Partida Rol por web

Lienargond

Lienargond: Un nuevo comienzo

Cargando editor
23/08/2022, 20:41
Dorotea / Emilia Lafaye

Cuando escuchó la voz de Seraphine, Dorotea se sobresaltó y la miró. Pestañeó como si no comprendiera bien sus palabras, pero de pronto negó con la cabeza y esbozó una sonrisa leve. Sin embargo, en sus ojos se vislumbraba aún una emoción poco placentera y en general se la notaba algo ausente.

Es usted muy amable, Seraphine —susurró apenas.

Pareció que iba a decir algo más, pero el anuncio del señor Moralta captó su atención. Aún distraída, le dirigió una inclinación con la cabeza a Seraphine; luego miró al carro almacén, donde Arsa estaba dando caricias a su caballo, y algo incómoda optó por dar media vuelta y dirigirse al carro jaula. Emilia apuró el paso para cruzarla y la detuvo, tomándola de los brazos. Por un momento se quedó en silencio, como si no supiera qué decir.

¿Te acuerdas de Tieslund?

La maldición de los lobos. Los niños en el bosque. Una niña a la que muerden y enferma. Su hermano le reza al altar de Menaeir en el bosque para que la salve y en sueños el dios le susurra que acabará con la maldición si persiste en el rezo. El niño hace caso y evade a los lobos cada día para llegar hasta el altar. Cuando por fin se manifiesta el dios, el niño le suplica que sane a su hermana. Y él le responde que le concederá un milagro por su perseverancia: por cada día que ha visitado el altar, uno de los suyos dejará de ser vulnerable a la maldición. Y tal como promete, uno por uno los hijos de Tieslund se vuelven inmunes”.

Y nunca más vuelve la maldición a tocar el pueblo —murmuró Dorotea, con una sonrisa en el rostro pese a la sombría mención. Había recuperado algo de color—. Qué historias extrañas recuerdas, Emi.

Sin una palabra más, la niña se dirigió al carro jaula. Emilia la vio alejarse y luego se acercó a Arsa para reiterar su oferta de conducir ella; si no estaba dispuesta, simplemente asentiría y subiría al carro sin chistar.

Cargando editor
23/08/2022, 21:24
Seraphine Delacroix

Pese a la sonrisa que le dedicó Dorotea, la mirada de la niña le indicaba a Seraphine que algo le ocurría o que quizá malos recuerdos le rondaban la cabeza. Intranquila y preocupada por la pequeña, decidió ir con ella hacia el carro jaula. Luisa se las apañaría con Arsa como hasta ahora y Emilia parecía lo suficientemente madura como para quedarse con ambas y llevar la situación con entereza. 

Cuando Dorotea estaba cerca del carro jaula, Serpahine alzó el brazo y lo agitó -Voy contigo, Dorotea. - Le dedicó a la niña una amplia sonrisa. Henewo le había pedido a Dorotea que subiese al carro almacén, aún así, la chica había preferido ir en el carro jaula. Seraphine no sabía si era por no estar con Arsa o por buscar una distancia con su hermana, o quizá porque le apetecía la compañía de los ocupantes del carro jaula. Lo cierto es que Seraphine, pese a algunos momentos tensos, lo había pasado en grande en el carro jaula con los muchachos, así que creía que le vendría bien a Dorotea el cambio de ambiente para alegrar su espíritu. 

Antes de dirigirse hacia el carro jaula, se acercó a Luisa y le dio un fuerte abrazo -Nos vemos luego, pelirroja- Se despidió guiñándole un ojo. Luego se agarró el vestido y caminó deprisa y alegremente hacia el carromato. 

