maestros para usar la fuerza militar, por lo que aunque los demás Clanes so ven al Fénix como que no quiere luchar, su impresión es solo medio correcta. Los samurai están deseosos por luchar, son los shugenja los que son difíciles de convencer.
EL CLAN DE LA GRULLA
Durante siglos, los Grulla han usado las maniobras políticas para ganarse la posición de consejeros del Emperador. Cuando el primer Hantei necesitó una prometida, ahí estaba el Clan Grulla con un montón de chicas guapas para que él eligiese. Cuando Hantei II necesitó una prometida, ahí estaba el Clan Grulla con un montón de chicas guapas para que él eligiese. Cada generación de Hantei se ha casado con una mujer del Clan Grulla. Pero Hantei no fue el único. Mil generaciones de Grullas se han metido en las dinastías de otros Clanes, proporcionando así al Clan Grulla la simpatía de cada Clan. Ya que la madre de cada Emperador (y de muchos Daimyo) ha sido una Grulla, esto le ha proporcionado al Clan con muchas ventajas. Podían pedir favores a casi todos los Clanes en casi cualquier momento.
El Clan Grulla también consiguió atraer a sus dojos los mejores espadachines del Imperio para que enseñasen a los samuráis Grulla el arte del kenjutsu, y ahora, la Academia Kakita de Kenjutsu es la principal academia de kenjutsu (esgrima) de Rokugan. Ir a esa academia se considera uno de los grandes honores que se le puede dar a un samurai. Por supuesto, solo se puede ir si se es invitado, lo que significa que muchos samuráis deben pagar un precio muy alto para que sus hijos e hijas reciban el mejor entrenamiento kenjutsu que existe.
Como consejeros políticos y económicos del Emperador, los Doji pueden vigilar a los demás Clanes. Son los primeros que se enteran de las noticias, los primeros en escuchar que tropas han atravesado las fronteras interprovinciales, y los primeros en hablar con el Emperador sobre cuales deben ser sus acciones. La familia Asahina era originalmente del Clan Fénix, pero cuando un shugenja Asahina fue salvado por una doncella Kakita samurai, su resultado fue una boda, y los Grulla heredaron toda la sabiduría de una familia shugenja Fénix.
EL CLAN DEL LEÓN
Si los Grulla son la "mano izquierda" del Emperador, los León son su mano derecha. El Clan León fue fundado por Akodo, hijo de Luna y Sol. Cuando Akodo buscó prometida, no buscó a una bella chica Doji, ya que no quería ser un servidor del Clan Grulla. Encontró a una bella mujer de fuerte carácter llamada Matsu e intentó conquistarla. Matsu era una mujer orgullosa que no quería saber nada del samurai y se tomó su cortejo como un insulto. Le retó a combate y Akodo accedió. El duelo entre Akodo y Matsu es una historia clásica que se cuenta una y otra vez por los cuenta-cuentos, y a menudo se muestra en el arte y en el teatro. Se dice que el ganador también ganaría el Clan. Pero cada uno de los combatientes añadió una condición. Akodo añadió la condición de que si ella ganaba, Matsu se tendría que casar con él. Matsu añadió la condición de que si él ganaba, ella no se tendría que casar con él. El final de la historia depende de quien cuenta la historia, pero el resultado siempre es el mismo: Akodo gana el Clan León y Matsu le jura fidelidad, pero no tiene que casarse con él.
El Clan León es el tradicional defensor del Trono Esmeralda. A un samurai Matsu León es conocido por su pasión y su temperamento. Es rápido en juzgar y creerse insultado, y nunca se toma a la ligera los insultos. Un samurai Akodo es conocido por su pasión y valentía, pero también por su conocimiento de las tácticas y el liderazgo. Mientras que los Matsu ganan con fiereza y arrojo, el Akodo es el maestro de las tácticas. A ambos se les considera los más bravos de todos los samurai de Rokugan. Se suele contar una historia a los niños sobre una famosa emboscada contra el Primer Hantei. El guardaespaldas del Emperador – Akodo Sato – se tiró de su caballo y se lo dio a su Emperador para que pudiese escapar mientras que Sato permanecía ocupándose del enemigo.
