Partida Rol por web

Con el hacha a dos mano se activan los símbolos de la misma abriendo una brecha enorme para que entre el grupo hasta el lugar de los primeros y entro yo el ultimo.

Las muertes y resurrecciones que se producían a su alrededor eran un reflejo del caos que rodeaba el lugar y aunque eran motivo de alegría la resurrección del Little Tolen le había dado bastante que pensar pero tendría que ser más adelante

- Vamos, que nadie se quede atrás. Si hay alguien más que necesite ayuda para entrar que lo diga y le ayudaré. 

El enano ve sorprendido cómo todo el mundo comienza a correr. ¡Pero a qué viene tanta prisa!

Hasta dónde los ojos del enano llegaban sólo veía magma, fuego y la interminable furia de los dioses. Fuesen dónde fuesen todo era igual.

Vio que todos corrían y pasaban casi empujando a la pobre elfa ciega:

-¡Muy bonito, si señores, muy bonito!¡Ya que estáis empujadla y meterle la cabeza debajo de la lava!. El enano se acercó a ayudar a la elfa. Imaginaba que al no disponer de visión, debería ser terrible oir los gritos de desesperación de la gente, gritando por salir de allí y no saber hacia dónde dirigirse. Que un enano tenga que ayudar a un elfa…refunfuñaba entre diente mientras se acercaba, entonces recordó que le había salvado la vida hará 3 noches.

Comenzó a correr y al llegar a su lado le tomó de la mano:

-No te asustes, elfa. Estos están todos locos. Corren de un lado a otro sin sentido. No pasa nada…

En ese preciso momento la tierra tembló y los dioses bloquearon las salidas. No había escapatoria. Ante el brutal temblor el enano apretó con fuerza la mano de la elfa, presa del pánico:

-¡Ay madre qué no salimos de aquí!. ¡Nos vamos a morir!. ¡No quiero morir todavía!. ¡Soy muy joven para ello!…

De pronto el temblor cesó y todo volvió a la normalidad. Recobrando la compostura le habló a la elfa:

-¿Ves?, no pasa nada. Todo está bien. Ven, sígueme. Te llevaré a un sitio menos inestable. Menos mal que estoy yo para ayudarte. Está mal que yo lo diga, pero los enanos somos la raza más valiente y menos asustadiza de todas…, dijo obviando el hecho de haber entrado en pánico ante el temblor de la tierra…y tenéis la suerte de contar conmigo, famoso entre los enanos por mi bravía y valentía. No lo digo yo, lo dice el pueblo entero de las montañas brumosas. Nada te pasará, confñia en mí. El enano andaba con porte orgulloso y tranquilo, para dar seguridad a sus palabras mientras guiaba a la elfa ciega hacia un roca cercana, en la que podrían descansar.

Ninguna brecha se abre ante la fuerza de El Leñador. Las puertas permanecían estáticas, y sellaban el lugar.

La advertencia estaba clara.

La vida de Neryastra había sido cobrada este día, y el pago había sido realizado.

Acompaño al grupo andando y pendiente e Sorya y las indicaciones que nos da. Como encuentre a lo traidores los decapito.

En algún punto del cielo, pequeñas llamas se alzaban para consumir el cuerpo de Ananistra. Nadie estaba en situación como para fijarse en el detalle, pero una buena parte del polvo resultante estaba cayendo sobre el cuerpo del fénix, aquel que siempre regresa, quizás con el secreto deseo de que Ananistra tenga una segunda oportunidad. Tan concentrado estaba que no sintió el temblor de la tierra y el gran portal cerrarse hasta que fue demasiado tarde.

- ¡No Neriastra! ¡No entres! - Pero estaba demasiado lejos, no lo escuchó, y su poder estaba demasiado concentrado en dar ese último regalo a aquella que tanta luz encerraba.

Viendo el caos desencadenado casi podría echarse a reír. En cualquier otra circunstancia le hubiese encantado verlo, pero dos personas que le caían bien acababan de caer, y ahora...

- ¡No se acerquen al portal! ¡Este mundo tiene Leyes! ¡Y de las Malas! Cualquiera que entre morirá sin remedio

Venid hacia aquí, solo seguid mi paso. Vaaamos, ese temblor ha afectado a la placa a sus pies, solo caminad hacia aquí. ¡Venid! ¡Venid!