Cargando editor
25/08/2022, 19:36
Luisa

Luisa había presenciado la votación sobre su permanencia en el grupo con expresión pasmada, y para cuando quiso reaccionar el resto de compañeras ya se habían puesto en marcha para continuar. Cuando Seraphine la abrazó salió del trance y rompió a llorar -OHÚ PERO ZI EH KE ZOIH UNOH AMOREH BUAAAAAAAAAAAAH....... BUAAAAAAAAAH ME CAGON DIO QUE BONICAH BUAAAAAAAAAAAA.... con cada frase los sollozos invadían más su habla, acompañados de alguna furtiva pompa emergente de su nariz ME CAGON LA PUTA QUE ZUH HURO QUE COMO ARGUNO D'ESOH SUH PONGA EN PELIGRO LO REVIENNNNNNNTO Tras estas palabras se frota el rostro con el antebrazo, se carga el cañón al hombro y se dirige al carro almacén.

Cargando editor
26/08/2022, 12:44
Narrador
⌘ Camino a Heniskali ⌘
Parada para dormir
Día 2

✦✦✦
Lienargond Zona_e10
✦✦✦

La caravana recuperó la marcha enseguida pero los cuerpos de quienes no estaban acostumbrados agradecieron el descanso permitido. Los desniveles provocados por la montaña hacían parecer que el camino estaba constantemente subiendo y bajando, girando o volviendo, además de que la grava que lo conformaba se fue haciendo ligeramente más gruesa en las cercanías al cañón.

Conforme el sol se iba escondiendo y la luna ocupaba su lugar, los sonidos de los alrededores iban cambiando y el nivel de viajeros fue también variando. Ninguno de ellos prestó la mínima atención a los carros de los Moralta, salvo alguna mirada pasajera.

Pese a que habían quedado en descansar en la entrada al cañón, ninguno de los conductores vio el carro anterior parar, por lo que continuaron el rumbo durante algún tiempo más, hasta adentrarse en las enormes paredes de piedra del cañón, tan altas que ni la luz de Ictium alcanzaba el suelo de las mismas.

Sin ningún tipo de señalización que lo muestre o aviso por su parte, el carro principal gira detrás de una roca, desapareciendo de la vista. Cuando el carro almacén alcanza la zona puede diferenciar un hueco considerable entre las rocas, cuya disposición parece tapar por completo la visibilidad de esta entrada. Arsa no tarda en seguir el rumbo de sus mentores e introducir el carro por la grieta, siendo seguida de cerca por Haxow.

Ante el grupo se encuentra una zona espaciosa y despejada donde los carros pueden estacionar sin problemas. Las paredes ascienden al cielo dejando ver en su parte alta la hermosura del cielo nocturno estrellado que no se ve afectado por la luz de la luna. El aire en ese lugar es cálido, pero no se mueve apenas brisa. Las paredes de roca son frescas y sólidas, casi acogedoras con su color pardo moteado. En un lado, a la izquierda, los restos de una hoguera todavía calientes os cuentan hermosos cuentos sobre una cena caliente y una noche tranquila.

Notas de juego

Localización en el mapa

Cargando editor
04/09/2022, 21:15
Maddon Labac 'Mad, el Juglar'

- Supongo que ya conocían este lugar resguardado del camino, no? Le pregunto a Harxon mientras preparamos todo para pasar la noche en aquel refugio. Luego busco con la mirada a Arsa para acercarme a ella.  Espero espero hasta que estemos disfrutando de algo de comer en conjunto para sentarme a su lado y decirle.

- Quiero disculparme por lo que hice antes contigo. Yo quería probarte que podía valerme solo, pero no tenía que hacerlo de ese modo. Se que hemos empezado con el pie izquierdo, pero hemos de compartir mucho tiempo y me gustaría poder enmendar mi error.

Cargando editor
05/09/2022, 10:34
Arsa Kenteni

Tras soltar al caballo de su carro, Arsa comenzó a descargar las cosas necesarias para montar el campamento de la noche, manteniendose alejada y silenciosa, ignorando a todos, incluido Haxow, que no parece afectado por la falta de atención de su compañera. Así se mantiene hasta que ve a Maddon acercarse, que mantiene una mirada fija en él, directa a sus ojos, todavía cabreada por lo sucedido. Tras oir las palabras del chico, lo agarra de la ropa y tira de él lejos de la vista y los oidos del resto.