La familia shugenja del Clan León – Kitsu – no es tenida en mucha consideración en los círculos shugenja. Creen que la escuela Kitsu está “anclada en el pasado” y demasiado embutida en la tradición. Pero esta queja se podría hacer sobre muchos León.
EL CLAN DEL UNICORNIO
Justo después de que Hantei tomara el Trono se volvió a su hermana Shinjo y le pidió que cabalgara más allá del Imperio en busca de aliados en previsión de posibles peligros. Shinjo partió con un pequeño grupo de seguidores y no se volvió a oír hablar de ellos durante ochocientos años. Hace sólo doscientos el Clan del Unicornio volvió con riquezas inimaginables, fabulosos tesoros de manufactura extranjera y su más valiosa posesión: los caballos de guerra del oeste. El Clan del Unicornio también regresó con muchas costumbres y creencias misteriosas que les convertían en extraños para la gente de Rokugan. Su ignorancia de la delicada etiqueta de la corte les ha hecho parecer "bárbaros" y "poco civilizados", pero sus poderosos caballos y valientes samurai (todos entrenados en lo que los León llaman "trucos bárbaros") les han convertido en aliados valiosos para quien los desee como tales.
Geografía de Rokugan
Rokugan es una tierra rocosa y montañosa, rodeada por tres lados de montañas (norte, oeste y sur) y por el océano al este. Hay casi doscientos volcanes, aproximadamente cincuenta de ellos activos, y cientos de manantiales termales que atraviesan las regiones montañosas. sólo cerca de un quinto del territorio es plano, la mayoría son laderas de colinas empinadas, estrechas gargantas, valles angostos barrancos y montañas. Cuanto más se aproxima uno al océano más llana se torna la tierra. Es allí donde se encuentran las granjas. La nobleza ha utilizado las regiones montañosas en su provecho, construyendo castillos en pasos estrechos o inaccesibles. Las tierras llanas se utilizan para las granjas, puertos y ciudades.
Hay muchos ríos que atraviesan Rokugan, fluyendo de las montañas y cruzando el paisaje para morir en el océano. Las ciudades y las granjas de arroz se construyen en las llanuras cerca de los ríos, con diques que las protegen de las riadas primaverales.El clima es variado. El invierno es corto pero frío. El verano es largo y sofocante. El otoño es fresco y la primavera húmeda. Un vistazo a los edificios y las ropas de Rokugan pueden explicara un extranjero que los rokuganeses encuentran mucho más desagradable el calor del verano que el frío del invierno. Rokugan experimenta fuertes nevadas durante esta época, tan serias que los viajes casi se paralizan en esta época.
La Furia de los Elementos
Rokugan no es ajeno al desastre. Durante los mil años de gobierno Hantei el Imperio Esmeralda ha visto cientos de terremotos, tsunami y huracanes.
Los terremotos tienen lugar con regularidad. Al menos una vez al año se siente un temblor menor bajo la tierra. Pueden ser ligeros movimientos que retumban durante unos momentos o grandes grietas que derriban edificios y hienden la tierra durante varios minutos. Ha habido cinco grandes terremotos en la historia de Rokugan, todos ellos seguidos al poco tiempo por un tsunami.
Tsunami es la palabra rokuganesa para "ola gigante". Después de un terremoto los rokuganeses siempre inician los preparativos para hacer frente a uno de estos desastres. Normalmente pueden contar con que llegue entre uno y dos días después. Incluso los terremotos menores pueden provocar tsunami, pero a mayor gravedad del temblor siempre es mayor la de la ola.
Los huracanes también son frecuentes de las costas de Rokugan. Estas grandes tormentas destruyen pueblos enteros, pero también aportan grandes botines a los pescadores una vez han pasado.