El descontrol era de esperar. Sin tocar el suelo y guardando cierta distancia, Sorya les guiaba como mejor podía marcando la dirección a seguir sobre las zonas de suelo más estable, concentrándose para sentir la mayor o menor presencia de su elemento para salir de la parte más peligrosa del cráter.

¡¡Neryastra!!

La voz de Z resuena en el lugar mientras intenta en vano chocar contra la puerta para ayudar a su maestra.

¡¡Neryastra!!

Veo como Neryastra me coge para ayudarme a entrar por la brecha que abrió, pero, esta se convierte de repente en una puerta al mismo infierno tragando a la humana, acabando con su existencia, caigo al suelo al ser esta tragada, mientras extiendo inútilmente mi mano hacia ella, intentando salvarla, pero no lo consigo, no llego siquiera a rozarla.

Tras que la puerta se cierre, observo como vicfire, Dork y el leñador intentan ayudar a Eladrin por su ceguera y el leñador intenta abrir otra brecha con su hacha

pero tu estas loco?!

Le grito, aunque por mi estado, tras gritar toso

cof cof cof

me incorporo, quedándome sentado en el suelo

no has visto lo que le ha pasado a Neryastra? Que quieres, matarnos a todos?! Cof cof cof

Me limité a seguir al resto y pasar como todos lo hacían. Con paso firme, me ponía a seguir la estela del resto de compañeros y sin mediar ni una sola palabra. Solo me limitaba a caminar y escuchar lo alcanzar oír con mis oídos.

Cada día que pasa mas desconcierto recae sobre mi mente.
Muertes, resurrecciones, acusaciones, KAOS....
Cuando Neryasta cae víctima de las nefastas leyes de este plano me decido a ayudar a quien sea necesario aupándoles en mi lomo y echando a volar.
Sin dar una respuesta a Y\'aimn, le agarro con una de mis garras y le lanzo hacia mi lomo esperando que se sujete con las pocas fuerzas que tenga.
Acto seguido me acerco a Eladrin, Dork, Vicfire, etc y cojo a la elfa de la misma manera que a Y\'aimn pero soltándola con mas fragilidad y esperando a que se sujete, lanzo también a Vicfire a mi lomo, cojo al enano con una de mis garras, al leñador con la otra, y con un increible esfuerzo comienzo a batir mis alas para intentar remontar el vuelo en pos de las indicaciones de Sorya.

- No tengo capacidad para volar con nadie mas. En cuanto Sorya nos indique un sitio fiable para quedarnos volveré a por el resto. Luego tendremos tiempo de hablar, juzgar y regir el destino de otra vida, pero hay mucha gente resurgiendo de su tumba. Esto no me gusta nada.

Después de muchos aleteos consigo alzarme y sin poder cojer mucha altura empiezo a moverme buscando el punto que Sorya nos indica.

Cuando consigo dejar a la gente en lugar seguro, vuelvo a alzarme por encima de sus cabeza, y aprovechando las corrientes de aire caliente que el magma me ofrecía, volví planeando para descansar un poco y me dirigí hacia el grupo que quedaba en territorio inestable.
Según llegué, subí a Amsu en mi lomo, corrí hacia Vivianne y la lancé junto a Amsu mientras me acercaba a Phi para ofrecerle una ayuda y subirle a mi lomo también, me fijé que Tahorn estaba como en las nubes, sumido en sus plegarias por lo que le cogí con una de mis garras y mientras volaba cogí a Alana al vuelo y la acerqué rápidamente hacia el territorio seguro.

Por lo visto era el único que podía volar y que podía transportar a la gente, asi que viaje tras viaje recogí a todo el mundo, menos al Capitan Greed y a Urkhova puesto que estaban enzarzados en un forcejeo.

Cuando pude poner a casi todos a salvo, me dirigí hacia Greed para intentar evadirle de sus fines, por lo menos hasta ponerse a salvo.

- Capitán. Creo que sus actos pueden llevarse a cabo en un lugar seguro puesto que el destino lo regimos con nuestras votaciones, y cualuier cosa que intente interferir en ese destino se cobrará la vida de quien interfiera, si no mire a Neryasta. Intentó ayudar y terminó en el infierno...
Acompañenme ambos por favor.