Cargando editor
05/09/2022, 10:42
Arsa Kenteni

El trato brusco de Arsa termina tras los carros, suelta las ropas y se gira, con los brazos cruzados. Pese a que sigue pareciendo enfadada, ya no parece solo eso, hay más cosas bajo la superficie ardiente del odio que destila su aura.
-Eress un inmaduro, incontrohlable y dessagradecido compañero de viaje -Suelta, usando un ligero acento irreconocible más siseante que al que Maddon está acostumbrado, probablemente de su hogar natal, en el continente sur -, ella ess un peligroh para todoss, oss gusste o no, ssi la esstán ssiguiendo puede sser nuestrah muer-te -Aunque sus palabras son duras, Arsa relaja su postura y suspira, frotandose la sien.
-Lo entiendo, esstaiss huyendo y oss ssentíss identificadoss -Gruñe, antes de levantar la mirada, volviendo a fulminar al chico -, pero no eress nadie para obligar-me a bailar assi -Donde estaba la comprensión, vuelve a haber odio y rencor -, puedess atacar-me, puedess ussar-me, puedes inssultar-me... pero jamáss vuelvass a hacer-me bailar assí -El calor del pequeño rincón aumenta y las manos de Arsa se cubren de fuego, alcanzando la mitad de sus brazos.
-No ssoy una herramienta ni una masscota, ssoy un ser humano y ahora ssoy libre -Su voz está subiendo de tono, pero el fuego se desvanece y Arsa respira hondo un par de veces y, cuando vuelve a hablar, su acento ha desaparecido, lo cual deja claro el gran esfuerzo que pone en esconder su origen -Eres amigo de Haxow y por eso voy a tolerarte, pero no confiaré en ti hasta estar segura por mi misma. Y te lo advierto... como hagas daño a alguien a quien quiero, te calcinaré hasta que tus huesos pasen a ser polvo negro -Con una fiera mirada penetrante, resopla y sale con el resto.

Notas de juego

El acento de Arsa es de tribus sin reino del continente sur, no creo que Mad sepa exactamente de dónde.

PD: Sorry, has ido justo a dar con el talón de aquiles de Arsa...

Cargando editor
05/09/2022, 18:15
Seraphine Delacroix

Al bajar del carro, Seraphine echó un vistazo a su alrededor y al cielo nocturno que cubría su cabeza. Desde siempre le habían fascinado la luna y las estrellas, notaba una conexión, un vínculo que ella sentía eterno. Pues ya desde su nacimiento, el símbolo de la luna marcó su pecho a la altura del corazón convirtiéndola en alguien especial, una bendición, como solía decirle su madre cuando ella era niña. 

Tras esos instantes de admiración y fascinación por las constelaciones, recordó que esa noche le tocaba hacer guardia.  -Enseguida estoy con vosotros, no tardo nada.- Antes de ir con los demás, decidió dar un pequeño paseo por la zona, sin alejarse mucho, con el objetivo de encontrar algún espíritu amable al que pudiera pedirle ayuda para que le advirtiera de peligros cercanos mientras el resto dormía. 

Cargando editor
05/09/2022, 21:51
Narrador

En la zona refugiada de los vientos y alrededores, Seraphine encuentra varios espíritus de animales, la mayoría de presas pequeñas, pero también un zorro etéreo que persigue al de un conejito como la nieve. Junto a estos, no hay compañía de espíritus humanos, excepto un niño vestido de forma humilde, sentado junto a la hoguera, colocando las manos casi dentro de las ascuas, con los labios ligeramente azulados. De sus ojos caen una tras otra lágrimas de desdicha, miedo y frustración, mientras intenta calentarse en un lugar que nunca va a poder proporcionarle el calor que desea.