Otra señal de las fuerzas de la naturaleza toma la forma de los volcanes.Como se mencionó anteriormente hay muchos volcanes en Rokugan, no todos inactivos. Los rokuganeses suelen construir pueblos en las tierras bajas, pero la nobleza elige sus fortalezas en lo alto de las montañas, cerca de la amenaza de erupción. Aunque las fortalezas montañosas no se construyen cerca de cadenas volcánicas activas, la mayoría de los rokuganeses conocen el cuento (sin duda apócrifo) de un grupo de shugenja que lanzó un poderoso ritual que despertó el fuego de la tierra para devorar el castillo de un enemigo...
Cultura
EL ORDEN CELESTIAL
Aunque la cultura de Rokugan puede parecer bastante extraña, es muy parecida a la Europa feudal con la que están familiarizados los amantes de la historia y la literatura fantástica. La sección siguiente está dedicada a la estructura de la sociedad regimentada que forma Rokugan. Aunque al principio puede asustar en realidad es bastante sencilla. Todo Rokugan está basado en una estructura jerárquica llamada El Orden Celestial... Los rokuganeses creen que todo forma parte de un diseño divino. Incluso la humanidad tiene un papel que jugar en este orden. Creen que todos tenemos un detino y que debemos trabajar para completarlo, aunque ello signifique la incomodidad, el dolor o la muerte, pues a pesar de lo terrible que pueda ser el camino de cada uno, algo aún peor aguarda a aquellos que intentan engañar a su destino.
LOS TRES ESCALONES
Rokugan es muy formal. El universo opera bajo una estructura escalonada: los hombres y las mujeres nacen en uno de los tres escalones del orden, y han de vivir el resto de sus vidas en el papel que su nacimiento les ha situado. Hay veces que algunos pueden moverse de un escalón a otro, pero esto es la excepción y no la regla.
Hay tres clases de personas en Rokugan: la Nobleza (los que hacen la guerra). los Campesinos (los que trabajan) y los Sacerdotes (los que rezan). Aquellos que quedan fuera de esta estructura se consideran no-gente, o Hinin, y no están protegidos por la justicia Imperial.
El propio Rokugan es un estado feudal. Hay un único Emperador que es dueño de todas las tierras. Todo lo que se extiende bajo el Sol le pertenece, puesto que su ascendencia se remota al primer Hantei que ganó el torneo del Sol y la Luna. Los nobles menores (daimio) juran lealtad al emperador. Gobiernan los territorios que se les dan y se aseguran de que las leyes del emperador sean obedecidas y cumplidas. A cambio, obtienen el derecho a recaudar impuestos en la tierra que rigen. Del mismo modo un daimio puede dar parte de sus tierras a cambio de fidelidad. Los campesinos trabajan los campos a cambio de la protección de los nobles. Por desgracia para los campesinos, el "contrato feudal" está un tanto desequilibrado en Rokugan. Los daimio y samurai no están obligados a protegerlos. Aquellos que lo hacen actúan por cortesía más que por obligación.
SAMURAI: LOS QUE HACEN LA GUERRA
La clase social más alta de Rokugan, la forman los guerreros o samurai. Todos los que nacen en una familia de samurai son considerados como tales sin considerar su profesión. El Emperador y su familia son el primer peldaño en esta escalera. Los daimio mayores de los Siete Clanes son el segundo peldaño y los daimio de las familias son el tercero. El cuarto son los samurais que han jurado fidelidad a las familias de los daimio y bajo ellos, en el quinto peldaño, están los que han nacido en la familia pero no han sido entrenados como guerreros. Por último están los Ronin (hombres herrantes, llamados así por su naturaleza vagabunda), los guerreros sin señor que vagan por el país.
Sólo un samurai puede portar un daisho: las dos espadas enfundadas en el cinturón u obi. La primera espada es la katana (espada larga) y la segunda se llama wakizashi (espada corta). Los samurais viven bajo un código de conducta llamado bushido. Este sistema gobierna todas sus acciones.
