Las votaciones concluyeron justo cuando los últimos rayos de sol se escondían por el horizonte, tiñendo el cielo de tonos rojizos y dorados. El Capitán, como de costumbre, estaba distraído corriendo de un lado a otro junto a Chopper, sus extremidades estiradas de forma absurda.

—¡ESTRELLA, ESTRELLA, METRALLETA! —gritó con energía.

Antes de que los desafortunados elegidos de la votación pudieran reaccionar, una ráfaga de puñetazos traseros los alcanzó con fuerza. Ren y Hanji fueron lanzados al aire con una velocidad vertiginosa, elevándose más y más hasta que sus figuras desaparecieron en las nubes, perdiéndose en la distancia sin que nadie supiera cuál sería sus destinos.

El silencio se instaló entre los tripulantes mientras todos observaban cómo las figuras se desvanecían en el horizonte. El ánimo estaba por los suelos, y no era solo por la inesperada catástrofe. Aún no habían encontrado el barco, y esa incertidumbre pesaba sobre ellos. Chopper, que normalmente habría intervenido, ni siquiera reaccionó. Su mirada estaba vacía, sin ilusión alguna observando a los seis sobrevivientes...por ahora.

Homura observó con seriedad cómo las figuras de Ren Hanzo y Hanji Watanaro desaparecían en el cielo, arrastradas por la frenética ráfaga del Capitán. El crepúsculo se cerraba rápidamente sobre ellos, cubriendo la isla en sombras mientras el grupo permanecía en silencio, sintiendo que cada vez quedaban menos y el peligro seguía al acecho.

Con la noche descendiendo como un manto, Homura volvió su mirada hacia Sakura. Su voz, baja pero firme, rompió la quietud.

—Sakura... ¿cuántos lobos crees que eliminamos? ¿Estaban ambos entre ellos o solo fue un error más?

Se acercó un paso más, sus ojos fijos en ella como si buscara leer cualquier reacción. —Si de verdad acabamos con alguno, estamos más cerca de sobrevivir... pero si no, esta noche nos toca estar unidos más que nunca.

La incertidumbre lo carcomía por dentro, pero no había tiempo para vacilar. —La próxima jugada puede definirlo todo. No podemos dejar que los lobos ganen ventaja.

Hemos votado bien, uno era el lobo supremo que podia infectar a alguien mas y hacerlo lobo. Aunque el otro era un tarotista. Hay que tener cuidado con estas ultimas votaciones.

¿Y quién era quién? Toda información es vital.

Así que Hanji sí que era un lobo... Sin duda le debo una disculpa a Ran, aunque su forma de actuar era demasiado sospechosa. Aún así, no tenemos tiempo que perder. Con uno de ellos fuera, ya deberían quedar pocos, con suerte uno solo.

Intentando responder a la pregunta de Aldric, responde: Creo recordar que Sakura mencionó que Valerie era uno de ellos, y ahora Hanji también. ¿Cayeron más, cierto?

Fin noche