Cargando editor
06/09/2022, 02:12
Maddon Labac 'Mad, el Juglar'

Esperaba una reacción violenta de parte de Arsa por lo que adopte una actitud serena cuando le tomo de la ropa para llevarme aparte y comenzó con su descargo. Le dejé hablar en silencio, me costaba alzar los ojos para mirarle al rostro, mucho menos a sus ojos encendidos en rabia. Sin embargo me esforcé para que viera en mi que realmente estaba arrepentido de cómo había manejado las cosas. Y no fue hasta que se sereno un poco en que intercale unas palabras a su monólogo.

- No imagine como podía afectarte lo que hice, considere que podía ser algo menos problemático hacerle bailar que obligarle a guardar silencio, pero me equivoqué. Por eso pido perdón y también porque se que mi don no está para ponerme por sobre otros sino para ayudar. Y en tu caso no ayude en nada. No voy a pedir que no me guarde rencor, solo me ha nacido trasnmitirte que no es mi intención provocarle ni mucho menos burlarme.

Como cada uno de los presentes en esta caravana ya hemos sufrido demasiado como para ponernos los unos contra los otros. Jamás volveré a usar mi don para obligarle a nada, Salvo que usted mismo corra peligro y con ello pueda ayudarle.

Tras sus palabras finales asiento y me quedo allí viéndole partir como una furia, entonces regreso con el grupo para dedicarme a comer algo y escuchar si alguien tiene algo para decir. Me siento cerca de Harxow y le pongo una mano en el hombro. Habíamos hecho la segunda parte del viaje en silencio, pues me había quedado meditando lo sucedido en busca de una forma de remediarlo, así como a Arsa también sentía que le había fallado a él que tan amable había Sido para conmigo y de la misma forma para con los Moralta.

- Gracias por darnos cobijo entre ustedes, y quiero disculparme públicamente con todos ustedes por como he actuado anteriormente. Fui impulsivo e insolente, sin medir las consecuencias de lo que había hecho. No hay excusas para mí actuar y espero poderlo compensarlo siendo de utilidad para todos en el futuro.

Digo alzando la voz y mirando de a uno en uno al rostro, finalizando con el cochero del carro jaula, para palmera nuevamente su hombro en señal de disculpas.

Cargando editor
06/09/2022, 10:02
Haxow Arleto

La vuelta de Maddon al grupo hace que Haxow sonria y después mire alrededor en busca de Arsa. No parece estar cerca pero enseguida sale de entre unas rocas alejadas y se acerca al resto, sentándose junto al chico, al otro lado y tapándose con una manta que le ofrece Artell. Ante las palabras de Maddon, los Moralta solo asienten, aceptándolas y Arsa mira a la lejanía sin decir nada. Es solo Haxow el que se ríe y habla:
-No digas tonterías, Mad, somos compañeros de viaje y es normal que haya roces y peleas -Le devuelve la palmada en el hombro y vuelve a reírse. Sin dejar de sonreir, se acerca al oído del chico a decirle algo que el resto no llegais a entender y se vuelve a colocar.
-En el carro tenemos un saco con ramas secas, esta zona no tiene mucha vegetación -Explica Henewo levantándose hacia el carro almacén -Luisa, querida, ¿podrías ayudarme con esto? -Le pide, señalando una olla de barro que no parece haber sido movida del carro desde que se subió -Como no sabíamos cuantos seríamos, compramos una grande -Añade con una enorme sonrisa.
Las tareas que quedan, se reparten entre el resto de los viajeros de la caravana, tomandoles poco tiempo antes de tener lista una nueva hoguera, con el agua calentándose sobre ellas.

Notas de juego

Luisa queda a cargo de mover la olla.
El resto podeis elegir entre estas tareas:
-Buscar el saco de ramitas (pesa un poco).
-Intentar cazar algo para añadir carne.
-Ayudar a Haxow preparar la hoguera.
-Ayudar a Artell a preparar verduras para el guiso.
-Ayudar a Arsa a sacar mantas para que todos podais dormir.

Esto es meramente on-rol y no tiene relevancia ni recompensas o consecuencias, pero más o menos, serán así las "misiones" con opciones que podreis elegir.