Algunos clanes son muy devotos de la religión de Rokugan, pero otros no. Los samurai del Clan del Fénix deben estudiar muchos textos sagradas y aprender las técnicas buhei (habilidades de lucha). Han de pasar ceremonias religiosas antes de recibir su daisho, en la que un shugenja (sacerdote, alguien que puede hablar con las fortunas y recibir respuestas) les afeita y les unge la frente. Los samurai del Clan Cangrejo no se entretienen con tales frivolidades. Un cangrejo aprende a luchar y a morir.
HEIMIN: LAS SEMI-PERSONAS
Los heimin o semi-personas son la gente común. El plebeyo mayor dentro del orden es el campesino, porque proporciona lo que es más necesario en la vida: la comida. Sin él todo el mundo pasaría hambre. El siguiente es el artesano, puesto que crea cosas que la gente necesita. El mercader está por debajo porque no crea nada, únicamente vende lo que los demás crean. Es legal para un samurai matar heimin si su honor se ha visto comprometido por la rudeza de éstos. Qué constituye una "rudeza" suele depender del samurai ofendido, por lo que los heimin siempre intentan ser tan humildes como les es posible en su presencia.
HININ: LAS NO-PERSONAS
Los hinin (no-personas) incluyen criminales, artistas (actores, músicos y geisha), charlatanes (prestidigitadores, y embaucadores) y jugadores. También incluyen a los seta, la gente que hereda trabajos "sucios" que implican tocar los cadáveres de humanos y animales. Los rokuganeses detestan tocar algo muerto. Creen que tocar los cadáveres (o cualquier cosa relacionada con ellos, como la sangre) mancha sus almas. Estos trabajos, como el de curtidores, enterradores o torturadores, se dejan para los seta. Aunque un samurai puede necesitar una buena razón para matar a un campesino, matar hinin no se considera un crimen porque no forman parte del orden. Sin embargo, matar a ciertos hinin (como la geisha favorita de un samurai) puede tener serias repercusiones.
NINJA
Los ninja se consideran eta, y por tanto, no-personas. No es un crimen matar a un ninja y no hay consecuencia derivada de ello. Un samurai perdería prestigio por tratar a un ninja reconocido, pero nadie sabe con certeza que existan en realidad. La amenaza de los ninja es todo lo que se necesita para que campesinos y nobles se estremezcan bajo sus quimonos. Un shuriken dejado sobre el cadáver de un sirviente muerto es suficiente advertencia, pero no es una prueba concreta de la existencia de los ninja.
LA RELIGIÓN
El Orden Celestial no se aplica tan solo a la humanidad. Los dioses de Rokugan (comúnmente conocidos como Las "Fortunas") también son parte de la gran máquina del universo y también deben obedecer sus rígidas leyes y códigos.
Hay muchas, muchas Fortunas. Por cada pueblo, ciudad, familia, Clan, gruta, montaña, río y árbol, hay una Fortuna que vela y guía su vida. Los shugenja de Rokugan son educados en la religión de las fortunas. Aprenden sus nombres y costumbres, así como los rituales y plegarias para realizar peticiones y calmarlas.
Además, en mayor o menor grado, los shugenja son educados en la filosofía de los Cinco Anillos, que fue enseñada al emperador hace mil años. Cada clan tiene una visión diferente del "shinseísmo", pero todos respetan sus enseñanzas.
Las mujeres
SAMURAI-KO
Las doncellas samurai que permanecen fieles a sus señores inscriben sus nombres en los libros de la historia.
Las que caen los dejan en las canciones trágicas de amor.
- Doji Shizue
Una de las historias favoritas de los poetas de Rokugan es la de la hermana de un samurai asesinado que se puso la armadura y cogió la espada de su hermano para vengarlo. La "historia de Hitomi" ha provocado que numerosas jóvenes se conviertan en bushi, y ha justificado dicho acto a ojos muchos daimyo. El ritual samurai de cambiar de nombre ha hecho que muchas samurai-ko (mujeres samurai) adopten el nombre de "Hitomi" tras tomar el daisho, incuída la samurai-ko del Clan del Dragon Mirumoto Hitomi.