Oh, no os preocupéis por mí. Hace calor, estoy acostumbrado a ello... llevaros a Alana por favor y sacarla de aquí, ponerla a salvo. Ella si necesita que la cuidéis. Yo... yo no tengo fuerzas despues de traerla a la vida nuevamente... ya no puedo hacer más.

El Demonio se miró la herida durante un momento y negó con la cabeza mientras se pasaba una mano por ella.

Esto curará, en un día, y volveré a ser el de antes. Hyent'nrám por favor, ponla en un lugar seguro hasta que recupere mis fuerzas...

- Demódinus, ella ya está a salvo, y aunque no te hayas dado cuenta, tú también...

vayamos a un lugar seguro, pero esta perra, deberia de quedarse aqui y consumirse por las llamas del infierno en el que estamos por su culpa

Alce el vuelo, pero no derrame lagrima o sentimiento alguno por la perdida de Neryastra Quiebraplanos, pues sus intenciones eran cuanto menos sospechosas y no estaba dispuesto a torcer la pata  y emprender de nuevo batalla por ver que yo tenia razon.

Capitan Greed, si tu poder saber y comfirmar mis sospechas sobre la humana, seria de ayuda. GRRRRRRR

MArtillodivino estaba confuso, el calor no le ayudaba a pensar
-Ufff... cuanto calor hace aquí... en mala hora mi señor me otorgo esta calurosa armadura.-Pensó en quitársela, pero tal vez las consecuencias finales serian peor y después de todo era un enano, una simple racha de calor no acabaría con el.

-Los muertos no deberían volver, eso es lo único que opinare al respecto, sobre lo que los elfos dicen entre ellos.-En ese momento un pequeño temblor lo desequilibro y se dio cuenta que no era sitio para hablar.

Su camarada estaba cerca y con el siempre esa ciega elfa, pero aquel inculpado dragón le saco de su lado.
-¡MALDITA SEA! ¡Eladrin!-Chillaba mientras ella volaba.-Tengo una pregunta para ti, ahora que Phi a vuelto ¿Aun tenéis esa comunicación única, entre ambos?-Sus pies empezaban a hincharse dentro de sus botas.

-Ni en el reino de mi señor hace tanto calor...-Era una mentira, después de todo era el astro rey el reino de su dios...-Sera mejor salir de aquí cuanto antes...-Dicho y echo, pues siguió al Capitan Greed tan rápido como sus cortas patas le dejaron.

Eladrín se encontraba como una niña indefensa, el primero en acudir en su ayuda fue Vicfire que la cargó en sus brazos hasta algún lugar indeterminado que entre el caos generado y los gritos de sus compañeros era imposible de discernir, luego sintió la mano de maese Dork sobre la suya tratando de calmarla, mientras ella seguía aferrada a Vicfire presa del pánico, y por último sintió como era alzada a lomos del dragón hacia otro lugar. Trató de serenarse y recomponer sus pensamientos. Otro de sus compañeros había caído, cayó al suelo intentado recomponer el aliento, estaba mareada y completamente desorientada, la angustia hizo presa de ella. Se echó las manos a la cabeza tratando de pensar. 

Amsu, hasta de noche no podré hacer nada, pero he descubierto esta noche a esta perra traidora . Señala hacia Ukhova otra vez con la punta de su sable

Mmmm el irritable capitan Greed al parecer dio con otra víbora. ¿cuantos traidores piensan que hay?, cada vez estoy más paranoica y no se a quien darle muerte, aunque si el capitan loco señala a esa persona votare por élla a pesar de que conmigo se equivocó

Hyent'nrám fue amable y me ayudó a ponerme a salvo, pero escuché como Demódinus decía que me pusieran a mi a salvo. Quizás por eso este me ayudó.

No, no Demódinus tú tienes que venir conmigo no puedes dejarme de esta forma...no te hagas el duro y ven...

Ya tendremos tiempo de matarnos entre nosotros. ¡Ahora dejad de hacer el imbécil y subid! Gritó Brontes a Greed y Ukhova.