Cargando editor
06/09/2022, 10:25
Haxow Arleto

-No te preocupes, le gustas aunque jamás lo admitirá.

Notas de juego

Dejo la frase suelta solo para ti

Cargando editor
07/09/2022, 02:40
Dorotea / Emilia Lafaye

Por fin asomó la luna y llegaron a una zona despejada para acampar. Emilia se bajó del carro e inspiró profundamente. Le agradaba el aire de la noche y la montaña y agradeció por fin poder estirar las piernas. “Tendré que acostumbrarme”, pensó, sabiendo que a ese día le seguirían muchos otros de viaje. Intercambió un gesto con Dorotea, que se estaba bajando del otro carro, y se reunieron con los Moralta y Haxow para preparar todo.

Emilia había tenido que encender hogueras varias veces en esos meses y creyó que podría ayudar a Haxow cuando vio que se disponía a preparar una. Al escuchar la indicación del señor Moralta, se dirigió nuevamente hasta el carro almacén a buscar el saco con ramas: sería muy difícil mantener el fuego encendido sin algo que ardiera. Cuando lo localizó, hizo ademán de alzarla, pero encontró que pesaba más de lo esperado. “Van bien preparados”. Supuso que no era buena idea usarlo todo en una noche, por lo que tomó el bolso en el que ella llevaba sus pertenencias, las dejó envueltas en una de las capas a un costado de las cajas y empezó a llenar su bolso de ramas. Cuando estuvo satisfecha con la cantidad, se dirigió hacia Haxow y, en silencio, comenzó a colocar las ramitas en su lugar para armar la hoguera.

Dorotea miró hacia todos lados. Parecía somnolienta tras algunas horas más de sueño: había querido estar bien descansada, pues le tocaba hacer guardia esa noche. Por alguna razón no encontraba a Seraphine. Miró a Arsa, que estaba sacando unas mantas, e hizo unos pocos pasos en su dirección para luego detenerse con una expresión de incomodidad. Podía ayudarla, pero no estaba segura de querer hablar con ella aunque creyera que correspondía. Finalmente, se rindió y decidió acompañar a la señora Moralta, que empezaba a preparar verduras. Cocinar era otra de esas tareas que Dorotea jamás había tenido que realizar, pero la maternal mujer le recordaba tiempos mejores y le aportaba a esa intemperie toda la calidez que le había faltado a sus meses de viaje. Le dirigió una sonrisa y se remangó en gesto de poner manos a la obra.

Cargando editor
07/09/2022, 23:30
Maddon Labac 'Mad, el Juglar'

Cuando Harxow me habló al oído rápidamente se me subieron los colores al rostro, por fortuna la sombras de la noche me permitían disimular un poco pese a que en aquel claro los astros iluminaban particularmente bien. Tras un tiempo de recomponerme de lo que me había dicho mi amigo de la infancia, decidí ir a ayudar con las tareas, fui primero con Artell pero ví que ya estaba allí Dorotea, por su Parte Emilia se había encargado de las ramas y comenzado a ayudar a Harxow con la hoguera. No había rastros de Seraphine por lo que quizá hubiera ido a buscar alguna presa, y Luisa tendría que ayudar con esa olla enorme. 

Me dirigí hacia el carro almacén para ayudar a Arsa con los almohadones, tratando de dejar atrás las peleas le dije.

- Creo que Seraphine se ha marchado en busca de algo que cazar, yo la verdad nos sirvo para ello. Quizá podría encargarme solo de las mantas y tu darle una mano con ello. Que dices?