Uno de los votos que realizan algunas samurai-ko durante su ceremonia de iniciación es el de celibato (después de todo, una samurai-ko no puede dedicarse a la vez a su daimyo o a su amante o marido). Si se descubre que una samurai-ko que ha jurado celibato tiene un amante, a menudo renuncia a su posición e ingresa en un monasterio. Por supuesto, la palabra clave es "descubre...". Hay muchas samurai-ko que tienen amantes,y el repertorio de cada poeta tiene diversas historias de samurai y samurai-ko que han provocado su perdición debido al amor. Las samurais-ko son tratadas como mujer samurai en el Orden Celestial, no hay diferencias de trato con respecto a los hombres.
ESPOSAS
El matrimonio en Rokugan no tiene nada que ver con el amor. Un matrimonio es un asunto estrictamente de negocios, arreglado por los padres de la pareja y un mediador. No se espera que uno ame necesariamente a su esposa. Sin embargo, una ofensa contra la mujer de un samurai es una ofensa contra su marido.
Un hogar rokuganés es muy diferente a lo que uno puede esperar. En Rokugan, la mujer maneja todo el dinero y está a cargo de la casa en todos los sentidos. Un samurai recibe un estipendio de su esposa que puede gastar de la forma que desee, pero la mujer decide como se gasta el resto del dinero. Maneja las finanzas, alquila trabajadores para reparar y mejorar la casa y se encarga de entretener las visitas. Sin embargo, aparte de esto, la esposa tiene poco que hacer salvo murmurar con las esposas de los demás samurai y leer las historias románticas (llamadas libros de almohada) que se venden en el mercado.
GEISHA
Aunque hay muy poco romance en un matrimonio no puede decirse lo mismo de las aventuras fuera de él. Aunque los asuntos extramaritales de un samurai son ignorados por la sociedad, se espera que sea discreto, de forma que no insulte a la familia de su esposa. Cuando un samurai busca compañía puede encontrarla en brazos de una geisha. Las geisha son artistas. Están entrenadas en el arte de la música, la poesía y la conversación. Aunque se tiene un gran respeto por sus habilidades, siguen siendo tan solo hinin dentro del Orden Celestial.
Cuando entra en la Casa del Té de una geisha se espera de un samurai que deje su katana en la puerta (para evitar verter sangre en él). Las leyendas están llenas de samurai que se enamora de geisha y el peligro que tal es pasiones suponen. Se espera que un guerrero sienta tal pasión sólo por una cosa: la protección de su señor. Tales pasiones comprometen la devoción de un samurai por un señor y son desaprobadas en extremo en Rokugan.
La vida de un samurai
Igual que las estaciones y las mareas, la vida humana sigue un ciclo. Negar este ciclo es negar la pertenencia al Orden y nuestro lugar en él. No solo es un deshonor hacia los dioses, sino también hacia los propios ancestros que esperan algo mejor de un samurai.
NACIMIENTO Y JUVENTUD
Cuando nace un niño, lo hace dentro de la casta de su padre y su madre. La infancia en Rokugan es muy diferente a la de occidente. Los niños no se consideran adultos hasta que pasan su ceremonia e gempukku. Un niño no es un adulto pequeño, es un menor al que no se le ha enseñado aún las normas de los adultos, y por ellodebe ser tratado con amabilidad y permisividad. Una vez cumple siete años es enviado a la escuela en la que pasará varios años aprendiendo las costumbres de su casta y profesión.
MAYORÍA DE EDAD: LA CEREMONIA DE GEMPUKKU
Los jóvenes samurai son educados en escuelas en las que aprenden historia, esgrima, lenguaje, tácticas de batalla y filosofía. Lleva aproximadamente nueve años completar el entrenamiento, durante los que los estudiantes rara vez (si hay alguna) ven a sus padres. En algún punto entre los 13 y los 21 (normalmente a los 16) el niño realiza el rito de iniciación llamado Gempukku y es, por primera vez, considerado un adulto. Normalmente se espera que los niños adopten un nuevo nombre (su nombre adulto) con esta ocasión.
