Su nombre ha caído en olvido. Antaño fué un elfo como sus compañeros, vírgen y puro, primogénito de la sacerdotisa y del jefe y le tocó vivir tiempos duros, pues sus padres cometieron un pecado fatal: osaron entrar al corazón del bosque, a lo más sagrado, para engendrar allí a su hijo, quien nació completamente unido al bosque.
Las plantas le ofrecían los mejores frutos, las panteras agachaban las orejas ante él y hasta los halcones se inclinaban a su paso. Su voluntad era la del bosque, y aquello lo hacía feliz, y a sus padres sentirse orgullosos. Su juventud fué una juventud de dichas para el pueblo, no obstante, todo cambió al acercarse la mayoría de edad, pues la naturaleza no olvida ni perdona: las plantas se secaban, la comida escaseaba, las lluvias nunca llegaban. Tan sólo para su hijo había alimentos, y el odio fué creciendo. Sus padres no sabían qué hacer.
Pero su madre lo vió en un sueño. El bosque pedía el alma de aquel que era suyo por derecho, de su hijo, en un siniestro ritual en el cual deberían profanar su cuerpo del mismo modo que profanaron ellos el corazón del bosque para que así su alma pudiese salir pura y unirse al bosque... Para toda la eternidad. Y así el rito comenzó: veneno paralizante, lágrimas de sus padres, espinas lacerantes que lo hicieron desanagrarse lentamente, drogas que le obligaron a no perder la consciencia, ojos secos con magia...Todo terminó con la luna llena, una luna llena que reclamó su alma para el bosque.
Y aunque lo recuerda, pues ni la naturaleza, ni él, olvidan y perdonan. El bosque es su hogar, los cuida y lo protege. Fué el precio justo por el pecado de sus padres hace tantos siglos que ya apenas puede recordar sus rostros.
Ahora el vuelo del primer dragón lo ha despertado: el mundo se muere. Y es su deber salvaguardarlo. Se adentró en el corazón del bosque hacia su objetivo...
"¿Un elfo? ¿Un druida? Soy más que todo eso: soy la naturaleza. Yo no olvido... Ni perdono."
Venganza de la Naturaleza: Cuando mueras, podrás marcar a alguien y dejarlo malherido. Si éste personaje recibiera cualquier tipo de don o efecto antes de que caiga un nuevo amanecer, morirá irremediablemente. Si muere de este modo, puedes lanzar 1d20, si sacas 16 o más, vuelves a la vida.
Oh, soy el elfito gay, XD, lo malo es que para mi don tengo que tener mucha suerte, tanto con la tirada como con lo del dón
Pues copio al sireno ese, su olorcillo a marisco podre me tiene loquita ^^
Vaya... no contaba con que ellos supieran que pasa algo
Hummmm... no se... no se... tal vez si, por que puede que alguno se extrañe y auxpee a Phi o le haga algo, pero por otro lado si el muere y reaparezco yo inmediatamente me volverán a matar
Tampoco pasa nada ^^, no es que morir en una partida sea una cosa que me quite el sueño XD
De todos modos que él muera y que tú vuelvas también sería sospechoso. xd
Pues si, si resucito deberé inventarme una nueva mentira, aunque no fue muy inteligente elegir a Phi, hubiera sido mejor para mi escoger a Ananistra, así si ella muere yo sería su sustituto
Bueno, te alimentarás de su amor... O algo. xD
Es que me quiero cargar a tu amiguito por no aceptar mi amor elfico ^^
Motivo: Matar a Phi
Tirada: 1d20
Dificultad: 16+
Resultado: 20 (Exito)