Cargando editor
07/09/2022, 23:46
Arsa Kenteni

La mirada de Arsa recorre a Mad de arriba a abajo antes de comprobar los alrededores. Se gira al carro de forma altanera y agarra una manta de dentro.
-Te permito ayudarme, no quitarme la tarea -Dice, doblándola de forma bastante mañosa y colocándola a un lado. Sus ojos miran al chico, se gira de nuevo y gruñe una palabrota, subiendose al carro de forma poco elegante, sujetandose la falda una vez arriba.
-Estate ahi quieto -Le ordena con la mirada furiosa, antes de empezar a urgar entre las cosas sacando mantas. Tras sacar cuatro, para, cuenta al grupo, hace cálculos en su cabeza y rebusca por más mantas. Una vez apiladas a sus pies, las dobla y va soltándoselas a Maddon sin avisar sobre los brazos. Después se baja de un salto del carro.
-Ya esta -Gruñe, acercándose a la zona donde están preparando la hoguera. Haxow, que parecía muy entretenido con las ramitas, mira a Mad de reojo y sonrie.
-Arsa, ¿puedes...? Por favor... -Le pregunta. Arsa lo mira, mira al resto, murmura en voz baja, sonrojandose un poco.
-Te odio -Le dice al chico antes de respirar hondo con los ojos cerrados. Sobre sus palmas se prenden dos pequeños fuegos azules que llenan el claro de un aire cálido. Al volcarlas sobre las ramas, como si se tratase de agua fluyendo, el fuego se derrama, prendiendo la madera sea, cambiando de color a verde y, tras un momento, al habitual tono anaranjado.

Tras esa muestra de poder, y completamente sonrojada, se cruza de brazos y se sienta de malas formas al lado de Haxow.

Cargando editor
08/09/2022, 17:33
Seraphine Delacroix

Seraphine aprendió desde pequeña a valorar y buscar la belleza de todo lo que la rodeaba. Mientras paseaba en busca de posible ayuda para la noche tan larga que tenía por delante, vio el espíritu de un precioso zorro que perseguía a un conejito. La chica, aunque era incapaz de hacerle daño a nadie, comprendía y aceptaba el curso natural de la vida. La muerte era parte de la vida y aquello era hermoso para Seraphine. No dejaba de ser doloroso para ella cuando alguien se iba, pero aquello le daba sentido a la vida y eso le ayudaba a apreciar su mundo y su paso por él. Siguió buscando y se encontró al espíritu de un niño junto a la hoguera, desde lejos no podía verle bien, con lo que se fue acercando a él cuidadosamente. Le entristecía ver espíritus de niños, pensar que habían fallecido sin a penas haber vivido, el sufrimiento que habrían pasado, el miedo de no entender qué les estaba pasando... Conforme se acercaba, empezó a ver el rostro del pequeño, lloraba y parecía buscar el calor de la hoguera, sus labios se veían azulados. Seraphine pensó que quizá se habría perdido y nunca encontró a sus padres, quizá habría muerto de frío o de hambre, o de ambas... Pobre chico, debe de estar aterrado. No puedo ni imaginar lo mal que lo debe haber pasado. Pensó la muchacha, luego, con el corazón en un puño, se acabó de acercar al pequeño y se puso de rodillas en el suelo para estar a la altura de los ojos del niño. 

-Hola, pequeño, ¿Me puedo sentar a tu lado? Mi nombre es Seraphine ¿Cómo te llamas tú? Dijo la chica en tono cariñoso, la voz de Seraphine sonaba dulce como la miel, quería ayudar al pequeño y acabar con su sufrimiento.

Cargando editor
08/09/2022, 20:31
Maddon Labac 'Mad, el Juglar'

Tratándose de Arsa no esperaba una buena recepción, pero si quería demostrar que estaba allí para colaborar mejor hacer que decir, por lo que aún pese a sus desaires me quedé allí haciendo caso de cada palabra que decía. 

Las palabras de Harxow me daban vuelta por la cabeza y le miraba comprendiendo a cada segundo menos.

- No quiero sacarte tu tarea, solo ayudar.