MATRIMONIO
Los matrimonios son concertados por los padres de los prometidos, y sólo ocasionalmente ambos sufren la agonía del romance. A menudo se utiliza un mediador para concertar el matrimonio, normalmente un miembro del Clan de la Grulla, que siempre está al corriente de los nacimientos de las familias reales de Rokugan. Los dos contrayentes suelen ser presentados algún tiempo después de su ceremonia de Gempukku.
El día del matrimonio la novia viste de blanco, el color que simboliza la muerte, para mostrar que ahora ha muerto para su familia. Durante la ceremonia deja caer esta vestidura blanca para mostrar otra roja, simbolizando su renacimiento. Tras la ceremonia hay pocas oportunidades para que florezca romance. La novia es llevada aparte por la suegra para que aprenda todo lo que necesitará para ser una buena esposa, mientras el marido marcha en peregrinación hacia algún lugar sagrado (para celebrarlo). La celebración suele implicar que el samurai medite sobre esta nueva fase de su existencia y sobre los cambios que necesitará hacer en su nueva forma de vida.
AMOR
Aunque el concepto de amor es a menudo trágico en la literatura occidental, también es edificante. No es así en Rokugan. El amor apasionado no tiene cabida en el corazón de un samurai; sólo hay lugar para una devoción completa e incuestionable al propio daimyo. Cualquier otra emoción entra en conflicto con la propia devoción, enturbiando la lealtad.El amor apasionado es a menudo mal visto en los círculo samurai; es una emoción para la "gente baja", como los cortesanos y las geisha. Sólo en muy raras ocasiones una historia de amor acaba bien para un guerrero. Aunque esto sea normal y aceptado en Rokugan, los amantes que logran sobreponerse a las dificultades suelen ser vistos como heroicos y honorables. Los que no lo consiguen suelen terminar tragicamente, y a veces se les vilipendia.
INKYO: LA LLEGADA DE LA VEJEZ
En Rokugan, un samurai es considerado un hombre joven hasta que alcanza su vigésimo cumpleaños. Entonces, hasta los 40, será de "mediana edad"... En su 40 aniversario se considera adecuado que se afeiten la cabeza, cambien su nombre y se conviertan en monjes para prepararse para su próxima vida.
Se considera adecuado, pero eso no significa que sea una verdad universal. El daimyo del Clan del Cangrejo, Hida Kisada, tiene 50 años y ninguna intención de afeitarse la cabeza o de unirse a un monasterio. Del mismo modo, la Grulla Gris, Kakita Toshimoko, tampoco muestra signo alguno de querer prepararse para su próxima vida; le queda mucho por hacer en ésta.
Cuando el Emperador o un daimyo se retira dejando a un joven samurai en su lugar a menudo permanece en la corte como consejero. Por supuesto, el resto de la corte sabe quién es la autoridad real, lo que convierte al joven sentado en el trono en un monarca de papel hasta que su predecesor fallece.
MUERTE Y SEPPUKU
El miedo a la muerte no es solo impropio sino también un deshonor. Dado que los rokuganeses creen en un mundo espiritual al que van las almas de los muertos para guardar su renacimiento, esperan unirse a sus ancestros en el mundo espiritual tras su muerte. A los samurai se les enseña en el dojo una famosa cita: "He recibido en préstamo el nombre de mis ancestros. Debo devolvérselo inmaculado."
Este valor sorprendente frente a la mortalidad puede hacer muy corta la vida de los samurai. A menudo, cuando uno no cumple con su deber o su valor queda en entredicho, surge la necesidad de probar su valía: la prueba definitiva de valor.
El Seppuku (abrirse el vientre) es esa prueba. El ritual de la demostración del propio valor frente a la muerte. Antes de la ceremonia el samurai pasa el día en un templo (dedicado a una deidad familiar), escribiendo poemas y cartas a sus seres queridos. Al final de este día, el samurai se arrodilla en una estera para proteger el suelo sagrado de su sangre, desenvaina su wakizashi y realiza tres profundos cortes en su torso. No debe gritar por el dolor, y a menudo un amigo íntimo o un familiar espera tras él, con su katana desenvainada, listo para realizar el corte final e impedir que su amigo se deshonre emitiendo algún sonido. Los samurai no comete seppuku para proteger su propio honor, sino el de su familia. Es, quizás, el aspecto peor comprendido de la cultura del samurai.