Fue lo único que dije antes que la morena comenzará a revolear las mantas hacia mi, que no sin esfuerzo fui apilando sobre mis brazos hasta que su labor cesó y Arsa sin despedirse ni mucho, se encamino hacia la hoguera voltie para verle irse y entonces las últimas palabras me tomaron por sorpresa. Me quedé allí con las mantas en los brazos mirándola ir hacia la hoguera con flamas azules en las manos y sin entender nada de lo que pasaba. Que había hecho ahora ? 

Ví que El cochero del carro Jaula me miraba y me encogí se hombros antes de encaminarme hacia donde estaba el resto del grupo para ir repartiendo las mantas, primero a Dorotea y Artell, luego Seraphine, Harxow y Emilia en la hoguera, Arsa estaba allí y me quedé un momento en silencio ofreciéndole su manta, antes de marcharme en busca de Luisa y el señor Moralta para culminar mi labor.

Cargando editor
08/09/2022, 21:04
Narrador

El espíritu del niño pone las manos directamente en las ascuas cuando escucha a alguien acercarse. Se sobresalta de forma que parece casi exagerado, buscando rápidamente a su alrededor, sin encontrar nada. Retrocede rápidamente hasta la pared de roca, donde parece chocar y quedarse parado. Niega con la cabeza y tiembla.
-No, no, no -Murmura, antes de tomar aire y gritar con tanta fuerza que incluso los que no son capaces de verle logran escuchar. Para cuando Seraphine abre los ojos, el niño es mucho más translúcido, sus lágrimas se han incrementado y se rodea las rodillas, balanceandose mientras susurra tan bajito que apenas logra entenderle.

Cargando editor
08/09/2022, 21:10
Arsa Kenteni

Todavía avergonzada por la demostración de poder sobre el fuego, Arsa mantiene la mirada alejada de todos los integrantes de la caravana.
-Nos quieres -Dice burlonamente Haxow, apoyándose en ella, que mantiene la mirada lejos, furiosa y firme. Haxow se rie, tirando de la muñeca de Mad -Siéntate aquí con nosotros -Su sonrisa es alegre pero cuando intenta moverse del sitio, Arsa lo agarra del brazo. Su boca se abre, como si fuese a decir algo, pero un chirrido de ultratumba hace que los corazones de todos se salten un latido. No dura más de dos segundos, pero se os queda en la mente. Un grito de dolor, de miedo y que ha surgido de ninguna parte.
-Arsa, tranquila -Dice Haxow preocupado a la chica que aunque hasta hace un momento estaba actuando enfadada, ahora se encuentra pegada por completo a él, temblando como una hoja y llorando -Todo está bien, habrá sido algún escalador -Su voz es suave y dulce, pero ella solo niega y se prieta más. El chico suspira y la cubre con la manta, abrazándola. Su mirada se cruza con la de Artell, que se ha quedado tan pálida como su marido.
-No os alejeis mucho... -Pide la mujer, acercándose con las verduras recien cortadas para empezar a preparar la cena.

Cargando editor
08/09/2022, 21:28
Seraphine Delacroix

Apenada por la reacción del niño, Seraphine se sienta justo en el lugar donde se había arrodillado sin acercarse ni un centímetro al muchacho. Entrelaza las piernas y adopta la postura más relajada posible. Tratar con espíritus no siempre era fácil, sobretodo si la persona había tenido una muerte traumática. Aquel chico estaba muy asustado, parecía temerla, quizá le habrían hecho daño. Seraphine inspiró y expiró profundamente, tratando de mantener la calma y mostrarse serena ante el niño. -No quiero hacerte daño, sólo quiero ayudarte. No me acercaré a ti si tú no quieres, me quedaré aquí quieta o me iré si lo prefieres... pero de verdad me gustaría ayudarte. - La chica deseaba ayudar al pequeño con todo su corazón, pero no lograría hacerlo si él no se dejaba. La tristeza del niño acongojaba a Seraphine, posó su mano sobre el pecho, sobre su marca, eso le daba consuelo, fuerza y confianza. La chica trataba de tener esperanza, aunque las cosas no siempre salieran bien, quería creer en un mundo mejor, en ayudar a los demás, vivos o muertos