El Idioma
En Rokugan hay dos idiomas diferentes: la lengua común y la lengua culta, usada sólo por la nobleza, los shugenja y los monjes. Todos los samurais aprenden la lengua común y a unos pocos se les enseña la lengua culta.
La lengua común de Rokugan tiene muchos dialectos. Un samurai puede viajar por las tres provincias diferentes y oír tres pronunciaciones diferentes de la palabra "arroz". A menudo el acento de un samurai denotará su clan, posiblemente hasta su familia.
La lengua culta es utilizada exclusivamente en las escuelas shugenja y en la Corte Imperial. Los documentos oficiales están escritos en la lengua culta (para evitar falsificaciones por parte de las clases inferiores) y los dialectos comunes no se permiten en las cortes. Los samurai no consideran importante que los campesinos comprendan o no las órdenes de la corte; sólo han de obedecerlas.
La Economía
KOKU
La moneda base en la economía de Rokugan se denomina "Koku", y tiene el valor aproximadamente de unos 200 kg de arroz. Un único koku se divide en 5 fanejas, o monedas de plata, llamadas Ichibukin o "Bu". Cada fanajea puede dividirse en 10 celemines de cobres, llamados "Zeni".
1 koku=5 bu= 50 zeni
IMPUESTOS
Cada estación de cosecha produce aproximadamente 25 millones de koku de arroz en Rokugan. También provoca la llegada de los recaudadores de impuestos a las granjas, listos para recaudar el 60% de todo lo que el campesino haya producido ese año.
Los recaudadores de impuestos no siempre recogen comida. Los campesinos también pueden ofrecerles seda, sake, telas o té. En algunas ocasiones hacen tales ofrendas como soborno para que no se informe de un nuevo campo de arroz a su señor.
ARTESANOS Y MERCADERES
Aunque los artesanos y mercaderes están muy abajo en la escala social de Rokugan también son los más ricos. Los samurai y los campesinos siempre necesitan de zapateros, carpinteros, toneleros, herreros y otros artesanos que reparen o reemplacen sus herramientas, armas, casa y ropa.
En Otosan Uchi, la capital del Imperio, un samurai puede encontrar tres herreros de hojas, ocho afiladores de espadas, cuatro plateros, tres hacedores de vainas, dos lacadores, dos flecheros, un tintorero y un centenar de destiladores de sake. Hay un total de 200 carpinteros disponibles y listos para trabajar, por no mencionar a los barberos, trenzadores de paja, papeleros, cortadores de tabaco, labradores y tejederos de esteras. Todos estos artesanos tienen trabajo estable gracias a los campesinos, los habitantes de la ciudad y el señor de las tierras.
CARPINTEROS
Los artesanos más ricos de Rokugan son los carpinteros. Tienen tanto dinero que muchos son capaces de pagar guardaespaldas que les protejan de los bandidos. Es bastante común que los campesinos paguen al carpintero local una pequeña cantidad para que extienda esa protección también a ellos. Por supuesto, el carpintero ha de hacer los "arreglos" con el magistrado local para que éste no ignore tales actividades. Ningún daimyo desea ver su autoridad comprometida, y más de un carpintero ha muerto por ofrecer su protección a los súbditos de un señor.
Hay cuatro clasificaciones de "carpinteros" en Rokugan: El yesero (que hace paredes de yeso), el techador (que hacer tejas para los tejados), el albañil (que hace los cimientos de la casa), y el serrador (que mide, corta y acondiciona la madera). Estos cuatro hombres trabajan en equipo, liderados por un carpintero que es maestro en todas las habilidades. Dicho personaje actúa como representante y busca trabajo para su equipo.